ESPARRAGO ROCK 2002

A pesar de que el cartel de la presente
edición 'Espárrago 2002' no presentaba propuestas tan
interesantes como en otros años, la primera jornada del festival
agradó, sorprendió y ayudó a olvidar el insoportable
calor de estos días. Esa es una de las quejas que más
se escuchaba dentro y fuera de bambalinas: el calor, y con razón
ya que los primeros conciertos están programados a las 18.00
h.
Orishas tuvieron la responsabilidad de abrir la jornada musical con
el sol de cara, un calor insufrible y un público ansioso de
bailar al ritmo de los sensuales cubanos. Y así fue, tras un
comienzo indeciso, sacaron sus mejores galas y exprimieron un repertorio
acertado por ser una imperiosa invitación para al cuerpo. Mientras
tanto, en el escenario 'La reina de los condenados', Antonio Orozco
se dejaba la piel sobre el escenario.
Otro de los platos fuertes de la jornada venía de la mano de
Dover que se llevó al público de calle y pusieron un
toque de naturalidad en el escenario de los grandes. Los madrileños
combinaron los mejores temas de su último trabajo con los clásicos
que el respetable esperaba. El final del espectáculo de la
banda de las hermanas Llanos, será recordada sin embargo, por
el desnudo del batería del grupo (que no dudó en ponerse
delante de miles de personas haciendo el pino mientras lucía
el tatuaje de su espalda, entre otras lindezas) y por las botellas
de agua que repartieron entre los sufridos asistentes.
Vieja gloria del pop
Por otro lado, Iggy Pop (la vieja gloria que cambió el rumbo
del rock contemporáneo) demostró que los años
no pasan igual por todos los mortales y que a él le queda mucha
energía que liberar sobre el escenario. Las firmes medidas
de seguridad que movió el cantante no impidieron que 'la iguana
de Detroit' bajara de los altares para mezclarse con el público
lo que provocó un momento de tensión entre un encargado
de seguridad y una parte del público. Iggy Pop es así,
políticamente incorrecto aunque musicalmente intachable, todo
un espectáculo para los sentidos.
En el escenario paralelo, el flamenco se enfrentaba a la difícil
tarea de competir dignamente con las cabezas de cartel. La Chiqui,
el Barrio, Segundo Falcón y Javier Barón derrocharon
arte y ritmos flamencos de calidad aunque, en todo momento minoritarios.
Ya de madrugada, le tocó el turno a los de Shirley Manson (Garbage)
que dieron unas lecciones de buena música con un directo insuperable.
El único fallo pasó por la elección de un repertorio
más centrado en el último disco, donde la banda ha dado
un giro musical sorprendente con la mezcla de soul, rhythm and blues,
punk y rock salvaje. Sin embargo el público echó en
falta retazos del pasado y algo más de implicación en
el espectáculo. Un apunte, alguien debería informar
a cantante de Garbage que, aunque intentó animar al respetable
pero no tuvo en cuente que en España, y más en Andalucía,
el nivel de inglés en los jóvenes deja mucho que desear.
Una de las causas de que la edición 'Espárrago 2002'
no consiguiera llegar al sobresaliente fue la ausencia de Fangoria,
por enfermedad. La tarea de sustituir este vacío recayó
en los mejicanos 'Jaguares' que cumplieron su función con demasiada
discreción.
El que sí cumplió las expectativas con creces fue Enrique
Bunbury que demostró calidad, saber estar en un escenario y
dejó a su público encantado. "Eres el más
grande" gritaba un chica que no pudo contener la emoción
ni las lágrimas mientras daba gracias al creador por que pusiera
a Bunbury sobre la faz de la tierra. El antiguo líder de 'Héroes
del Silencio' se dio un auténtico baño de multitudes
y preparó el terreno para su próximo disco, cuya salida
está prevista que se haga realidad en el 2003, se gún
declaró el cantante.
Escenario Espárrago: Orishas, Dover, Iggy Pop, Garbage y Bunbury
Reina de los condenados: Antonio Orozco, La Chiqui, El Barrio, Segundo
Falcón & Javier Barón, Jaguares y Tabletom.
F Universe: DJ Fabián, MR. R.C. aka Rasco, Sideral, Felipe
Volumen, Richie Hawtin y Javi Unión
F Electro: DJ's Telephunken vs. Los Chicharrons DJ's, Wagon Cookin,
Junior, José Callado, Pedro Canales, entre otros muchos.
Sugarless en el festival
NOCHE DE LUJO CON GARBABE E IGGY POP
(Cronica remitida por agencias)
EFE- IDEAL- Garbage e Iggy Pop pusieron la nota de lujo en la noche
más internacional del Festival Internacional Espárrago
Rock en Jerez de la Frontera. Los españoles Bunbury y Dover
completan el grupo de las actuaciones más destacadas en el
escenario principal del certamen jerezano.
La decimocuarta edición del Espárrago, la cuarta de
ellas en la localidad gaditana, se inauguró con la noticia
de la cancelación del concierto de Fangoria, el grupo de Alaska
y Nacho Canut, por enfermedad.
Ayer, en la primera jornada oficial del Espárrago tras la fiesta
de presentación del jueves, miles de personas comenzaron a
llegar a las cercanías del Circuito de Velocidad, y acamparon
en las zonas habilitadas al efecto antes de acceder al recinto para
asistir a los conciertos.
Los asistentes al certamen pudieron participar anoche en Jerez en
uno de los más intensos conciertos del mítico Iggy Pop,
que desgranó sobre el escenario lo mejor y más conocido
de su repertorio de más de 30 años de carrera.
El rockero de Detroit saltó al escenario y no paró de
cantar, bailar, gritar y despegar su espectáculo hasta la última
canción, en una actuación que fue de las más
esperadas de la noche, y el ex compañero de fatigas de David
Bowie no decepcionó a nadie.
Otro de los momentos más intensos de la noche llegó
con el grupo que forma la escocesa Shirley Manson junto a tres gigantes
de la música como Steve Marker, Duke Erikson y Butch Vig: Garbage.
En esta ocasión Butch Vig, mítico productor y artífice
del sonido de grupos como Nirvana y Smashing Pumpkins, no viajó
con el resto del grupo por encontrarse convaleciente de una enfermedad.
La actuación de anoche en este festival de Garbage ponía
punto y final a la gira que durante un mes ha llevado al grupo por
tierras europeas.
Sus compañeros salieron al escenario hacia la una de la madrugada
y, sin duda, congregaron a la mayor cantidad de público de
toda la noche.
El magnetismo de Shirley Manson y la fuerza de las letras y las canciones
en directo hicieron las delicias de los más de 10.000 asistentes
que corearon las canciones más conocidas de Garbage, desde
el "Boys and girls" que cantaron casi al comenzar hasta
el "Paranoid" y su himno "Stupid girl", para el
que los asistentes tuvieron que esperar hasta casi el final del concierto.
Los cubanos Orishas, con su mezcla de rap y hip hop con la música
cubana, inauguraron el Espárrago 2002 e hicieron saltar al
público a pesar de la hora (las siete de la tarde) y el calor.
El trío cubano presentó ante el público en Jerez
su nuevo disco "Emigrante" y dieron una lección de
fusión musical.
Después actuaron en el escenario principal del certamen los
madrileños Dover, que trajeron lo mejor de su último
trabajo "I was dead for 7 weeks" y no decepcionaron a nadie
e hicieron un repaso por lo mejor de su trayectoria.
Bunbury puso el cierre al escenario principal cuando salió
al escenario pasadas las tres de la mañana.
El ex de Héroes del Silencio interpretó los mejores
temas de su aventura en solitario y fue una de las sorpresas más
agradables de la noche.
Otro de los escenarios importantes del Espárrago, La Reina
de los Condenados-Flamenco viene del sur, fue inaugurado por Antonio
Orozco, ya que los mexicanos Jaguares pasaron a cubrir la baja de
Fangoria y no saltaron al escenario hasta las dos de la mañana.
También pasaron por este escenario los malagueños Tabletom,
con su carismático líder Rockberto, y las actuaciones
flamencas de los gaditanos El Barrio, de La Chiqui y Segundo Falcón
y Javier Barón.
DESDE la fatídica lluvia torrencial que terminó con
la edición del 2000 al festival de música independiente
más barato de Europa le está costando levantar cabeza.
El pasado año se arriesgó con grupos internacionales
de la talla de Placebo, Beck y Neil Young, pero le salió mal
la jugada y tuvieron que devolver miles de abonos por falta de público.
Ese debe ser el motivo de la precaución que ha mostrado la
organización del Espárrago Rock a la hora de plantear
el cartel de la presente edición.
El festival no pasa por su mejor momento a pesar de llevar catorce
años de tradición, ya que la sombra de la suspensión
de hace dos años aún planea sobre los asistentes y sobre
las arcas de los organizadores. A esto hay que añadirle la
inmejorable propuesta que ha preparado el Festival Internacional de
Benicàssim para el mes de agosto. Este festival cuenta con
un respaldo presupuestario con el que no puede competir el de Jerez,
aunque lo intenta.
Sea como fuere, la gente acudió al circuito de velocidad de
Jerez a ver a sus artistas favoritos y disfrutó, aunque cada
uno cuenta la experiencia según le ha ido. En general las mismas
quejas de siempre: el horario de los conciertos que comenzaba a las
seis de la tarde, los autobuses que supuestamente recorría
cada media hora los 4 Km que separaban la zona de acampada de la de
conciertos y que costaba 1,50 euros por cabeza, las duchas y servicios
para los que había que soportar colas de hasta una hora y media,
y la ausencia de Fangoria, entre otras cosas.
Oferta ecléctica
Sin embargo, con esta edición se ha demostrado que ni las incomodidades,
ni un cartel demasiado comercial para el perfil de este festival impide
a 22.000 personas acudir, presenciar y disfrutar de la música
en su versión más ecléctica. Según la
filosofía china 'de todo lo malo se puede sacar algo bueno',
esto es más cierto que nunca en el caso del Espárrago
2002 que consiguió, con la miscelánea de estilos, abrir
el horizonte del público al combinar grupos como Amaral y Dover
(sobradamente conocidos) con otros como Sober, Sidonie o Big Soul.
La noche del viernes, la más internacional del festival, estuvo
marcada por las actuaciones de Orishas, Iggy Pop y Garbage, junto
con Dover y Bunbury como representación nacional. El Espárrago
arrancaba con bastante éxito en cuanto a la asistencia (que
es lo que le importa a la organización) y a la calidad de las
actuaciones (que es lo que valora el público).
La noche del sábado prometía ser una velada completa
tanto por la oferta musical como por la masiva llegada de aficionados
a la música durante toda la jornada. Backyard Babies sorprendió
a sus habituales con un giro musical que devolvió a la banda
sueca a sus orígenes más duros en la línea del
hard punk europeo. La siguiente en actuar fue Amaral que agradó
tanto a sus seguidores incondicionales como a los advenedizos por
su buen hacer y por la sencillez de los que triunfan desde abajo.
A continuación llegó Sober y encandiló al respetable
con un directo formidable y unos temas profundos y directos.
El premio gordo del presente festival se lo llevó Extremoduro
con la caradura y sinvergonzonería que no han perdido en los
nueve discos que tienen en la maleta. El lleno fue absoluto y los
temas elegidos con acierto como demostró un público
totalmente entregado, que coreaba todas y cada una de las letras.
El contrapunto lo pusieron Sidonie. La esperada actuación de
los catalanes se vio retrasada por un cambio en el programa lo que
les dejó la responsabilidad de cerrar el escenario 'Flamenco
viene del sur'. Por fin aparecieron y, tras numerosos problemas de
sonido, comenzaron un concierto demasiado flojo. Acabaron desnudándose
para intentar salvar lo poco que quedaba, pero ni por esas.
Lo mejor: 'Los Rabanes' teloneros con proyección de futuro,
Orishas, Iggy Pop, Garbage, Bunbury, Sober, Extremoduro y Big Soul
con los temas de dos anuncios televisivos.
Lo peor: como cada año, la habilitación de la zona de
acampada, los horarios poco compasivos con el sufrido público,
la ausencia de Fangoria y el descalabro de Sidonie.
2º Dia
DEL POP DE AMARAL A LA SUGESTIÓN SONORA DE "OMEGA"
LA ULTIMA NOCHE DEL ESPÁRRAGO ROCK 2002
El Punk de Backyard Babies, la fuerza de Sober y el mensaje de rock
"urbano" de Extremoduro
Un balance oficial de 22.000 asistentes garantizan la continuidad
del festival del sur.
Jerez de la Frontera (Cádiz), 14 jul (EFE).- Extremoduro y
Amaral triunfaron en la última noche del Festival Internacional
Espárrago 2002 de Jerez de la Frontera (Cádiz), en la
que también participaron Sober, Hamlet y Enrique Morente y
Lagartija Nick, que trajeron al certamen jerezano su espectáculo
conjunto "Omega".
En el escenario del Espárrago actuaron también los grupos
de la escena independiente española que tocaron en el escenario
La Reina de Los Condenados.
El certamen jerezano, que comenzó el pasado día 11 y
finalizó ayer, superó las expectativas de público
previstas por la organización y alcanzó la cifra de
las 22.000 personas, de tal forma que el número de asistentes
por día osciló entre las 16.000 y las 18.000 personas.
El momento del festival que congregó a un mayor número
de público fue el concierto en el escenario principal de la
banda española Extremoduro, con su carismático líder,
Roberto Iniesta, a la cabeza.
Los extremeños presentaron en directo en el Festival los temas
de su último trabajo "Yo, minoría absoluta",
a la vez que hicieron un repaso a lo mejor de su trayectoria desgranando
temas clásicos de discos como "Deltoya", "Rock
transgresivo" o "Agila".
El dúo Amaral, compuesto por Eva Amaral y Juan Aguirre, logró
también conectar con el público del Festival en su actuación
en el escenario principal, que registró un lleno absoluto.
Otro momento clave de la noche fue la actuación en el escenario
"Flamenco viene del Sur" del cantaor granadino Enrique Morente
junto al grupo de rock Lagartija Nick, que presentaron su espectáculo
"Omega", que lleva cuatro años recorriendo los escenarios
y que anoche congregó a un gran número de público.
El flamenco y el rock se mezclaron en este concierto con las adaptaciones
de Lorca y las versiones de Leonard Cohen.
Una propuesta flamenca más tradicional fue la que ofreció
hacia las 21 horas en el mismo escenario el joven Ezequiel Benítez,
cantaor jerezano, que hizo disfrutar a los asistentes con un repertorio
clásico y lleno de fuerza.
Los madrileños Sober, con su propuesta hard-rock, y los consolidados
Hamlet fueron otros de los platos fuertes de la noche del sábado.
Asimismo, por el escenario La Reina de los Condenados, ya que por
él desfilaron grupos de la escena independiente española
como Sidonie, Sunday Drivers, los gallegos Deluxe o Eugene, así
como los norteamericanos Big Soul.
Otro de los éxitos de la noche estuvo en los escenarios dedicados
a la música electrónica, sobre todo en el Universe,
ya que en ocasiones se vivieron momentos de lleno absoluto con las
actuaciones de nombres como Jordi Slate, Phantom Beats, Deibeat o
Señor Lobo.
El director de Munster Tourin, Francis Cubero, y el responsable de
Media Festivals, José María Palacios, aseguraron en
rueda de prensa que el Festival Espárrago de este año
ha sido todo un éxito, con una gran afluencia de público
como lo demuestra la cifra de 22.000 personas que baraja la organización
y el hecho de que la zona de acampada, a pesar de haber sido ampliada,
se haya vuelto a llenar por completo.
Las empresas organizadoras destacaron a su vez la idoneidad de la
ciudad de Jerez de la Frontera y del recinto del Circuito de Velocidad
para albergar un festival de estas características, lo que
hace que se consolide la presencia del certamen en la localidad.
De hecho, anunciaron que para el Festival Espárrago de 2003,
cuando se celebrará la decimoquinta edición y la quinta
de ellas en Jerez, se desarrollará un certamen especial.