Hablando con la luna

 

Hoy te admiro y luces más radiante que nunca,

luces tan bella y clara que me inspiras confianza,

ha de ser porque mis ojos hoy ven sólo bello

y es de eso amiga delo que hoy quiero hablarte.

 

Ella llegó hoy a mi vida

luego de haber paseado por ella,

luego de haber recorrido mi mente

marcandose en mí sin dejar huellas.

 

Dejando solo una duda,

dejando una puertita abierta,

una posibilidad, una esperanza

un tal vez sin certeza.

 

Eso fue antes luna,

mucho antes de conocerla,

de saber en realidad quien era,

la persona más dulce y bella

la que se apoderó de mi alma y mi vida entera.

 

Luna te confiezo que la amo,

que me encanta cada gesto,

cada detalle y movimiento

que se desprende de ella cuando la beso.

 

Con solo mirarla leo su mente,

puedo ver en sus ojos los sentimientos,

puedo leer en us labios el deseo

sin pronunciar palabras en ningún momento.

 

Cuando me toca siento que me quemo entero,

que un fuego ardiente me consume por dentro,

y con solo una caricia, un beso ,

me transmite su sentir sincero.

 

Hoy amiga luna me llegó el amor de improviso,

sin duda fuiste tú quien lo envió, pues ya te lo había pedido.

Me lo entregó un ángel uno ya conocido,

al que he amarrado a mi alma para que siempre se quede conmigo.

 

Gracias luna, pues escogiste bien la persona

aunque creo que nunca te pedí tanto,

por favor me lo agradeces a Dios de paso

y que me regale este angelito que me ha prestado.

 

Copyright © 2003
Escrito por:  Luis O. Malavé

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