Principios
de la filosofía andina LA
DUALIDAD COMPLEMENTARIA Y LA OPOSICIÓN PROPORCIONAL[1]
Por: Javier Lajo Una respuesta a la pregunta de los que se inician en la
escuela de la Qhapaqkuna[2],
sobre ¿Cuál es el abc de la filosofía andina?,
la podemos comenzar a explicar por ejemplo, si buscamos en el
origen de Manco Cápac y Mama Ocllo, que como todos sabemos fue la gran
pakarina o lago sagrado del Titicaca,
líderes de los pueblos de navegantes y pescadores que surcaban
el lago, según Huaman Poma fueron integrantes de la estirpe de los
“Amaro Runa”, y es muy seguro que allí en el lago sagrado
construyeron en algunas islas o dentro del mismo lago, algunos
“artefactos” o herramientas culturales que nos han dejado como una
guía para nuestra educación. Analicemos
algunas encontradas en la isla de Amantani,
pues es imprescindible para los hombres andinos saber
claramente en qué se diferencia nuestra filosofía andina de la filosofía
occidental-colonialista. Aquí me voy a referir a la isla de Amantani en nuestra
pakarina mayor, en donde hoy mismo existe el culto y los Templos o
plazoletas hundidas, u “horizontes artificiales”
que servían como observatorios; la plazoleta cuadrada o
“Pachatata” y la circular o “Pachamama”; instrumentos de
observación astronómica solar-diurna y estelar-nocturna
respectivamente; que expresan la dicotomía cosmogónica andina y que
sirvieron en algún momento de nuestra historia para la observación
astronómica, la construcción de calendarios y la conceptualización y
control del tiempo, pero siempre en forma binaria, dicotómica,
complementando y confrontando proporcionalmente las dos partes que
forman lo existente. PACHAMAMA y PACHATATA de la Isla Amantani del lago Titicaca[3]
Artefactos similares, pero mucho mas evolucionados en
su simbología y en su funcionalidad los tenemos también en los
Templos del Hanan Qosqo o “Muyucmarka” en Saccayhuaman en
complemento con el Templo del Urin Qosqo o Koricancha, ambos en la
ciudad sagrada del Cusco, templos que daban “soporte” religioso
y político a los dos líderes que encabezaban el “racimo” de
gobernantes que tenia la confederación concéntrica y binaria de los
Inkas. Ambos templos
ancestrales que nos hablan del culto al padre Wiracocha o
Pachatata (o padre-cosmos) y al culto de la madre Pachacamac o
Pachamama (o madre-cosmos), eran a la vez centros ceremoniales
religiosos y políticos de gobierno de un Estado “racimo”
compuesto por miles de Ayllus o familias extensas ordenados en el
sistema circular-concéntrico de la “Tawa”, cuyas estructuras
sociales y políticas según el científico Jhon Earls[1] fueron calibradas “a imagen y semejanza del universo
celestial”, al haber ajustado los ciclos sociales y políticos que
por su naturaleza son irregulares, de mayor entropía o de mayor
incertidumbre, a los ciclos astronómicos que son movimientos
regulares o de entropía cero. En este juego binario de templo cuadrado-solar y templo
circular-estelar, debemos descubrir sus relaciones o leyes de
complementación y proporcionalidad, si es que queremos entender
el conjunto de ambos
sistemas, y sobre todo de saber cómo funcionan juntos[2]. Uno de
los elementos de “ajuste” o relación de los dos sistemas es
indudablemente la diagonal de un cuadrado inscrito en un círculo,
puesto que esa diagonal es la línea de proporcionalidad entre los
lados de un cuadrado, y a su vez es también el diámetro que es el
único elemento de proporcionalidad con el perímetro del círculo. Precisamente cuando se
quiere encontrar el cuadrado y el círculo que tengan el mismo
perímetro, en realidad queremos encontrar la pareja perfecta o el
PAR-PRIMORDIAL que en el Qhapaq Simi o lengua Puquina –ancestro del
Quechua y del Aymara- esta representado por la pareja “illawi”[3]
o “Idolo” Puquina de Ilave, que
representa un varón mirando al oriente y una mujer mirando al
poniente, ambos envueltos de serpientes “coas” y “asirus”. Al encontrar esta relación de proporcionalidad de
la pareja-primordial, de la relación simbólica de “Pachatata” y
“Pachamama” surge la operación geométrica
de obtención de la cruz cuadrada o cruz del Tiawanacu, o Tawa-Chakana
que es una operación relativamente sencilla, pero que encierra los
secretos de la cosmogonía, filosofía y de las ciencias
andinas. Esta
cruz andina es la “Tawa-chakana” que significa precisamente
“cruz-puente” de comunicación entre uno y el otro cosmos, dado
que vivimos en un cosmos
PAR, o lo que es lo mismo: Existimos
en un “duo-verso”, que es un concepto diferente al monomaniaco y
excluyente “universo” de
la cultura occidental. En
este concepto “par” del cosmos binario y “su puente” que es la
Tawa-Chakana existe una ruta de interrelación que es el QHAPAQ
ÑAN, que esta marcada por la diagonal o “gran diagonal”
según nos ubiquemos en “uno” o en los “tres Pachas”[4].
Esta “ruta”, escuela
o disciplina hacia la perfección, es tal porque solo quien logra
entenderla y vivirla, es decir, cuando se logra encontrar la relación
y reconocimiento con EL PAR VERDADERO se adquiere la SABIDURÍA que es
el único PODER REAL de los seres humanos. A este “Par” los Incas
lo simbolizan como un “hermano mellizo” doble perfecto o de “oro
puro”: El Waukke; mientras los Mayas lo llaman: El Nagual.
Solo
actuando “de la mano con El Waukke” o el Nagual, se puede encontrar y sobre todo transitar el camino de la
justeza, de la corrección y de la exactitud.
Es decir, el camino de la sabiduría y de la paz que es el camino
de los Qhapaq, la ruta o
disciplina de los justos, de los correctos, de los exactos, de los
nobles; de
los hombres consagrados al cuidado del equilibrio del mundo, de la
vida y de la naturaleza, que es el método cosmogónico y escuela
vital de la ciencia andina.
[1] Earls, John. La Producción en el Antiguo Tahuantinsuyu. 1977. Lima [2]
No
comprender estas “razones de Par” nos puede llevar a pensar
como occidentales y decir con Nietszche: Y ¿quién ha
comprendido plenamente hasta qué punto son extraños, uno para
el otro, el hombre y la mujer? (Pág.170)... Dos cosas quiere
el hombre auténtico: peligro y juego. Por ello quiere a la mujer:
el más peligroso de los juegos. El hombre debe ser educado para
la guerra, y la mujer para el solaz del guerrero: todo lo demás
es tontería.(Pág.62). Federico
Nietszche. Así Hablo Zaratustra. Edit. La Oveja
Negra. Pág.63. [1] El presente artículo esta basada en una parte del libro: “Qhapaq Kuna...mas allá de la civilización”, de Javier Lajo, Editorial Grano de Arena, 2002; Cusco, Perú [2] Ver Quincenario “Ollanta” N° 15, Pag. 12, Artículo: “Lo sagrado de la Tawa-Chakana”. Lima, 2003. [3] Tomado de: “Pagando la Tierra: Un ritual en la Isla de Amantani” de Victor A. Rodríguez Suy Suy; 46° Congreso Internacional de Americanistas. fuente: http://www.quechuanetwork.org NOTA: Este articulo ha sido tomado de la fuente arriba indicada, su publicacion en esta pagina no significa que su autor SE IDENTIFIQUE NECESARIAMENTE con nuestras tesis, postulados politicos y programa.
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