9. NOSTALGIA

La soledad es aplastante... Me dejo llevar por mis pensamientos... y no consigo pensar nada. ¿Aburrido...? Quizás... Si fuese de noche trataría de describir las estrellas y las absurdas constelaciones que trazaron los antiguos sobre ellas. Absurdas, pero bellas, con nombres altisonantes y enigmáticos... Trataría de hablar con la Luna, astro femenino condenado por toda la eternidad a escuchar monólogos y suspiros de solitarios mortales enfermos de la angustia que a su alma le produce la situación de espera de ser querido. Pero no, son la seis de la tarde ... ¡y ella aún no ha llegado!.

Resulta curioso... Tantos filósofos intentando dogmatizar sobre las raíces de los motores del mundo, escribiendo volúmenes y volúmenes de libros auténticamente pesados de leer (los leen generalmente personas atormentadas que no se animan a estudiar otras cosas más serenas) ... e ignoran que la verdad de las cosas la posee la gente humilde y los poetas... ¡la verdad es que el mundo lo mueve el amor!.

Amor a tu pareja amada, que se espera durante el día mientras se está en el trabajo o en clase... Cuando llega la tarde y te unes a él, el día se ve de otra forma... Llega la noche y la intensidad de la espera y la pasión mide el grado de unión física y espiritual que ambos necesitan...

Amor al ser que se desea querer, que se idealiza, se idolatra y se sueña con que algún día ese amor será correspondido... y mientras tanto se martiriza a la Luna y al cielo con pláticas y soliloquios explicando y gritando los dolores del corazón...

Amor a la humanidad, formada por frágiles seres mortales como nosotros que nacen, viven, se reproducen y mueren y que poseen sentimientos similares y parecidos a los que esbozamos nosotros ... Gentes que sufren sufrimientos que serían los nuestros en caso de vivir sus mismas vivencias... Gentes cuyas experiencias forman parte de la experiencia colectiva de la humanidad de la que uno trata de escapar para refugiarse en si propio yo, pero que otros se encargan de que fracasemos en este vano y necesario intento.

Amor... En definitiva, amor es lo que guía todos los actos de nuestra vida mortal... El amor debe expresarse... y si no lo logra fabrica subproductos en forma de suspiros, ayes, vahídos, miradas extraviadas, selenefibia y un largo etcétera que conforman la base de la poesía y hacen las delicias de los amantes sufridores mientras leen las bellas palabras que surgen de estos corazones atormentados y que el vulgo denomina, acertadamente, poetas.

Benditos poetas, válvula de escape de nuestra incapacidad expresiva a la hora de poner metro y hacer rimar bellas frases acabadas en amor, corazón, dolor, pasión, frenesí, sufrir, vivir, belleza, ansiedad, soledad y el largo rosario de nombres, verbos, adjetivos y adverbios que expresan la maravilla del amor...

Benditos poetas, capaces de componer con palabras sonoras canciones, sonetos y metáforas para expresar las transformaciones que produce en nuestro cuerpo y nuestra alma ese tormento diario al que nos somete el amor.

FIN.