NUESTRA PARROQUIA

Nogales actualmente cuenta con una parroquia cuya fiesta patronal celebramos todos lo nogalenses el 24 de Junio  Nacimiento de San Juan Bautista.

Remontándonos un poco al pasado encontramos que en el antiguo Ostotipac, actual Nogales, en estas tierras adquiridas por el primer virrey de la Nueva España don Antonio de Mendoza, quien en el año de 1545 fundó una finca azucarera, la cual contaba ya con iglesia de zacate y cura propio como lo mandaban las ordenanzas reales.

Como podemos ver la religiosidad de nuestro pueblo es ya muy antigua.

Otro acontecimiento significativo ocurrido en Nogales y que tiene que ver con la parroquia, es lo acontecido en el año de 1717 cuando un incendio acabó con el ingenio, las habitaciones de la noble familia, las casas de los trabajadores y habitantes lugareños y obviamente con la iglesia que en ese tiempo contaba con techo de vigas.
El historiador Don Manuel Orozco y Berra nos dice en el año de 1852 refiriéndose a Nogales: Tiene iglesia parroquial regularmente adornada, la cual se está en la actualidad ampliando y sus casas son de cal y canto y teja.
Siendo la iglesia parroquial actual con su nueva advocación de San Juan Bautista, el único vestigio que aún perdura en pie desde los tiempos pretéritos de este legendario centro de población con más de cuatro centurias de vida, preciada reliquia de esbeltas torres y que si tuviera el don de la palabra, nos relataría como presenció el final del ingenio con 175 años de vida -1542-1717- y no sólo lo sucedido al ingenio sino también a sí misma el 28 de agosto de 1973, temblor en el cual perdió la cúpula y el actual temblor del pasado 15 de Junio, en el cual también sufrió algunos daños menores.
                                  San Juan Bautista
Profeta y Primo de Nuestro Señor Jesucristo
Por antonomasia se designa como el Bautista a san Juan, precursor de Cristo. Era hijo de Zacarías y de santa Isabel, prima de la Virgen María, y por tanto primo de Jesús, que recibió el bautismo de sus manos. Cuando tenía 27 años comenzó a predicar en el desierto de Judea y a bautizar a sus seguidores en el río Jordán. Juan predicó la venida del Mesías, anatematizó los vicios y crímenes de los poderosos y murió degollado en el año 32 por orden de Herodes Antipas, uno de aquellos poderosos a quien había puesto en evidencia en más de una ocasión pero que, consciente de su falta, callaba, bien por admiración a Juan, bien por miedo a una revuelta del pueblo que lo veneraba. Herodes Antipas era hijo de Herodes el Grande, a cuya muerte su reino de dividió entre tres de sus hijos: Arquelao quedó al frente de la provincia de Judea con el título de etnarca, Herodes Antipas recibió el gobierno de Galilea y Perea, con el título de tetrarca, y Filipo la región septentrional de Traconítide e Iturea. Pero Herodes tenía un cuarto hijo, llamado también Herodes, por sobrenombre Filipo, que no ostentaba título alguno ni tenía el gobierno de ninguna región. Era, podemos llamarlo así, un particular, un hombre de negocios. Herodes Filipo se había casado con su sobrina Herodías, hija de Aristóbulo, nieto de Herodes el Grande y de Mariamne. Herodes Antipas estaba casado con una hija de Aretas, rey de Arabia. En un viaje que hizo a Roma visitó a su hermano Herodes Filipo y se enamoró de Herodías, a quien hizo proposiciones de matrimonio. Herodías, que era una mujer muy ambiciosa, se unió fascinada a Herodes Antipas, el cual repudió a su mujer, lo que originó la guerra entre él y su suegro, el rey nabateo Aretas, que quería vengar la injuria inferida a su hija.
El Bautista condenó la vida licenciosa que llevaba, hasta que fue apresado y encerrado en la fortaleza de Maqueronte.
Herodías, ambiciosa y vengativa, quería que Herodes diese muerte al Bautista; pero Herodes se negaba no sólo porque le consideraba un hombre justo y santo, sino también por temor a una rebelión del pueblo que tanto lo quería y lo veneraba como profeta.
Una gran fiesta que se organizó para conmemorar el cumpleaños de Herodes fue la gran ocasión que se le presentó a Herodías para vengarse del Bautista.
Herodías tenía una hija llamada Salomé. Aunque en los banquetes las danzas usuales entre los babilonios, los persas, los griegos y los romanos solían ejecutarlas bailarinas profesionales, esta vez fue una princesa quien se presentó ante los cortesanos siguiendo la trama urdida por Herodías, que se aprovechaba de la voluptuosidad y embriaguez del rey, y es por todos sabido que el popular baile que interpretó fue la danza de los siete velos...
Natividad de san Juan Bautista: 24 de junio
Degollación de san Juan Bautista: 29 de agosto
Degollación de san Juan Bautista
(Evangelio según san Marcos, 6, 21-29)
"Y llegó el día oportuno, cuando Herodes, en su cumpleaños, dio un banquete a sus magnates, a los tribunos y a los principales de Galilea. Entró la hija de la misma Herodías, danzó, y gustó mucho a Herodes y a los comensales. El rey, entonces, dijo a la muchacha: "Pídeme lo que quieras y te lo daré". Y le juró: "Te daré lo que me pidas, hasta la mitad de mi reino". Salió la muchacha y preguntó a su madre: "¿Qué voy a pedir?" Y ella le dijo: "La cabeza de Juan el Bautista". Entrando al punto apresuradamente adonde estaba el rey, le pidió: "Quiero que ahora mismo me des, en una bandeja, la cabeza de Juan el Bautista". El rey se llenó de tristeza, pero no quiso desairarla a causa del juramento y de los comensales. Y al instante mandó el rey a uno de su guardia, con orden de traerle la cabeza de Juan. Se fue y le decapitó en la cárcel y trajo su cabeza en una bandeja, y se la dio a la muchacha, y la muchacha se la dio a su madre. Al enterarse sus discípulos, vinieron a recoger el cadáver y le dieron sepultura".
http://www.cristiandad.org/indexvidas.htm