¿Cómo diferenciar entre ocultismo y charlatanería? La pregunta es muy actual y muy acorde, y contrario a la opinión popular no es tan difícil. El ocultismo es, como ya había explicado anteriormente, una doctrina o corriente filosófica que se pregunta por Dios, por el Hombre y por el Mundo, tiene en su seno axiomas fundamentales, además de los axiomas del ser compartidos por todos, el más importante de ellos es que todos los elementos de la realidad, como conjunto, mantienen entre sí relaciones análogas, no espaciales y no temporales, es decir, las relaciones causales entre las cosas pueden ser unívocas o pueden ser análogas, pero aún así se pueden presentar “iluminados” que respetando en menor o mayor manera tal principio, como todos los demás principios del Kybalion y ser en realidad charlatanes.
El método más eficaz, cuando se recorren las secciones de “ocultismo” en las librerías, o se navega por Internet, es mantener en cuenta que el ocultismo es filosofía, no es religión, ¿a qué me refiero con esto? Cuando un autor, corriente o “escuela de conocimiento” nos presenta, no argumentos filosóficos, sino dogmas, mitos que hay que aceptar como verdades universales, entonces es momento de preguntarnos si es ocultismo o si se trata de un charlatán. Pongamos un ejemplo, la gnosis de Samael Aun Weor, aunque podrían ser miles:
Aquí nos encontramos con un tal “Samael Aun Weor”, un colombiano cuyo verdadero nombre era Víctor Gómez Rodríguez, según este Hombre él es el arcángel regente de Marte, ahora, ¿porqué Marte tendría un regente, para cuidar qué, las piedras?
Ésta es la primer señal de problemas, cuando el ocultismo irrumpe en cuestiones que la ciencia se debería de ocupar, y Marte es sin duda una de ellas, no lo dice de un modo alegórico, una metáfora como cuando Crowley afirma ser el águila que enceguece a Mahoma con sus alas, sino que lo dice de modo literal. El ocultismo no es ciencia, no se mete en cuestiones científicas, si bien sí hace uso de la ciencia, es para hacer analogías, el caso más claro es Eliphas Leví y el electromagnetismo, que en su época era poco menos que el descubrimiento de un nuevo mundo. Víctor Gómez Rodríguez, o “Samael” como le solían llamar, ya ha fallecido, dice ser la reencarnación de muchos personajes, que un ocultista crea en la reencarnación no es en sí algo malo, pero puede causar problemas cuando esas reencarnaciones son las típicas de un paciente de manicomnio, en lo personal no creo en la reencarnación porque es un problema teológico enorme, se trata de una incoherencia, pero vamos, cada uno cree cosas que no puede demostrar del todo, y en ocasiones ni parcialmente, sin embargo, y continuando con la exposición, entre las reencarnaciones de este iluminado tenemos: a Julio César, Chou-Li en China, que según él, es miembro de la orden del dragón rojo durante la dinastía Chou, si existió tal orden no lo sé realmente, también fue un Lama tibetano, un hierofante egipcio asesor y educador del faraón Kefren, un caballero y alquimista en la edad media, amigo personal de Cagliostro, batalló como militar al lado de Alejandro Magno, fue Marques en España y señor de Granada, fue Miguel Angel y Dante Alligheri, hermano gemelo de Jesús, en fin, este Hombre en todas sus vidas pasadas siempre le tocó la fortuna de ser alguien destacado y no un humilde campesino.
Víctor Gómez “Samael” abre su escuela gnóstica, sin ninguna relación con la masonería o la O.T.O o cualquier logia más o menos reconocida que guardase algo de orden entre sus filas, pero no enseña filosofía, ni misticismo gnóstico, sino una nueva religión que se alimenta tanto de Blavatsky como de Leví, aún cuando entre ellos hay diferencias irreconciliables. Una de sus enseñanzas, y tercera señal de problemas es que las mujeres son meros vehículos para convertirse en dioses, y que durante el sexo el hombre no debe llegar al orgasmo, lo cual causa enfermedades, si es que tal proeza es posible. Ésta es clara señal de charlatanería, exigir cosas a los discípulos que van más allá de sus capacidades naturales, no es lo mismo lo que exige la Chaos Magick o la O.T.O., es decir, capacidad de atención constante, una voluntad templada, control sobre las pasiones y la mente, etc., que realmente son posibles de hacer, pero cuando estos iluminados exigen algo así, que causa enfermedades y que es simplemente imposible no eyacular jamás, se trata simple y llanamente de un charlatán. Este personaje también se hacía pasar por profeta, entre sus más destacadas profecías encontramos:
"Los rusos ya están a punto de conquistar la LUNA. El ser humano caminará por ese satélite y hallará que en la cara invisible de la LUNA hay vida vegetal, mineral, animal, etc. La Luna es rica en Petróleo. La guerra entre el este y el oeste es inevitable."
"El Vaticano está a punto de ser destruido. El Papa Juan XXIII andará por distintos lugares del mundo. Todas las conferencias de paz y todos los arreglos diplomáticos fracasarán inevitablemente...[...]"Rusia y los Estados Unidos no podrán arreglar nada y al fin irán a la guerra y la muerte".
La gnosis de Samael es una secta y no una escuela de filosofía, es fácil de observar por sus rasgos característicos, el discípulo no puede hacer preguntas, jamás, y eso ya va en contra del espíritu filosófico que debe instaurar el ocultismo, lentamente se busca lavar el cerebro y quebrar la voluntad de los discípulos, hacerles herramientas de sus maestros, es por ello que se cambia el nombre a “Samael Aun Weor, Logos solar de Marte”, porque no es lo mismo creerle a un tal Víctor Gómez, que al Logos solar de Marte, y más aún, los títulos de todos los demás maestros, incluyendo a su esposa, están diseñados específicamente para crear emociones que generen en el discípulo una reverencia exagerada hacia su maestro, que era precisamente lo que condenaba por ejemplo Crowley, quien argumentaba que el discípulo y el maestro no están ordenados jerárquicamente, es decir, el maestro no es superior al alumno, aunque entre ellos se guarde el respeto de los buenos modales y el sentido común.
Este gnosticismo, que nada tiene que ver con el gnosticismo antiguo, o incluso el de la línea de Crowley que se comparte entre las logias más serias, y para muestra de ello basta con ver la mezcla que se hace con la ciencia ficción, la gnosis de Samael mantiene que el planeta “Hercolubus”, que misteriosamente nadie jamás lo ha detectado, ni la NASA, es un peligro para la humanidad, pero que solo la gnosis podrá salvar al mundo, y que la manera de salvar al mundo es a través de la Gran Obra, que según esta secta se trata de tener sexo sin eyacular, ahora ¿cómo va el cáncer testicular que genera tal práctica salvar al mundo de una invasión extraterrestre? Ya en este punto es claro que se trata de una charlatanería absoluta, no se enseña, predica, y predica cosas que no puede demostrar, y peor que le compete a la ciencia demostrarlo y no a una secta. Sin embargo, esta idea de la amenaza fantasma funciona para la secta al introducir el miedo al discípulo se le engancha, se le lava el cerebro, se le cambia el modo de pensar para amoldarse al de sus líderes y muy difícilmente puede salirse de allí.
¿Cuáles son pues las señales que nos indican que una tendencia, lejos de ser ocultista es una secta?
Si usted, o algún conocido suyo, es parte de esta secta, le recomiendo la siguiente página, que le informará sobre la doctrina y las estrategias sectarias, tiene sección de documentos, enlaces y foro: http://www.sos-gnosis.org/
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