MEDICAMENTOS HOMEOPATICOS:

NUX VOMICA

Se trata de personas ambiciosas. Tienen la "sana" ambición de querer generar su propia empresa, pero no para provecho propio, sino para beneficiar a los demás.

 Se enojan principalmente por situaciones que consideran injustas. Así, padecen de indignación, y su modo de reaccionar es violento...
Usan la violencia física. Son aquellos que "se les va la mano" en un puñetazo contra quien lo enoja. Actúan y luego piensan.

STRYCHNOS NUX VOMICA

Se los conocen vulgarmente con la denominación "leche hervida". Son nerviosos, irritables y muy activos. No toleran la contradicción. Son idealistas.

Son friolentos y les gusta comer grasas... Comen mucho y luego se sienten mal, tanto que este medicamento puede usarse en los trastornos por excesos alimentarios. También se usa en náuseas matinales, y por el embarazo. Son sumamente sensibles a todo, a lo que les dice, a cómo se los trata , a las groserías, a los ruidos molestos, al humo de cigarrillo, a la luz excesiva, al contacto físico. Son esas personas que no toleran que se los toque.
Ni que hablar si se están enojando y quien los increpa los toca: se produce entonces el estallido violento.
El café les disgusta y lo mismo pasa con el pan.
Si no duermen de noche, de día se comportan de modo insoportable, siendo sumamente sensibles en todo, con fácil irritabilidad.
Si duermen bien por la noche, están de muy buen humor por la mañana, con gran capacidad de trabajo. Mejoran con clima templado y con humedad.
Suelen ser muy ordenados con sus cosas, y saben organizarse bien, y organizar sus empresas. 
Son competidores y competitivos , pero su competencia no es desleal. Avanzan sin perjudicar a nadie, son correctos, y muy nobles en su proceder.
Pueden padecer celos, tanto de sus amistades, como de sus parejas. Celos no tan marcados como vemos en otros medicamentos como lachesis o hyosciamus.
Pueden representar a grupos para defender sus derechos y así desempeñar con total idoneidad puestos como representación gremial, o similares.
Pueden temer descontrolarse, pero en situaciones de apremio encolerizante carecen de control, son lo opuesto al medicamento que se reprime por excelencia: Staphisagria.

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