DIA
TRAS NOCHE
Dia
tras noche
te
he esperado
noche
tras día
te
he añorado
y
tu,
me
sigues ignorando
Quizá
ya tus labios
no
sepan pronunciar mi nombre
quizá
ya otros brazos
te
den el calor
quizá
solo sea una ilusa
que
aun te sigue amando
mas...
no me averguenzo
pues,
así soy.
AHOGANDO
LA RAZÓN
Que
cruentas tempestades
soliviantan
mi razón
hablándome
de olvidos
susurrándome
traición
negras
y enmarañadas dudas
que
en la noche quebrantan el sueño
me
arrastran por espesuras
que
ahogan los pocos suspiros que me quedan.
Y
doy bocanadas de aire
e
insuflo esperanza a la razón
y
le digo, -¡calla!-, no seas impaciente,
mantente
erguida junto al corazón
¿No
ves como el no falla?
¿No
ves que sigue en esa batalla
de
creer en lo que, quizá, existió?
Y
la razón me habla
y
me hiere con palabras de hielo
y
se ensaña con mi candidez
diciéndome
al oído
con
irritante sonido
¿No
ves que te engañaron otra vez?
Y
entonces me desarma
por
no saberle explicar
lo
que el corazón tampoco entiende
que
aquel amor que entregaran valiente
se
perdiera en un silencio pertinaz.
Y
aun así,
envuelta
en la negrura,
con
la razón cabalgando a mi espalda,
sigo
acariciando cada noche
aquella
figura, que lejana,
ilumino
con velas blancas,
atrapada
en su recuerdo
sin
querer desunirme a ello,
por
si vuelve una mañana.
¡
Dios, como me duele el corazón !
CAERÉ
Cuando
un día caiga
y
las nubes te emborronen
y
la sonrisa se desvanezca
acuérdate
de mi sonreír
Recuérdame
con ternura
con
la dulzura que te amé
con
la salvaje frescura
con
que hacías tuya mi piel
Recuérdame
sonriendo
con
los ojos brillando transparentes
con
mi pecho latiendo turgente
reventando
de amor por ti
Recuérdame
así, amor,
envuelta
en un blanco tibio
deslizándome
suave, tu alivio
que
te acurrucaba en su piel
Y
recuerda, amor
que
te emplazo en otra cita
aunque
hayan mil años
de
espera maldita
mi
luz seguirá unida a ti.
ALGUN
DIA
Algún
día,
cuando
la soledad te arrecie
recordarás
aquellos dedos
que
amorosos te dibujaban
aquellos
labios amantes
que
dulce te pronunciaban
ansiarás
volver a aquella piel
que
suave se entregaba
sin
pedirte nada a cambio
tan
solo, enamorada.
Llorarás,
y
las mentiras vendrán a tu mente
aquellas
que fuiste tejiendo
poco
a poco, indiferente,
que
tapaste con olvidos
con
ausencias prolongadas
olvidando
las locuras
que
tu corazón fraguaba.
Olvidarás,
y
yo,
seguiré
recordando un sueño
aquel
que tu creaste
entre
mentiras y cuentos
les
diré a los que conociste
que
solo fuiste humo
un
hueco deseo
caminante
sin destino.
Y
tú,
mírate
de nuevo al espejo
enfréntate
de nuevo a tu mirada
y
dile, sin requiebros
que
no sentías al tocarme
la
locura en los dedos
que
tu corazón no reventaba
feliz
entre mis sueños
dile
que no me amabas
al
recitarme versos
miéntele
a él también
a
tu sincero espejo.
LLOVERME
Cuantas
veces me he llovido
y
he tragado oscuro barro
nómada
en el olvido
tirando
de un solitario carro
Tantas
noches braceando
nadando
en la ingravidez
pasos
adelantados
que
debía retrasar otra vez
Claroscuras
caricias
que
soliviantaban mi cuerpo
que
a duras penas podían
sentir
a través de un cerco
No
había ardorosos latidos
solo
escozor del alma
una
laguna, otro latido,
y
de nuevo esa banal calma
Aquella
singladura marchita
aquel
coraje desesperado
que
a veces chispeaba inaudita
y
otras moría desangrado
Mas
encontré una noche clara
una
mirada inquieta
que
quería saber de mi alma
y
de mi pensamiento poeta.
PINTEN
FLORES ROJAS
Restallan
latidos graves
en
mi corazón inacabado
siento
una daga en el pecho
un
anhelo estallando
Siento
nacer en mí la pena
en
este día de desencanto
cortejo
fúnebre de violines
el
manar lento de un llanto
Esa
espera incontrolada
esa
angustia de espanto
ese
caer las hojas
de
un largo calendario
Que
alguien desclave esta daga
que
poco a poco me está matando
que
alguien pinte flores rojas
en
este cuadro de colores pálidos
NO
TE DIGO NADA
Te
digo que no te amo
y
pienso lo contrario
Te
digo que no te deseo
y
muero por tenerte
No
te digo nada
Callo
y espero
Y
no te digo nada
MALDITA
SOLEDAD
Esa
soledad que te rodea
que
de tu carro nunca se apea
que
te envuelve con dulzura
y
te ahoga con su ternura
Esa
soledad inconstante
que
se cree tu amante
que
susurra a tu oído
lo
que nadie dijo
Esa
soledad aceptada
que
duerme acurrucada en la cama
que
tu sabes que le engañas
para
que te deje una mañana
Esa
relación de soledad
que
sabes quieres dejar
y
tu mente abotargada
no
sabe como empezar a abandonarla
Esa
soledad mal entendida
que
tu quieres sólo algún día
y
que ella a ti se amarra
hasta
que tu corazón desgarra
DOCE
DESEOS DE MUERTE
Y
mañana beberé
doce
vasos de vino
uno
por cada golpe
que
me dio el destino
Y
mañana brindaré
por
esta maldita suerte
y
mientras bebo recitaré
para
que venga la muerte
Y
mientras muera reiré
y
le daré un susto a mi sino
pues
yo también me burlaré
de
su espinoso camino
Y
desde el universo bendeciré
la
sonrisa de un niño
el
aroma de una flor
y
el final de mi camino
DESAPARECERÉ
Desapareceré
de tu vida
como
la nube se disipa
como
agua de arroyo
en
el mar se difumina
Desapareceré
sin ruidos
como
huracán imaginario
como
desaparece la nieve
cuando
entra el verano
Desapareceré
de tu vida
como
se va la infancia
como
se va la hermosura
las
huellas y fragancias
Desapareceré
de tu vida
sin
siquiera haber entrado
entre
susurros no dichos
y
suspiros sofocados
¡Desapareceré
y tú
ni
siquiera lo habrás notado¡
ESTRELLA
DE MI ALMOHADA
Y
tu me das el alma
y
yo solo la piel no puedo
y
sigo amando en calma
en
silencio tu recuerdo
Y
no quiero olvidarte
pues
te amo demasiado
para
que tu estandarte
quede
solo abanderado
Y
no hay decisión tomada
pues
día sin noche no hay
tu
estrella aún puebla mi almohada
Es
mi castigo la distancia
y
mi pena no poder
absorber
esa fragancia
que
de sueño en tu voz puedo oler
Baño
mi cuerpo en las lágrimas
de
mi rabia contenida
me
doy asco y lástima
por
no poder verte, vida mía
Y
quiero morir en silencio
enterrar
este día ingrato
este
llorar de nubes
este
triste día sin tu canto
No
hay decisión tomada
pues
día sin noche no hay
tu
estrella aún puebla mi almohada
Sirve
la negra distancia
para
valorar a los amigos
y
el amor y mi ignorancia
te
seguirá esperando como mendigo
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