MENSAJES DADOS POR LA VIRGEN MARÍA
DEL ROSARIO DE SAN NICOLÁS
1-11-87          1290

Me dirijo a todos tus hermanos:
Por la fe, el cristiano se considera hijo de la Madre.
Por la fe, salvará su alma.
Por la fe, el hijo cree en la Misericordia del Padre.
Por la fe, espera en Su Promesa.
Por la fe, perseverará en la misma fe.
Por la fe, el punto de partida y de llegada de cada cristiano, es Cristo Jesús.
Por la fe, ama en la Madre al Hijo.
Tened fe en Cristo y Su Espíritu, os sobreabundará en Gracia.
Bendito y alabado siempre sea.
Predícalo.


3-11-87          1291

¿Es que no comprende el hombre cuánto lo Ama el Señor?
¿No es capaz de reconocer que la soberbia hace que se crea poderoso y lo aparta 
de Dios?
Digo a mis hijos: Buscad a Dios y comprobaréis Su Amor.
Que vuestro corazón se vuelva humilde y comprenderéis que el único Poderoso es 
Dios.
Recordad mis palabras y lograréis arrancar el hielo de vuestros corazones.
Amén, amén.
Predícalo hija.





5-11-87          1292

Pido a mis hijos: Mansedumbre, abandono y amor hacia Dios.
Sed mansos como el Cordero, abandonaos en el Padre, id tras el Padre.
No quiero cadenas para vosotros hijos míos, tampoco quiero que estéis 
desprovistos del Amor de Dios.
Si me escucháis, seréis libres y tendréis también Su Amor.
Amén, amén.



6-11-87          1293

Es constante mi preocupación por todos mis hijos; es por eso que intervengo, es 
por eso que necesito almas reparadoras, perseverantes en la oración y confiadas 
en el Amor de Dios.
Ora hija mía, por las almas  alejadas  del  Corazón de Jesús.
Alabado sea.



7-11-87          1294

En este tiempo, la oración al Señor y a Su Madre, debe ser intensa, de un extremo 
al otro de la tierra.
Hijos míos: En el Padrenuestro, le estáis pidiendo a Dios, el pan de cada día; 
dadle vosotros a Dios, la oración de cada día y a  Su Madre, junto con la 
oración, dadle vuestro corazón, para que lo presente ante el Señor, mediando así 
por vosotros.
Quieren ser Mis Palabras, la llama que avive el fuego en vuestros corazones, 
fuego de amor por Cristo.
Amén, amén.





9-11-87     (Intención de la Novena del 17 al 25)          1295

En la Novena de este mes, orad, para que el hombre despierte a tiempo. Digo a 
los pueblos: Dios llama al hombre a un hermoso despertar; no rehuséis Su 
llamado, no tardéis y El se compadecerá de vosotros.
Así habla esta Madre, que, con Amor, quiere llegar al corazón de sus hijos, para 
confiárselos al Padre.
Gloria por siempre al Señor.

Leed: Ageo C. 2, V. 19

        19      ¿Queda aún semilla en el granero? ¿Todavía no han dado nada la vid, la  higuera, el 
granado y el olivo? A partir de este día, Yo daré mi bendición.



11-11-87         1296

Gladys: La Fuerza y el Amor que hay en Mi Corazón, arrasará con la fuerza del 
mal, esa fuerza que sólo lleva a la muerte. Como Madre les ofrezco abrigo a mis 
hijos y la seguridad que el adversario no penetrará en ellos, si ellos antes se 
introducen en Mi Corazón.
Amén, amén.



13-11-87         1297

¡Hija, cómo deseo el bien espiritual de todos tus hermanos! Es necesario que 
ellos tengan una paz interior completa y para esto, deben dejar que la Madre 
purifique sus espíritus.
Yo les digo: No basta vivir, sino vivir para el Señor; no basta escuchar Su 
Palabra, sino conocer Su Palabra.
Me aparezco y hablo aquí, para que los infieles se conviertan en fieles hijos de 
Dios.
Gloria al Altísimo.
Sea conocido y reflexionado este mensaje.





15-11-87          1298

Gladys: Mi Corazón siente el latir de cada corazón y quiere llegar a ellos.
Mi Corazón, es un Jardín, donde puede entrar, todo aquel que quiera ser regado 
por mi Amor de Madre.
No soy indiferente al dolor de nadie y me compadezco por el dolor de todos.
Bendito sea Jesucristo.



16-11-87          1299

Hijos míos: Buscad a la Madre y hallaréis al Hijo; deteneos en Mí y a El 
llegaréis.
Volved vuestros ojos hacia la Madre de Cristo y os encontraréis con Su mirada.
La confianza del hijo en la Madre, es lo que tan ansiosamente busco en mis hijos, 
porque, quien confía en la Madre ama a la Madre.
Amén, amén.



16-11-87         1300

Tengo una locución interior. Abandonarse en Dios significa: Despojarse de la 
propia voluntad y desear hacer solamente, la voluntad de Dios.



18-11-87          1301

¡Hija, que tus hermanos se entreguen al Señor totalmente, como El lo espera de 
ellos!
Así fue mi entrega, total y con fe en el Señor, deseando ardientemente agradar al 
Señor.
Sean los hijos, seguidores de la Madre; en la paciencia y en la constancia, en la 
fe y en la esperanza.
Cuanto se recibe de Dios, debe ser aceptado; de esto, quede el corazón del 
hombre, completamente convencido.
Gloria al Señor

Leed: II Corintios C. 13, V. 5

        5       Examínense para comprobar si están en la verdadera fe. Pónganse a prueba 
        seriamente. ¿No reconocen que Jesucristo está en ustedes? ¡A menos que   la 
prueba se vuelva contra ustedes mismos!



19-11-87          1302

Veo a Jesús. Me dice: Hoy advierto al mundo, lo que el mundo no parece 
advertir: Las almas peligran, muchas se perderán, la salvación llegará a pocas, 
si no soy aceptado como el Salvador.
Debe Mi Madre, ser recibida, debe Mi Madre, ser escuchada, en la totalidad de 
sus mensajes; debe el hombre descubrir la riqueza que Ella trae a los cristianos.
                 
Los hijos del pecado crecerán en él, si la incredulidad se acrecienta en ellos.
Quiero una renovación de espíritu, un desprendimiento de la muerte y un apego a 
la Vida.
El Corazón de Mi Madre, es el escogido para que se haga realidad lo que Yo 
pido.
Las almas se encontrarán Conmigo, por medio de Su Corazón inmaculado.





19-11-87         1303

Veo a la Santísima Virgen y me dice: Gladys: Existe en estos momentos, un real y 
gran vacío entre el hombre y Dios; ese vacío, lo puede llenar la oración, tiene 
que ser llenado con la oración, porque es la que acerca al hombre a Dios.
La oración, ha sido siempre y es en estos días en especial, el único campo 
habitable para el cristiano.
La oración, purifica, mata el pecado y hace que el alma, viva en amistad con el 
Señor.
Por eso digo a mis hijos: Orad y viviréis en Su Luz.



21-11-87          1304

Venid hijos y que vuestra alma se alegre en el Señor.
Felices los que reciben a Dios en el corazón.
Felices los que no vacilan y entregan su corazón a Dios.
Gloria al Eterno.



23-11-87         1305

Hijos míos: Dad vuestra prueba de que amáis a esta Madre, consagrándoos a Su 
Corazón.
En la Consagración, el hijo se entrega a la Madre y Ella a su vez, será su Refugio 
y su Consuelo, porque es el Arca, donde los hijos depositan el corazón.
Responded a Mi llamado, responded a Mi pedido, veréis que tiernamente seréis 
conducidos por Mí.
Amén, amén.





25-11-87        (Día de Peregrinación)    1306

Hija mía: Cada veinticinco, siento que son más, los hijos que llegan a Mí; cada 
veinticinco, Mi acción maternal obra en mis hijos.
Es la Gracia de Dios, que se hace presente y se manifiesta a través de Su Madre; 
es el Amor de Dios, que se hace sentir por medio de la Madre, es la Misericordia 
de Dios, que es expresada por Ella.
En mis hijos, está el Amor eterno de la Madre.
Gloria al Señor.



27-11-87          1307

Hija: Ora, por los que padecen de soberbia, de egoísmo; por todos los que están 
bajo el poder del mal.
Donde hay soberbia, no hay humildad; donde hay egoísmos, no hay caridad.
Un corazón dominado por el mal, está alejado de Dios.
Deben mis hijos estar atentos a cuanto digo.
Amén, amén.

 

28-11-87          1308

Gladys, digo a tus hermanos: Acudid con más frecuencia a la oración y habrá
paz en vuestros corazones. En este cenáculo estoy Yo, respondiendo a vuestra
necesidad. Sólo deberéis ser dóciles.
Gloria a Dios.

Leed: Filipenses C. 4, V. 17

        17      No es que yo busque regalos; solamente quiero darles la ocasión de que ustedes se
enriquezcan cada vez más delante de Dios.
 

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