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El Lado Oscuro ya está en DVD

The Revenge of the Sith DVD Edition
Ewan McGregor, Sanuel L. Jackson, Hayden Christensen, Natalie Portman
Dirigida por George Lucas
Twentieth Century Fox, 2005
Naturalmente que extrañaremos esta historia de las galaxias que se prolongó por casi 30 años pues con ello se cierra un capítulo importante en la manera de hacer cine. Para bien o mal, como luego dicen, Star Wars cambió el rostro de las películas como las conocíamos; esas campañas publicitarias de una cinta mediante los restaurantes de comida rápida, los tráilers con un año de adelanto, las precuelas... todo esto no existía antes que Star Wars fuera estrenada aquel lejano julio de 1977 en Estados Unidos (y en México en diciembre de ese mismo año).

Ante los muy cuestionados resultados de las precuelas The Panthom Menace y The War of the Clones, Lucas nos demostró en esta sexta-tercera parte el por qué de su reputación como uno de los directores a respetar en Hollywood. Es una película sombría pues trata de la seducción que sufre Anakin Skywalker hacia el lado oscuro, cuando la amistad con su mentor Obi Wan Kenobi se convierte en animadversión, y cuando el canciller Palpatine, en realidad un sith, se convierte en el Emperador con Lord Vader como su protegido. Es una historia magnífica que ciertamente extrañaremos pues --aparentemente-- ya no hay nada que contar.

Bueno, sí, hay algo, y se incluye en este DVD. Se trata de las "escenas editadas" aunque sí, ya lo adivinaron, muchas de ellas parecen haber sido omitidas a propósito para ofrecerlas posteriormente. Una de ellas se refiere a Bobba Fett y otra a un casi niño Han Solo y otra la manera en que Yoda es obligado a exiliarse en el sistema Dagobah. También incluye un documental donde Lucas se explaya sobre la escena final donde Anakin queda semi achicharrado y sin piernas. Por supuesto que ello no demerita nada para quienes son fans de la sexteta.

Revenge of the Sith es, sin duda, una de las películas del ya agónico 2005. Conservarla en DVD es parte obligada de mantener este legado, para que la fuerza se quede, así, en casa.

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¡Reivindicado!

Con Revenge of the Sith, George Lucas...

(Junio 2005)

Hulk
Eric Bana, Jennifer Connely, Sam Elliot, Nick Nolte
Dirigida por Ang Lee
Universal Pictures, 2003
Esta película, estrenada en el 2003, terminó por convertirse en una lección para Hollywood: el público no es tan predecible ni tan ingenuo como creen los estudios, pues si bien Hulk arrancó como un estreno que presagiaba lo que allá llaman blockbuster, a los pocos días cayó en el vacío de la ignominia.

¿Razones? Un argumento sumamente débil al que se quiso maquillar con efectos especiales que sí, eran sorprendentes, pero que al final evidenciaban lo obvio, esto es, que estábamos ante un bodrio de alto presupuesto. Curiosamente, tanto el director Ang Lee como los miembros de Industrial Light and Magic, encargados de los efectos, manifestaron varias veces que la cinta enfatizaba más lo sicológico y espiritual que los meros efectos especiales, algo que ni su abuelita les creyó.

El problema principal de Hulk --más evidente ahora en que la hemos visto nuevamente en DVD-- es que la trama se cae lastimosamente a poco menos de la mitad de cinta: sí, el doctor Bruce Banner, al recibir esa inesperada sobredosis de rayos gamma, combinará al monstruo con su inestabilidad emocional; sí, se trataba de un proyecto secreto del gobierno norteamericano, factor infantable para imprimir paranoia al asunto; sí, Hulk es otra vuelta de tuerca al Dr. Jekyll y Mr. Hyde que todos llevamos dentro... y, ahí terminan las posibilidades, y para llenar casi dos horas se requería, claro, de una sobredosis de efectos especiales tras los cuales muchos espectadores también quisimos ponernos verdes, pero de coraje ante la evidente estafa.

Esta debilidad argumental fue detectada por Bill Bixby, el Hulk de la televisión. Por ello ideó a un David Banner que cada semana visitaba un poblado distinto y que más tarde abordó temas como el abuso infantil, la explotación laboral, y otros. Los efectos especiales eran bastante rudimentarios, pero yo prefiero al Hulk de Bixby que a este engendro con el cual Hollywood nos quiso ver la cara.

Falling Down DVD
Michael Douglas, Barbara Hershey, Robert Duvall, Rachel Ticotin
Dirigida por Joel Schumacher
Warner/1992
Un oscuro burócrata de Los Angeles termina de hartarse cuando un nudo de tráfico le impide llegar al cumpleaños de su hija, quien vive con su mamá divorciada. Deja abandonado su auto en plena autopista e inicia un camino, como él dice, sin retorno. Pero en ese camino se topará con un coreano que infla los precios en su tienda, a dos chicanos, a un restaurante fast food donde se niegan a servir el desayuno pasadas las 10:30 am y a un fanático nazi.

Casi de milagro, Falling Down (que por acá conocimos como Un Día de furia) se brincó todas las cercas de lo políticamente correcto: al coreano por poco y lo mata de un infarto, los chicanos que quieren vengarse de él en pleno East LA terminan no sólo muertos o con un balazo ("toma lecciones de tiro, imbécil", le dice a uno de ellos) sino que les roba una mochila retacada de armas de grueso calibre.

Cuando corre la noticia de que "un loco" recorre Los Angeles, se encarga al agente Frank Barnes (Duvall) y a su asistente (Ticotin) a que lo localicen. En cada parada realiza una llamada telefónica a su ex-esposa para avisarle que va en camino a casa. Todas sus frustraciones y emociones se convierten en una sola: cuando mata al fanático nazi --algo que Schumacher tuvo que incluir para balancear la primera parte-- y provoca un infarto a un viejito que juega golf nos surge una pregunta a los espectadores: el tipo está loco, ¿pero cuánta gente no estaría dispuesta a saltarse las trancas legales si se le diera la oportunidad?

La principal falla argumental radica en la inclusión innecesaria de la esposa de Frank, una mujer quien, como el personaje de Douglas, vive en su propio mundo luego de perder a su hija y sufre de profunda paranoia. En tal sentido estas escenas roban dinamismo a una cinta que, en lo general, marcha a buen ritmo. (Otra escena exagerada: los que mueren de sida en un parque de Los Angeles ante la indiferencia general).

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