1-6-85 574
Pido hoy, oración y una especial devoción al Sagrado Corazón de mi Hijo, no olvidéis que de su Corazón fluye su Divino Amor. Pedidle perdón por vuestras malas acciones, primetiendo absoluto amor y completa obediencia, hijos míos, y su Corazón se apiadará de los vuestros. Bendito sea Jesús.
2-6-85 575
Tantas pasiones insanas hay en todas partes, hijos míos, que la ceguera se ha apoderado de mucha gente. El pecado sobrepasa toda medida, el demonio quiere poseer total dominio sobre la tierra, quiere destruir. Mas el Señor no quiere vencidos, sino vencedores, venced definitivamente la maldad que os rodea. En Dios está la victoria. Amén. Amén. Dadlo a conocer.
Leed: Apocalipsis C. 21, V. 6-7-8 6 "¡Ya está! Yo soy el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin! Al que tiene sed, Yo le daré de beber gratuitamente de la fuente del agua de la Vida. 7 El vencedor heredará estas cosas, y Yo seré su Dios y él será mi hijo. 8 Pero los cobardes, los incrédulos, los depravados, los asesinos, los lujuriosos, los hechiceros, los idólatras y todos los falsos, tendrán su herencia en el estanque de azufre ardiente, que es la segunda muerte".
3-6-85 576
Hija mía: Dios desde lo alto ve dolor y soledad. El hombre que sufre, no hace nada para amortiguar el dolor y el que está solo, no ve que es el momento propicio para buscar a Dios. Implorad por vuestras almas al Señor. Al Dios que sana las heridas, por profundas que sean, al Dios que salva al oprimido por fuertes que sean sus cadenas, al Dios que jamás duerme, al Todopoderoso. Amén. Amén. Dad a conocer. 4-6-85 577
El Señor riega de bendiciones a sus hijos, en todo el universo, por lo tanto, negaos al pecado y podréis recibir estas bendiciones. Alabado sea el Señor. Predicad.
5-6-85 578
Soy la paciente Madre que a sus hijos llama, la que dice, id y predicad la Palabra del Señor. La que pide fe y que digáis: Dios mío, sin condiciones me entrego a Ti, haz de mí según Tu Voluntad. Amén. Predicadlo.
6-6-85 579
Os digo hijos: Delante del mal camina el bien, mas también os digo, atentos debéis estar. Felices los que se ofrecen con amor a Dios y benditos los que se dedican a Su Obra. Amados sois por el Señor. Gloria al Altísimo.
Leed: San Mateo C. 12, V. 35-36-37 35 "El hombre bueno saca cosas buenas de su tesoro de bondad; y el hombre malo saca cosas malas de su tesoro de maldad. 36 Pero les aseguro que en el día del Juicio, los hombres rendirán cuenta de toda palabra vana que hayan pronunciado. 37 Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado".
7-6-85 (Intención de la Novena del 17 al 25) 580
Nadie ignora que el peligro que corre la tierra es grande, ¡a esto lleva la ambición del hombre! ¡Si el hombre se quisiera despojar de sus deseos de lograr méritos, de elevarse hacia donde lo único que logrará será estrellarse! ¡Si quisiera descubrir a Dios, ésta sería una tierra de paz para todos, porque solamente Dios puede hacer reinar esa paz por tantos anhelada! Hijos: En este mes, en vuestra Novena, orad por la paz de las naciones y repito, lo que tantas veces dije, que el hombre se encuentre con Dios. Que haya en él un real arrepentimiento y no malogrará su vida. Amén. Amén. 8-6-85 581
Muchos quieren enlodar la obra de Dios en estos días y Yo, hijos míos, una vez os dije: "Escuchad mis palabras y hacedlas escuchar", porque ellas encierran una gran enseñanza. Os quiero prevenir, es preciso que lo haga. Amén. Amén.
9-6-85 582
En la mañana, la Virgen me dice: En la Santa Misa, no sólo se recibe el Cuerpo y la Sangre de Cristo simbólicamente, Cristo Jesús está presente y se ofrece verdaderamente. Que todos mis hijos vean en la Comunión al Salvador, que sientan esa íntima comunicación con Cristo y que Cristo entra en ellos. Hijos, apreciad también el tesoro incalculable que pone a vuestro alcance el Señor. Esforzaos en merecerlo, no perdáis algo tan valioso como es la salvación eterna. No lo dejéis para el futuro, porque la salvación comienza desde aquí en la tierra, hoy, en el presente, en este presente en que el Señor os está hablando. Queridos míos, que el gozo que siento en acercaros al Señor, sea también gozo vuestro. Gloria a Dios.
10-6-85 583
Hoy veo a Jesús y me dice: Nunca la noche será mayor que el Día, Dios no lo permitiría. Las tinieblas no te tocarán, las acechanzas, acechanzas serán, porque las fuerzas del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo te protegerán. Luego veo a la Santísima Virgen, me dice: El Señor es para vosotros la perfecta protección, ya que El está en cada uno de sus hijos. Sed entonces parte del Señor, así como el Señor es parte de vosotros. Amén. Amén.
11-6-85 584
Hija: Desde mucho tiempo atrás he sembrado Amor, mas he recogido espinas. Aquí contigo, ha sucedido todo lo contrario, siembro Amor y recojo amor. Aquí, mi rosal floreció, no se secará, seguirá la rosa dejando sus pétalos, llevando su mensaje de amor. Amén. 13-6-85 585
¡Qué valor tiene para el Señor la oración, no lo imagináis hijos míos, por eso os pido tanta oración! Rezad el Santo Rosario meditado, os aseguro que vuestras oraciones se elevarán, como un verdadero canto de amor al Señor. Gloria al Señor.
14-6-85 586
Hija, rezad el Santo Rosario continuado durante las veinticuatro horas, Mi Hijo Jesucristo premiará esta devoción a María, Su Madre. Amén.
15-6-85 587
Queridos míos: Nunca temáis decir la verdad, porque la verdad da seguridad. La mentira es mala para el hombre, por eso os digo, sed íntegros, el Señor así lo quiere. Alabado sea Dios.
16-6-85 588
Amados hijos: Comenzad cada día, viviéndolo en una estrecha unión con Dios y maravilloso será para vosotros vivir. Con El, no os perderéis, no deja el Señor perder a sus hijos. Nunca os faltará el Señor. Amén. Amén.
Leed: San Juan C. 15, V. 6-7 6 Pero el que no permanece en Mí, es como el sarmiento que se tira y se seca; después se recoge, se arroja al fuego y arde. 7 Si ustedes permanecen en Mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y lo obtendrán. 17-6-85 589 Mirad, cómo el Señor no se cansa de señalaros Su Senda, mirad, cómo os está bendiciendo, no os asombréis de la misericordia de Dios. El se presenta ante vosotros, sus hijos, os hace ver que debéis ser amorosos y piadosos. Os enseña, para que estéis preparados a las diarias pruebas que todo cristiano debe saber sobrellevar. Amados hijos: Que nadie quiera escapar de su cruz, recordad esto que dice vuestra Madre. Ninguna cruz será ,más pesada que la Cruz de Cristo. Alabado sea el Salvador.
18-6-85 590 Digo a tus hermanos: Examinaos hijos y buscad a Dios. No os anuléis tratando de ignorarlo, El se hace accesible, dadle entonces vuestros corazones. Cristo Jesús ama, bendice, redime y sana. Es admirable el Señor. Amén. Amén.
19-6-85 591 Hijos míos: A pesar de todo lo negativo que puede haber en torno vuestro, Yo me alegro, porque nada os detiene. Estáis enriqueciendo vuestros espíritus, con las palabas que os llegan del Señor. Seguid todos vosotros, obedeciendo a Dios, continuad marchando a mi lado, que mi manto os protege. Amén. Amén. 20-6-85 592
Muchas veces el hombre no quiere entender a Dios, ya que esto lo obligaría a profundizar en su interior. ¿Puede esto quedar ajeno al conocimiento del Señor? ¿Puede desconocer el Señor, que por comodidad, el hombre descansa en la ignorancia? Pretende así, vivir apartado del bien, más, está tocando el mal. El Señor como viñador conoce su viña, como sembrador sus semillas y como pastor su Rebaño. Gloria por siempre al Señor.
Leed: I de Corintios C. 10, V. 12-13 12 Por eso, el que se cree muy seguro, ¡cuídese de no caer! 13 Hasta ahora, ustedes no tuvieron tentaciones que superen sus fuerzas humanas. Dios es fiel, y El no permitirá que sean tentados más allá de sus fuerzas. Al contrario, en el momento de la tentación, les dará el medio de librarse de ella, y los ayudará a soportarla.
20-6-85 593
En la tarde la Santísima Virgen me dice: Hija, el amor verdadero y puro viene del Señor y lo alimenta el Señor. Bendito el hijo que no se rebela a Dios y no peca, porque ese hijo, es obediente a los mandatos del Eterno Padre. Amén. Amén.
21-6-85 594
Hijos míos: Os hablo con el Corazón. Edificad vuestra vida espiritual, en la fe en el Señor, esa será vuestra respuesta al Señor, ya que la fe es la base de la esperanza. La felicidad de todo hijo, debe estar en la esperanza de la Vida Eterna en el Señor. Amén. Amén.
22-6-85 595
En la mañana: Velo por vosotros, hijos míos. Invocáis a Dios, mas, qué lejos está en muchos de vosotros el Señor. Os digo, tened constancia en la oración y no desesperéis, el Señor a todos les da Luz. Que vuestra humildad sea conocida por el Señor. Gloria al Altísimo. 24-6-85 596 En la mañana me dice: Dad gracias al Señor porque a todos os reconforta, dadle gracias, porque sois causa de su contemplación y dadle gracias porque os lleva en Su Corazón. Amén. Amén.
24-6-85 597 En la noche en "El Campito" me dice: Nunca en el dolor de un hijo estará ausente el Amor de la Madre. Benditos, porque no dejáis desolado este Santo lugar. ¡Amados hijos míos!
25-6-85 598 Hija: Soy la Madre que a la Verdad os lleva, la Madre que a caminar os enseña en el perfecto camino hacia el Señor. Soy la Madre, por siempre Madre. Amén. Amén.
26-6-85 599 Siempre la Madre es motivo de esperanza, porque la Madre no defrauda. Pertenezco a todos mis hijos, aunque todavía no todos me conocen.
27-6-85 600 Alegraos, sufrir por causa del Señor es salud para el alma, es vivir para Cristo, esto es Vida en Cristo. Gloria por siempre sea al Señor. 28-6-85 601
Pobres, los que están cegados por sentimientos insanos, hija mía. Pobres, los que difaman, los que quieren edificar sobre terreno fangoso, pobres, porque se hacen indignos ante el Señor. Yo les digo: Tened paz en el corazón hijos míos, id a Dios, que vuestro accionar sea dirigido por Dios. Sembrad paz y recogeréis paz. Amén. Amén.
Leed: Eclesiástico C. 19, V. 22-23-24 22 No es sabiduría saber hacer el mal y no hay prudencia en el consejo de los pecadores. 23 Hay una astucia que resulta abominable, y el que carece de sabiduría es insensato. 24 Es preferible el poco inteligente que teme al Señor, al muy inteligente que quebranta la Ley.
30-6-85 602
No dejéis debilitar vuestras voces, porque la Palabra de Dios estáis predicando. El discípulo debe escuchar a su maestro, el hijo a su padre, en estos mensajes se escucha y se conoce a Dios. Bienaventurados los que al Señor responden. Gloria al Señor.
Leed: Isaías C. 30, V. 8 8 Ahora vé, escribe esto en una tabla, delante de ellos, e inscríbelo en un libro: Que sirva de testimonio perpetuo para el tiempo futuro.
Volver a la página de la Virgen del Rosario de San Nicolás