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Artículo principal
Nuestro Presente
Debemos saber que el Presente
es siempre un punto de partida y este acercamiento una oportunidad única, si
siente la necesidad de aprender a investigar para descubrir la Realidad y poder
así participar en la Obra Creadora.
Cada cosa creada tiene una función. El hombre, que es creación, también la
tiene.
Descubrir quién es y para qué está es su única Realidad: “lo que conoce
más lo que no conoce”.
Tenemos deberes, no derechos -
¿acaso no debemos la Vida?
La Vida es todo, y si creemos que la vida es un regalo o algo en lo que nosotros
estuvimos ajenos, entonces no se puede apreciar la Realidad.
Lo que cada uno es y lo que siente, es frente al para qué. Esa es la
respuesta que con seguridad debemos lograr.
¿Cuál es el trabajo? Lo primero es prepararse para ver. El primer deber:
VER. Conocer cada cosa y su ubicación justa en función del Propósito Creador y
que todo lo que nos rodea está en el mismo Propósito en distintas etapas.
El trabajo de evolución no es “crear situaciones”-todo está creado- Hay que ver
cada situación como el momento oportuno para tomar las decisiones correctas.
No podemos cambiar el Pasado, pero sí podemos programar el Futuro, y así ser
dueños de nuestro destino.
No es fácil, pero sí simple.-
"Vivamos hoy como queremos vivir
mañana"
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Para pensar y
sentir...
¿Chofer o Auto?
La relación del hombre con el Propósito Divino surge
cuando se genera en él la inquietud de saber quién es y para qué está. Si
no es así, nos quedamos una vez más en lo evidente, en la forma.
Estamos viviendo en un mundo caótico con una total ausencia de “valores” y en
estas circunstancias, la Ciencia presume por el descubrimiento del genoma
humano, hasta el punto de pensar que se podría programar un hombre perfecto,
cuando sólo se ocupa del contenedor, sin tener en cuenta el contenido.
¿Cómo se ensambla este descubrimiento con el Propósito de la Creación?
El hombre no ha tenido hasta ahora la inquietud de la comprobación de la
relación de este descubrimiento con el Propósito Divino. Evidentemente que si se
ha descubierto una relación genética, no se ha hecho nada más que desmenuzar un
medio, no un fin.
Con esto queda al descubierto que a través del tiempo, y en una actividad
totalmente divorciada de la Realidad, se ha logrado dañar este programa, y que
ahora, mediante la ingeniería genética se quiere recomponer.
Para entender esto decimos: que el cuerpo es un vehículo como el auto, por un
lado de gran utilidad y en el otro extremo de gran peligrosidad. Lo útil y lo
destructivo del vehículo, depende de quién lo conduce.
¿De qué vale hacer un auto perfecto si el conductor es el mismo? no tiene
rumbo, no sabe para qué es el auto y cuando lo usa a su antojo, tenemos una
situación más grave aún.
¿Es el hombre el cuerpo? ¿Es el hombre el conjunto de
vísceras? ¿Es el hombre esta cibernética?
“No es más que un medio de la manifestación del ser”.
La propuesta del Plan Divino fue y sigue siendo la misma: “todo aquél que se
ajuste a lo propuesto tiene la posibilidad de ir aparejando condición con
medios”, o lo que es lo mismo, abandonar el camino de rebeldía para adecuarse al
Propósito que lo hizo nacer y convertirse en garantía de Continuidad de la Obra
Creadora.
“Querer ser, es capacitarse para ser elegido semilla
de una nueva generación”.
El compromiso es de cada uno.-
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