Soneto |
Para ver si sus ojos eran cuales La fama entre pastores extendía, En una fuente los miraba un día Dórida, y dice así, viendolos tales: “Ojos, cuya beldad entre mortales hace inmortal la hermosura mía, Cuáles bienes el mundo perdería Que a los males que daís fuesen iguales? Tenía, antes de os ver, por atrevidos, Por locos temerarios los pastores Que se osaban llamar vuestros vencidos; Mas ahora viendo en vos tantos primores, Por mas locos los tengo y perdidos Los que os vieron si no mueren de amores.” |
Gutierre de Cetina |