Jueves - abril 10 del 2008

Aztlán se habría situado en una cuenca ajena a Nayarit, según concluyen

Sin aval oficial, investigación echa abajo origen histórico de los aztecas

Rechazan participación del INAH por temor al saqueo de piezas: vocero de Nahui Ollin

MARISOL WENCES MINA

Según investigaciones de la asociación Nahui Ollin Cuarto Movimiento, la verdadera cuna del pueblo azteca y sus siete tribus no estaría en Mexcaltitlán, sino en un punto de convergencia entre los estados de Zacatecas, San Luis Potosí, Jalisco y Guanajuato.

La información ha circulado en algunas conferencias, incluso por medio de investigadores extranjeros, pero hasta el momento ninguna institución mexicana le ha dado aval.

El vocero de dicha asociación, Pablo Enrique García Sánchez –médico militar retirado radicado en Acapulco– reveló que hace un año reportó al secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván, los resultados de las indagaciones que por ocho años se han hecho en Ojuelos, Jalisco, pero el general le externó que a esa instancia no le correspondía dar seguimiento al tema.

En Ojuelos, afirma García Sánchez, se han encontrado diversas piezas más antigüas que las de la cultura Olmeca, considerada la cultura madre, sin embargo, ninguna institución ha impedido el saqueo del sitio.

En entrevista con La Jornada Guerrero, luego de una presentación pública del trabajo, el investigador detalló que la asociación no quiere la intervención del Instituto Nacional de Antropolgía e Historia (INAH), porque, a su juicio, no está seguro el resguardo de las piezas, pues “los arqueólogos (salvo honrosas excepciones) sólo van sobre las piezas y se han perdido muchas”, dijo.

Los integrantes de la asociación han buscado además entrevistas con la presidencia de la República, pero ésta no respondió; han tratado de abrirse espacios en diversos medios de comunicación, pero al momento pocos le han dado cobertura.

Por esta situación, subrayó García Sánchez, si para julio no hay institución que dé garantías de que el lugar será investigado y resguardado del saqueo, tendrán que informar a instancias extranjeras del asunto, “pero qué vergüenza que ellos vengan a investigar y en México nadie se interesa”.

Exploración

El descubrimiento “que podría cambiar la historia y los conocimientos que hasta ahora tenemos de nuestras raíces”, indicó, ocurrió cuando estando de campamento junto con varios amigos, el teniente García Sánchez, encontró algunas piezas parecidas con el Calendario Azteca, aunque menos elaboradas.

Después los habitantes de la zona, los invitaron para empezar una indagación y así fue como nació la asociación Nahui Ollin.

Según mapas satelitales e información del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática, en la convergencia de los estados mencionados, hay una cuenca totalmente seca y en medio de la misma está el Cerro del Toro, “donde se encuentra el teotépetl o sancta sanctorum”, precisó el investigador.

La fisonomía del lugar corresponde casi exactamente con las referencias históricas escritas y orales que se tienen de la mítica Aztlán, afirmó. Entre las imágenes que mostró en su exposición destacan una figuras con rasgos apaches, con tipi y la inconfundible corola de plumas, asimismo mostró unas pequeñas figuras con forma de chac mool rudimentario, una figura antropomorfa con una armadura al estilo de los guerreros chinos, y una cabeza “con el aspecto de los moais de la isla de Pascua”, las monumentales cabezas de piedra que miran hacia el horizonte.

Por eso, informó, los integrantes de la asociación han concluido que en Ojuelos estuvo ubicado un centro de peregrinaje al que llegaban miembros de pueblos de distintos lugares del mundo.

“Si alguien llega al Cerro del Toro, sentirá el magnetismo que emana de allí por la composición del cerro, con núcleo de basalto y granito y cuarzo blanco. Es como un acumulador natural”, dijo.


Referencia: http://www.lajornadaguerrero.com.mx/2008/04/10/index.php?section=cultura&article=013n1cul