IKKI (FENIX):  Hermano  mayor  de  Andromeda  Shon,  el  Caballero  del  Fénix  es  el  más poderoso de los Caballeros de Bronce.

Cuando  eran  niños,  La Fundación eligió a Shon  para el viaje hacia la Isla de la Reina  Muerta con la finalidad de que combatiera por conseguir la Armadura del Fénix,  pero  Ikki reclamó su derecho como hermano  mayor y  afirmó que tomaría su lugar en el viaje;  con la intención de proteger a su hermano.

Durante 8 años Ikki soportó el infierno que significaba luchar buscando el odio y la muerte, eso era  el  objetivo  fundamental de  su  diabólico  tutor;  que llegase  a  despertar  en  él  un   odio infinito  hacia  su maestro,  hacia su hermano,  hacia el patriarca y hacia la humanidad entera.

Ikki se resistía a aceptar  semejantes  condiciones,  él aún creía que podía  dominar al Fénix sin aquel sentimiento abominable y ahora  más que nunca, ya que había conocido a Esmeralda;  hija de su maestro y a la cual  amaba de una manera muy  especial.  Al término  de los  ocho años,  su maestro le comunicó que debería luchar en su contra al amanecer del día siguiente y que si no lo derrotaba no habría oportunidad alguna de alcanzar al Fénix.

Al amanecer,  Ikki  combatió  fieramente  contra  su  maestro,  pero  cuando  pensó  que  iba  a matarlo se detuvo al instante.  El maestro,  furioso  por  el  acto  de Ikki lo atacó sin compasión alguna hasta arrojarlo al suelo.

Esmeralda que observaba las acciones de su padre, interviene en la lucha tratándo de proteger a Ikki, pero su padre la hiere mortalmente sin compasión.

Ikki,  tomando  a  Esmeralda  en  sus  brazos,  lloraba  mientras  ella le rogaba que obtuviera la armadura  o de lo contrario su muerte sería en vano.  Al  morir  Esmeralda,  emergió  de Ikki un odio  inimaginable  hacia  su  maestro,  odio  que  significó  la  victoria y el dominio final de la voluntad del Fénix.

Tiempo  después,  al ser  derrotado  por  Seiya  y el poder de  la   Armadura de Sagitario,  Ikki comprende nuevamente el significado verdadero del valor y la amistad, decidiéndo traicionar a los Caballeros Negros y al Santuario.

Resultando  herido durante el combate con el Caballero Negro del Fénix, se retira al Volcán Sagrado en la Isla de la Reina Muerta para restaurar la Armadura. Ikki está  plenamente seguro de que todo ser humano puede forjar su  destino si posee coraje e inteligencia.

Al  terminar  su  recuperación en el  Antiguo Volcán,  Ikki  es  atacado por  Shiva y  Agora,  los cuales  se  encontraban  respaldados  por  el  cosmos  de  Shakka, que era  enviado a distancia desde el Santuario por el poderoso Caballero.

No obstante, Ikki derrota a ambos caballeros con la ayuda de Atena y llega a tiempo para salvar a sus amigos y a su hermano Shon en la Casa de Virgo.

Durante  la increíble y  sangrienta batalla contra Shakka,  Ikki pierde los seis sentidos,  la vista, el olfato, la audición, el tacto, el habla y la intuición.

Sin embargo,  era  solo una  decisión  desesperada  para lograr que  Shakka  abriera sus ojos y debilitara su cosmos interno.

En el ultimo momento Ikki comprende el origen del Septimo Sentido,  por lo que magnifica su cosmos a tal intensidad que envuelve el cosmos de Shakka,  destruyéndo por completo la Casa de Virgo y desapareciendo súbitamente sin dejar rastro alguno.

Horas  después  Ikki  regresa  en  compañía  del Caballero Dorado de Virgo a  través del  portal creado por Mu.  Al entender el motivo por el cual Shakka lo había ayudado se dirige hacia la Sala del Maestro para ayudar a Seiya.

Fenix  utiliza su gran poder para combatir a Arles,  que intenta arrojarlo a otra dimensión; pero es evadido por Ikki que utilizando sus alas de Fenix,  cruza el portal nuevamente  atacando  sin vacilación a la reencarnación del Mal.

Arles,  al ver que el tiempo  se agotaba y que no podía  vencer al  Fenix,  utiliza su  poder  para destruir los pilares del templo, (por lo que Fénix se ve en  dificultades  para esquivar los  fragmentos de columnas  y  rocas que se le venían encima) y  se lanza en  persecución de Seiya, que estaba a punto de llegar al Escudo Sagrado.

Pocos minutos después,  y  al tiempo que Athena logra  recuperarse,  Ikki logra llegar a tiempo para salvar a Seiya de Saga, quien se encontraba a punto de quitarle la vida definitivamente.

El Caballero del Fénix advierte a  Gémini que no podrá matar a Seiya mientras él esté con vida, y se prepara para continuar el combate.

Después  de  golpear  en   repetidas  ocasiones  al  Caballero   Dorado,   Ikki  finalmente  es alcanzado por el poder de su oponente,  el cual destruye  completamente su armadura y  lo deja mal herido.

Cuando  Saga  se  dispone  a  matar a Seiya y a Ikki,  es detenido por un rayo de Athena, la cual había cruzado las doce casas del zodíaco con la misión de ayudar a sus leales guerreros.