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INTRODUCCIÓ A LES TAULES RODONES

Introducció a les Taules Rodones

La sociedad de estos comienzos del Siglo XXI es, sin duda, la sociedad de la información y de la globalización. Ello trae consigo cambios continuos cada vez más acelerados. Como todos los organismos sociales, la Universidad Española está inmersa también en el proceso de cambio, debido no sólo al contexto general sino también a parámetros propios como son la entrada en vigor de la nueva Ley Orgánica de Universidades y la integración de los estudios de las distintas universidades europeas siguiendo las directrices de Bolonia. Así pues, tanto el marco general de una sociedad en continua evolución como los dos hechos citados, obligan a la Universidad Española a entrar en un proceso de reflexión profunda para adaptarse a las nuevas necesidades. Por si ello fuera poco, en el caso particular de las carreras científico-técnicas, la actual situación y evolución de la enseñanza secundaria obliga a un esfuerzo suplementario, dado el descenso de nivel que se ha experimentado en la formación de los alumnos procedentes de bachillerato en lo que respecta a su formación científico-tecnológica. En este punto, cabría añadir que también se entra en una época de cambio y reflexión dada la inminente puesta en marcha de la nueva Ley de Calidad de la Enseñanza. Es indudable, pues, que se está viviendo una época de profundos cambios, que obliga a buscar respuestas.

En el caso de la Ingeniería Química, estos retos se acentúan todavía más, fundamentalmente por dos razones, ambas relacionadas con el ejercicio profesional del futuro Ingeniero Químico pero con significados distintos. La primera de ellas tiene que ver con la formación intrínseca que debe poseer el futuro Ingeniero Químico. Es evidente que esta formación debe comprender todos aquellos aspectos relacionados con la Ingeniería Química de siempre pero, además, debe ser capaz de integrar aquellos otros aspectos que van a ser clave a corto y medio plazo. Desde este punto de vista, hay que tener en cuenta que el futuro de la sociedad actual pasa, más que nunca, por el desarrollo sostenible y, por tanto, el futuro Ingeniero Químico, como pieza básica de la Industria Química, debe tener profundamente integradas en sus conocimientos aquellas cuestiones ligadas con este tema. Esto quiere decir que, además de la formación técnica en aspectos relacionados con el medio ambiente y la seguridad, debe conocer también todo aquello relacionado con los aspectos de gestión de calidad, de la seguridad y medioambiental.

Decíamos que el futuro Ingeniero Químico tenía dos retos, el primero es el que se acaba de describir. El segundo se circunscribe más al caso español y es el que hace referencia a la colegiación o asociación del nuevo Ingeniero Químico. Dada la inexistencia de un colegio profesional propio, a los nuevos ingenieros se les abre una baraja de posibilidades entre las cuales deben elegir aquellas que sean más convenientes para sus intereses y los de la sociedad donde van a ejercer su profesión, sin descartar modelos ya ampliamente experimentados y de larga tradición en otros países, como podría ser el caso de Estados Unidos o Inglaterra.

Ante este panorama, la Mesa Redonda del Jueves sobre Enseñanza de la Ingeniería Química del próximo IX Congreso Mediterráneo cobra, si cabe, más relevancia que nunca como foro de debate y reflexión. Considerando lo anteriormente expuesto, este debate podría centrarse en tres líneas básicas, que coincidirán, además, con las ponencias que se van a presentar:

1)     El primer tema se centraría en el papel actual de la Universidad en la formación de Ingenieros Químicos, es decir, cómo se adapta al nuevo estudiante de bachillerato que llega a la Universidad y cómo se va modelando hasta llegar al Ingeniero Químico que necesita la sociedad, integrando en su formación aspectos claves como los relacionados con el desarrollo sostenible.

2)    El segundo tema tiene que ver con la integración europea y, por tanto, con la remodelación necesaria de planes de estudios según las directrices de Bolonia y con la introducción del crédito europeo, cosa que representa un cambio considerable en la manera de proceder actual tanto de profesores como de estudiantes.

3)     Por último, el tercer eje pasa por definir el tipo de asociación profesional que requiere el nuevo Ingeniero Químico en España, mirando no sólo a un futuro inmediato sino también a más largo plazo.

La Mesa Redonda del Viernes por la mañana servirá para profundizar en el tema de las asociaciones en España, su organización, sus objetivos y el problema actual de las atribuciones profesionales. Para esta mesa está prevista una gran afluencia de gente de toda España, de los medios de comunicación y seria una buena forma de dar a conocer nuestra problemática.

Los ponentes, aún no concretados, irían en la línea de mostrar como se estructuran asociaciones de IQ en el resto del Mundo (modelo AIChe, Icheme, ...), un ponente con perfil de abogado, y un par de representantes de las asociaciones más dinámicas de España.