Propiedad Ajena - despues del estreño

Largo fue el proceso que le llevó al cineasta Luis Vélez completar la versión definitiva del guión de su ambicioso proyecto Propiedad Ajena (2007), desde su anterior filme, Corazón de Melón (2002), que marcaba su debut como realizador.

Ambicioso, debido a que se trata de un relato en el que se traslapan dos historias paralelas que coexisten en tiempos y países diferentes: la época actual y 1848, año en que se firmó el Tratado de Guadalupe-Hidalgo entre México y los Estados Unidos, con la que nuestro país cedía a aquella nación casi la mitad de su territorio.

La historia de Amalia (la guapa Gizeth Galatea), casada con Lorenzo Sámano (Plutarco Haza) -que se lleva a cabo en Texas y Coahuila en el siglo 19-, una mujer desesperada por el despojo de su Hacienda, Las Acequias, y su clandestina relación amorosa con el Coronel estadounidense Robert Crossman (Humberto Zurita), acaba por parecerse mucho a la de la arrojada joven Miranda Sámano (Ludwika Paleta), en nuestros días, quien luego del descubrimiento del intrigante diario de doña Amalia decide pasarse de ilegal a territorio estadounidense, donde conoce y se enamora de Matt (Rib Hillis), descendiente directo de Crossman y actual dueño de la antigua propiedad que perdieron ilegalmente sus antepasados.

A una primera parte intrigante, con atractivas elipsis al estilo de Estrella Solitaria (John Sayles,1996) -Lorenzo Sámano y al mismo tiempo Miranda, cruzando la línea fronteriza, por ejemplo-, una lucidora fotografía que saca partido de los ambientes rurales del México de 1848 y escenas bien logradas, como la trágica huida de los Sámano en carreta, corresponde una segunda parte más cercana a las fórmulas y coincidencias que inundan las telenovelas, sin faltar momentos fallidos como la fiesta de disfraces en el bar L'étranger, propiedad de Matt, quien busca desesperado a la chica incógnita de sus sueños -Amanda, que escribe frases en el bar, sin ser vista-, así como el previsible y melodramático clímax que sucede en el interior de la Hacienda.

Bajo el barniz de una historia de amor que trasciende el tiempo y el espacio, Propiedad Ajena, con ecos de Los Hermanos del Viento (1975) -western de Alberto Bojórquez, ambientado en 1848-, intenta erigirse como una suerte de alegoría sobre esa tirante relación de amor y odio que México y los Estados Unidos han sostenido lo largo de su historia  ■

Luis Vélez cursó la carrera de Cine en el Centro de Estudios Cinematográficos (CUEC) de la UNAM de 1976 a 1980.
De entonces a la fecha Luis Vélez ha producido y dirigido un sin fin de documentales, largometrajes, obras de teatro, programas unitarios, series de televisión, programas institucionales, comerciales.

Entre 1985 y 1986 Luis Vélez dirigió, produjo y escribió el guión de la película documental “Caracol Púrpura”, producida por la Unidad de Divulgación Cultural de la Subsecretaría de Cultura, para la Dirección General de Culturas Populares, misma a la que le fue otorgado el premio ARIEL, por la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematográficas, en 1987, como MEJOR PELÍCULA DOCUMENTAL 1986.

De 1988 a 1997 Luis Vélez dirige más de 12 Telenovelas y una gran cantidad de Programas Unitarios para Televisa.
En 1997 Luis Vélez ingresa a TV Azteca donde labora hasta el 2002, dirigiendo y produciendo tanto Telenovelas como Programas Unitarios y Series.

En el 2003, dirige y produce su Opera Prima, el largometraje “Corazón de Melón”, ganadora del Premio del Público “Il calice delle colline” en el FOOD IN FILM FESTIVAL de Montforte D’Alba, Piamonte, Italia, en marzo del 2004.

Otros premios de Luis Vélez:
Nominado por la Unión de Críticos de Teatro para el premio SALVADOR NOVO, a la mejor dirección escénica en comedia musical por “A Chorus Line”, en 1989.
Ganó EL HERALDO, el TESTIMONIO DE CALIDAD y el premio TV y NOVELAS como mejor director de 1991, por la Telenovela "Cadenas de Amargura".

Despues de esta breve introduccion del Director, les presentamos una breve entrevista relacionada con su mas reciente proyecto:

GuiaW- ¿Fue dificil completar este proyecto?

Luis Vélez - Casi 7 años duró el proceso para llevar a la pantalla este proyecto. Toño Olvera y yo empezamos a escribir el guión, basado en la novela homónima de Enrique Berruga Filloy, en el 2001 y el séptimo tratamiento lo concluimos en 2004. Lo más difícil, por supuesto, fue lograr el financiamiento para la película, pero gracias al estímulo fiscal del artículo 226 de la Ley Federal del Impuesto Sobre la Renta, se pudo finalmente concretar el esquema financiero de Propiedad Ajena.

GuiaW- ¿De donde surge su pasion por este proyecto?

Luis Vélez - Yo estaba escribiendo sobre esa curiosidad que todo ser humano tiene por conocer su origen, sus raíces, en fin, conocer su pasado para entender su presente. Como hijo de refugiados españoles nacido en México pensé en escribir, entonces, sobre el significado para nosotros, producto de una guerra, lo que significó ese exilio. En ese tiempo leí la novela de Berruga y me di cuenta que había mucho en ella de lo que yo quería contar. Así, invité a Toño para que escribiéramos juntos el guión de Propiedad Ajena.

GuiaW- ¿Cual es el Trasfondo que queria proyectar para este largometraje?

Luis Vélez - La reflexión profunda que tenemos que hacer de nuestro pasado para entender nuestro presente y construir un mejor futuro, pues la película cuenta una historia de amor en 1848, cuando México pierde más de la mitad de su territorio a manos de los EEUU, y lo que pareciera ser la continuación de esa relación amorosa en el 2007. Relación que simboliza la sostenida por México y los EEUU a lo largo de su historia, una relación de amor, odio, pasión, traición, venganza, etc.

GuiaW- ¿Porque se decidio por el elenco que escogió?

Luis Vélez - Lo más importante era tener actores con experiencia profesional de primer nivel, después pensar en actores con los que se pueda establecer una muy estrecha comunicación, con los que pudieran entregarse en alma y corazón al proyecto. Por eso y más, están los que están.

GuiaW- ¿Cual cree que sea la trascendencia que pueda tener esta pelicula?

Luis Vélez - Eso no lo puedo saber. Tendremos que esperar un buen tiempo para que el público juzgue y reaccione ante la película. Lo que puedo decir al respecto, es que espero que la película emocione y mueva el interior de quien la vea y la haga reflexionar, además de sentir orgullo, como lo sentimos quienes la hicimos, de ser mexicanos.

GuiaW: Gracias por su tiempo y esperamos que esta pelicula asi como sus futuros proyectos sean todo un exito.

Luis Vélez - Muchas Gracias  ■

Anonimo:(Blog-Biosstars-mx) Plutarco Haza es un gran actor mexicano y me ha gustado mucho la pelicula de Propiedad Ajena

Francisca Menchaca:(Milenio) Iren es una pelicula bien padre se las recomiendo mucho porque yo soy Landing Immigrant en Canada, y pues bien padre.

Magaly Casanueva:(Milenio) Felicidades!!! gran pelicula. Excelente trama, ambientacion, colorido, MUSICA!!! Vale la pena disfrutar este nuevo tipo de cine mexicano fino en donde la imagen proyectada es de los mexicanos de gente luchona, decidida y apasionada. No se la pierdan.

Miguel Duran:(Milenio) Estuve presente en la Premier de Propiedad Ajena y es un gusto saber que el cine mexicano no se trata de puras groserias y en escenas donde se muestra lo peor de nuestro pais, esta pelicula nos muestra la realidad por la que pasaron y siguen pasando muchos mexicanos. Es una pelicula que te mueve en todos los sentidos, te hace llorar, reir e inclusive te tiene por momentos agarrado de la butaca. Muchas felicidades, que el cine mexicano siga creciendo en este sentido, ya que asi llegara mucho mas lejos.

Y para tener la “gama” completa la opinión negativa

Ana: (Guia W) "Propiedad Ajena" es mala, malísima!! Hace años que no me salia de una película (y eso que aguante mas de lo que creia porque estaba esperando que pasara algo!); que lástima de la temática, tan buena y tan mal tratada… Me sorprendió mucho Plutarco, lo corren de su tierra y reacciona como si cualquier cosa, nada de emoción! donde está el gran actor que conocemos? Hubo gran espectación por el desnudo de Ludwica, pero para los que no nos interesan esas vanalidades no hubo nada, lástima de peli! Hay mejores que ver…

Y como por mera casualidad ;) la opinión megativa es de mi tocaya me permito añadir aquí mi verdadera opinión expresada en el foro de Christian Bach y Humberto Zurita:

Ana: (Foro CBHZ)"No creo que voy a poder ver esta película pero las opiniones expresadas aquí fueron muy de mi agrado. Me alegraría enormemente si México renunciara a mostrar al mundo “lo peor del país” y “puras groserías”, y luchara por medio del cine y de la cultura para mostrar una nueva imagen al mundo - un país con “gente luchona, decidida y apasionada” país con cultura y tradiciones. Se que conozco muy poco de vuestro país y por esto no me considero tan en derecho a opinar pero soy convencida que MERECE tener una mejor imagen, merece ser apreciado por su fantástica riqueza cultural. No puedo darme cuenta si esta película demuestra esto o no, pero me alegraría enormemente que sea a si y que vuestro país sea apreciado por lo que tiene mejor y no solamente criticado por lo que es peor. Con afecto, Ana"  ■

Tal es el caso de los festivales de: Dallas Texas, El París Latino Film Festival y La muestra Iberolatinoamericana del Festival Internacional de Cine de San Luis en Argentina, LAIFF (Latin America Internacional Film Festival) de los Ángeles, Panorama Latinoamericano del 29 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, el Festival Internacional de cine de Cancún y el más reciente, el Festival Internacional de Nuevo Cine Latinoamericano de la Habana, Cuba.

Una obra que refleja la intensidad de sentimientos que han marcado la relación de los mexicanos con nuestros vecinos del norte.

Propiedad ajena, logra proyectar el arraigo aunado al orgullo que sentimos por nuestra cultura, como contraparte el gran sentimiento de confusión, inconformidad, intolerancia y hasta ignorancia, que inevitablemente a lo largo de los años ha definido una relación de encuentros, desencuentros, amor y odio entro los dos países.

Propiedad ajena ha reunido una serie de elementos, que la han hecho destacar: una interesante y atinada mezcla de pasado y futuro, espectaculares escenarios naturales, actores de primer nivel como: Ludwika Paleta, Humberto Zurita, Plutarco Haza ,Gizeht Galatea y Alonza Vélez, quienes lograron una excelente interpretación bajo la dirección de Luis Vélez.

Propiedad Ajena, cine mexicano de exportación. Una pieza de arte hecha 35 mm que dejará huella y a partir de hoy aporta un gran significado a nuestro cine.  ■

Hay descubrimientos desoladores en la vida de todos los niños mexicanos: la muerte de la mamá de Bambi, el verdadero nivel de la Selección Nacional y la historia del pérfido Santa Anna y el territorio que los gringos le agandallaron. Este último tema es el que aborda Luis Vélez con gran soltura en Propiedad ajena.

Por medio de las historias paralelas de dos mujeres de una misma familia, en dos momentos históricos distintos, pero con la misma misión de recobrar el terruño arrebatado con tanta arbitrariedad por los yanquis, Vélez (Corazón de melón) sondea por las aguas de nuestros paradigmas nacionales y confirma que sigue abierta la herida inflingida por la intervención norteamericana a nuestro país en 1847. Basada en la novela de Enrique Berruga Filloy, Propiedad ajena es el tipo de cine que nos enfrenta de manera tajante con nuestros traumas nacionales, ayudado por apasionados romances, algunos momentos de enseñanza sobre la historia nacional y situaciones amenas, que ponen sal y pimienta a temas tan actuales como la migración, la frontera, la biculturalidad y la identidad de quienes no son ni de aquí ni de allá (como diría el bardo Alberto Cortés).

1848:

La anexión de Texas al territorio estadounidense obliga a la familia Sámano a dejar su hacienda Las Acequias y emigrar hacia Saltillo, donde viven la nostalgia de lo perdido. La más afectada por esta expulsión es Amalia Coronado de Sámano (Gizeth Galatea), quien entre sentidísimas recitaciones hace un compromiso férreo, a la Scarlett O’Hara, porque algún día su familia recupere las tierras que les pertenecen.

Siglo XXI:

La exhumación de cadáver (y con él, el diario) de Amalia hace que Miranda Sámano (Ludvika Paleta) tenga acres cuestionamientos sobre su origen y las causas que impidieron recuperar la hacienda familiar. Entonces decide emprender un viaje, como ilegal, a San Antonio Texas, en busca de las piezas del rompecabezas que le permita entender lo que ocurrió hace 160 años y of course, que también le permita encontrarse consigo misma.

A partir de estos dos planteamientos ocurren un montón de cosas muy intensas y que dejan a la gente pensando mucho, como los votos de silencio que hace Amalia mientras no recupere a su tierra y a sus muertos, o los agudísimos mensajes que deja Miranda en el baño de un bar, y que disertan de manera certera sobre la xenofobia, la migración, el biculturalismo o la identidad escindida. Todo esto, por supuesto, acompañados de un nutrido mosaico de personajes que representan las muchas aristas de la complejísima relación entre Estados Unidos y Mexico.

Amor a la gringo-mexicana

Poco a poco, los destinos de Amalia y Miranda toman giros inusitados, cuando ambas sostienen tórridos romances binacionales: Amalia con el coronel gringo Robert Crossman (Humberto Zurita) y Miranda con el descendiente del coronel, Matt Crossman (Rib Hillis). La coincidencia de enlazar a las dos familias a través de los siglos, reafianza el sentido alegórico del filme. Por supuesto, cada una de estas historias presenta tortuosos cotos de pasión y dolor. La experiencia del director en el melodrama se manifiesta con solidez en el manejo de los actores. Expresiones, tonos, desplantes, se mantienen en un altísimo nivel de intensidad. Eso remarca el ímpetu desaforado de los romances (¡hasta la Ludvika se ve toda desnuda!) y nos hace entender que la desventura caerá de forma inexorable sobre los personajes. Y cuando los romances derivan en la tragedia, el espectador comprende que esta historia simboliza nuestras tortuosas relaciones con los vecinos del Norte.

Las historias se van entrelazando y complementando argumentalmente una a la otra, con anécdotas propias del realismo mágico o de la comedia romántica, que van dando dimensiones más complejas a los personajes. El acompañamiento de personajes secundarios como Lorenzo Sámano (Plutarco Haza) o El Oso (Ehécatl Chávez) en el pasado, o Camila Sámano (Aldonza Vélez) y Elzear (Farnesio de Bernal) en el presente, aportan notas didácticas y de humor a la desgarradora trama central.

Entre el realismo mágico aguachocolatoso y la comedia romántica, entre la lección cívica y el ineludible morbo del erotismo, Propiedad ajena se presenta como una propuesta actual e ineludible, en estos tiempos de muros, xenofobia y amable intolerancia entre las dos naciones.  ■