Preparemonos porque esto no ha hecho más que empezar. Hay según que cosas que no se pueden publicar y eso desde el punto de vista de los que se manifiestan como portadores del vox populi de la sociedad, que al fin y al cabo es una manera de pensar y no un CRITERIO DE VERDAD ABSOLUTA. Sin tener en cuenta que hay otras formas de entender este mundo y tan respetables como las suyas (presumiblemente al menos...) se atribuyen la facultad de la quema de libros y el asalto a un local público con el beneplácito de las autoridades. ¿Y hablan de los nazis? Algún día llegará que también se haga lo mismo con sus panfletos, y los que sobren se regalarán como tebeos para regocijo y cachondeo de todos. Inauguraremos en las sedes de esos desmelenados museos de los horrores donde los alumnos de Psiquiatría puedan estudiar el complejo de subnormalidad inherente al homo democraticus y la empanada mental de los adalides de la democracia que defienden por un lado la libertad de expresión y por el otro no paran de gastar en cerillas quemando libros que son una muestra de esas misma libertad de expresión(¿?) Crearemos el premio a la aberración más delirante para todos aquellos jueces y magistrados que dicten sentencias que tiren por tierra los más elementales derechos constitucionales.

Y eso si, desde ya mismo, instamos a que no se olvide lo hecho, que tomemos nota de todo, y que vayamos engrosando la agenda personal de "tareas pendientes".