ðHwww.oocities.org/es/nemfics/epda2.htmwww.oocities.org/es/nemfics/epda2.htm.delayedx/bÕJÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿȈƒOKtext/html€(¹y,ƒÿÿÿÿb‰.HSun, 04 Aug 2002 23:45:38 GMTº Mozilla/4.5 (compatible; HTTrack 3.0x; Windows 98)en, **bÕJƒ >>> El Poder de Akane (cap. 2) <<<
 

 

 
   
 

 

El Poder de Akane  

 

 

 

Nota de la autora:

¿Qué tal están todos?  Pues aquí tienen el segundo capítulo del fanfic.  Este capítulo es más corto que el anterior, sólo espero que les guste mucho.

Pero antes que nada quiero aclarar algunas cosas que quizás puedan interesarles.  La vez anterior dije que este será un fanfic muyyyy largo y ahora les explicaré el porqué. ¡¡¡LEAN ESTO, ES IMPORTANTE!!! Pues bien, el fanfic constará de 3 Partes (quizás pueda llegar a haber una cuarta o en su defecto un epílogo, pero aún no lo tengo decidido), las cuales se dividirán a su vez de 3 a 6 capítulos cada una aproximadamente.  Comentar que cada parte podría ser considerada como una historia diferente.  Y ustedes se preguntarán ¿y por qué no hacer tres fanfictions en vez de uno dividido en tres? Pues la respuesta es simple, porque dichas historias o partes están demasiado ligadas unas a otras como para separarlas, son acontecimientos consecutivos que si los separásemos perderían fuerza.  De esta forma iremos descubriendo progresivamente el poder de Akane Tendo.  Como breve adelanto decir que la Parte 3 será la más larga e importante del fanfiction, cosa que es de suponer teniendo en cuenta que será la última aventura de Ranma, Akane y todos sus amigos.  Pero no les diré nada más, tendrán que descubrirlo ustedes mismos. 

Y ya saben ¡¡¡ESCRÍBANME!!!  Si no lo hacen no sabré que les pareció y no podré mejorar para el siguiente capítulo las cosas que no les gustó, o seguir así si es que no encontraron fallos.  Sea lo que sea, háganlo a: 

nemfics@yahoo.es 


Datos de interés:

(...)  comentario de la autora

"..." pensamientos de los personajes

*...* algún sonido

[...] un lugar

****  cambio de escena

<<...>> un recuerdo

<===> una escena de recuerdos o un sueño


Todos los personajes que aparecen en este fanfic son propiedad exclusiva de Rumiko Takahashi, pero teniendo en cuenta que no voy a sacar ningún bien económico con esto, hagan el favor de no denunciarme ¿si?


 

 

Capítulo 2

En Busca de Akane

 

[Dojo Tendo, habitación de Ranma]

Ranma se encontraba tumbado en su futón, mirando distraído al techo.  No sabía muy bien cuanto tiempo llevaba allí perdido en sus pensamientos, pero no importaba, hoy no tenía que ir a clase así que podía quedarse acostado todo el tiempo que quisiera.

Se sentía extraño... era como un suave cosquilleo en el pecho y al mismo tiempo como una fuerte presión en la boca del estómago.

"¿Qué me está pasando?... Quizás... sea por ese sueño....."

 

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Ranma no conseguía reconocer donde se encontraba.  Recordaba que hacía unos pocos segundos había estado luchando por salir de algo que parecía un mar de nieve, pero ésta desapareció de repente y llegó a este lugar.

Era una especie de jardín, repleto de cerezos en flor,... y quizás otros árboles, algunos bancos, una fuente???... no conseguía distinguirlo bien, estaba demasiado borroso y la belleza de los cerezos le embriagaba... el olor de sus flores, la extraña calidez que emanaban... esa calidez... ese aroma...

"Akane,... estos cerezos me recuerdan a Akane"

Se quedó parado mirando los árboles por un tiempo, sintiéndose tan hipnotizado por ellos como lo hacía por los ojos y la sonrisa de su prometida.  Y entonces lo escuchó,... era la voz de Akane, pero no conseguía verla por ninguna parte,... sólo los cerezos,... era como si la voz saliese de ellos y fuese directamente hacia su alma sin pasar por sus oídos.

- Mi amor, lo siento...

- ¿Akane? ¿Dónde estás?

- ...he de partir sin ti ahora...

- ¿Partir? ¡No! No puedes irte...

- ...pero te juro que estaré bien, y que volveré pronto...

- No, Akane, no te vayas... no me dejes solo... - decía mientras corría desesperado entre los cerezos intentando  encontrarla. 

- ...y entonces podrás estar orgulloso de mí... te prometo que me convertiré en tu compañera ideal... y entonces nadie podrá vencernos... nadie podrá volver a separarnos nunca... y jamás volveré a alejarme de ti.

- No tienes que hacerlo... ¡Idiota! - Ranma cayó derrumbado al suelo.  Ella pensaba irse lejos y él no era capaz de encontrarla por ninguna parte para impedir que se fuera - No eres más que una tonta testaruda...  Akane,... no tienes que ir a ninguna parte para conseguir ser mi compañera ideal,... siempre lo has sido, y siempre he estado muy orgulloso de ti... Por favor, cariño, no te vayas... - Lágrimas comenzaron a formarse en sus ojos.

- Ahora vienen tiempos difíciles para los dos... sólo piensa en mí, como yo lo haré en ti... piensa en los buenos momentos...

- Jamás he hecho otra cosa,... en todo este tiempo no he hecho más que pensar en ti...

- ...y lucha por encontrarme...

- No me dejes...

- ...yo te estaré esperando mi amor... porque te amo.

- ¿Que? Akane,... yo... 

De repente todo se desvaneció y Ranma quedó en una total oscuridad.  Ya no podía ver los cerezos, ni sentir su aroma y su calor,... y ya no podía escuchar la voz de Akane.  Ella se había ido, lo había dejado y ahora se encontraba aquí, perdido en esta inmensa soledad, en este total vacío que le había producido perder lo más importante de su vida.  Lloró, y esta vez no le importó que fuese algo que un 'hombre' no pudiese hacer.

- Akane... ¿Por qué me dejas solo?...¿Es que aún no lo sabes?... ¿Es que aún no entiendes que no puedo vivir sin ti? -  Buscó en su interior nuevas fuerzas y dejó de llorar - No me importa... Te encontraré... estés donde estés te juro que te encontraré porque... 

No pudo terminar de hablar, de nuevo volvió a sentir la calidez y el aroma de los cerezos, y se volvió para ver de donde provenía, pero esta vez no vio ni un solo árbol, sino que en su lugar se encontraba Akane, arrodillada ante él.  Se la quedó mirando, sin poder moverse ni articular palabra. 

"Sus ojos... tiene los ojos más bonitos que jamás haya visto"

Ella cerró sus ojos con suavidad y lágrimas cayeron de ellos. Ranma consiguió recobrar su consciencia durante unos instantes.

- Akane,... ¡Has vuelto!... No te vayas por favor,... quédate conmigo...

Akane no le respondió, sólo continuó con sus ojos cerrados y acercó lentamente su rostro al de su prometido hasta que lo besó.  Ranma jamás había sentido algo así antes, se sentía tan bien, tan cálido...  Ranma comenzó a devolverle el beso, pero ella se sobresaltó y se retiró de él.

- Akane... - Ranma pasó sus brazos por la cintura de Akane y la acercó con cuidado hacia él.  La abrazó con tanta dulzura como pudo encontrar en su corazón.  Se sentía feliz, más feliz de lo que podía recordar haber sido nunca,... ella lo amaba y había vuelto a él. - "Este es el momento"  Akane, mi dulce y hermosa Akane... lo siento, he sido un estúpido... y debí decirte esto hace demasiado tiempo... pero ya no puedo callarlo más... porque... te amo Akane Tendo, te amo desde la primera vez que te vi.

Él acarició suavemente el cabello de la mujer que tenía en sus brazos, sintiéndolo tan suave como una brisa de mar... Le alzó lentamente el rostro con sus manos y la beso,... perdiéndose en sus labios, en su cuerpo.  Le pareció como si estuviese besando a una persona diferente, ya no sentía ese hervor en su corazón, no sentía esa inmensa suavidad en sus labios,... Pero no le importó, por fin la tenía en sus brazos y ya nada podría hacer que se separase de ella,...  nunca la dejaría marchar.

 

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Ranma siguió perdido en sus pensamientos durante algún tiempo.  Realmente había sido un sueño extraño.  En realidad no era la primera vez que soñaba que se declaraba y besaba a Akane, o que la perdía por algún motivo, pero... este sueño no era igual que todos los otros que había tenido, pero no conseguía saber porqué.

"¿A quién quiero engañar?  Lo que me pasa es que estoy muerto de miedo porque hoy es el día,... hoy, por fin, he que decirle a Akane lo que siento... Pero... ¿Y si ella no me quiere? ¿Y si se ríe de mis sentimientos? ¿Y si no me cree?"

 - ¡AAAHHH! Si sigo así terminaré volviéndome loco. - Dijo mientras se incorporaba y se levantaba de su futón para vestirse antes de bajar a desayunar - Ya se acabó, no puedo seguir huyendo como un niño pequeño...

- ¿De qué no puedes huir Ranma-kun? ¿Es que hay algún problema? - Kasumi había entrado en la habitación de Ranma tan sigilosa como un espectro y Ranma casi sufrió un ataque al corazón cuando escuchó esa voz detrás de él.

- Ka-Kasumi ¿Qué?

- Buenos días Ranma-kun.  Que bueno que ya estés levantado  ¿Te importaría ir a despertar a Akane?  Es que voy muy retrasada en mis tareas esta mañana.

- ¿Aún no se ha levantado? Pero si se acostó muy temprano...

- Bueno, supongo que el día de ayer fue demasiado para mi pobre hermana - Y diciendo esto salió de la habitación con su hermosa y plácida sonrisa en el rostro.

Ranma se vistió con sus ropas típicas chinas: pantalón azul marino y camisa blanca con ribetes en rojo.  Salió de su cuarto y se dirigió hacia el de Akane.  Estaba tan nervioso que los latidos de su corazón lo hacían ensordecer.  Llego hasta la puerta de su prometida y la golpeó suavemente.

- Akane, Akane ¿Estás despierta? - No obtuvo respuesta, tras la puerta se cernía el mayor de los silencios - Akane, voy a entrar.

Giró el pomo de la puerta con cuidado.  Sintió una punzada en el pecho, era una especie de mal presentimiento, y temió entrar.  Buscó nuevas fuerzas en su interior, dejó escapar un suspiro para relajarse y entró.

Una corriente helada recorrió su columna y se instaló en su pecho.  Akane no estaba.  Su cuarto estaba completamente vacío, su cama hecha y la ventana abierta de par en par, y... en el escritorio... un sobre...  Ranma tomó la carta en sus manos e intentó abrirla, sólo entonces se dio cuenta de que el pulso lo había abandonado.  Sacó la nota que había en el sobre y la leyó al menos cinco veces antes de convencerse de lo que en ella ponía:

    'He partido en viaje de entrenamiento.  No se cuanto tiempo estaré fuera, pero será bastante, seguramente unos cuantos meses.  No se preocupen por mí, estaré bien.  Pero sobre todo, NO me busquen, les aseguro que no podrán encontrarme y aunque lo hicieran no podrían llevarme de vuelta al dojo.    Akane Tendo.'

Ranma no podía creer que fuera cierto, ella no podía haberse ido, no era posible que le hubiese dejado.  Apretó con fuerza la carta con su mano y abrió con furia las puertas del armario de Akane.  Otro escalofrío.  Gran parte del vestuario de la joven había desaparecido, dejando sólo los trajes más elegantes, así como varias faldas y vestidos (no son lo más cómodo para entrenar).  Ranma sintió como la desesperación y la rabia se forjaban con más firmeza en su interior y comenzó a revisar cada uno de los rincones de la habitación intentando encontrar más evidencias, comprobando así que la mochila y las mayores pertenencias de Akane habían desaparecido.

Ranma sintió rabia, tanta que no pudo contenerse y lanzó un puñetazo hacia una de las paredes, produciendo que una grieta floreciese en ella. 

- ¡¡No eres más que una IDIOTA!!... ¡¡¡AKANE!!!...... Akane... 

Se sentó lentamente en la cama y escondió la cabeza entre sus manos.

"Se ha ido,... ella realmente se ha ido... Pero ¿por qué?... ¿por qué has tenido que irte?... ¿por qué has tenido que dejarme?..."

- ¡¡Ranma!! ¡¿Qué demonios está pasando aquí?!  ¡¿Dónde está mi pequeña hijita?!

Ranma sólo se quedó mirando al padre de su prometida sin saber que decir.

"Me matará, en cuanto se entere de que esa estúpida se ha largado me matará"

- ¡¡¿Se puede saber que hiciste esta vez Ranma?!! - Nabiki habló en el tono más grave que encontró, era divertido mortificar a Ranma de esta forma, estaba al tanto de que a él le dolía mucho saber que le había hecho algo malo a Akane.

El resto de las dos familias llegaron al la habitación sin decir una palabra.  Ranma miró al suelo al notar que todos lo observaban con una mirada escrutadora e intentó hablar.

- E-ella... no está... - las palabras se negaban a salir de su boca, se sentía demasiado avergonzado.  Su deber era proteger a Akane y en vez de hacerlo había permitido que se marchase sola a quien sabe que lugar - de-dejó esta nota... dice que ha ido a entrenar... - agachó aún más la cabeza - ...y que estará mucho tiempo fuera... puede que incluso meses.

Un silencio sepulcral invadió la estancia.  Las familias Tendo y Saotome parecían en shock.  Ranma sólo miraba el papel arrugado que tenía en sus manos.

- ¡¡¡¡¿¿¿¿QUEEEEE????!!!!  ¡¡¿¿Cómo has podido dejar que eso ocurriera Ranma??!! - Soun Tendo había sido el primero en reaccionar, y lo hizo transformándose en una cabeza de demonio que Ranma ya conocía bien.

- ¡¡¿¿Y cómo se supone que debería haberlo sabido yo??!! ¡¡¡No soy adivino como para ver que es lo que se le pasa por la cabeza a la tonta de su hija!!!

- Mi hija... - la cabeza de demonio se desvaneció de golpe y Soun estalló en lágrimas - Mi pequeña hijita, sola e indefensa...  ¿Que será de ella ahora?...

- Sr. Tendo yo... - Ranma intentó acercarse, el padre de Akane se veía mucho peor que de costumbre, bastante más afectado..., o quizás era Ranma el que lo estaba.

- No te acerques a él - Nabiki se lanzó al ataque verbal, su favorito, el que sabía que Ranma nunca podría vencer.  Estaba enfadada, muy enfadada.  Normalmente una pelea entre Akane y su prometido la habría divertido, pues no tenía ninguna duda que esos dos tontos se querían, pero esto había sobrepasado el límite,... su hermanita se había ido de su casa por Dios sabe cuanto tiempo, ¿quién sabe que podría ocurrirle? y eso la enfurecía sobremanera...  Era hora de que alguien le diese una lección a ese muchacho testarudo que se empecinaba en seguir cometiendo los mismos errores una y otra vez - ¡¡¡Todo esto el CULPA tuya!!!  ¡¡Lo que me extraña es que mi hermana no haya huido de ti antes!!

- ¡¡¿Pero de que demonios estás HABLANDO?!!  ¡¡¡YO NO HE HECHO NADA!!! - Las palabras de Nabiki le dolieron mucho. 

- ¡¡¡No puedo creer que tengas la cara dura de decir que no has hecho NADA!!!  ¡¡Lo has hecho TODO!!  Desde el primer día no has parado de insultarla, metiéndote con cualquiera de sus defectos y haciéndole que se terminara creyendo que realmente no tenía ninguna virtud,... la has humillado hasta la saciedad, provocando que se sintiera el ser más despreciable de la Tierra, haciéndole creer que no servía para nada, que nadie podría llegar a sentir cariño por ella. - Nabiki concentro todo el desprecio y la frialdad que pudo para terminar su ataque - La has destrozado Ranma Saotome,... has destrozado deliberadamente la vida de la mujer que amas.

Ranma cayó de rodillas al suelo, no le quedaban fuerzas para permanecer en pié.  Las palabras de Nabiki resonaban en su cabeza sin parar, atacando su mete y su corazón como si de cientos de agujas se tratasen.  

"No puede ser, no puedo haberla perdido,...  Jamás quise hacerte daño Akane, jamás,... Yo sólo quiero verte feliz, iluminándolo todo con tu sonrisa...  Pero Nabiki tiene razón, todo ha sido culpa mía.  Tantos insultos, tantas peleas, tantos reproches y... tantas mentiras.  ¿Por qué?... ¿Cómo he destrozado tu vida, Akane?"

- Oh, Nabiki ¿Cómo puedes decirle cosas tan horribles a mi pobre hijo?  ¿No ves cuanto daño le haces? - Nodoka se arrodillo ante su hijo intentando consolarlo sin resultado.

- ¡¿Daño?!  ¡¿Qué le hago daño?!  ¡¡¿Y qué se supone que ha estado haciendo él durante todo este tiempo sino hacer sufrir a mi hermana?!!  ¡¿¿Pretende decirme que debería sentir compasión por él??!  Le recuerdo que es mi hermana la que está sola en algún lugar.

- Ya basta Nabiki, por favor.  No es momento para discutir.

- No, Kasumi, ¡No basta!  Ya me cansé de aguantar todas sus estupideces y las consecuencias que con ellas trae.  ¡Por favor!  Akane se ha escapado,... y mira a papá, ni siquiera consigue reaccionar.  ¿Y me pedís que me calme, que me calle?  Pues no voy a hacerlo.  No voy a seguir aguantándome mientras veo como hace sufrir a mi familia. - respiró profundamente y se dirigió de nuevo hacia Ranma - Escucha bien lo que te voy a decir Ranma.  Eres el ser más patético y despreciable que he conocido nunca.  Y usted Sra. Nodoka debería replantearse muy seriamente si su hijo es merecedor o no de librarse de su promesa del sepuku,...  Yo no lo creo...  ¡¡No eres más que un COBARDE, que lo ha perdido todo por no tener el valor de aceptar lo que siente,... de hacer algo tan simple como dar amor a quien tu corazón te dictaba!!  ¡¡¿Y tú te llamas hombre?!!  Yo no veo más que a un niño malcriado...

- Y que sabrás tú... - la voz de Ranma sonó quebrada.  Nabiki había dicho muchas verdades, tal vez demasiadas... pero no tenía derecho a decir todo eso,... no ella.  La rabia y la impotencia recorrió todo su cuerpo haciendo que sus músculos se tensaran, apretando con fuerza su puños. -  Para ti todo es muy fácil, tan sólo soy un cobarde...  ¿Pero qué sabrás tú del valor?  ¿Qué puedes saber del amor si nunca has amado a nadie excepto a ti misma y a tu dinero? ¿Y tú pretendes  enseñarme lecciones de como se debe amar?  - Ranma se levantó con pesadez, estaba demasiado tenso, y miró a Nabiki con rudeza - ¿Y que sabrás de lo que Akane y yo sentimos?  ¿Te crees que esto es fácil?  ¿Qué tan solo es un juego?  Pues no lo es.  Todos habéis estado jugando con nuestras vidas desde siempre, sin importaros en lo más mínimo nuestros sentimientos, nunca os planteasteis lo mucho que podríamos sufrir con todo esto.  Así que no me vengas ahora a decirme que todo lo ocurrido es culpa mía... - Se dirigió a Nabiki mirándola con furia a los ojos, y sólo apartó la mirada segundos antes de llegar hasta ella.  Pasó de largo y se dispuso a salir de la habitación, dejando atrás a todos con la boca abierta.  Justo antes de salir habló de nuevo a la hija mediana de los Tendo sin mirarla. - ...pero sobre todo... no te atrevas a decir que he hecho sufrir deliberadamente a Akane...  Te recuerdo que fue culpa tuya que todos se enterasen de lo de la boda...  Si no hubieses antepuesto tu obsesión por el dinero a la seguridad y la felicidad de tu hermana, nada de esto habría pasado. - Y aún sin mirar a nadie se dirigió a su habitación.

- Ranma, hijo ¡Espera! ¡¿A dónde vas?!  ¡¡Tenemos que hacer algo!! - dijo Genma corriendo hacia él.

-¿Y a dónde crees que podría ir sino a buscarla? - Ranma no se volvió hacia su padre, lágrimas comenzaban a aflorar en sus ojos y no podía permitirse que le viesen así - Pero esta vez no permitiré que os entrometáis,... esto es sólo entre Akane y yo.  Juró que no pararé hasta traerla de vuelta... pero no lo hago por ninguno de ustedes.  De ahora en adelante su opinión deja de tener valor para mí... ya es hora de que seamos nosotros lo que decidamos sobre nuestras vidas... Esta vez lo haré sólo por Akane y por mí,... sólo por nosotros...

Ranma desapareció tras la puerta de su cuarto y comenzó a hacer su maleta sin dudarlo ni un segundo.  Pudo escuchar como el silencio reinó en las dos familias que se encontraban en el pasillo por unos minutos.  Kasumi fue la primera en reaccionar pidiendo ayuda para cargar a su padre hacia su habitación.  De esa forma todos fueron desapareciendo de la escena, sin mirarse, ni atreverse a decir nada,... sentían demasiada culpabilidad en esos momentos como para hacerlo.

 

* * * * * * * * * * * * * * * * * * *

[En Shizuoka, 12:00 a.m.]

Akane y Cologne llegaron a un pequeño pueblo a las afueras de Shizuoka, zona costera a bastantes Kms. al suroeste de Tokyo, y se dirigieron hacia una humilde posada para descansar un poco.  Llevaban ya ocho horas de interminable caminata, y este sólo era el inicio del camino, pues según dijo la anciana amazona tardarían al menos tres días en alcanzar su destino y sólo si llevaban un buen ritmo.  Y mira si lo llevaban. 

Entraron en la posada y se sentaron en una mesa que se encontraba resguardada al fondo del salón, era mejor pasar desapercibidas, sólo por si acaso.  Akane dejo todas las cosas que llevaban en el suelo y se dejó caer en la silla.  Ella creía haberse sentido cansada en muchas ocasiones a lo largo de su vida,... y que equivocada había estado, pues sólo ahora comenzaba a suponer lo que era realmente el cansancio, el verdadero y total agotamiento.

"Parece que la anciana no mintió cuando dijo que jamás habría podido imaginar que existiera un entrenamiento más duro que al que piensa someterme.  Y no se si podré aguantarlo,  no llevo más que ocho horas con ella y ya estoy para el arrastre,... y eso que el entrenamiento aún no a comenzado. Pero mira que hacerme carga con todas las cosas a mi sola,... y mientras ella tan pancha sin cargar un alfiler,... y encima de que se ha empeñado en hacer a pie todo  el camino, me lo hace hacer corriendo todo el tiempo.  Estoy tan cansada,... Pero no voy a rendirme, no dejaré que escuche ni una queja de mi boca, no permitiré que tenga un motivo para reprenderme.  Les demostraré a todos que puedo convertirme en la mejor artista marcial del mundo, y entonces volveré a ti Ranma y ya nunca....."

- Querida, se te enfría la comida.  Debemos reponer fuerzas, aún nos queda mucho camino por delante.

- Sí maestra - Akane comenzó a comer, estaba muerta de hambre y sin embargo notó como la comida se resistía a pasar por su garganta;....  estaba demasiado cansada.

- He pensado que descansaremos aquí unas horas antes de proseguir nuestro camino...

- Pero, no podemos hacer eso... - Akane se levantó impulsivamente de su silla y miró a los ojos de su nueva y anciana maestra - ...debemos llegar cuanto antes, no podemos detenernos o...

- ¿O qué?  ¿Qué es lo que ocurre querida? - Cologne estaba sorprendida, era la primera vez que uno de sus alumnos se negaba a descansar.  Y no es que hubiesen hecho nada realmente agotador, pero Cologne era consciente de que Akane aún no había tenido tiempo de recuperarse de la pelea del día anterior y no deseaba minar las fuerzas de su estudiante consiguiendo que enfermase, eso no era necesario, al menos de momento. - ¿Acaso tienes tantas ganas de comenzar el entrenamiento que no deseas ni siquiera descansar? - dijo en tono burlón.

- Yo... por supuesto que deseo comenzar el entrenamiento cuanto antes,... y claro que desearía poder descansar pero... no podemos permitírnoslo...  A estas horas ya deben haberse dado cuenta de mi ausencia y puede incluso que, con un poco de mala suerte, haya  acertado el camino y ya se dirija hacia aquí... No podemos permitirnos el lujo de que nos alcance sólo por descansar un poco.

- Jia jia jia jia  Tu tenacidad es increíble querida.  ¿Pero no crees que exageras un poco?  ¿Tan segura estás de que el yerno te buscará?

- ¿Estar segura?  No, no estoy segura,...  Es mucho más que eso...  Él nunca me ha dejado sola y sé que no permitiría que me ocurriese nada malo y.... no me pregunte cómo pero... lo sé, sé que Ranma ya viene a buscarme... de alguna forma... puedo sentirlo...

Cologne no respondió nada, sólo se quedó mirando a la joven en silencio.  Akane miraba apenada su plato, parecía casi como si se hubiese asustado o impresionado de sus propias palabras.  

"Es una jovencita increíble.  Y una contrincante demasiado poderosa para mi nietecita.  Sólo esperemos que no tenga razón, porque si el yerno se empeña en encontrarla no parará hasta conseguirlo.  Eso será muy malo para Shampoo, pero ahora es cosa suya saber impedir que estos jóvenes se encuentren.  Pero no le resultará nada fácil, si Akane verdaderamente puede sentir que el yerno ya la está buscando, eso podría querer decir que tienen de alguna forma un nexo de unión... Pero eso no es posible, no puede ser que ellos estén conectado,... pero si lo están... él la encontrará por mucho que nos ocultemos..."

- De acuerdo querida.  Haremos como dices y saldremos de inmediato - La voz de la anciana sonó solemne y Akane sintió alivio de que no le hubiese hecho ningún tipo de pregunta o comentario. - Así que date prisa en terminar tu comida.  No hay tiempo que perder.

- Sí maestra.

Akane siguió comiendo, intentando no pensar en nada, procurando descansar al máximo cada segundo que le quedaba.  Si no lo hacía puede que sus heridas pudiesen con ella.

 

* * * * * * * * * * * * * * * * * * *

 [Dojo Tendo]

Ranma no tardó demasiado en empacar todas sus cosas y dirigirse a la cocina para coger algunas provisiones.  Estaba en esta tarea cuando sintió una presencia detrás de él, pero no se volvió para ver quien era, llevaba suficiente tiempo viviendo en esa casa como para saber distinguir el sonido de los pasos de sus ocupantes.

- ¿Qué es lo que quieres ahora, Nabiki? - Ella no respondió, sólo se acercó a él y tendió su mano ofreciéndole lo que en ella tenía - ¿Qué es eso?

- Encuéntrala - Nabiki mantenía su mirada fija en el piso. - Toma este sobre, creo que será suficiente de momento.

Ranma cogió el sobre y lo observó con una interrogación en su rostro.  Lo abrió con cuidado y comprobó con asombro que contenía una gran suma de dinero en su interior.

- Lo siento, pero no puedo aceptarlo.  Ya os lo dije antes, esto es sólo cosa mía y yo seré quien la traiga de vuelta.  No quiero vuestra ayuda. - y tendió el sobre de vuelta hacia Nabiki.

- Eres un inconsciente ¿Lo sabías? Sin dinero no llegarás muy lejos,...  Y lo único que debería importarte ahora es encontrarla lo antes posible y no tu estúpido orgullo. - Nabiki levantó la cabeza y miró a Ranma a los ojos.  Esta vez no había rabia, ni frialdad, ni dureza en los ojos de la chica. - Toma ese dinero, por favor.  No lo tomes como un favor, ese dinero os pertenece a ti y a mi hermana, es el que gané el día de la boda,... no le encuentro mayor utilidad que para traerla de vuelta,...

Ranma miró con cierta dulzura a la joven que tenía frente a él.  Parecía ser que después de todo Nabiki Tendo no era tan fría y calculadora como todos habían supuesto.  Ella realmente se preocupaba mucho por el bienestar de su hermana menor, aunque nunca se permitiese demostrarlo.  Ranma no contestó nada, se limitó a asentir con una leve sonrisa en su rostro y se volvió para guardar el sobre en su mochilla junto con el resto de las provisiones.  Una vez hubo terminado se colgó la mochila a la espalda y se dirigió a la puerta.

- La encontraré. - Se volvió hacia la hermana de su prometida y le dedicó una sonrisa, que aunque apanada fue lo suficientemente conciliadora como para hacer que Nabiki le devolviese la sonrisa - Y no os preocupéis, se que ella está bien, es muy fuerte,... y lo digo con conocimiento de causa. - dijo llevándose una mano a la cabeza.

- Ja ja ja. Sí, tienes razón.  No hay nadie más fuerte que mi hermanita cuando la haces enfadar - ambos rieron un poco recordando inconscientemente, pero esa sensación desapareció pronto dejando tan sólo un suspiro - Cuídate mucho y tráela pronto.  Sabes que os extrañaremos,... esta casa no será lo mismo sin ustedes...

- Lo se.  Bueno, es hora de partir.  Despídeme de los demás y cuida de ellos en mi ausencia.

Ranma se dirigió de nuevo a la puerta y salió sin mirar atrás.  Encontrar a Akane no iba a resultar fácil, podría estar en cualquier parte y le llevaba muchas horas de ventaja.  Salió por la puerta del dojo sumido en estos pensamientos, cuando una voz conocida lo detuvo.

- Ranma-kun ¿Ya te vas? - Parada tras de él se encontraba Kasumi con una hermosa sonrisa en su rostro que emanaba paz.

- Sí, Kasumi, no hay tiempo que perder,...  Y demasiados sitios donde buscar... - Ranma bajó su mirada al suelo mientras decía esto.

- Siendo así puede que te ayude saber que la abuelita de Shampoo también desapareció.

- ¡¡¿Qué?!! ¿¿Cologne también se fue?? ¿Cómo lo sabes?

- Pues fácil, estuve llamando a todo el mundo por si sabían algo de Akane y cuando llamé al Nekohanten Mousse me dijo que la anciana se había ido a hurtadillas en la noche dejando sólo una nota.

- Igual que Akane... - Ranma permaneció en esté pensamiento por unos segundos, luego levantó su rostro hacia Kasumi - Esto es demasiado raro. ¿No te dijeron nada más?

- No, lo siento mucho Ranma-kun.  Pero quizás si vas para allá la pequeña Shampoo pueda decirte algo más.

- Sí, eso haré Kasumi.  Y muchas gracias por tu ayuda.  Los llamaré de vez en cuando para mantenerles informados.  Adiós.

- Adiós Ranma-kun y ten mucho cuidado.

Ranma no llegó a escuchar estás palabras, pues ya corría a toda velocidad por encima de los tejados de Nerima hacia el Nekohanten.

"¿Qué demonios está ocurriendo aquí? ¡¿Akane y Cologne desaparecidas al mismo tiempo y de la misma forma?!  Esto no puede ser bueno, nada en lo que esté metida esa vieja loca puede ser bueno...  Akane, dime que estás bien."

Pronto vio frente a él el Nekohanten y bajo del tejado cayendo frente la entrada.  Estaba cerrado así que llamó con fuerza hasta que Mousse le abrió.

- ¡¿Saotome?! ¡¡¿Cómo te atreves a venir aquí?!! Si piensas que te permitiré llevarte a mi Shamp...

- ¡¡Niaho airen!! - La hermosa amazona había saltado a abrazar sensualmente a Ranma tan pronto como le vio, pero no sin noquear antes al chico pato - ¿Airen venir a vivir con Shampoo ahora que chica violenta lo dejó? 

- ¡¡Suéltame Shampoo!! Sólo vengo a que me contéis todo lo que sepáis de la desaparición de tu bisabuela... ¡¡Y Akane no me ha dejado!! - Ranma parecía tan enfadado como en su último encuentro así que la amazona decidió aflojar un poco su abrazo.

- Lo que tu quieras airen.  Shampoo estar para hacer realidad todos los deseos de su futuro esposo - dijo frotando aún más su cuerpo con el de Ranma, intentando así hacer más clara su indirecta.

- ¿Entonces me lo contarás todo? - dijo el joven ya más calmado y con un tono ilusionado.

- Sí, como no.  Sígueme. - Shampoo se soltó algo molesta y se dirigió a la cocina seguida por Ranma.  Era indignante para la hermosa amazona que este muchacho nunca reaccionase a sus insinuaciones, al contacto con su cuerpo.  Cualquier hombre sucumbiría sin remedio a sus encantos, pero no Ranma, el sólo tenía sitio en su mente para esa estúpida muchacha que no hacía más que golpearlo. - Aquí está.  Mi abuelita dejó esta nota y se marchó sin decir nada más.

Shampoo le tendió la nota a Ranma y esté la leyó con suma atención, afortunadamente estaba escrita en japonés:

  'Querida nieta, he de salir en una viaje de suma importancia y lo más seguro es que no vuelva por Nerima en meses.  Espero que seas capaz de encargarte del restaurante en mi ausencia.  Y aprovecha la gran oportunidad que te proporciono para conquistar al futuro yerno.  Cologne' 

- Shampoo no saber nada más.  Pero,... si bisabuela haberse encargado de chica violenta, seguro que ella no volver a molestarte nunca más. - dijo la amazona en tono divertido y con una pose triunfal.

- ¡¿Encargarse de ella?! - Ranma se abalanzó contra Shampoo con una mirada desafiante en los ojos, pero la amazona no sólo no retrocedió sino que le dio otro fuerte abrazo.

- Ahora Ranma ya no tener compromiso con niña de los Tendo - Shampoo volvió a restregar su cuerpo contra Ranma, pero éste a falta de sentir excitación sintió como un escalofrío recorría su columna, no podía evitar que el roce de la chica le recordara al de uno de esos horribles gatos. - Airen besar ahora a Shampoo y después casarnos ¿Si?

- ¡¡¡NO!!!  ¡¡Y vas a decirme todo lo que sepas ahora mismo!! - Ranma estaba furioso y tan preocupado, las cosa eran mucho más graves de lo que había pensado en un principio.  Antes estaba preocupado por estar lejos de Akane durante tanto tiempo, por la posibilidad de que no pudiese cuidarse sola,... pero si lo que Shampoo decía era cierto, entonces Akane estaba en serio peligro y tenía que hacer algo de inmediato.  Se soltó del abrazó de la amazona y la tomó por los hombros con fuerza - ¡¡¡Shampoo, dilo!!!  ¡¡¿Qué es lo que está planeando esa vieja bruja?!!

- ¡¡Deja en paz a mi amada Shampoo, Saotome!!  Ella ya te ha dicho que no sabe nada más.  La vieja sólo se fue sin avisar.  Pero por si te interesa te diré que no creo que la vieja momia disecada esté intentando eliminar a la bella Akane Tendo - Mousse estaba parado en la entrada de la cocina de forma altiva, mirando escrutadoramente a una desafiante figurita de barro - Escucha bien Ranma Saotome...

*Plof* (ruido de Ranma subiendo a la cabeza de Mousse, tirándolo en el proceso)

- ¡¡Haz el favor de mirarme cuando me hablas!! ¡¡¡Ponte tus lentes de una vez!!!

 

* * * * * * * * * * * * * * * * * * *

Los dos jóvenes guerrero y la amazona se encontraban sentados en una masa del Nekohanten, muy serios y mirándose mutuamente con una desconfianza que podía sentirse en el aire.

- Y bien Mousse, di de una vez lo que sabes ¿Por qué estás tan seguro de que Cologne no va a atacar a Akane? - Ranma intentaba permanecer tranquilo, aplacando como podía el inevitable deseo de correr hacia Akane e impedir que esa maldita bruja le hiciese algo malo.

- De acuerdo Saotome, te contaré todo lo que se.  Ayer, después de que te fueras de aquí, la anciana salió alegando que tenía unos asuntos urgentes que tratar, pensé en seguirla pero Shampoo me detuvo obligándome a limpiar el local.  Debió de tardar poco más de una hora en regresar y se la veía muy contenta.  Eso me llamó mucho la atención, cuando esa vieja chiflada está contenta es que está tramando algo, así que decidí averiguar de que se trataba y la observé desde donde no podía verme...

- Mousse, eso llamarse espiar - Shampoo estaba bastante molesta con esta situación.  No se explicaba que otra razón podría haber para la desaparición de su bisabuela y su mayor adversaria.

- Bueno, como sea.  Si no me interrumpen más le cuento lo que vi:

 

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 Cologne se encontraba en el trastero buscando entretenida unos papeles.  Se la veía ilusionada mientras leía uno a uno una veintena de viejos pergaminos que tenía escondidos en diferentes rincones del desván.

- Jia jia jia.  Este es muy bueno, pero para el yerno he de encontrar algo aún mejor.

Mousse por su parte se encontraba escondido tras unas vigas del techo, oculto en la oscuridad que allí reinaba.  Estaba aburrido, la vieja momia disecada, como él la llamaba, llevaba más de veinte minutos sin hacer más que leer y leer pergaminos, nada de verdadero interés para el muchacho, pues que la anciana buscase algún otro brebaje para atar a Saotome a su nieta no era nada nuevo.  Pero ahora que estaba allí ya no podía salir de su escondite hasta que la anciana terminase o de seguro sería descubierto y las consecuencias de dicha acción serían penosas.  De este modo siguió así durante unos minutos más, ya comenzaba a entrarle sueño cuando un grito de la anciana lo sobresalto.

- ¡¡¡Aquí está!!! ¡¡La técnica invencible secreta de las antiguas amazonas!! Jia jia jia jia.  Esta vez yerno, te he encontrado un contrincante que pronto estará a tu altura, y cuando logre dominar esta técnica entonces perderás sin remedio tu título de invicto.  Jia jia jia jia jia jia.

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- Y eso es todo lo que se.

Los tres jóvenes permanecieron en silencio durante un tiempo.  Shampoo y Mousse miraban a Ranma expectantes, pues éste parecía encontrarse en shock.

- No... no es posible... - la voz de Ranma parecía carente de toda expresión, como si no se hubiese dado cuenta de que había comenzado a pensar en voz alta. - Pero ella dijo que se iba a entrenar... Entonces... - levantó su vista hacia la pareja china que estaba sentada frente a él y habló con cierto tono de preocupación y desesperación en su voz - ...eso quiere decir.... ¡¿Qué Cologne se ha llevado a Akane para hacer que se enfrente a mí?!  ¡No puede ser! ¡Akane no es tan tonta como... - hundió la cabeza en sus manos dejando ver su latente frustración - Si que es posible,... esa idiota se ha dejado engañar y se ha ido.

- ¡¡¡No!!! - Shampoo se levantó de golpe de la silla, dejándola caer.  Estaba furiosa por las palabras que estaba escuchando - ¡¡Bisabuela nunca dejaría a Shampoo por chica violenta del mazo!!

- Pues parece ser que si que puede.  Y si esa técnica que encontró es tan invencible como escuche que dijo, entonces estás perdido Saotome.

- Y que me importa a mí esa estúpida técnica - la voz de Ranma comenzó a quebrarse de nuevo - Esa loca tiene a Akane y Dios sabe que intentará hacerle,...  Sólo espero que no sea tan estúpida como para ponerle un dedo encima... - levantó su vista, la rabia era visible en su mirada - ...porque si se atreve a hacerlo la mataré - y sin decir nada cogió su mochila y comenzó a marcharse.

- Airen, no engañarse.  Bisabuela y chica tonta poder estar en cualquier parte.

- Shampoo tiene razón.  ¿A dónde irás?  Puede que incluso ya estén llegando a China.

- No. - no se volvió para hablarles - No están en China.  Akane podrá ser tan estúpida como para dejarse embaucar por las mentiras de Cologne pero no como para seguirla hasta China,... No teniendo el recuerdo de Saffron tan fresco.

Todos se quedaron callados durante un tiempo, mirando al suelo, mientras recordaban todo lo que habían vivido durante esa dura batalla.

- Está bien.  Pero si Airen ir a buscar a Akane Shampoo acompañar.  Shampoo no poder permitir que chica violenta ocupar su lugar en la supremacía femenina.

- Pues si Shampoo va, yo también iré.

- ¡NO!  Mousse quedarse aquí.  Shampoo viajar sola con futuro esposo. ¿Verdad airen?

- Ni hablar.  No estoy tan loco como para viajar solo contigo.

- ¿Airen estar seguro? - Shampoo volvió a acercarse a él de forma melosa - Airen recordar que Shampoo conocer sitios favoritos para entrenar de bisabuela.

Ranma se quedó mirándola por unos instante.  Pensamientos encontrados envolvían su mente.  Pero era el momento de tomar una decisión.

"Lo que Shampoo ha dicho tiene mucho sentido, nadie mejor que ella para conocer los escondites de la vieja amazona.  Además también hay que tener en cuenta que el hecho de que la anciana la haya dejado para entrenar a su mayor enemiga, convierte a Shampoo en una gran aliada, y si Shampoo lo es su incondicional Mousse también lo será.  Pero, no es tan fácil, viajar solo con Shampoo supone un gran peligro para mi integridad física, no soy tan tonto... Si voy solo con Shampoo me violará por el camino antes de que consiga que me lleve hasta Akane, y con llevarnos a Mousse no mejoran las cosas...  Pero ¿quién podría acompañarnos?..."

- Si piensas que voy a permitir que te vayas sola con mi Ranchan estás muy equivocada.

- ¡¡Ucchan!! - Ranma sintió un gran alivio al ver a su mejor amiga apoyada en la puerta del Nekohanten, y liberándose del abrazo amazónico se dirigió hacia ella - ¡Qué bueno que hayas venido!! ¿Te has enterado ya de lo de Akane?

- Sí, Kasumi Tendo me llamó para preguntarme si sabía algo sobre Akane y me contó lo ocurrido.  ¡¡Y no puedes irte!!  ¿Ranma, olvidas que eres mi prometido?  No puedes irte en busca de esa chica.  Ahora que ella te ha abandonado ha perdido todo derecho de ser tu prometida, así que ya no hay ningún impedimento para que nos casemos.

- Pero Ukyo,... ¡Tú tienes que entenderlo! - Ranma se acercó aún más a la chica y la tomó por los hombros mirándola a los ojos con una mirada sincera en el rostro - Ukyo, he de encontrarla.  Cologne se la ha llevado y esa anciana es capaz de cualquier cosa para que me case con Shampoo.  Tienes que ayudarme.  Ukyo, por favor, tú eres mi mejor amiga, tienes que ayudarme a encontrarla.

Ukyo no podía dejar de mirar los hermosos ojos del hombre que estaba frente a ella. No quería permitir que Akane volviese, ella que era el obstáculo que la separaba de su amado. Ese fue el motivo por el que se unió a las otras prometidas el día anterior en la emboscada que terminó con Akane. Este era el fundamento de haberla atacado: ponerla en su lugar, dejarle bien claro que no era merecedora del mejor artista marcial del mundo, que debía dejarle para que pudiese irse con una mujer digna del gran Ranma Saotome, pues ella jamás podría serlo. Pero ahí estaba ahora él, rogándole a ella, a su mejor amiga, que le ayudase a encontrarla. Y cómo negarse a esos ojos, a esa mirada desesperada. No pudo soportar por mucho tiempo la culpabilidad por haber conseguido que él sufriese de ese modo... porque él estaba sufriendo, y lo hacía por Akane, no por ella que tanto lo amaba, por el cual había abandonado tantas cosas, por el que había luchado en tantas ocasiones... sólo por Akane, siempre esa estúpida de Akane Tendo. Ukyo sintió que lágrimas iban a comenzar a formarse en sus ojos, así que sacó fuerzas de flaqueza y le otorgó una sonrisa a su prometido, que si bien era hermosa cualquiera hubiese podido comprobar que no era sincera. Ella misma se impresionó de la irritación que dejó entrever su voz cuando aceptó acompañarlos en su búsqueda.                                                                 .          

Ranma pudo sentir el dolor el la voz y la mirada de su amiga, que aún siendo perjudicial para su relación con él, había accedido a ayudarlo. No pudo evitar sentirse culpable por no poder corresponder el incondicional amor que ésta le brindaba. Pero desde cuando el amor responde a la razón, pudiendo variarse al antojo con un pensamiento o un deseo. Pero no era momento para pensar en eso, no mientras Akane estuviese lejos de él.  Ranma soltó a su amiga y se dirigió a todos.

- Entonces saldremos hoy mismo.  Nos encontraremos a las 6:30 en la entrada del Furinkan.  ¿Podréis tenerlo todo listo para esa hora?

No hubo entusiasmo, ni alegría, si siquiera una pizca de complicidad en las respuestas de sus compañeros.  Simplemente asintieron.  Este no iba a ser un viaje placentero para ninguno de los que estaban en la sala, personas que no sabrían si calificarse de amigos o enemigos, pero que deberían estar unidos ahora, sin saber por cuanto tiempo.  No eran necesarias más palabras de las que ya se dijeron y de esta forma Ranma se dispuso a salir nuevamente. 

- ¡Ranchan!  ¿Dónde te quedarás hasta entonces?  Podrías venir al Ucchan´s conmigo y así ayudarme a preparar las cosas.

- No, gracias Ukyo, sólo te entretendría y... - la voz de Ranma sonó tremendamente cansada de golpe - ...tengo algo muy importante que hacer antes de marchar.

Y sin decir más, los cuatro muchachos se dispusieron a marchar hacia sus distintos quehaceres.

 

* * * * * * * * * * * * * * * * * * *

 [Entrada al cementerio de Nerima]

Alguien dijo una vez que el cielo puede ser reflejo de los sentimientos.  

El día había amanecido con un sol radiante brillado en el cielo, pero de forma progresiva y sin aparente explicación para algunos, esa luminosidad inicial había ido desvaneciéndose dejando paso a un cielo oculto tras nubes que amenazaban lluvia.  Para Ranma esto no parecía ser ningún misterio.  Allí se encontraba, mirando el cielo como hipnotizado por él, sintiéndose culpable de haber infectado también al que comenzó siendo un hermoso día, con esta pésima suerte que se empeñaba en perseguirle donde quiera que estuviese.

Ranma cerró sus ojos con pesadez.  Por alguna extraña razón, el que Akane estuviese lejos de él siempre le causaba que perdiese parte de su energía, pero no conseguía explicarse el porqué.  Se llevó una mano a la frente y se secó unas gotas de sudor frío que habían comenzado a formarse en ella.  Luego respiró lo más profundamente que pudo y dejó escapar el aire a modo de suspiro.  Abrió sus ojos y entró en el cementerio, intentando no pensar en nada mientras se dirigía hacia a su meta,... necesitaba estar lo más centrado posible para lo que debía hacer.

Pronto se encontró frente la tumba de la difunta madre de Akane.  No supo porqué, pero temió acercarse al principio. Ese lugar le causaba un tremendo respeto, mezclado con algo de miedo y dolor... un dolor causado por el recuerdo de la tristeza en la mirada de Akane cada vez que se hablaba de su madre, por aquella solitaria lágrima que él vio caer de sus hermosos ojos café la última vez que estuvieron en este lugar.  Una sincera emoción recorrió su cuerpo al pensar en Akane, al darse cuanta que realmente habían vivido muchas cosas juntos, y no sólo peleas y locuras, sino momentos especiales, felices o dolorosos, que habían unido sus vidas de una forma especial.  Se acercó lentamente a aquella tumba y se arrodilló ante ella.   Limpió en silencio la lápida que acumulaba algo de polvo y dejó un clavel junto a ella.... Bajó la mirada al suelo y comenzó a orar en una susurrante plegaria, que casi sólo él podía oír.

- Sra. Tendo.  He venido a traerle este presente,... su hija Akane me dijo una vez que era su flor favorita.  Y, sí, es por ella por la que he venido a hablar con usted... necesito pedirle algo... y se que si hay alguien que puede conseguirlo esa es usted - una lágrima solitaria cayó del rostro del muchacho - Cuídela... por favor, no permita que le ocurra nada malo... pues si algo le pasase yo... no podría soportarlo... no podría perdonármelo nunca... Por eso se lo pido, protéjala hasta que yo la encuentre,... después le juro que ya no tendrá que preocuparse más, que la protegeré con mi propia vida y que no permitiré que vuelva a alejarse  de su familia...  Y no volveré a dejar que se vaya lejos de mí... porque todo lo que quiero es tenerla a mi lado... para poder cuidarla siempre... y...

Ranma no pudo hablar más, un nudo se instaló en su garganta y lágrimas corrieron libremente regando el suelo que bajo él yacía, por un largo tiempo.  Después sólo se secó el rostro y se dirigió hacia el Furinkan.

"Te encontraré Akane, estés donde estés te juro que no pararé hasta encontrarte,... aunque tenga que tardar toda mi vida"

 

FIN DEL CAPÍTULO 2


Nota de la autora:

¿Qué les pareció? ¿Les gustó? ¿Les pareció patético? Pues ya saben, escríbanme y díganmelo a:

nemfics@yahoo.es

Y nada más por ahora.  Nos vemos en el Tercer Capítulo: Reencuentro

 Un saludo.

Némesis