¡Recordad el
11 de Marzo!
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El País Digital, Viernes,
12 de marzo de 2004
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Los
partidos suspenden la campaña electoral y el Gobierno convoca
hoy una manifestación
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MATANZA
EN MADRID - Reacciones
Aznar habla con el Rey,
Zapatero y Rajoy; mientras, el Gobierno anuncia
a última hora la posibilidad de que la autoría sea del
terrorismo islámico, tras mantener todo el día que era ETA
L. R. AIZPEOLEA / C. VALDECANTOS - Madrid
EL PAÍS | España - 12-03-2004
Los partidos decidieron la suspensión de la campaña
electoral, una vez que tuvieron noticia del alcance de la masacre
terrorista sin precedentes ejecutada ayer en Madrid. Entre las nueve y
las diez de la mañana, casi a la vez de que los líderes
anunciaban la suspensión de la campaña, el jefe del
Gobierno, José María Aznar, notificó al Rey y a
los secretarios generales del PSOE, José Luis Rodríguez
Zapatero, y del PP, Mariano Rajoy, la convocatoria de una
manifestación para hoy a las siete de la tarde en toda
España con el lema Con las víctimas, con la
Constitución y contra el terrorismo. A última hora de la
noche el Gobierno anunciaba la posibilidad de que la autoría del
atentado correspondiese al terrorismo islámico.
La rotundidad del Ejecutivo, durante toda la jornada, atribuyendo a ETA
la autoría de la masacre sufrió un viraje cuando el
ministro del Interior, Ángel Acebes, sobre las ocho de la noche,
abrió la posibilidad de que fuera el terrorismo islámico
el autor de la matanza, aunque sin descartar la hipótesis
inicial.
Los representantes de los partidos democráticos se mostraron
conmocionados tras conocer el alcance de la masacre terrorista, sin
precedentes no sólo en España sino en Europa y con la
clara conciencia de que marcará de algún modo el
resultado de las elecciones del domingo y el arranque de la nueva
legislatura. Para las diez de la mañana ya se sabía que
el 11-M era la versión europea del 11- S norteamericano.
A primera hora de ayer, y previamente a la conversación
telefónica que Aznar mantuvo con el Rey y con los principales
líderes políticos, el secretario general de la
Presidencia, Javier Zarzalejos, mantuvo un contacto con su interlocutor
permanente en el Pacto Antiterrorista, el socialista Alfredo
Pérez Rubalcaba. Ambos coincidieron en la conveniencia de
suspender los actos pendientes de la campaña, así como de
dar una respuesta unitaria de los partidos al desafío
terrorista, pese a las discrepancias mantenidas por el PP y PSOE,
durante la campaña, sobre el modo de entender el Pacto
Antiterrorista, tras la conversación del secretario general de
ERC, Carod Rovira, con la dirección de ETA.
Tras la notificación de Aznar a los principales líderes
políticos de las protestas convocadas para hoy, el
vicepresidente segundo, Javier Arenas, se puso en contacto con las
Delegaciones del Gobierno, los sindicatos y organizaciones
cívicas para que se sumen a las mismas.
Para las once de la mañana, La Moncloa ya tenía un
conocimiento muy aproximado del alcance de la tragedia, y Aznar
convocó al Gabinete de Crisis de la Presidencia. A su cita
acudieron los dos vicepresidentes del Gobierno, Rodrigo Rato y Javier
Arenas; el ministro portavoz, Eduardo Zaplana, y el ministro del
Interior, Ángel Acebes, con el que Aznar mantenía
contacto permanente desde que se conoció la tragedia, y el
secretario general de la Presidencia, Javier Zarzalejos.
El Gabinete de Crisis tuvo información de las primeras
investigaciones sobre la autoría del atentado, las medidas
adoptadas para garantizar la seguridad y restablecer los servicios
públicos afectados. También decidió declarar tres
días de luto oficial, como "expresión pública del
dolor que compartimos todos los españoles de bien".
Tras la reunión del Gabinete, compareció en La Moncloa el
ministro del Interior. En ese momento, el Gobierno anunciaba la cifra
de 173 muertos y 600 heridos. Acebes expresó su creencia en que
la autoría de la masacre correspondía a ETA e incluso
calificó de "absolutamente intolerable" cualquier
intoxicación "por parte de miserables" que manejasen otras
hipótesis sobre la autoría del atentado. El ministro
recordaba los cuatro intentos de ETA de realizar una masacre en Madrid,
desde que la banda rompió su tregua en noviembre de 1999 y
aseguraba que el modus operandi respondía al de la banda
terrorista. Minutos después, La Moncloa informaba que las
investigaciones sobre el explosivo utilizado en la masacre
correspondía al que maneja ETA.
Sin embargo, por la noche, el propio Acebes dudaba, también
públicamente, de que la autoría fuera de ETA, al apuntar
la posibilidad de que fuera el terrorismo islámico, tras
descubrir la policía una furgoneta en Alcalá de Henares
(Madrid) con temporizadores y una cinta grabada con versículos
del Corán. Como colofón, por la noche, la
organización terrorista Al Qaeda se atribuía la
autoría del atentado a través de un comunicado enviado a
un periódico árabe en Londres.
Previamente, a las dos de la tarde, el presidente del Gobierno
realizaba una declaración institucional, desde la sala de prensa
de la Moncloa. En las primeras filas estaban todos los miembros del
Gabinete de Crisis, así como Ana Botella, esposa del presidente.
Aznar empezó su declaración con una frase para la
historia: "El 11 de marzo de 2004 ocupa ya su lugar en la historia de
la infamia". Para ese momento ya conocía que el Parlamento
Europeo había hecho del 11-M "Día Europeo de las
Víctimas del Terrorismo", un equivalente simbólico al
11-S norteamericano. También había tenido conciencia del
enorme impacto mundial de la tragedia. Le habían llamado Romano
Prodi, George W. Bush, Tony Blair, Gerhard Schröder, Jacques
Chirac, Silvio Berlusconi y otros muchos líderes.
Aunque en su intervención no citó a ETA, las referencias
políticas colocaban a esta banda en el centro de la diana. Pese
a la enorme tragedia, mantuvo su tesis de que "los terroristas tienen
su capacidad más debilitada que nunca". "Su instinto asesino y
su voluntad de someter a España a sus dictados permanecen, sin
embargo, trágicamente activos".
"Los derrotaremos. Que no tenga nadie ninguna duda", aseguró. Y
reiteró la vigencia de la actual política antiterrorista:
unidad de los partidos, apoyo internacional, lucha policial y fuerte
implicación de la Justicia.
Reiteró, en línea con el Pacto Antiterrorista, que el
Gobierno no cederá al chantaje terrorista por tremendo que sea.
"No vamos a cambiar de régimen ni porque los terroristas maten
ni dejen de matar" y "no debemos aspirar a nada que no sea la completa
derrota del terrorismo, su rendición sin condiciones de ninguna
clase. No hay negociación posible ni deseable con estos asesinos
que tantas veces han sembrado la muerte". |
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