Los meses de Octubre, Noviembre y Diciembre aquí son muy especiales. Creo que todo el año esperamos que llegue esta época.
Los inviernos son muy largos y la alegría de esta fecha hace que veamos con gusto la llegada de la nieve, porque no se concibe una navidad sin ésta.
Digo desde Octubre porque comienzan con "thanksgiving", o sea, el día de acción de gracias que es el tercer domingo de Octubre, distinta la fecha con USA. Las casas se adornan con espantapájaros, hojas otoñales, pumpinks (zapallos), etc. Ese día se festeja la llegada de los peregrinos a este país desde otras tierras y se agradece a Dios por lo recibido durante el año. Se prepara una cena muy especial a base de pavo y tartas de pumpkin.
Luego viene "Halloween" que es el día de las brujas, el 31 de octubre, también las casas se adornan de forma especial, con telas de araña, fantasmas colgados de los árboles, luces especiales y algunos también ponen sonidos macabros y hacen cementerios en el jardín del frente de las casas. Todo el mundo prepara sus disfraces para ese día, la mayoría de duendes, vampiros, monstruos, etc., y salen a pedir golosinas a las casas.
Y los mayores asisten a fiestas de disfraces en la noche tarde.
Al día siguiente de finalizar Halloween, empieza la navidad.
Las tiendas se llenan de luces de colores, de guirnaldas, de ornamentos de todo tipo y alargan el horario de atención al público para que todos puedan hacer sus compras de navidad con tiempo.
Los centros comerciales son un espectáculo digno de no perderse. Cada uno construye un lugar especial en donde estará Santa Claus hasta el día 23 para que los niños le pidan lo que deseen recibir, para sacarse fotos con él, y siempre reciben alguna golosina o alguna otra cosa de parte de Santa. Incluso algunos traen renos especiales para que el primer día que llega Santa Claus salgan los niños a pasear en el trineo. (Los niños tienen la posibilidad en este país de mandar una carta a Santa Claus por correo para pedir lo que quieren también, y nunca les falta la respuesta, que las dan voluntarios del mismo correo para que se sientan correspondidos).
Vienen niños de las escuelas y de lugares especiales, generalmente los fines de semana, a cantar villancicos, y algunos los hacen en varios idiomas.
Da gusto recorrer cada centro comercial para ver lo que han preparado, ya que cada año es distinto.
Esta es una época que difícilmente uno esté en casa.
Los precios de todo son sumamente acomodados y tienen ofertas muy especiales que uno no quiere perder. La verdad es que uno quisiera tener una valija de dinero en estos días...:).
El día 24 todo se cierra tempranito y la gente en sus casas se dispone a vivir esta fiesta. Sólo que prácticamente ese día sólo se tiene alguna cena especial y se van a dormir tempranito, a menos de que vayan a algún restaurant que hacen la fiesta en la noche.
El 24 es para cantar villancicos y para armar el árbol de navidad entre toda la familia (siempre que la gente puede, coloca árboles reales que se venden muy baratos en todos lados, pero éstos pierden las agujas, para lo cual ponen una alfombrita especial debajo, y además corren peligro de prenderse fuego si hay algún corto circuito...las casas aquí son básicamente de madera y se prenden en segundos; éstos, los que son reales, amanecen el día 26 afuera para que los lleve un recolector especial, y muchos están completos, con adornos y luces), colocando al final la estrella que va en la punta del arbolito. Luego se apagan todas las luces y los niños arman gran algarabía al ver como se enciende en todo su esplendor.
Alrededor de éste se pone un trencito y las casitas que llaman de "Dickens" que son casitas representando la iglesia, los negocios, las casas de la gente, etc. y están todas iluminadas. Muy pocas casas arman pesebre. Pero éste es un país multicultural, así que cada uno sigue sus propias costumbres. Yo cuento más o menos lo que hace el canadiense nato.
En la noche del 24 todos se van a dormir tempranito para poder levantarse temprano al día siguiente (pero antes de irse ponen un vaso de leche y galletas (cookies) para Santa.
Una vez que amanece el día 25, primero van hacia el árbol a buscar lo que trajo Santa Claus (mientras prenden el horno para que se cocine el pavo), luego desayunan y se visten para ir a misa. A su vuelta comen el pavo relleno que ha sido especialmente preparado para la ocasión, con gravy (que es un salsa marrón espesa que se echa sobre la porción que se sirve a cada uno, hecho a base de maicena o harina, caldo de pollo o de pavo, el líquido que cae del pavo cuando se cocina y un poco de manteca). Al principio a uno le sabe extraño el gravy, mas con el tiempo se va acostumbrando y luego resulta imprescindible, incluso si hay papas fritas con el pavo, éstas también se sumergen en esa salsa.
También suelen colocarle cranberry sauce, que es una salsa dulce de color rojo, parecido a una salsa de frutillas.
El pavo lo corta el hombre más anciano de la familia, en lonjas finas. Tienen todo un arte para cortarlos!.
En la mesa se colocan nueces, castañas, avellanas, etc. El postre suele ser una torta o arrollado en forma de tronco, de chocolate, y adornada con muñequitos de Santa Claus, arbolitos, trineo, etc.
Si no se quiere hacer en casa, la venden en todos lados. Tienen ensalada de frutas también. Y además, tienen un budín hecho de muchísimas frutas abrillantadas, que llega a ser empalagoso de tan dulce. En estos día suelen hacer unas galletas de gengibre en forma de muñequitos de nieve o de arbolitos para los niños y para dejarle a Santa Claus. Y no deben faltar los "candy canes" que son como bastoncitos dulces de varios sabores.
En esta mezcla de almuerzo y cena, se reúnen todos los familiares.
Al día siguiente, está lo que se llama "boxing day", en donde todos los comerciantes ponen los artículos navideños y otras cosas a un valor muy mínimo y todos salen a comprar cosas para el año entrante. Ese día también es feriado aquí.
Toda la navidad es una tradición muy especial. Los árboles rebosan de regalos, algo que en mi país no he visto. Las casas están todas iluminadas y a veces los vecinos compiten para ver cuál es la más bonita. Suelen poner figuras representando un pesebre, o a Santa Claus con sus renos. He visto casas con más de ocho mil luces! y he visto vecinos muy enojados también porque el ruido es molesto e interfiere con las tv's...:)))))))). Pero el espectáculo es digno de verse!.
Muchas noches solemos recorrer barrios para admirar los adornos de cada casa, a partir de los últimos días de noviembre.
Adentro de las casas (en el techo o en lo alto), pero cerca de la entrada de la casa, se coloca lo que se llama "mistletoe" que es una especie de hongo parásito que crece en los árboles y que tiene una especie de uvas. Cada vez que una persona pasa por allí debe besar a la dueña o dueño de casa, según corresponda, debajo del "mistletoe" y sacar una de las uvas. Cuando estas uvas se acaban se acaban los besitos...:). La mesa se adorna con "poinsettias" que son unas plantas con hojas rojas muy decorativas.
La verdad es que aquí se vive con mucha alegría esta fecha y parece que el país entero se viste de fiesta. La gente se ve en las calles con mucha energía, llena de sonrisas y haciendo largas
filas para hablar con Santa Claus.
Este país, para esa fecha, hace muchas caridades con aquéllos que no pueden tener una cena navideña. Para esto están los llamados
"food banks" que recolectan durante todo el año dinero o piden ayuda, para tener pavos, frutas, verduras, manteca, gravy en cajas para ser preparados, huevos, pan, salsa de cranberry, etc. También tienen árboles, adornos, luces, y regalos: juguetes variados, ropa invernal, libros y golosinas. Entregan una caja con toda la comida en un día designado y en otro los juguetes.
Los periódicos, como el "Sun" y el "Toronto Star", juntan dinero y dan dinero en efectivo uno de ellos (lo suficiente para una cena de navidad y alguna otra cosita), y el otro arma cajas especiales, donde ponen un juguete, un pullover, guantes, medias, y un paquetito de golosinas, y lo reparten entre gente que se anota especialmente y que el gobierno avala como no pudiente. Esas cajas son hechas con un papel muy especial todo adornado y son muy bonitas.
Los comercios también aportan lo suyo para los food banks, y muchos de ellos colocan un pino de navidad con etiquetas que dicen: niño/a, la edad, las medidas y lo que más o menos necesita. Para los food banks hay que anotarse desde octubre y probar muy bien que necesitan ayuda, así que más o menos saben cuantos niños son y que precisan cada uno. De ahí pasan la información a los comercios para que pongan en esos árboles especiales.
Están colocados desde mediados de noviembre y uno simplemente va al negocio, retira el o los papeles que quiere, deja su teléfono y tiene que traer el regalo que quiera en una fecha determinada, para permitirle a los food banks estar preparados a entregar los regalos a tiempo. Uno no necesita comprar nada especial o caro, o algo impuesto, sino compra lo que quiere y lo que puede.
Si algún día visitan este país para estas épocas, no dejen de buscar esos arbolitos y contribuir con algún regalo. Quizás para ustedes no signifique mucho, pero para un niño significa una sonrisa especial. Además, nada es más hermoso que saber que algún niño esa noche quizás tenga la sonrisa más amplia de todo el año, por un pequeño gesto de amor nacido del corazón.
Aquí no hay gente sin navidad. Realmente demuestra el país entero que es una época de dar y no de recibir, y el mejor ejemplo es no permitir que nadie pase sin tener su navidad.
Muchas veces la gente tiene lo justo para pasar esta noche tan especial, mas, aunque sólo sea un poquitito, unas moneditas para el Salvation Army o un regalito pequeño ya contribuye para que esa noche sea especial para todos.
Este país enseña muchas cosas y no existen razas, ni credos, ni religiones en esta fecha. Sólo existe un gran sentimiento de unión y caridad.
Cuando llegué a este país tuve necesidad de recibir, porque todos los comienzos son muy difíciles, y ese primer año no podía creer las cosas que habían juntado para mí!, todos regalos nuevos, hermosos, mi primer árbol con todo lo que necesitaba, y la cena de una princesa!. Quizás tuve más regalos que los que alguna vez recibí en mi país!, y me llevaron a misas especiales, sin importar religión, porque lo que importaba era el nacimiento de Jesús y el amor de la gente...
Me sentí especial, única en el mundo, porque en un país extraño, donde prácticamente no conocía a nadie me hicieron vivir una navidad bellísima y me llenaron de cariño, porque cada cosa que me entregaron me la dieron con una sonrisa, con palabras de paz y felicidad. Y ese año aprendí (no porque no supiera, sino porque en nuestros países no tenemos estas costumbres y estamos muy justitos con todo, sin darnos cuenta quizás de que si nos lo proponemos podemos compartir). Aprendí que es una fecha para dar, y así como yo, todos los años hay alguna otra persona que necesita, sea extranjera o sea nativa del país, y desde mediados de noviembre salgo a buscar. Busco esos arbolitos, busco esos domicilios que tienen que estar completos para llegar a todos los hogares para el 24...y de esa forma devuelvo al país lo que alguna vez me dió sin preguntarme de dónde era, de que raza o religión. Simplemente me dió, y por eso a través de este pedacito
de página quiero agradecer a Canadá, y a todos los canadienses, que jamás permitieron que me falte nada, sea para la época de navidad o en cualquier otro momento del año. Y que me enseñaron que el placer no está en ese regalo que se recibe el 24 o 25 de diciembre. El enorme placer está en la sonrisa del niño que la tiene gracias a lo que podemos dar, a la cena compartida con la familia, (que bien lo sabemos los que la tenemos lejos y no tenemos oportunidad de ver a mamá y papá en ese día, y quizás, sin saberlo, aquél último año que pasamos en nuestro país pudo ser la última navidad, como me pasó a mí con mi papi. Mas a veces con los preparativos y los regalos olvidamos disfrutar de la reunión familiar, del amor que está presente durante todo ese día). Y del amor de un país entero que sin mirar a quien, sólo da.
Por eso les pido, que este día especial valoren lo que reciben, lo que tienen. Den gracias por todo esto, dejen que el niño Jesús nazca en sus corazones y esparzan el amor que éste difundió. Y por sobre todo, den en vez de esperar recibir. No permitan que este año alguien quede sin "navidad", vivan en el país que vivan. Es mucho más sabrosa la mitad de un pedazo de pan, sabiendo que alguien a nuestro lado tiene hambre, que un trozo entero mirando la carita de aquél. No importa cuánto tengan o si les alcanza, sólo piensen que con un poquitito, alguien que no tiene, podrá tener una sonrisa como ustedes.