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Antonio Arango
''ATV 2 (Rostros)''.

Instalación interactiva que presenta, de manera satírica el determinismo psicopatológico a partir de la fisonomía facial y craneal. Durante mucho tiempo el hombre ha intentado encontrar una fórmula ''objetiva'' para la catalogación de aquello que escapa a su control: el comportamiento humano. La criminalistica, en especial, intentó identificar a aquellos individuos anómalos para la sociedad a partir de sus características físicas.
En esta instalación el espectador, que es tomado por una cámara oculta, es mostrado en un monitor situado en otra sala de la galería. La imagen se acompaña de la descripción del criminal que esta observando en el didáctico interactivo.

Gustavo Artigas
''Estructuras del diálogo''

. Instalación compuesta de una mesa repleta de libros abiertos y dos ventiladores, uno en cada extremo de la mesa, que funcionan intermitentemente, creando corrientes de aire que hacen pasar las páginas de los libros de uno a otro lado consecutivamente.
Artigas metaforiza, como en trabajos anteriores, los procesos de comunicación con un tratamiento más poético que intelectual. La ausencia evidente del cuerpo, la carne que es sustituida por máquinarias cíclicas es un rasgo frecuente de su obra. Diálogos de sordos, mensajes que son solo el aire que mueve las hojas en un ping pong eólico. Lo que resta siempre es la solitaria presencia del artificio animado, el revés de la moneda tecnológica.

Fernando de Alba
''Memoria física (polvo al polvo)''.

Ingravidos, un matraz con cenizas humanas y un pequeño monitor cuelgan tensos en medio de la sala. Un video del rostro del autor se muestra borroso, titubeante, frágil bajo el crital, todavía más fragil, que contiene la memoria de cuerpos reducidos a su fin inevitable.
Dificil precisar cual disolución de la carne es más inquietante, la síntesis de electrones en una imágen o las fertiles cenizas.

Verena Grimm
Sin título.

Llegando al fondo de la galería, como una bomba de tiempo, se encuentra un cuarto aislado sistemáticamente para escenificar un estado caótico, el cual solo puede ser observado a través de la ventana de una ascéptica y sólida compuerta cerrada. Fragmentos de una camilla suspendidos en el espacio, tubos, fibras sintéticas, agujas, insectos, una cortina, todo iluminado por una blanquecina luz de pequeños neónes dispersos nos revelan, en una mirada más aguda, pequeños escenarios de juquete; ambulancias y personajes diminutos, un choque, una crisis, una corrupción de un cuerpo también ausente. Verena Grimm nos confronta con la enfermedad como aquella amenaza social que debe ser aislada, contenida en su voraz propagación.

Víctor Martinez
''Arqueología del Miedo''.

Tampoco hay cuerpos sino vestigios de ellos en sus deshechos. Partiendo de que lo descartado configura una imagen negativa del sujeto, por tanto es información que nos habla de su conducta, El autor hizo un levantamiento de sitio en una calle de la ciudad de México donde se acostumbra dejar la basura para que el servicio metropolitano o los pepenadores la recojan. En la exhibición se presenta una vitrina de un metro cuadrado del ''hallazgo'' original y fotografías de objetos considerados significativos en la busqueda de comportamientos violentos acompañados de una serie de explicaciones posibles sobre su origen. El miedo se encuentra implicito en la especulación. Esto se aplica a la indagación del pasado y futuro. Especular sobre las ruinas de la conducta es intentar delimitar el discurso de los hechos para tener la seguridad de que no hemos equivocado el camino.

Hortensia Ramírez
''La dosis''.

Una cadena ata un 'viewmaster' (visor de juguete para observar pequeñas transparencias) con un gran molcajete (mortero de piedra para hacer salsas, tradicional en la cocina mexicana). En el visor el espectador descubre fotografías de niños con síndrome de down, aquellos que en su cadena genética poseen una diferencia que los sitúa en el extremo más distante de la "normalidad". Esa diferencia pone en relieve la controvertida operatividad de uno de los ideales de la modernidad: la Igualdad.

SEMEFO
''El miedo''.

Cada vez más sintético el trabajo de este grupo de artistas cuya obra gira en torno al cadáver como etapa última de la existencia corporal. En este caso la instalación se conforma de las cabelleras de decenas de personas fallecidas en el anonimato. Una masa de cabellos inunda la sala designada para que el público circule y literalmente entre en contacto, a su paso, con estos residuos que inevitablemente evocan los holocaustos de este siglo. La cabeza despojada de su protección natural es un símbolo de mutilación muy referido en diversas culturas. El sentimiento sobrecogedor de esta pieza radica nuevamente en lo que no esta presente; evocado por esa maraña oscura como todo lo temible.

Santiago Sierra
''Documentación sobre la obra 30 cm. tatuados en la espalda de una persona remunerada''.

Los límites del objeto artistico son transgredidos una vez más ¿Es la línea recta tatuada en la espalda de una persona, el acto o la fotografía de la misma lo que constituye el suceso artístico? El cuerpo es violentado con un signo perpetuo, una mesura sin sentido, ínutil, un anti-ornato y todo ello sólo por dinero.

Héctor Velázquez.
Sin titulo.

Dos fotogafías en color que sin ser un díptico están íntimamente vinculadas entre sí. En una se muestra al autor con un cuello ortopédico. Un mapa urbano llena el fondo de la imagen del cual se desprenden cordones de distintas locaciones hacia el aparato que sostiene fijamente su cabeza como extensión de las ramificaciones medulares.
La segunda imagen presenta nuevamente al autor, ahora de espaldas, con un solo cordón que lo conecta a un termo en un ambiente frío de mosaicos blancos. La obra de Hector Velázquez, más que una especulación conceptual nos remite a sensaciones producto de un diálogo entre elementos orgánicos e inorgánicos. Aditamentos para el cuerpo y en especial aquellos que se relacionan con el calor son frecuentes (los cordones son de un rojo intenso). La dimensión del vínculo (hacia el espacio o hacia el objeto) e incluso su aparente contrapunto abren un amplio espectro de interpretación. Estas fotografías donde el cuerpo es nuevamente sólo su imagen (en otras obras Velázquez elabora modelos esculturales con elaboradas técnicas) se acerca tangencialmente a una especie de body-art personalizado donde el registro de una acción o situación; la mediatizacion de la experiencia corporal, es el vehículo de su mensaje que lo unifica al espíritu de la exhibición ''Después del Cuerpo''.