El más campeón
"Jamás soñé con ser jugador"

Aimar dice que empezó en el fútbol por sus amigos; se queja de algunas condiciones del profesionalismo.

El potrero de la esquina de la casa de su Río Cuarto natal sigue tal como hace diez años, pero la diferencia está en el alambre de púa que reemplazó al perro que le impedía jugar a Pablo Aimar cuando este era un niño.

Por ese entonces, cuando el Payito -así lo conocen todos en el barrio Banda Norte- seguía al pie de la letra los consejos de su padre, no se le cruzaba por la cabeza que algún día sería futbolista como su padre, Ricardo, que actuó durante años en el Belgrano cordobés.

-¿El fútbol de hoy es con el que soñaste desde chico?

-Es que yo jamás soñé con jugar al fútbol. Hay gente que no me cree, pero es la pura verdad. Hoy vivo lo que me tocó vivir y no puedo decir que me haya desilusionado o sorprendido. Yo empecé a jugar en Río Cuarto porque lo hacían mis amigos y llegué a Buenos Aires porque vinieron algunos de ellos. Después, estando acá, me di cuenta de que podía jugar en un club grande y ganar plata.

-¿Te sentís cómodo con el fútbol de hoy?

-Y..., no. Hay un montón de cosas que me parece que están mal, que me preocupan.

-¿Como cuáles?

-Como jugar a las tres y media de la tarde con 30 grados. O lo que le pasó a esa reserva, que jugó a la una de la tarde con un calor infernal, sin que nadie pensaba en los jugadores. Tampoco estoy de acuerdo con que el futbolista tenga 15 días de vacaciones y en medio de ellas estén las fiestas.

Encima, si uno tiene que jugar para la selección nacional, se queda sin vacaciones, como en mi caso y el de otros tantos compañeros, aunque se trate de una linda experiencia, como ya dije. En fin, hay un montón de cosas más, pero yo no soy quién para cambiarlas y no creo que haya alguien que pueda o quiera hacerlo. Al menos, eso me sugiere lo que veo o escucho.

-Entonces, ¿hay que callarse, bajar la cabeza y seguir para adelante?

-Y sí... así están dadas las cosas. Creo que si algún jugador se hace el rebelde, empiezan a decir que es conflictivo y todo ese tipo de cosas.

-En algún momento, Diego Maradona creó un sindicato para evitar todo ese tipo de cuestiones, pero no prosperó.

-No hubiese estado mal que siguiera para pelear por derechos que son del futbolista.

"River es un club espectacular"

Pablo Aimar trasluce una creciente madurez en todas sus opiniones. Y hasta se permite una observación no habitual al referirse a lo que representa River.

-Definime a River y al seleccionado.

-River es un club espectacular, en el que a todos los jugadores les gustaría jugar, pero también creo que River podría ser más grande.

-¿Cómo es eso?

-Creo que River podría sacar más jugadores y así crecer más aún.

-¿Y el seleccionado?

-Cuando en el Mundial de México los argentinos cantaban el Himno yo decía: "Eso sí quiero. Quiero jugar un Mundial". La selección no se compara con nada dentro del fútbol. Un partido en el seleccionado son diez en cualquier club. Ojalá que cuando me retire pueda decir: "Jugué muchos partidos en el seleccionado".

Este último proyecto de Aimar está en sus albores. Con el seleccionado mayor sólo jugó en dos amistosos: los 7 minutos finales frente a México y un primer tiempo ante los Estados Unidos.