Edit. #26, Otro fiasco en Dominicana
Félix López, El Diario la Prensa                                       NYC        09/12/05


Es denigrante la forma en que los ex-discípulos del Prof. Juan Bosch se inventan proyectos y privatizan propiedades y patrimonios del pueblo dominicano antojadizamente. Primero regalaron parte de nuestro litoral para la construcción de una isla artificial frente al mar caribe, proyecto este, que desde ahora debemos considerarlo como el “Nueva York chiquito” que nos tiene ofrecido Leonel.

Ahora se destapan con “otro gran e importante proyecto” que nos conducirá según estos genios iluminados, a transitar hacia el siglo veintiuno por los senderos del “desarrollo” y el “progreso`”. Me refiero nada mas y nada menos que a la venta casi regalada de la bahía de Sans Souci a una empresa totalmente desconocida, y cuyos principales accionistas, ululan sobre las sombras.

Vender este patrimonio por friolera suma de 29 millones de dólares es una burda falta de respeto a la sensatez del pueblo dominicano, quienes ilusionadamente depositaron su confianza en ellos, para que los sigan engañando. Es absurdo que la compra de un terreno donde el supuesto grupo comprador piensa invertir mas de 400 millones de dólares, tan sólo pague 29 millones de dólares. En 29 millones de dólares vendió el magnate de los bienes raíces de Donald Trump un apartamento en un lugar exclusivo de Manhattan, que por más exclusivo que sea, no creo que este apartamento tenga igual valor que el área de Sans Souci.

Debemos responsablemente parar los pretensiones entreguitas de Leonel. El profesor debe estar revolcándose en su tumba cuando los leonelistas exclaman su nombre y hacen campaña al mejor estilo balaguerista, cuando entregan las famosas “funditas” no con el “vuelve y vuelve” impreso si no con la propaganda mentirosa de que “e’ p’alante que vamos”.

Decía nuestro prócer Juan Pablo Duarte “mientras no se escarmiente a los traidores como se debe... los buenos y verdaderos dominicanos seguiremos siendo víctimas de sus maquinaciones”.

Félix López vive en El Bronx, N.Y.