"Tras una Docencia con Objetivos
Prácticos"
por Ricardo Pato
PROLOGO
En la búsqueda de perfeccionar la preparación
de nuestros alumnos, y tras el mandato de nuestros maestros: ir a
las cosas; estar donde la comunidad nos necesite, buscarla la
certeza en el hacer cotidiano, es que desarrollamos un estilo de
trabajo, como docentes, que es diferente, pero no contrario a lo
acostumbrado.
Trabajar interdisciplinariamente, relacionar,
cotejar, confrontar, interactuar: distintas acciones en la
búsqueda permanente del Bien Común, he allí el objetivo que se
trata de transmitir.
A MODO DE INTRODUCCION
Mons. DERISI en uno de los primeros textos
que , tal vez tuvimos que leer al ingresar a esta casa, nos
recibía aclarándonos qué es lo que debía ser la Universidad y
los actores que a ella la dinamizan:
"Organo superior de investigación y
transmisión de la verdad al servicio de la comunidad" (1)
Pero sin quedar encerrada en sí misma:
"Instaurada en el seno de la sociedad como
órgano de cultura superior, la Universidad tiene como misión,
irradiar esta cultura más allá de sus propios alumnos, en los
diferentes sectores sociales" (2)
y dejándonos en claro que:
"La Universidad no puede perder de vista
su pertenencia a una determinada comunidad, ubicada a su vez en
una precisa situación geográfica e histórica" (3) y que
"no debe confundirse el carácter teorético de la
Universidad con el de enajenación o pérdida de contacto con la
realidad geográfica, histórica, social del pueblo en que está
implantada" (4)
Esta búsqueda permanente de la verdad
no debe quedar en lo teorético. Hay un mandato, por así decir,
de ‘ir a las cosas’. Una verdad para hacer y obrar. Esa verdad
que irradia todo el quehacer del hombre.
En ésta misma Universidad, el Dr. FEDERICO
MIHURA SEEBER nos enseñaba a distinguir entre Ciencia
Especulativa y Ciencia Práctica, los métodos específicos para
cada una de ellas y, lo que aquí nos interesa, el dilema de la
existencia y distinción de la certeza.
- – Mons. DERISI, Octavio N. – Naturaleza y Vida de la
Universidad, pág. 12. Ed. El Derecho, 3º Edición – 1980
- – Op. Citado, pág. 36/7
- y (4) – Ibídem, pág. 49
Define certeza como "estado en el cual
la inteligencia se afirma en lo verdadero" (5)
Llegado a este punto, es necesario aclarar el
por que de la preocupación por aclarar los conceptos de
práctico – certeza – estar en la comunidad.
Aquí se detallará un método aplicado desde
alguna cátedra de esta Universidad por un grupo de profesores
que no tiene mucho que ver con el estilo de ‘clases
magistrales’ a la que estamos acostumbrados; pero sin embargo,
están embarcados en la búsqueda de la verdad, tal cual
nos enseñaba Mons. DERISI, al servicio de la comunidad,
teniendo en cuenta su realidad histórica.
Desde lo práctico y con certeza. Ese es
el camino optado para transitar hacia la verdad.
De allí la necesidad de aclarar que sí se
considera que puede haber certeza en la práctica.
Seguimos con MIHURA:
"Hemos de afirmar que existe certeza en
el conocimiento práctico –certeza práctica-... sin que ello
obste al reconocimiento de la contingencia y libertad de la
acción humana". (6)
El "objeto de conocimiento... es de otro
tipo que... el teorético"
La verdad del conocimiento práctico es la
adecuación del conocimiento al "deber ser" o al
"apetito recto".
Este "deber ser" está atestiguado
por nuestra experiencia moral, que no nos dirá "sobre si
algo ‘ocurrirá o no’, sino sobre si conviene o no hacer tal
o cual cosa" (7).
Nos asiste la ‘certeza’ de que ‘conviene’
trabajar en la comunidad en procura del Bien común.
De allí que se encare lo que a continuación
se relata.
(5) – Dr. Fernando Mihura Seeber, Sapientia
Vol. XLII – 1987 – pág. 239.
(6) – Ibídem, pág. 240
(7) – Ibídem, pág. 242
UN TRABAJO "PRACTICO"
La experiencia como alumno de ésta
Universidad, en la Escuela de Ciencias Políticas, es que cuando
se habla de ‘trabajo práctico’, nos limitamos a realizar (y
exigir) una Monografía, o cuando más, un asomarse a la ventana
de la investigación sólo a través de la lectura o visitando
algún lugar de experiencia política.
Con un grupo de egresados y alumnos, tuvimos
la idea de promover un Servicio de Apoyo al Tercer Sector
que denominamos "Servicio UNCION". A partir de
él nos fuimos conectando con la realidad de ese Tercer Sector.
Sumamos a ello nuestras experiencias laborales en la ‘promoción
de desarrollo de las personas’; luego tuvimos acogida en la
Cátedra de Políticas Públicas – Seminario de Política
Social – Vº año y más tarde en Práctica Profesional, (IVº
Año).
Al comienzo del 2000, en el ámbito de la
Secretaría de Culto de la Nación, nació un programa de "Coordinación
de las Acciones del Estado y Organizaciones Religiosas para la
Ejecución de Programas Sociales". A partir de ellos
nos vinculamos con Programas que se ocupan de asistir a
población en riesgo. En el primer cuatrimestre fueron tres los
Programas con los que trabajamos con alumnos de Vº año, a
quienes dividimos en grupos de igual número y junto a ellos
visitamos cada lugar, entrevistándonos con los responsables.
Los programas fueron los siguientes:
"Nuestra Señora del Carmen",
donde se desarrolla el Programa "San Francisco de
Asís", cuyo objetivo es reinstalar en la sociedad a los
ambulantes mayores.
"Nuestra Señora de Caacupe"
– Villa 21, Barracas – con la diversidad de problemáticas
que presenta este tipo de población.
"De la Resurrección", en
Chacarita, con un grupo que trabajaba con ‘chicos en
situación de calle’ en una casa parroquial a la que llaman
"La Casita".
Todos necesitaban recursos. Para alcanzarlos
había que elaborar sendos proyectos, para ser presentados ante
distintas autoridades estatales que podían llegar a proveer
tales recursos.
Indagamos, profesores y alumnos juntos, sobre
cuáles eran los recursos que ofrecía el Estado: optamos por
los Planes del Ministerio de Trabajo (Plan Trabajar, PEL
Productivo).
Los alumnos analizaron cada uno de ellos, los
cotejaron con las necesidades de los Programas y propusieron
proyectos con soluciones.
Para el Programa "San Francisco",
fue un PEL Productivo Línea A con lo que se posibilitó a un
grupo de 20 ambulantes, mejor dicho ex ambulantes, poder
desarrollar un taller de artesanías, comercializando lo
producido, lo que les permitió sostener su estado de ex
ambulantes.
En el caso de Caacupe, Villa 21, fue
un Plan Trabajar, Desarrollo Comunitario lo que permitió que 10
jóvenes con secundario completo, vecinos del barrio, pudieran
dar apoyo escolar a 100 chicos del lugar, en las tres Capillas
que pertenecen a la Parroquia.
En Chacarita se complicó: se estaba pensando
en un Plan Trabajar para financiar la mano de obra que
permitiera terminar la construcción de "La Casita"
y, de esta manera, tuviesen los chicos un Hogar. Otra
institución se había comprometido a proveer de los materiales.
Cuando se estaba trabajando en la definición del proyecto, el
Programa se quedó sin financiamiento para sus operadores
profesionales y sin el material prometido. Ellos y nosotros
empezamos a pensar juntos en el ‘qué hacer’ ante esta nueva
realidad. De allí surgió el proyecto: organizarles, ordenarles
los pasos a dar. Armarles un proyecto de trabajo. Nosotros
fuimos la contraparte. El recurso fue la organización.
Para concretar esto, poco estuvimos en el
aula. Todo fue ‘trabajo de campo’: conocer, dialogar,
proponer, pensar juntos con la comunidad, trabajo
interdisciplinario, interactuar, y fundamentalmente, conocer la
realidad desde dos ángulos:
- La del demandante de recursos.
- La del aparato burocrático del Estado.
En el segundo cuatrimestre, contamos con el
espacio de la Cátedra de Práctica Profesional, IVº año, con
más alumnos, lo que nos permitió multiplicar la apuesta, ahora
con algo más de experiencia: 14 son los proyectos en marcha,
repartidos en 11 Programas diferentes.
Seguimos apoyando a Nuestra Señora de
Cacupe y San Francisco, sumamos a CARITAS,
otras Parroquias, una Asociación Civil, a la oficina conjunta
de proyectos de la Iglesia Evangélica Luterana Unida e
Iglesia Evangélica del Río de la Plata y una parroquia de
Río Negro que trabaja en la promoción de la mujer Mapuche.
Esto requirió encarar la tarea de otra
manera:
 | Visitar, en carácter de docente, cada lugar. Allí fue
necesario presentar el proyecto UNCION y desmitificar a la
propia Universidad, vista como una burbuja de cristal anclada en
Puerto Madero. |
 | Incrementar las relaciones con CARITAS, ya que siendo
ésta la organización de la Iglesia encargada de la Promoción
Social, todo lo que se haga en ámbito de ella debe comunicarse a CARITAS. |
 | Indagar más a fondo sobre los recursos del Estado. |
 | Rendir cuenta de las acciones a Secretaría de Culto, quienes
nos había acercado a los dos sectores: Estado y comunidad. |
Esto, que si bien es un trabajo constante,
fue más intenso en el periodo de receso universitario, junio
– agosto, para estar en condiciones de hacer una correcta
presentación ante los alumnos. Y ésta fue una fragosa tarea:
nuestros alumnos NO están acostumbrados a enfrentarse con la
realidad concreta. Le temen. Están ganados por el mismo
escepticismo que el resto de la sociedad. Por ello, les parece
que nada se puede hacer, y de lo que se hace, es para beneficiar
a unos pocos. La palabra proyecto los asusta...
¿Será producto de la formación recibida?
...
Tuvimos que convencer de que se trataba de
algo posible, lógico y conveniente para su formación.
Eligieron ellos el Programa con el cual
trabajar.
Una vez divididos en grupos de dos (excepto
los de Caacupe y San Francisco, que por su
magnitud, tienen más integrantes), se les asignó un líder de
proyecto a cada uno, reclutados éstos desde distintas
profesiones: un Licenciado en Cs. Ps. de la U.B.A.; una
Asistente Social de la U.B.A.; otra de la Universidad de La
Matanza; un Licenciado de Cs.Ps. de esta casa; una alumna de
Vº año de Cs.Ps. que desarrolló un proyecto en el
cuatrimestre anterior y un estudiante de Filosofía con vasta
experiencia en el área social.
Se les explicó en qué consistía cada uno
de los Programas y a lo que apuntaba cada proyecto. Se les
proveyó la lista de los recursos. Se establecieron los canales
de comunicación con los Programas, líderes de proyectos y
profesores.
Luego les tocó a ellos:
Concertaron la entrevista con cada
responsable de Programa, a la que los acompañamos, guiando la
conversación hasta poder definir el proyecto, luego de haber
sido ilustrados sobre la realidad que preocupa y ocupa a los
mismos.
Paso seguido, la interacción entre
responsables del Programa – alumnos – profesores para
plasmar el proyecto viable de ser financiado por el Estado y
concretado por el Programa.
Esto significó hacer y rehacer; buscar,
cotejar, confrontar, trabajar interdisciplinariamente,
compromiso de alumnos y profesores, pocas horas en el claustro,
mucho tiempo en la ‘comunidad’, caminar los pasillos de los
Ministerios y otros organismos del Estado.
¿Cuáles son los objetivos de tanto esfuerzo
y despliegue?
- Que los alumnos se confronten con "la Argentina doliente",
que como politólogos, tendrán que dirigir en un futuro
inmediato;
- Que aprendan a conocer la dinámica burocrática del Estado;
- Que aprendan a trabajar interdisciplinariamente, que es el nuevo
paradigma del mundo laboral.
A tales objetivos, le sigue como consecuente,
que los trabajos prácticos realizado desde la cátedra, no sean
‘letra muerta’ que luego de aprobado va a parar a una caja
que 10 años después se tira. Aquí los trabajos prácticos se
concretan, sirven, ayudan, se hacen realidad.
El alumno, desde la Universidad, "comienza
a ser útil a la comunidad".
¿Qué es lo que aprenden?
Tal vez a hacer un proyecto. No es ese el
único objetivo. El Estado tiene formularios pre –
establecidos e instructivos para llenarlos. Se los conoce, se
infiere la intencionalidad. Hay poco para aprender en esto.
En otros casos se les provee de modelos: el
del PNUD, Ander – Egg, lo que aportan los
Asistentes Sociales, el Esquema de la Acción del Dr.
SANTIAGO, etc. Son instrumentos, no un objetivo de la
Cátedra.
Con relación a los proyectos y sus
instructivos, tienen que negociar excepciones, buscar
alternativas, consensuar, presentar la realidad como el oferente
de recursos lo exige. Esto es un buen ejercicio político.
Además ven de cerca la realidad que nos
rodea, la cual muchas veces no podemos o no queremos ver.
Si bien es cierto que el trabajo con el
emergente social es propio de otras disciplinas, tales como el
Trabajo Social, la Psicología, etc., el Politólogo NO puede
desconocer:
 | Como se vive en una Villa, quienes y en qué condiciones
trabajan los que se ocupan de esa realidad; |
 | Las causas y consecuencia de los chicos en situación de calle; |
 | Por qué hay adultos durmiendo bajo un cartón; |
 | Qué sucede en nuestras cárceles; |
 | Cuales son las premisas ideológicas de quienes operan en lo
social. |
El Sistema Político Argentino tiene en la Constitución
Nacional su sustento: derechos, deberes, garantías, pactos
y convenciones internacionales que marcan el sendero que se debe
seguir para alcanzar el tan mentado Bien Común.
Pero la realidad a veces parece
contradecirlo. El Bien Común se ve postergado por la
satisfacción de algún bien particular.
La Constitución es violada o desoída a
diario. Vemos injusticia social por doquier.
Desigualdad, discriminación, odios,
desencuentros... esta es la realidad. Aquí es donde nuestros
alumnos deben formar su "experiencia moral"
para que mañana, profesionales de la política (¿Podemos decir
profesionales en la búsqueda del Bien Común?) sepan discernir
"sobre si conviene o no hacer tal o cual cosa".
Resumen de la actividad docente que se
desarrolla a estos efectos.
Creo que ha quedado explicitada, pero tal vez
la siguiente enumeración sirva como resumen:
- Acordar con Secretaría de Culto de la Nación;
- Coordinar acciones con CARITAS Buenos Aires;
- Visitar cada uno de los Programas, interiorizarse sobre su
situación, combinar las acciones con los representantes del
Programa;
- Transmitir las consignas a los alumnos, consustanciandolos con
los objetivos;
- Capacitar a los líderes de proyectos;
- Acompañar a los alumnos en las visitas a los Programas,
guiándolos en la búsqueda de la problemática concreta a
trabajar;
- Trabajar con los alumnos en la búsqueda de los recursos;
- Buscar las herramientas que sirvan a cada proyecto, para que los
alumnos puedan moverse con los elementos necesarios;
- Concretar las negociaciones ante la Administración Pública,
como etapa superadora a la que emprendan los alumnos;
- Mantener los canales de información hacia los titulares de
cátedra, CARITAS, Secretaría de Culto, y el Servicio
UNCION.
Para ello:
- No hay horarios fijos;
- Se requiere tener conocimiento en materia social;
- Se requiere indagar sobre lo que no se sabe;
- No escatimar reuniones con los responsables de los Programas,
los alumnos, las contrapartes, Etc.
- Como las horas de clases no son suficientes, hay que preveer la
posibilidad de reunirse con los alumnos fuera de cátedra.
¿Qué se concretó con estas acciones?
- La capacitación de un grupo de madres solteras en Villa 21, que
a la vez que aprenden a cocinar, ayudan a dar de comer a un grupo
de ancianos carenciados;
- Se dejó preparado un Plan Trabajar para proveer de mano de obra
para la construcción de un centro comunitario en Gral.
Rodríguez, Pcia. de Bs. As.;
- Un PEL Productivo para un grupo de ambulantes, que les dará la
oportunidad de pasar a ser ex ambulantes;
- El aporte para 15 operadores de Ciudad Oculta, a través
de un Plan Trabajar – Desarrollo Comunitario;
- La comercialización de las artesanías producidas por detenidos
en la Unidad de Devoto, cuyos frutos cubren necesidades de sus
familias;
- La oportunidad para que detenidos en Devoto, en condiciones de
gozar de salidas laborales (como lo establece el Régimen de
Progresividad), puedan concretarla;
- Repetir la experiencia del Programa "San Francisco"
en otras parroquias de la Ciudad de Bs. As.;
- Colaborar con la búsqueda de recursos para un hogar regenteado
por la Iglesia Evangélica;
- Permitir que la comunidad Mapuche también tenga acceso a
los Programas del Ministerio de Trabajo;
- Armar un Programa Deportivo Integral en Villa 21, con aportes de
empresas privadas y el Estado, que abrirá nuevas oportunidades
para los 1000 chicos que se agrupan en torno a la Parroquia y sus
Capillas;
- Colaborar en la puesta en marcha de un Microemprendimiento que
dará capacitación y salida laboral a ex ambulantes,
integrándolos en forma total a la sociedad, dándoles las
soluciones impositivas y de seguro social que se requieren. Para
ello se acordó entre: CARITAS, SIPAM; D.G.I., Ministerio de
Trabajo, PAMI, ANSSES, Secretaria de Culto, Gobierno de la Ciudad
de Bs. As., Fundación U.O.C.R.A., con al participación de
alumnos y profesores de ésta Universidad, en el marco de una
cátedra, con nota para un parcial.
¿Cuál es el significado de esto?
- Son hechos políticos.
- Responden a un mandato que ORTEGA Y GASSET le hiciera a los
argentinos ya hace tiempo: IR A LAS COSAS.
|