por Marcelo Gasió
Mike Keneally nació en diciembre de 1961 en Long Island, New York. Ninguno de sus padres tocaba instrumentos, pero era común que en la casa hubiera una radio prendida con música a todo volumen. Sus hermanos mayores le hicieron conocer a los Beatles, y a los seis años compró su primer LP: Sgt Pepper.
Cuando cumplió siete años, sin
pedirlo, sus padres le regalaron un primitivo órgano Magnus que además de las teclas
tenía botones a la izquierda para tocar acordes. Casi de inmediato comenzó a tocar
"Paint it Black".
Dos años después su familia se mudó a San Diego, California. Allí le compraron la primera guitarra, aunque el descubrimiento de grupos como Yes o Emerson, Lake & Palmer lo hicieron inclinarse por los teclados. Hoy, Mike dice con orgullo que gracias a eso aprendió a tocar con pedalera, una habilidad infrecuente en estos días.
Cuando tenía diez años un vecino le hizo escuchar Freak Out, el primer álbum de Frank Zappa, y Mike se enamoró de "Help, Im a Rock", uno de los temas experimentales del disco.
En los 70s tocaba covers de Santana y Crosby, Stills, Nash & Young, a dúo con su hermano mayor. Tan grande era su entusiasmo, que al terminar la secundaria, cuando todo adolescente se plantea trabajar o seguir estudiando (o ambos), su padre le exigió que se quedara en casa practicando y componiendo canciones (!!!).
Adquirió varios teclados y comenzó a tocar covers de UK y King Crimson, soñando con convertirse en el nuevo Keith Emerson. Como diversión tocaba la guitarra... con ella aprendió muchos temas de Frank Zappa, el Passion Play de Jethro Tull y el repertorio completo de Gentle Giant (sic). Además, mientras componía en forma incesante con la ayuda de una drum machine Oberheim DMX, se interesó por el bajo (el primero de ellos fue un Peavey), instrumento que aún hoy lo fascina.
En 1983 formó Graphic, una banda cuyo único fin era tocar en clubes y obtener dinero. Dos años después se enteró de que Zappa contestaba llamados de sus fans en su oficina. Keneally lo llamó para preguntarle sobre algunas letras y le dijo que soñaba con tocar con él algún día. "Seguí soñando, -fue la respuesta de Zappa- nunca más voy a salir de gira".
Ese mismo año Mike Keneally se casó con su novia de la adolescencia y se vio obligado a trabajar en relación de dependencia, aunque siempre dentro de su especialidad: consiguió un trabajo en una casa de venta de instrumentos musicales. Probando un sintetizador Roland, un músico llamado Larry Rathburn lo convocó para integrar una banda de covers. Con él, Keneally estuvo tocando durante dos años con un buen sueldo.
Simultáneamente formó otra banda, Drop Control, con la que también terminó tocando covers en pubs. Su destino parecía ser ese.
Pero a fines de 1987 la vida de Mike Keneally tomó un rumbo inesperado: se enteró de que Zappa estaba convocando músicos para una nueva gira y, sin mucho optimismo, llamó para ofrecer sus servicios de cantante, guitarrista y tecladista. Tenía 26 años.
Al día siguiente recibió el llamado de Frank Zappa convocándolo: "Tengo entendido que tocás todos mis temas. No te creo. Mové el culo y vení esta noche a probarlo".
Keneally, que aún vivía en San Diego, le pidió a su hermano que lo llevara y se pasó todo el viaje sentado en la parte trasera practicando en guitarra no sólo los dos temas que Zappa le dijo ("Whats New in Baltimore" y "Sinister Footware 2"), sino todos aquellos que podía recordar.
Al llegar a la sala de ensayo, y luego de presentarse, quiso impresionar a Zappa tocando "The Black Page" junto al Synclavier que estaba sonando. Pero el viejo Frank, sin inmutarse, le dijo que tocara los dos temas que le había pedido. Mike asegura que ejecutar la melodía que viene después del solo de "Sinister Footware" delante de su compositor es altamente intimidatorio.
Luego Zappa le pidió temas al azar, con dispar suerte, hasta que llegó un momento definitorio. Zappa le preguntó si sabía "G-Spot Tornado" en guitarra, a lo que Keneally contestó negativamente, aclarando que sí sabía "Night School" (ambos temas integran el álbum Jazz From Hell y fueron compuestos para ser ejecutados por una computadora, el Synclavier). Frank le pidió a un asistente que le imprimiera la partitura. Cuando Mike terminó su ejecución, Zappa levantó una ceja y dijo: "hubo una sola nota mal".
La culminación de este calvario para Keneally llegó cuando Zappa
le puso la partitura de "Strictly Genteel" sobre un DX-7 y le pidió que tocara
la parte de piano. Keneally no sabía leer a primera vista, así que tocó la parte de
memoria confiando en su excelente oído y haciéndole creer a Frank que en realidad estaba
leyendo. Zappa le estrechó la mano, lo felicitó y le dijo que regresara el lunes
siguiente para que el resto de los músicos "pudieran dar testimonio de su
particular esplendor".
Luego de ensayar ocho horas por día, cinco días por semana, la gran banda de doce músicos salió de gira en febrero de 1988, comenzando en la costa este norteamericana y culminando en Europa. Esta gira, inmortalizada en tres CDs (Broadway The Hard Way, The Best Band You Never Heard in Your Life y Make a Jazz Noise Here) sería la última de Frank Zappa. La destreza de Keneally puede apreciarse como cantante en "Elvis Has Just Left The Building", "Rhymin Man" y "Ring of Fire" (donde imita a Johnny Cash), como tecladista en "Any Kind Of Pain", "When The Lies So Big", "Zoot Allures", "Andy", "Inca Roads", "The Torture Never Stops", "Eat That Question", "The Black Page", "Duprees Paradise", "Bartok Piano Concerto", y "Strictly Genteel" (entre otros), y como guitarrista en todos los temas (excepto los solos, que son de Zappa).
La idea era continuar la gira por la costa oeste de los EE.UU., pero todos los músicos (excepto Keneally) se negaron a seguir tocando con el irascible Scott Thunes (que, dicho sea de paso, fue el bajista que trajo Vai en su anterior visita). Zappa dio por terminada la gira y de ahí en más se dedicó a componer para el Synclavier y orquestas sinfónicas.
Keneally siguió ligado a la familia Zappa. Al terminar sus días en la ruta pasó a integrar la banda de Dweezil (el hijo de éste) y se convirtió en un experto clasificador del archivo musical que los Zappa tienen en el sótano.
En 1991 el director de orquesta neoyorquino Joel Thome se conectó con Frank con la idea de realizar una serie de shows con su música. Zappa se entusiasmó y sugirió a Keneally como líder del seleccionado de músicos a convocar. El evento se realizó en New York en noviembre de 1991 y se denominó Zappas Universe. La intención era que Frank estuviera presente en los shows, pero lo avanzado de su enfermedad (el cáncer de próstata que lo llevó a la muerte en diciembre de 1993) se lo impidió. La actuación de Keneally fue descollante: cantó la mayoría de los temas, tocó guitarra y teclados, convirtiéndose en el eje indiscutido del evento. Dos años después (cuando el fin de Zappa era inminente) la compañía discográfica editó un resumen en CD y un video de los shows (que, vaya casualidad, le hizo ganar a Steve Vai un Grammy por su interpretación de "Sofa").
El relativo éxito de Zappas
Universe lo motivó a Keneally a grabar su primer CD solista, hat (1992),
y más tarde Boil That Dust Speck (1994). Ambos discos, altamente
recomendados, fueron grabados en el estudio que Mike tiene en su casa, acompañado por
músicos amigos. En realidad Mike toca la mayoría de los instrumentos y canta. Aunque
tienen un toque personal, la influencia de Zappa es bastante notoria en los temas
instrumentales; no así en los cantados, que parecen ¡no tener estribillo!
En 1995 grabó The Mistakes, un ecléctico y también muy recomendado CD junto al guitarrista Henry Kaiser (ex-Henry Cow), al bajista Andy West (ex-Dixie Dregs, grupo de Steve Morse) y al baterista Prairie Prince (ex-Todd Rundgren).
Al año siguiente se alejó de Z (el grupo de los hijos de Zappa, con los que grabó dos discos) para formar una banda llamada Beer For Dolphins, con el bajista Bryan Beller y el baterista Toss Panos, con la cual editó un cd doble en vivo y un video. Al mismo tiempo fue convocado por Steve Vai para su gira Fire Garden 96-97, la que lo trajo a Buenos Aires.
En octubre de 1997 lanzó dos nuevos CDs: 1) The Tar Tapes: recopilación de grabaciones caseras anteriores a su trabajo con Frank, en edición limitada de 500 ejemplares y 2) Sluggo! su esperado nuevo álbum de estudio.
Lo que sigue es el reportaje exclusivo que realizó con MG y Adrián Stoppelman:
La gente te considera como guitarrista, pero durante mucho tiempo fuiste sólo tecladista.
MK: Durante cuatro años toqué solamente teclados; después me pasé a la guitarra, a la que le dediqué estos últimos años. Pero ahora estoy volviendo al piano. Por primera vez tengo uno en mi casa. Lo que compré el año pasado, y estoy tocando y componiendo mucho con él. Mi próximo disco va a estar basado en eso.
Por otra parte, desde que estoy tocando con Steve se reavivó mi interés en la parte técnica de la guitarra. El le dedica mucho tiempo al acto físico de tocar la guitarra, la forma en que ponés las manos, los dedos, la púa. Al tener que aprender sus temas, tuve que estudiar nuevamente la parte física de cómo tocar la guitarra. Eso me resultó muy didáctico y mejoró mi técnica muchísimo.
¿Cómo aprendiste sus temas? ¿Te pasó las partituras o los sacaste de oído?
MK: La mayoría los saqué de oído, escuchando los discos, como lo hice con Zappa. No soy muy bueno leyendo.
¿A qué te referís cuando decís que "no sos bueno leyendo"?
MK: A que no puedo leer a primera vista. Si querés que toque algo que no puedo escuchar grabado, entonces por favor mandame las partituras con una semana de anticipación. Puedo leer, pero no de una. (Ver más arriba la anécdota con Zappa y "Strictly Genteel"). Tengo buen oído porque me crié sacando temas de los discos. Aunque últimamente, debo decir, estuve componiendo bastante, y ahí descubrí que cuanto más escribís, mejor lees. Así que creo que mi lectura mejoró sin proponérmelo.
Viendo el show de Steve Vai, y en especial la prueba de sonido, uno encuentra muchas similitudes entre su forma de trabajar y la de Zappa.
MK: Por supuesto. Creo que eso es algo que se imprime en la psiquis de todos los que hemos escuchado sus discos y después hemos trabajado con él. Es inevitable. Algunas cosas que hace Steve, como dirigir al público para que haga ruidos, son de Frank. Pero otras las hacés sin darte cuenta, como por ejemplo la forma de estructurar los ensayos. Se trata de hacer las cosas eficientemente, sin cuestionarte el sentido de cada nota, sino dejando fluir la música. Tanto Steve como yo mamamos eso, es una ética de trabajo. Una de las cosas de Frank que más nos inspiró no fue solamente la calidad sino la cantidad de música que producía. Es por eso que saco discos tan seguido. No quiero pasarme tres años sin grabar nada. Esa es una frustración que tiene Steve, estando en una multinacional. El escribe muchísimo, pero la grabadora no le permite sacar más de un disco por año, ya que necesita tiempo para comercializarlo.
¿Cómo fue que terminaste en la banda de Vai?
MK:
Se hizo una gira en los EE.UU. llamada G3 (Guitar 3- integrada por Vai, Joe
Satriani y Eric Johnson). Steve me llamó para esos shows. Yo me había ido de Z
para formar Beer for Dolphins. Después de estar un mes con G3, Steve salió
de gira para presentar su álbum Fire Garden y opté por seguir con él. Estuvimos
tocando por los EE.UU. con los Dolphins como soporte. Así que yo tocaba con mi grupo y
luego con la banda de Steve (!). Eso fue muy bueno para mí, porque permitió que mucha
gente conociera mi trabajo solista.
¿Qué diferencia hay entre tu trabajo solista y Beer for Dolphins?
MK: Beer for Dolphins en vivo es un power trío (guitarra, bajo y batería). Lo que hacemos son versiones reducidas de los temas de mis discos solistas, que en estudio tienen múltiples sobregrabaciones de guitarras, teclados y voces. Yo utilizo el término "Cream interpreta a Keneally" como slogan publicitario. Tenemos un CD doble en vivo y un video. En cuanto pueda, tengo muchas ganas de venir a Buenos Aires para tocar con ellos.
¿El hecho de haber trabajado con Zappa, te favorece o te perjudica profesionalmente?
MK: Cuando me presento ante otros músicos o fans de la música en general, se ponen contentos y se excitan con la idea de que yo haya tocado con Frank. Pero la cosa cambia cuando el interlocutor es una compañía discográfica, un manager, una agencia, un periodista de una revista importante o cosas por el estilo. El nombre Frank Zappa es VENENO para la gran industria. No quieren saber nada con él.
En cuanto a mí, casi todo lo bueno que me pasó profesionalmente en los últimos nueve años se lo debo a él. Yo no estaría con Steve si no fuera por Zappa. Si bien no he tenido un éxito grande ni estoy forrado en guita, lo poco o mucho que conseguí fue por haber trabajado con él. El contrato de grabación lo hubiese conseguido igual, porque los dueños del sello son amigos míos, pero mi música no habría sido la misma.
Por otra parte, si a alguien le molesta que yo haya tocado con Frank, entonces a mí no me interesa tener relación con esa persona.
¿Creés que hay lugar para tu música en los EE.UU.?
MK: (Sorprendido) ¡Sí! Sé que hay gente, no sólo en los EE.UU., sino en todas partes del mundo que gustan de la música no convencional. Esos meses de gira con Steve fueron muy importantes para nosotros, porque el numeroso público que tiene Steve tuvo la oportunidad de escucharnos. Y podíamos ver la cara de satisfacción de la gente al escuchar a los Dolphins. Vendimos muchos CDs en los shows, y eso es prueba de que hay lugar para mi música en Norteamérica. Además lo noto en la correspondencia que recibo de todas partes del mundo.
Esta es una adaptación de la nota que publicó la revista argentina El Musiquero en abril de 1997.
Al terminar el concierto del sábado,
Keneally y Vai asistieron al show de la banda argentina Sul Divano, especialista en
temas de Frank Zappa y Astor Piazzolla. Ante la mirada atónita de los asistentes, Mike
Keneally aceptó la invitación de los shockeados Sul Divano y subió para tocar con ellos
"King Kong", improvisando un estupendo solo de
guitarra. Incluso Steve Vai lo felicitó calurosamente, gratamente sorprendido de que
Keneally se acordara en seco de una melodía ¡que no tocaba hacía nueve años!. (Puedes
escuchar o bajar la interpretación en este archivo Real
Audio -622Kb)
Recomiendo consultar la excelente y completísima página de Mike Keneally.