www.sonymusic.com.ar Domingo 12 de noviembre de 2000 Entrevista exclusiva para Sony Music Bajo la dirección del propio tecladista y director de su banda, Gerardo Gardelín, Soledad, Natalia y sus músicos, han logrado culminar con el proyecto más importante de La Sole, su quinto álbum. Grabado completamente en Buenos Aires, por los propios integrantes de la banda, y, para sorpresa de muchos, el resultado final es técnicamente impecable. "Soledad", es el quinto disco de la artista número uno del país y en este se puede observar el impresionante crecimiento artístico de sus tres músicos que la acompañan desde sus principios, hoy por hoy, una de las bandas con mejor desempeño en vivo. Con chacareras, zambas, valses y otros géneros cuidadosamente seleccionados, la calidez y profesionalismo de los músicos, y con el carisma inconfundible que desplega Soledad. ¿Cómo la pasaste en tu cumpeaños? Bárbaro, fue un día de trabajo. Hace mucho tiempo que para mi cumpleaños me invitan a programas de televisión y además, es la primera vez que lo pasé en Buenos Aires. Pero a pesar de todo y no haber estado con mis amigos de Arequito, me encantó. ¿Se puede definir este disco como el más personal de todos? Sí, totalmente. Trabajé muchísimo para este álbum, cosa que nunca hice en los anteriores. Me metí en la grabación de los instrumentos, que uno siempre va a grabar la voz y nada más, en la masterización, en la mezcla, en el nivel de volúmenes ... Estuviste en la cocina del disco ... Exacto, y fue para mi muy importante, porque además de seleccionar los temas, elegí la manera de cantarlos, la manera de interpretarlos y, sobre todo el hecho de quién iba a tocar en cada tema. Decidimos con Gerardo Gardelín, que fue el productor y además una excelente persona, conseguir en este disco mucha intimidad, pero a su vez, lograr trasladar el escenario al estudio de grabación. ¿Lo de trasladar el escenario lo decís por el sonido en vivo? Más que el sonido, el ambiente y el sentimiento. Generalmente uno se enfría en la grabación, porque va pensando en un montón de cosas y no es como el vivo, que lo cantaste una vez y chau. Lo que intentamos en este álbum fue que sea fresco, como en vivo. Que si tuviera errores, sobre todo en la manera de interpretación, no importara tanto como sentirlo o transmitirlo. Entonces decidimos que todos los músicos que tocaran hayan tenido la experiencia de compartir el escenario conmigo, desde los que siempre me acompañaron hasta los nuevos que se incorporaron para esta ocasión. ¿Incorporaste cuerdas en el disco? Sí, sí. Son todos chicos que tocaron conmigo en alguna parte. El único que no tocó junto a mí en un escenario fue Sixto Palavecino, que fue el invitado especial. Lo invité porque lo adoro y es un honor para mí que esté presente. Me parecía algo especial para el disco. ¿Qué significa para vos este nuevo trabajo? El disco es como un poco de todos mis sentimientos, es el disco como más mío, y además es totalmente personal en el gusto. Intenté de que sea popular. Es difícil a veces que sea personal y la vez, que sea también popular. Ahora vamos a ver si es del agrado de la gente. ¿Cómo pensas que el público lo va a tomar? Va a hacer el disco que menos prejuicios tenga, del punto de vista musical, eso de que es muy folklórico. Más allá de las críticas, si las tiene o tendrá, ¿vos estas conforme con el disco? Totalmente. Creo que nadie me puede decir nada de este álbum, sobre todo, porque yo lo sentí así. Siempre digo que la gente no se puede meter, puede darme su opinión, pero no meterse en lo que yo siento, como yo tampoco meterme en lo que siente la gente. Me doy cuenta que arriba del escenario, el público siente en algunos temas una cosa muy especial, y ya lo hicimos tantas veces que al ver eso no puedo dejar de cantarlo. Además porque son temas que a la gente la ponen bien. ¿Cómo manejas ese tema de no caer siempre en lo mismo? Es medio difícil, pero trato de crecer profesionalmente, que es lo que me permite a veces, hacer en diferentes canciones, quizás, interpretarlas con más sentimiento. En los recitales siempre fue eso de revolear el poncho (Soledad hace gestos que explican que sus shows eran como eléctricos). No había un matiz en todo el show, era todo pum, pum, pum, y la gente terminaba cansada. Ahora manejamos más esos momentos. También hay una realidad, y es que mi gente, es un público que crece conmigo y es amplio. Siempre me exigen más cosas, que no todo sea para arriba, sino que les hable, y me parece genial. ¿Qué es lo que te permite, de repente, tomar estas actitudes? Haber entrado en el corazón de la gente. Si yo esto lo hubiera hecho desde el comienzo, quizás al público no le hubiera interesado. Siempre fue "Soledad y el poncho", el "Huracán de Arequito". Nadie sabía que era lo que decía arriba del escenario. Logré entrar en el público y que pararan las orejas. De ahí en más, como que uno tiene la posibilidad de darse algunos lujitos, y es, en definitiva, lo que me permite ir cambiando y renovando. ¿Qué diferencias hay con el disco anterior, de acuerdo con este cambio que decís? El disco anterior tuvo un problema de tiempo. Por ejemplo, el álbum estaba sonando hacía un mes y el video clip salió mucho después, y en ese momento, ya estaba sonando otro tema. Fue un problema de que no salió todo junto, porque yo tampoco tuve tiempo de armarlo. Con "Soledad" me propuse, lo que no me propuse con ninguno de los otros discos. De que si hay un video salga a tiempo, de que el corte de difusión esté decidido con tiempo también, del arte de tapa, que de que todo tenga que ver con todo. ¿Lo del track interactivo fue idea tuya? Fue idea de la gente de la compañía, de agregarle algo nuevo y realmente me encantó. Me pareció como algo diferente para darle al público y además, porque mucha gente no asocia a Soledad con una computadora, porque es folklore. Me pareció genial, sobre todo para los chicos. Son seis minutos en donde yo les puedo decir el porqué de este disco. ¿Es tu etapa más madura en la parte artística? La más madura con respecto al comienzo, sí. Se puede decir que es una etapa de madurez, de tranquilidad, más que todo. Cinco años quizás no es nada en una carrera, pero en la época en la que se está viviendo y con la rapidez que ocurren las cosas, es un logro mantenerse. Es una etapa de madurez, de tranquilidad, de decir: "ya no me pueden exigir más nada". De ahora en mas, voy a tratar de hacer buenos trabajos y ojalá que vendan muchos, porque es el motivo por el cual salen a la venta. ¿Te imaginabas este presente? No, porque yo pensé que toda mi carrera terminaba en Cosquín, y fue ahí donde empezó. Mi único sueño como cantante folklórico era subir a cantar, aunque sea medio tema en el Festival de Cosquín. No sólo canté un tema, sino que canté cuatro y tuve que volver otro día, hasta me dieron un premio. Ahí comenzó todo: me llamó la compañía discográfica, mi representante, César Isella, y empecé a trabajar a nivel profesional no siendo profesional. Yo tuve que aprender todo sobre la marcha y zafé bastante bien por la situación que me tocó vivir. Logré hacer shows en vivo y grabar un disco. Tu disco debut fue increíble a nivel de ventas ... Sí. Profesionalmente no lo se. Tiene mucha frescura, mucho de lo que era yo en ese momento. En lo musical deja mucho que desear, pero tiene algo especial. Yo no me arrepiento de ninguno de los discos que hice, pero ese tiene algo ... (Risas). Además con este disco hay una anécdota ... ¿Cúal es? Ni bien salió el álbum no vendía nada y en el contrato decía que si no vendía cinco mil unidades había que rescindirlo. Entonces mi papá empezó a pedir dinero prestado para él comprarlos. Yo misma me subía a la camioneta y los vendía con un póster. Así el disco empezó a remontar y a remontar hasta que llegué a lo de Tinelli (Por el programa Videomatch), ese fue el boom en Buenos Aires. Cuando yo llegué al programa de Marcelo Tinelli es como que el disco empezó a crecer y no lo paró nadie. Subió y subió, y creo que es el disco más vendido en la historia de Sony Music. Y del país ... Por ejemplo, siempre que se habla de un artista en el tiempo, lo importante es mantenerse. Yo hice veinte Gran Rex, pero hay que ver si logro mantenerme tanto en el tiempo como, por ejemplo, Charly García. Volviendo al primer disco, creo que lo que pasó fue muy fuerte. Podría haber sido también ese boom y nada más. Para mantenerse lo importante es trabajar, crecer como artista, dar cosas nuevas y tratar de estar en el medio. Que uno se sacrifique y le ponga ganas. ¿Cómo lo definís a este nuevo álbum? El disco es el más escenario de Soledad. Es el más fresco, el más natural y el más espontáneo, esa es la palabra. Son las cosas que sentía y decidí los arreglos como a mí me parecían. Obviamente estaba la palabra del productor, pero él me preguntaba. Todo tiene mi color, mi gusto y mi forma de ser. Es un disco muy Soledad. ¿Cómo va a hacer el plan promocional? Generalmente como lo hacemos todos los años. Recorrer las principales ciudades del país haciendo notas por todos lados, conferencias de prensa, firma de autógrafos. Este año queremos que sea más especial todavía, que sea algo super espontáneo. El show cambia un poquito porque se incluyen los trece temas de este disco pero no va a cambiar de lo que son mis shows en vivo. ¿Cómo fue la experiencia de tocar en Inglaterra? Fue muy emotivo. Lo que más me gustó fue la diversidad de géneros musicales. Argentina tiene una cultura muy variada. Un poco porque somos descendientes de un montón de culturas y razas, y por otro lado, porque hoy en día hay una mezcla de cosas: el rock, el folklore, la bailanta. Pero la experiencia fue única. También me gustaría que la repercusión que toma este tipo de actuaciones sea el mismo que toma un show en Vilchina, que queda en La Rioja y que es un pueblo muy chiquito que alberga a casi toda la población en un show. ¿Volverías hacer una película? Me encantaría. Más allá de que la película tuvo muchos errores, que se pueden aceptar porque se hizo muy rápido, me gustaría hacer cine nuevamente. Para ello estudiaría todo el tema, pero ahora me demanda mucho tiempo esta carrera. Estoy continuamente pensando en proyectos nuevos para los próximos meses. ¿Un sueño? Que los argentinos volvamos a recuperar la sonrisa. Yo no puedo pedir más, tengo el apoyo de la gente, hago lo que me gusta, vivo relativamente bien, pero realmente lo que más me interesa, es que mi país esté bien.