LOS HEROES SON RECORDADOS PERO...

Por:

Anais.

Email: alix2cool@hotmail.com

 


 

- Neftis, ¿Dónde esta Mirash?.- Pregunto la mujer rubia.

El chico rubio, fornido y de ojos azules, volteo a ver a su hermana melliza con cierto fastidio. Presentía que iba a haber otra escena de celos, como las que todo el campamento se estaba acostumbrando a presenciar.

- Creo que se fue rumbo al río.-

- ¿Osiris esta ahí?.-

La chica ni se tomo la molestia de esperar a que su hermano le respondiera. Corrió rumbo al río lo más rápido que pudo.

***

 

Efectivamente, Osiris se encontraba en el río relajándose debajo de la cascada. Mirash lo observaba desde la orilla, despojándose lentamente de su armadura para meterse al río.

- ¡Osiris!.- Llamo una voz masculina.

La chica giro para encontrar a Horus detrás de ella. Él la intimidaba, muy a pesar de su carácter fuerte y de su orgullo, se sintió como una niña atrapada en plena travesura. Basto ver al mago para que ella se percatara de que quería hablar a solas con Osiris, así que ella desapareció en el acto, refunfuñando.

Cuando Osiris llegó a la orilla del río, alcanzo a ver como Mirash se alejaba.

- Horus, es la segunda vez que me salvas de Mirash. No se si, pedirte que dejes de vigilarme tanto o darte las gracias.-

- Deberías darme las gracias. Esa mujer tiene un destino perfectamente trazado y tu no figuras en el.-

- ¿Por qué siempre que hablas de ella es como si conocieras su futuro?, ¿Quién es ella?.-

- El día que llegó, te advertí que no podría decirte nada sobre ella. Será mejor que te ahorres una pena y la dejes en paz, no estará con nosotros por mucho tiempo. Pero basta, no he venido aquí ha hablar de ella. Vine a avisarte que me ausentare algunos días. Necesito arreglar algunos "asuntos de familia"-

- ¿Familia?, creí que no tenías familia.- Dijo Osiris mientras tomaba una manta del piso y se cubría con ella.

- Hay muchas cosas que no sabes de mi.-

- Como sea, no puedes ausentarte ahora. El ataque se realizara en poco tiempo.-

- No pienso participar.-

-¡¡¡¿QUÉ?!!!, ¡¡¡¡¿Te has vuelto loco?!!!!, Hasta ahora eras de toda mi confianza pero ahora estoy dudando de ti. ¡¡¡Yo no perdono a los traidores Horus !!!, ¡¡¡Así que... ándate con cuidado!!!.-

Osiris se fue furioso. Horus se marchó como lo había advertido. Tenía muchas cosas en que pensar y asuntos pendientes que arreglar.

b a

 

Latis y Ráfaga caminan con pasos fuertes por uno de los tantos pasillos del castillo, se notan preocupados. Al dar la vuelta en un corredor se encuentran con Ascot.

- ¿Dónde esta el rey?.-

Al escuchar a Ráfaga hablar, Ascot se dio cuenta de era un asunto grave. Cuando no estaban ante la corte o el pueblo de Céfiro, ellos le llamaban Paris, como antes.

- En los jardines, con la srta. Iris.-

***

 

En los jardines del palacio, Iris estaba sentada bajo un gran árbol que daba una refrescante sombra y Paris estaba recostado sobre las rodillas de la chica. Hasta ahí llegaron Ráfaga. Latis y Ascot.

- ¿Qué ocurre?.- Dijo el rey incorporándose.

- Nos han informado que los rebeldes planean atacar la Cd. de Paires.-

- ¿Cuándo?.-

- No lo sabemos, solo sabemos que será pronto.-

- Ráfaga, ve inmediatamente con tu gente. La mayor parte de los habitantes de esa ciudad, son comerciantes. Esa gente esta completamente desprotegida.-

- Pero si hago lo que me pides, el castillo quedara vulnerable.-

- No te preocupes por nosotros. Latis y sus hombres estarán aquí y recuerda que Zaz y Lilandra instalaron un sistema de seguridad la ultima vez que vinieron. Estaremos bien. –

b a

 

Unas cuantas horas más tarde, Caldina recibía la visita de un mensajero.

- Cori, Papa no llegara mañana como había dicho. Lo han mandado urgentemente a defender la Cd. de Paires.-

La niña bajó su cara en señal de tristeza.

- ¿A defender?, ¿A defender de que?.- Pregunto Heli extrañada. Ella ya sabía que el esposo de Caldina era capitán de la guardia de Céfiro, pero ella no estaba enterada de que hubiera una guerra o algo así.

- Los tradicionistas piensan atacar ese lugar por que el 50% de su población es de extranjeros, es un punto de fuerte intercambio comercial.- Explico Caldina mientras intentaba que el mensajero reaccionara, ya que se había quedado bobo al ver aparecer a la exuberante mujer pelirroja.

- ¿Quiénes son los tradicionistas Caldina?.-

- Es gente de Céfiro que esta inconforme con el gobierno. ¿Recuerdas que te hable de las Guerreras Mágicas y del sistema del Pilar?.-

- Si.-

- Pues ellos están en contra de todos los cambios que trajo la abolición de ese sistema y de que se le permita a los extranjeros de otros planetas vivir en Céfiro.-

- ¿Por qué?, el sistema del pilar era muy injusto y los extranjeros han traído muchos beneficios al planeta.-

- Eso es verdad Heli, pero no olvides que cada planeta tiene un equilibrio. Los tradicionistas buscan mantener ese equilibrio. La magia del pilar aun nos protegió unos años después de que se aboliera. Pero después varias criaturas nos atacaron, cada vez que alguien tiene un sentimiento negativo aparece una criatura y la magia, maquinas, fauna y flora de otros planetas son extraños a Céfiro, por lo tanto no sabemos como reaccionara el planeta a fin de cuentas.

Céfiro es un planeta muy sensible, es posible que los cambios ocurridos atraigan catástrofes. Eso es lo que los tradicionistas tratan de impedir. Su causa es valida pero sus métodos son deplorables, son muy violentos y extremistas por eso se ocultan en los bosques-

Helia se quedo observando con los ojos muy abiertos a Caldina, vaya que estaba informada de lo que pasaba en el planeta. La había dejado sin habla.

- ¿Cómo sabes todo eso?.-

- Bueno, siendo esposa de un militar creo que es normal. Pero también SIEMPRE ME GUSTA ESTAR MUY BIEN INFORMADA.- Sonrió Cadina de una manera extraña que Helia no supo interpretar.- Bueno pero eso no nos concierne a nosotras. Lo que nos interesa es cuando vuelve Guru Clef y desgraciadamente parece que aun tardara un par de semanas más en regresar.-

Heli dio un suspiro de resignación.

- Vamos mujer, ¡¡¡Anímate!!!, pronto volverás a casa.-

- Si, Heli. Además yo no se que voy a ser cuando te vayas, te voy a extrañar mucho.- Le dijo Cori mientras la abrazaba.

- Gracias.- Les dijo mientras les sonreía a ambas.

b a

Cerro los ojos...

Escucho el arroyo...

Su suave y tranquilo murmullo...

El agua que no deja de correr...

Esa era la canción de cuna que la arrullaba, cuando era una bebe...

- ¿Quién esta ahí?.- La niña abre sus ojos y alerta sus sentidos. Percibe que alguien la observa. Con un rápido movimiento, lleva su mano al guante joya y de la piedra ambarina saca una espada tan grande como ella. Cualquiera creería que el peso del arma la haría caer, pero ella balancea la espada como si de una pluma se tratase. Escucha un ruido detrás de unos arbustos al otro lado del río. Un movimiento de su mano y dichos arbustos se hacen a un lado.

Al verse descubierto, un niño un poco mayor que ella se incorpora. Su cabello y sus ojos son negros, como la más oscura noche, va cubierto con un manto del mismo color.

- ¿Shet?, ¿Qué haces aquí?.-

- Antes no te sorprendía mi presencia.-

- Todo es diferente ahora.-

Nina bajo la vista y clavo sus ojos celestes en el agua. Vio su rostro de niña, no había cambiado casi nada de cuando tenía seis años... de cuando conoció a Shet...

 

Flasback.

- ¡¡¡¡¡BUUUAAAAAAAAAAA!!!!!-

- ¿Qué te ocurre?.- Un pequeño de ojos negros miraba sorprendido a la pequeña de cabellos ensortijados. Brincando de piedra en piedra, cruzo el río para quedar frente a la niña.

- ¿Qué te ocurre?.- Volvió a repetir.

- snif, snif, Me...snif... perdí.- Sollozaba la pequeña.

- ¿Por donde llegaste aquí?.-

- No se.-

- ¿Cómo se llama tu mama?.-

- No se.-

- Entonces creo que estas perdida.- Dijo el niño muy serio.

La niña de le quedó viendo un tanto extrañada pero luego le contesto.

- Eso ya lo sabía, ¡¡¡¡BUAAA!!!!.- La niña siguió llorando y a el niño le salió una gota en la cabeza.

- ¿Y como te llamas?.-

- Eso si lo se. Me llamo Nina. ¿Y tu?.- La niña sonrió.

- Mi nombre es Shet.- Él también sonrió.

Al lado de los dos pequeños, comenzaron a brillar pequeñas luces doradas, hasta que tomaron la forma de una dama de cabello dorado.

- ¡Nina!. No vuelvas a salirte así. Estaba muy preocupada por ti.-

La chiquilla rápidamente se aferro a las faldas de la recién llegada.

- Lo siento mucho.- Dijo la niña haciendo pucheros y mirándola arrepentida. –Mira mamá, hice un amigo. Se llama Shet.- Dijo la niña orgullosa.

La mujer volteó la vista con una dulce sonrisa, pero cuando vio al niño sus ojos se clavaron fríamente en él y su cálida sonrisa se borro de su rostro.

- Gusto en conocerte Shet.- Dijo la dama disimulando su sorpresa.- Lo lamento pero tenemos que volver a casa.-

La mujer tomó a Nina en brazos y le dio la espalda al niño, la pequeña le decía adiós con la mano mientras le sonreía, por sobre el hombro.

***

Una piedra que arrojo Shet al río, atrajo la atención de Nina y la saco de sus recuerdos. El niño la miraba preocupado.

- Ya comenzó...lo sentí...-

- Si, yo también...- Aseguro la niña.

b a

Después de un millón de ruegos, Aura había aceptado ir a dar una vuelta, con Maat, a la ciudad. Él chico tenía razón, necesitaba distraerse. Ultimamente pasaba mucho tiempo sentada en el barranco meditando... forzándose a recordar... lo que fuera que le dijera quien era ella y algo sobre su pasado, pero nada...

Era como si hubieran borrado esa información de su mente. Eso la desesperaba terriblemente, y cuando una lagrima asomaba a sus ojos, siempre soplaba una gentil brisa que la reconfortaba o aparecía Maat que se empeñaba en hacerla reír y distrerla un poco. Como este día en especial que la había arrastrado a la ciudad con el pretextó que le ayudara a estudiar en la biblioteca. Ella sabía que era mentira, Maat era un chico muy listo y probablemente un excelente estudiante. Disfrutaba mucho su compañía, a pesar de que era 5 años menor que ella...pero en Céfiro no importan mucho las diferencias de edades...

Ambos sintieron un temblor bajo sus pies, se miraron uno al otro y luego hacia arriba. Los edificios se movían, casi como si bailaran. Corrieron con dirección al punto más libre de construcciones que encontraron, el cual resultó ser un parque. Se armo un caos en las calles, un deslizador salió de control y se dirigió a ellos. Maat apenas alcanzo a saltar y empujo a Aura a el lado contrarió. La tierra seguía moviéndose...

Un recuerdo vino a la mente del chico, algo que lo había aterrorizado cuando era niño...

La tierra también tembló aquella vez...

Cuando la princesa fue secuestrada...

Cuando aquellas horribles criaturas aparecieron...

Cuando su padre murió por protegerlo a él y a su madre...

Un ruido de algo cuarteandese lo hizo regresar a la realidad, no le gusto lo que vio. El piso se estaba abriendo y una criatura, semejante a un reptil con escamosa piel azul y una lengua gigante. Hacia años que nadie veía una criatura semejante, algo no estaba bien con el planeta, lo supo en ese momento. Mucha gente se quedó sin habla, estaban muy asustados. Maat sabia el peligro de eso, se levanto y se coloco frente al moustro.

- ¡¡¡YO NO TE TEMO!!!.-

Todas las miradas se clavaron en él.

- ¡¡¡No demos temerle!!!. ¡¡¡El miedo lo hace más fuerte!!!.-

Algunas personas se colocaron al lado del chico y le hicieron frente a la criatura, pero la mayoría aun permanecían a la defensiva.

- ¡¡¡Los moustros son nuestros temores!!!, ¡¡¡Si les hacemos frente desaparecerán!!!.-

Otros más se agregaron. La criatura miraba la muralla de voluntades frente a él. No se había movido. De pronto solo dio un latigazo de su lengua, y como si advirtiera que el disminuía su poder, se trago a Maat como si fuera una mosca.

Nadie supo exactamente como paso, pero segundos después, de la multitud salió una mujer y brinco sobre la criatura. Mientras caía, de la nada, más bien del aire, se formo una espada en sus manos. Dió una sola estocada y callo tras del moustro.

Apenas se mantuvo unos instantes de pie y se desmayó, su espada desapareció dentro de un extraño guante que llevaba en la mano.

La criatura permaneció sin hacer un solo movimiento unos segundos más y después se partió en dos sin dar un solo quejido, para después desaparecer. Maat quedo parado en el lugar donde se encontrara la criatura. Tardo un poco en reaccionar, miro a todos lados y no supo explicar lo que había pasado.

A una considerable distancia tras de él, diviso a Aura desmayada sobre el piso...

-¡Aura!, ¿¡Qué te ocurrió!?-

La mujer no le respondió. Algunas personas se acercaron.

- Chico, tienes una novia muy fuerte. De no ser por ella estarías muerto.- Le dijo un hombre de las personas cercanas.

Maat se quedo callado, ¿Comó rayos había hecho Aura para acabar con la criatura?, ¿Por que ella estaba inconciente?

Definitivamente tenía un mal presentimieto de todo esto...

b a

En esos precisos momentos, una burbuja de luz se acerca al observatorio. Desciende, brilla un par de veces antes de desvanecerse y dejar al descubierto a un hombre.

Este se acerca y llama a la puerta.

Le habré una mujer, su nombre es Vada. Sus ojos se abren hasta casi salirse de sus órbitas y se lleva una mano a la boca para no gritar, llora...

- Tranquilízate hermana, ¿No me invitas a pasar?.-

 

Continuara...


¡Hola =)!

No me gusto mucho este capitulo, creo que esta aburrido. ¿Ustedes que opínan?

Hoy vengo de pocas palabras ^-^

Muchos besos a todos y nos escribimos luego.