Rusia y la devaluación de su moneda
Por Carlos
Aquino Rodríguez
Dr. en Economía
[Regresar]
Rusia, el otrora gigante del comunismo, está pasando por una crisis económica que lo obligó a que acuda al Fondo Monetario Internacional y este le dé un préstamo de 22 mil millones de dólares. Sin embargo, los problemas internos de la economía rusa y los efectos de la crisis económica de los países asiáticos están haciendo que a pesar de esa ayuda del FMI, se apueste cada vez con mayor fuerza por una mayor devaluación de la moneda rusa, el rublo (a pesar de que la moneda se devaluó ya en un 15% el 17 de agosto). De persistir la presión devaluatoria contra la moneda rusa, sumándose a la presión devaluatoria sobre el yen japonés, y la posibilidad de una devaluación de la moneda china el yuan, entonces la economía mundial sí se enfrentará a un período de inestabilidad financiera y económica.
Los problemas económicos de Rusia
La economía rusa enfrenta el problema derivado de la transición de un sistema comunista a uno capitalista; complicada, además, por las peculiaridades de su economía. Las reformas económicas, introducidas de 1989 en adelante que dejaban atrás su sistema de economía estatal, han producido hasta el momento tasas de crecimiento negativo de su economía. De 1990 a 1997 la economía rusa tuvo un crecimiento negativo anual promedio de -7.7%. Esto, aunado a la inestabilidad política y la falta de un completo sistema jurídico para el desarrollo de la actividad económica y defensa de la propiedad empresarial, hace que el Estado se vea incapaz de recaudar suficientes tributos para su normal funcionamiento. Ante esto el gobierno ruso ha emitido bonos del Tesoro, en rublos, que pagan altísimos intereses, para financiar sus gastos. Se calcula que se ha emitido el equivalente de alrededor de 70,000 millones de dólares (a la tasa oficial de comienzos de agosto de 1998 de 6.3 rublos por dólar) de bonos del Tesoro que en el último mes ofrecían una rentabilidad anual de 149% (una tasa altísima pero necesaria para atraer financiamiento). Justamente el temor de que Rusia no pague esta abultada deuda está forzando la desconfianza en su economía. Asimismo, los ingresos por exportaciones que Rusia obtiene, principalmente de su gas y el petróleo, están muy por debajo de lo planeado, pues el precio de estos productos ha caído en casi 40% desde el año pasado. También su Bolsa de Valores ha caído más del 70% desde su pico en octubre de 1997.
¿Por qué el Estado ruso no puede recolectar suficientes impuestos?
La respuesta está en que los individuos y las empresas en Rusia no quieren pagar impuestos. Muchos subvaluan sus ingresos reales para evitar pagar impuestos, o sencillamente no pagan. Lo más serio es que Rusia se ha convertido en una economía en que los negocios se hacen al trueque. No se utiliza efectivo, se vende mercancías a cambio de otras mercancías. Por ejemplo, Gazprom, el gigante ruso del gas y que debe al Estado más de 2,000 millones de dólares en impuestos (para algunos la figura es el doble), dice que no puede pagar esos impuestos pues nadie le paga en efectivo por su gas. Vende gas a las empresas y se cobra con productos de esas empresas. Se cobra con autos de la compañía automotriz, en aviones de las compañías de aeronáutica, etc. Mientras tanto los individuos y familias, que no tenían tradición de pagar impuestos bajo un régimen comunista, ni siquiera declaran sus ingresos. Se calcula de que de los 150 millones de ciudadanos rusos, sólo 5 millones presentaron su declaración de ingresos ante la Autoridad Tributaria.
La economía de trueque alcanza a los mismos trabajadores. Se calcula que en 1996 el 15% de los salarios fueron pagados en especie y la cifra debe de haber aumentado al doble en 1997. Esto también crea otros problemas aparte de que estos trabajadores tampoco podrán pagar sus impuestos. Por ejemplo, pescadores de la Flota de Arrastre de Preobrazhensk en Primorskii Krai eran pagados regularmente en vodka. Ante esto las esposas de estos pescadores acusaron a Preobrazhensk de "deliberadamente volver adictos" al vodka a sus esposos mientras las familias no tenían suficiente dinero para comprar alimentos.
¿Qué puede ocurrir de haber una mayor devaluación de la moneda rusa?
De ocurrir una mayor devaluación de la moneda rusa habrían grandes perdedores, tal como los inversionistas extranjeros que han comprado bonos del Tesoro ruso en rublos y verían disminuir su inversión. Pero el problema más grave es que muchas empresas y bancos rusos tienen deudas en dólares y de devaluarse el rublo se les hará más difícil el pago de sus deudas. Por ejemplo, el mismo Gazprom se calcula tiene 9,000 millones de dólares en deuda externa. Y lo peor es que con una devaluación del 50%, por ejemplo, se dice podrían quebrar todos los bancos rusos excepto el Sberbank, el banco estatal de ahorros.
Asimismo, una devaluación ocasionaría una gran inflación pues se calcula que las importaciones comprenden un 25% de los alimentos y productos de consumo del pueblo ruso.
El impacto más grave de una devaluación sería el pánico financiero en Rusia y también en los países vecinos como Ucrania y Kazakhstan. La situación social se tornaría difícil y las reformas económicas de Yelstin podrían ser revertidas.
¿Qué puede Rusia hacer para evitar el colapso?
Primero, forzar la recolección de impuestos de las empresas e individuos. Sólo de esta forma el Estado ruso no se verá en la necesidad de depender de la emisión de más bonos del Tesoro para financiar sus gastos. Esta gran deuda interna, y el cómo pagarla, es el principal problema económico de Rusia.
Segundo, para reforzar lo anterior se debe simplificar los numerosos impuestos existentes en Rusia. Se calcula que las empresas tienen que pagar más de 120 tipos de impuestos. Impuestos del Gobierno Central, de cada Estado de la Federación Rusa, en fin todo un sistema muy complicado que da como resultado que nadie pague ningún impuesto.
Tercero, se debe reforzar el sistema jurídico de defensa de la propiedad pues sólo así se logrará un desarrollo de sus empresas. El sistema jurídico actual permite que los directivos de las empresas descapitalicen, o roben en forma abierta, los activos de las empresas, trasladando estos activos a otras empresas. Esto impide también que el Estado pueda fiscalizar los ingresos de las empresas y así cobrar los impuestos.
Los problemas que enfrenta Rusia actualmente tienen su origen en la forma como Rusia emprendió sus reformas económicas hacia el capitalismo. Esto lo podemos ver claramente si comparamos el comportamiento de la economía rusa con otro miembro del antiguo sistema socialista que también está transitando a una economía capitalista, la economía china, que hasta el momento ha mostrado altas tasas de crecimiento económico desde que emprendió sus reformas económicas en 1979.
¿Por qué Rusia tiene problemas en su transición al capitalismo y China no?
Desde que Rusia comenzó a dejar su sistema socialista en 1988-89 y empezó a implementar reformas económicas, ha tenido muchos problemas y su economía ha esta decreciendo en forma continua. De 1989 a 1997 tuvo un crecimiento promedio anual de -7% anual, aunque creció un 0.8% en 1997 (el único año de crecimiento positivo, pero decreció otra vez -0.2% en los primeros cinco meses de este año 1998). En contraste, China, que desde 1979 aplica reformas económicas, ha tenido un crecimiento económico continuo, de 1979 a 1997 (19 años seguidos) en promedio de casi 10% anual. ¿Por qué China crece y Rusia no?
Razones para un crecimiento económico divergente:
En Rusia, en cambio, el comunismo ya tenía 70 años de existencia cuando empezaron las reformas económicas en 1989. La revolución bolchevique que empezó en 1917 mató la iniciativa privada de hacer negocios existente en el pueblo ruso y eliminó también el sistema legal y jurídico necesario para que el sistema capitalista funcione (sistema jurídico que aún no se logra establecer plenamente). El sistema de controles y permisos en una economía centralizada como la rusa alimentó la economía informal, de pago de comisiones y sobornos para conseguir algo que era difícil conseguir por los medios legales. Así nace también la mafia rusa, que según algunos análisis controla parte importante de la economía rusa (ver artículos, como los de la revista del Banco Mundial "Transition", de abril de 1994, febrero, abril de 1997 y junio de 1998).
En Rusia en cambio las reformas empezaron primero con la apertura política "glasnost", y luego la "perestroika" o reformas económicas. La apertura política abrió una Caja de Pandora de conflictos internos (étnicos, regionales, etc.) que derivó en la desintegración de la Unión Soviética y la inestabilidad social existente ahora. Además, no hubo mayor gradualismo en la aplicación de sus reformas económicas, con la privatización de muchas de sus empresas públicas y el retiro del Estado de muchas actividades económicas. Al haber sido el sistema de economía comunista ruso más extensivo e intensivo que en China, abarcando todos los aspectos de la vida del ciudadano ruso, su trabajo, educación, vivienda, etc. el traslado de estos servicios al sector privado ocasiona problemas derivados de la etapa de transición. Se calcula que como consecuencia de esto (y de la contracción de la economía desde el comienzo de las reformas) el nivel de vida del ciudadano ruso medido por su ingreso real ha caído un 40% desde 1991 (el PBI en 1997 es un 55.2% de lo que era en 1989 –datos de la revista "Transition" de junio de 1998).
Rusia recibió el año 1997 sólo 3,900 millones de dólares de IED, y esto fue un 90% más que el del año 1996. Rusia es aún un lugar inestable para los inversionistas extranjeros y no tiene como China una comunidad en el exterior que pueda invertir en su país. Además, un inversor potencial en la explotación de sus recursos naturales como Japón no invierte por problemas políticos derivados de la ocupación rusa de unos territorios reclamados por los japoneses como suyos.
Artículo publicado
en el Diario El Peruano,
el 20 de Agosto de 1998.
Lima, Perú.
Inicio |
Ir
a Actividad Académica |
Ir
a la Página Principal |
Libros Publicados |