|
Conclusiones
Los judíos de Jerusalén se fundaron en la doctrina de los Apóstoles. Los samaritanos se convertían a Jesucristo sin otro enseñanza que la del diaconé Felipe, y los apóstoles Pedro y Juan. Ninguno tubo que rectificar la doctrina del bautismo que los apóstoles enseñaban con Mateo 28:19. Nadie contradecía lo dicho y practicado por los apóstoles. No tenían que acudir a la expresión literal de Marco escribiera anos mas tardes. Estas palabras dicho por Cristo es misterio y ordenada para los Apóstoles y profetas ya estaba rebelada desde antes que mateo las escribiera. El nombre que estaba oculto permanecería en misterio para los discípulos, ignoraban El nombre del Padre. En Juan 14:8,9 oyen que Jesús menciona al Padre y se imaginan otra persona fuera de el. Jesús inmediatamente corrige esa tripartía y le afirma que el mismo es el Padre.. Tras su velo de carne el Padre se manifiesta: Dios estaba en Cristo reconciliándo al mundo, 2 Cort 5:19. La revelación del MISTERIOS del NOMBRE del Padre del Hijo, y del Espíritu Santo era una practica en las enseñanza de la Iglesia primitiva. La revelación es Jesucristo.
La Iglesia de Antioquia, donde primeramente se le llamo cristianismo, los que allí se convertían lo hacían por la revelación de los profetas y doctores. Bernabé, Simón, Lucio, Manahen y Saulo. La revelación que estos predicaban estaba relacionado con la doctrina de los Apóstoles. Así de esta manera todas las Iglesia de Judea, del Asia y de Europa, eran edificadas en el fundamento de los Apóstoles y Profetas. Siendo el perito arquitecto Jesucristo mismo Efe 2:20
| Estamos edificados sobre el fundamento de Cristo |
arriba
|
