EMERSON LAKE & PALMER

( Revista "Estornudo", Argentina 1977)

Atomic Rooster, King Crimson y Nice, tres grupos con diferentes sonoridades, pero que contenían en su núcleo fuertes personalidades musicales. La unión de parte de sus integrantes hizo que nada continuara igual. Seis manos bastaron, entonces, para inaugurar la era del virtuosismo instrumental.

En 1970 nace como grupo EL&P, emergiendo con una excepcional potencia y unificando géneros dispares en una síntesis tan original como brillante. Su música desde el delicado 'Lucky Man' hasta el dinámico 'Karn Evil 9' y la intrincada 'Tocatta' de Ginastera, es tan avasallante como el aspecto visual de sus presentaciones en vivo. Para alcanzar eficientemente este objetivo, viajan con 35 toneladas de equipo que complementan con un sistema de 32 cabinas de sonido cuadrafónico, los que aunados por una ingeniosa disposición de luces, diseñadas especialmente por Lake y Palmer, transforman una sala común en el mayor centro de imágenes fantásticas, un show de color-movimiento-sonido.

Lake: "Siempre fui consciente del aspecto show de las actuaciones. Un concierto es un espectáculo integral, los discos son pura música y no hay nada más que decir. Cuando vas al teatro, ves al artista; por supuesto esto puede ser usado tanto para complementar la música como para oscurecerla".

Emerson: "En un recital se trata de provocar el mayor impacto, pensando que la audiencia no lo verá a uno por un año entero. Se deben, entonces, exagerar teatralmente algunos puntos para expresar mejor lo que se está haciendo musicalmente. La música es para ser disfrutada y creo que para que ese placer sea completo, debe comprender también un buen espectáculo visual. De otro modo al público le resultaría igual quedarse en su casa y escuchar el disco".

Palmer: "Debido a ello considero que logramos interesar a todo el auditorio; un 50% comprende nuestra música por su valor intrínseco, el otro está en el aspecto visual, en la observación de los músicos y su habilidad técnica. Creo que un grupo puede impresionar en distintos niveles, por eso hay muchas cosas que deben complementarse. Nosotros somos "músicos-animadores".

Herencia europea:

Mucho se discute todavía si fueron los iniciadores de la costumbre de utilizar una orquesta sinfónica como marco en las actuaciones, pero es innegable que fueron los primeros en lograr una cohesión más acabada de estos dos elementos anteriormente considerados como dispares (recordar el pretencioso engendro de Deep Purple y la Royal Philarmonic Orchestra).

Lake: "Pienso que es una cuestión de herencia cultural. Los músicos europeos tienden a acudir a su herencia clásica, los grupos americanos a los blues. Esto no es una generalización sin límite, pero a menudo sucede. Aquí está la diferencia fundamental entre grupos como el nuestro, Yes y Moody Blues con bandas como Allaman Brothers.

Palmer: "Nosotros apreciamos mucho la música clásica. Tengo mis compositores favoritos como Stravinsky y Bartok. La tenemos de tal forma incorporada, que a veces fluye naturalmente y nos convierte en una mini-orquesta en la que mi rol es el de cuatro percusionistas y el de Keith es el de tocar una combinación de teclados con toda clase de matices cromáticos".

Emerson: "Yo pasé por un período en el que no me gustaba lo clásico, es decir, no lo comprendía porque recién empezaba a estudiar. En cambio, el jazz significó otra cosa para mis oídos, supongo que porque era un mundo nuevo. Repentinamente comencé a escuchar a Charlie Parker y al primer Cuarteto Dave Brubeck. Ellos hacían unos deslumbrantes contrapuntos en los que Paul Desmond podía improvisar alrededor de Brubeck y viceversa. Esto fue algo muy espontáneo y pensé que era mejor que Bach. Conversando con otros pianistas de jazz, ellos me dijeron que su oído se había desarrollado para la improvisación con Debussy. No comprendí entonces lo que me querían decir y por lo tanto volví a mis viejos libros con una nueva óptica. Ahí descubrí que gente como Bach y Mussorgsky eran grandes improvisadores en su tiempo. El arte de la zapada es muy importante. Puede ser muy agradable y cómodo o sino un desafío. Uno podría esforzarse tocando para tratar de superar sus propios límites o relajarse y simplemente dejarse ir. Pero lo único destacable en todos los casos en la verdadera creación".

Palmer: "En la batería pasa lo mismo... Creo que no hay en este momento en el rock muchos percusionistas capaces de combinar un trabajo creativo con habilidad técnica. Mi ambición ha sido siempre cumplir con todo esto sin, por ello, perder simplicidad. Comencé por la parte técnica y después pasé a lo otro; obviamente esto permitió que mi aprendizaje sea más rápido. En este momento estoy utilizando en escena dos timbales, un equipo de campanas tubulares, otro de ocho toms y uno extra de 16' en el piso. Por muchos años los percusionistas han tocado con un pequeño 'tom-tom' al frente y otro en el piso hasta que de pronto aparecieron dos tambores bajos. Pienso que si se tiene un gran címbalo, esa no es razón para no tener también uno pequeño. Todos estos adminículos tienen un buen espectro de sonido, esto es consecuencia de que siempre he tratado de tener la afinación del tipo orquestal y la habilidad de Buddy Rich, que ambas cosas aparezcan simultáneamente. En general comprometerse con un estilo inhibe la capacidad de progresar, por eso busco todas las aperturas posibles". "Yo utilicé el primer prototipo de tambor con sintetizador, hoy lanzado al mercado. Pero esta experiencia resultó bastante limitativa para mi forma de trabajar y para lo que quería alcanzar. Debía preparar el mini-moog y luego tocar el tambor. La limitación se evidencia, por ejemplo, cuando quería obtener 5 u 8 diferentes sonidos y debía dejar de tocar reacondicionar el sint. En la "Tocatta" de "Brian Salad Surgery" hay un movimiento realizado con un tambor con sintetizador especialmente construido. Los actuales tienen el tamaño de un envase de cigarrillos, uno por cada tambor con dos osciladores. Se puede afinarlos juntos o ligeramente fuera de tiempo como hago yo. Ataco el tambor y el sonido programado se produce con la demora deseada; algunos pueden ser más brillantes o tener eco y cada sonido actúa en forma independiente respecto al que se trabajó antes, ya que cada uno tiene su propio micrófono incluido. Cuando quiero tornar los tambores electrónicos, aprieto el botón en el piso y me ofrece siete registros diferentes preseleccionados, de manera que sé con exactitud qué tipo de sonoridad se va a producir en ellos. Actualmente tengo tres botones en el suelo: uno para conectar el aparato, otro para desconectarlo y un tercero que me permite obtener sonidos electrónicos captables, uno en particular está constituido por una secuencia de 14 notas. Al golpear el parche se produce la serie para armonizar con un número que siempre hacemos".

Vivir el éxtasis:

Por su parte Keith también se encuentra entre los amantes de las últimas adquisiciones de la tecnología. Emerson trabaja con varios moog, dos órganos, piano electrónico y otro acústico de cola completa; en total trece teclados sobre escena: "Esto suena poco menos que una locura, pero si yo pudiera hallar un instrumento que supliera el sonido de cada uno de ellos, lo usaría. Sé que hay gente trabajando para lograrlo, pero los sintetizadores con que se cuenta actualmente son aún de alcance limitado. Muchos tecladistas están dejando de limitarse al uso exclusivo del piano y del órgano, es decir, cuando apareció el órgano, muchos pianistas se volcaron a él. Yo mismo comencé a utilizarlo, especialmente porque tenía a mi alcance pianos muy malos. Me sirvió para crear un sonido amplísimo, que es en definitiva nuestro mayor objetivo. Esto lo hemos conseguido principalmente a través del trabajo con orquestas sinfónicas. Aunque en un principio yo quedé desencantado con mi primera aproximación a los músicos de esas bandas... Cuando se trata de reunirlos para ensayar, no dejan de mirar el reloj. A veces ni siquiera tienen la música frente a ellos, sino los resultados de los partidos de tenis o cualquier otra cosa. En cuanto pueden abandonan todo y se van. También existen los que se quedan y disfrutan realmente del momento, pero esto va contra las reglas de sus sindicatos. Imposible imaginar un grupo como el nuestro actuando de esa forma!".

En cambio Greg Lake no es partidario de perder el tiempo en programaciones o formalismos en escena, le gusta tener todo listo de antemano y liberarse al éxtasis del momento. "Keith debe preocuparse constantemente durante el show de repreparar sus instrumentos. Conmigo no ocurre lo mismo: una vez que me pongo a tocar debo pensar nada más que en eso. En este momento soy básicamente un guitarrista. He tenido que trabajar algún tiempo para lograrlo, pero me gusta y pienso que le da otro colorido al grupo, le abre nuevos senderos. Keith puede hacer la parte del bajo en el moog con la mano izquierda y tocar el órgano con la derecha. Se puede decir que lo que más se destaca en nuestro grupo es el hecho de que todos somos en cierta forma percusionistas. Yo me siento muy identificado con el bajo en su rol de instrumento de percusión". "Pienso que cada trabajo y cada álbum está hecho como se hace un cuadro. El finalizarlo significa un gran alivio; después sólo queda el placer de mostrarlo a la gente. Ya no existe el esfuerzo necesario en la creación. La próxima vez pasará lo mismo aunque se sepa lo que se quiera hacer y se conozcan los métodos que pueden ayudar a lograrlo. Comenzar una nueva obra implica una especie de masoquismo que a veces te empuja a erigirte en profeta. Eso es muy peligroso. Por esto siempre hacemos equilibrio con la destreza de una cabra montañesa, pues nuestro proceder puede ser una buena o mala influencia. El riesgo de caer hacia un lado u otro supone el fin de tu carrera".

 

REGRESO