~°Un
verano inolvidable...°~
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*~ Yushita ~*
Dentro
de un hospital cerca de la posada de los abuelos de Tai, había una gran
movilización, personas que entraban o salían. Dos muchachos entraron al lugar
cargando a dos chicas que se veían exhaustas, una tercer pareja llegó siguiéndolos
aunque sin decir palabra alguna. Una enfermera los recibió e instaló a las dos
jovencitas en una habitacion,
posteriormente un médico las atendió...
-Esto
es un desastre, se supone que debían reconciliarse no matarse- comentaba el
rubio a su hermano que permanecía sentado fuera de la habitación tomando agua
al lado de Kary, Tai salió en seguida de la habitación
-Te
felicito amigo, ahora creo que su amistad de verdad se destruyó, pero mira el
lado bueno, las separamos a tiempo. De no haber llegado, tal ves Mimi tendría
la mandíbula rota, y Sora la nariz
- No
te burles Tai...- el joven soltó una carcajada al ver el rostro de su amigo en
el que se veía preocupación y culpa
- Oye,
tranquilo, el médico dijo eso, si no las huyéramos traído a tiempo, o si se
hubieran dado otro golpe, ambas necesitarían cirugía, por suerte no fue así
^^
-Si
claro... creo que ahora si, los padres de Mimi nunca más la dejaran salir con
nosotros
- Ya
deja de pensar en eso hermano, para cuando regresemos, las dos estarán total
mente recuperadas y sus padres ni se enteraran, a menos claro, que ellas les
cuenten.
- Si,
TK tiene razón, ahora hay que preocuparnos por su salud ^^
Las
dos muchachas se encontraban dormitando, la enfermera salió de la pieza dejándolas
totalmente solas...
- Me
duele todo...-susurro para ella misma, su acompañante sonrió
- Pues
no eres la única, creo que me rompí la nariz de verdad
- Yo
no siento la parte inferior del rostro... el golpe que me diste fue muy duro...
- Como
si tu no golpearas igual... Mimi...
- ¿Si?...
- Como
fue... que llegamos a esto... estar internadas en un hospital por una riña
pasajera... ¿dónde quedaron las promesas que hicimos sobre nunca pelear por un
chico...
-Fue
tu culpa, tu fuiste la que terminó nuestra amistad, y hoy tu fuiste la que dio
el primer golpe
-No lo
abría hecho si te hubieras quedado callada... –la rubia trato de reír, pero
el dolor se lo impido, y Sora al verla quejarse emitió una risita
-No es
gracioso, me duele
-Tampoco
es gracioso tener la nariz rota...
-Sora...
-¿Si?
-Lo
que dije en la playa, era mentira
-¿Quieres
decir que esto... todo esto fue por una mentira?- pregunto incrédula
la chica tratando de voltear a ver a su compañera
-Si...
la verdad si, pero te mereces estar ahí con la nariz rota, por no haber querido
escuchar la verdadera historia.
-Así
que eso era todo lo que querías, explicarme lo que sucedió...
-Si,
pero tu has estado tan ciega que no me lo has permitido, por eso no me
arrepiento de haberte golpeado como lo hice hoy, aunque si quieres escuchar la
verdad...
-Entonces
comienza ahora, antes de que la anestesia surta su efecto y quedemos dormidas..