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16 de enero de 2005
18:49 EST
La campaña de Mango en
Tambogrande es más intensa ahora, después de las fiestas.
Por lo menos he gozado un
buen 25 de diciembre y un buen 1 de enero. Esos fueron nuestros únicos
días libres en el trabajo.
La dueña de la fábrica
también se fue a pasar fiestas con fu familia y estuvo de vuelta en el
trabajo el 2 de enero.
La empresa nos regaló un
panetín por Navidad. Casi todas las empresas hicieron lo mismo. Pude
observar a tanta gente caminando con su panteón, por la calles, en los
mototaxis… en grupos, cada uno llevando su panteón. ¡Eso era gracioso!
Por estos días, la dueña me
propuso cambiar de área. Es que en la empresa se trabaja por áreas:
calibrado, hipodérmico, empacado. Yo acepté. La dueña me dijo que lo
hacía para que pueda ver el trabajo de las otras áreas.
Antes estuve trabajando en
calibrado. Ahora estoy trabajando en empacado. Lo que
estamos preparando acá se va para Estados Unidos.
Ahora mi trabajo es llenar
unas cajas especiales con mangos, que van a alguna parte. Aldo hay
varios cajones llamados pallets, que se arman en bloques de
cajas empacadas de unos dos metros de altura. A ese proceso se llama
palletizado.
Luego todo se lleva a un
lugar que le llaman ‘cámara’, que es como una congeladora gigante,
para evitar que la fruta verde madure con el calor, que cada día es
más fuerte.
La tensión en esta área es
menor que la de la anterior donde estuve. Desde aquí, muchas gracias a
la señora Esther por eso.
Espero que me dejen hasta
el final, porque necesito el dinero.
Mi plan es este: reunir el
dinero para ir a algún lugar a estudiar algo –consiguiendo un trabajo
antes, ¿no?...
Aldo Palacios es corresponsal de factortierra en Tambogrande, y
nos entregará semanalmente sus impresiones acerca del trabajo en la
industria del mango.
Envíe sus
comentarios a
factortierra@yahoo.es
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