Nacional
Anaquismo,
superando
el tercer posicionismo
Troy Southgate

La obsesión del
hombre con los conceptos trinitarios ha durado miles de años. De
hecho, cuando se nos presentan dos opciones – y ninguna de las dos nos
convence – buscamos siempre una tercera opción, más
allá de ambas. A finales del siglo sexto antes de Cristo, el
famoso sabio budista, el príncipe Gautama, rechazó el
llevar una vida de opulencia y autocomplacencia y buscó en la
atuodisciplina y la negación una via alternativa. Tras llevarse
al borde de la muerte por inanición, el principe
comprendió que existía un tercer camino más
allá del lujo y del ascestismo. En este caso, el camino fue la
senda de la meditación y el desprendimiento, un proceso que
venía a superar a ambos modos de vida.
Es posible hacer un interesante paralelismo entre el ejemplo de Gautama
en su rechazo de la vida disipada y la
búsqueda de una alternativa al Capitalismo a lo largo de los
siglos XIX y XX. La solución, como bien sabemos, fue el
Comunismo. De hecho, el siglo pasado se puede percibir como el
período en el que tuvo lugar la lucha entre estas dos
ideologías tan amargamente opuestas. Pero tal y como Hilaire
Belloc observó en “La Restauración de la Propiedad” (*The
Restoration of Property, 1936) hace más de sesenta años,
las diferencias entre ambas ideologías no eran tan importantes
como algunos de sus partidarios pudieron afirmar en algún
momento. “La única diferencia entre una turba de ingleses
libres (capitalistas) que dependen de no faltar a sus puestos de
trabajo para subsistir y un rebaño de rusos
serviles (comunistas), es que los primeros están explotados en
beneficio privado y los segundos por el Estado de manera comunal. El
objeto de las clases dirigentes rusas es el establecer una burocracia
cómoda para sí mismos y sus intereses fundamentada sobre
la labor y el esfuerzo del proletariado. El objeto de la clase
dirigente inglesa es incrementar sus fortunas privadas sobre las
espaldas de la clase obrera explotada. Nosotros
necesitamos algo distinto a cualquiera de los dos” Así, el
Comunismo no es considerado como el antídoto del Capitalismo,
sino como un síntoma y un producto de él. La
búsqueda de Belloc de una alternativa al Comunismo y al
Capitalismo se manifestaría en la “Distribucionist Leage”,
fundada junto a G.K. Chesterton. Ambos fueron
famosos conversos al Catolicismo y se inspiraron en el “Rerum Novarum”,
una encíclica de aquel tiempo con la que el
Papa Leo XIII contestó al desafío comunista ateo con la
propuesta de que las riquezas debían ser distribuidas más
equitativamente y los trabajadores tratados con
mayor dignidad. Como veremos más adelante, Belloc y Chesterton
se acabarían convirtiendo en dos de las más importantes
ideólogos de la nueva Tercera Posición (Third Position).

A finales de los 70, la organización de ultraderecha National
Front (NF) experimentó un crecimiento sin precedentes.
Virtualmente indistinguibles del más moderado
Partido Conservador en el que se defendían
los valores de la familia, la ley y el orden, la pena de muerte,
y muchas otras políticas de la extrema derecha, el
NF se convirtió en un grupo popular por su oposición al
multiculturalismo y el apoyo a la obligatoria repatriación de
todos los inmigrantes no blancos. En 1979, no obstante, el NF fue
derrotado en las elecciones tras algunas afirmaciones de Margaret
Thatcher contra la inmigración y el problema que ésta
representaba. Como consecuencia, muchos de los
simpatizantes del NF migraron hacia los puntos más moderados del
Centro-Derecha, aunque como era de esperar, la propuesta de la
señora Tatcher de combatir la inmigración nunca se
consolidó en la práctica.
A partir de este momento, el NF cayó en un período de
fraccionalismo, este retroceso hizo que la complicada amalgama
ideológica que había cominado aquel tiempo bajo una sola
bandera se quebrara y comenzó una amarga lucha entre
conservadores reaccionarios, neonazis violentos y revolucionarios. Los
lumbreras como Martin Webster o John Tyndall salieron del partido
a principios de los ochenta, para dejar el camino libre a
una nueva generación de jóvenes activistas como
Dereck Holland, Nick Griffin, Patrick Harrington y Graham
Williamson. Estos estaban influenciados por
organizaciones de la “tercera vía”, y en particular por la
“Terza Positione” italiana y el exiliado de Italia en Londres, Roberto
Fiore. La estrategia de la tensión – Anno di
Piombo – que caracterizó la política italiana de los 70,
que llevó a la creación de bandas paramilitares como
la Nuclei Armati Rivoluzionari (Núcleos Armados
Revolucionarios), así como a manifestaciones
en las calles en las que se elogiaba tanto a Mao como a Hitler. Muchos
miembros del NF se inspiraron en Otto Strasser, un miembro del NSDAP
que se enfrentó a Hitler por su traición a los principios
socialistas del partido. Así, para el NF, se inició una
nueva era de política revolucionaria. Una,
en la que los límites de izquierda-derecha
debían ser rechazados totalmente y redefinidos de nuevo desde
cero.

En 1983, el NF británico comenzó a publicar una serie de
revistas revolucionarias tituladas “Rising: Booklet For The Political
Soldier”, en cuyos detallados artículos trataban
sobre los conceptos de lucha y sacrificio político. Entre tanto,
el panfleto de Dereck Holland, “The Political Soldier”, inspiró
a una nueva generación de activistas muy
influenciada por el filósofo italiano Julius Evola. En 1986 el
NF, ya del todo liberado de los “Tories” y de los reaccionarios y mucho
de la mortificante izquierda tradicional,
comenzó a forjar alianzas con organizaciones separatistas negras
como la “Louis Farrakhan Nation of Islam” y a elogiar terceros
posicionismos como el del Iran de Jomeini. De hecho, mientras
anteriormente los trabajos de Belloc y Chesterton fueron utilizados
para proporcionar una única plataforma económica al NF,
la nueva dirección abogaba por la “Ley Popular”, una interesante
teoría sociopolítica según la cual la estructura
de la sociedad inglesa se debe descentralizar en un grado similar al de
la Libia del coronel Gadafi. No en sus aspectos culturales, sino en los
administrativos - en lo que concierne al establecimiento de
comités vecinales, de área y regionales a través de
cuya fuerza las reivindicaciones se podrían
canalizar decisivamente hacia arriba desde la raiz
de la sociedad. Esto estaba en fuerte contraste con la anterior
dependencia del NF del sistema electoral. El NF, en respeto con sus
nuevos homólogos libios, comenzó a distribuir copias del
libro verde de Gadafi y a repetir una y otra vez el lema de
“ninguna representación sin participación”. Como
consecuencia, el rechazo en las elecciones confirmó su
inevitable entrada en el campo revolucionario de la política
extraparlamentaria. El movimiento abogó por
la independencia regional, la solidaridad europea, el antirracismo
positivo y la cooperación con las comunidades negras y
asiáticas del pais.
Estos fueron tiempos emocionantes para los partidarios del nacionalismo
revolucionario pero los choques personales tendieron a prevalecer a
todos los niveles y acabaron rompiendo el
movimiento en pedazos el otoño de 1989. A
un lado estaban ubicados los partidarios de Dereck Holland, Colin Todd,
Nick Griffin y Roberto Fiore, todos ellos envueltos en el
establecimiento de un nuevo proyecto rural en el norte de Francia. En
el otro lado estaban Patrick Harrington, Graham Willianson y David
Kerr, los cuales creían que el centro administrativo de la
organización debía permanecer en las Islas
Británicas. Holland, Todd, Griffin y Fiore se fueron para formar
la “International Third Position” (ITP), mientras que Harrington y los
partidarios restantes del NF disolvieron el movimiento en marzo de 1990
y formaron “Third Way”. Pero para los que creyeron
que el dinamismo revolucionario de finales de los 80 iba a continuar,
todo acoabó en decepción y desaliento. “Third Way” se
volvió muy conservador y comenzó a
hacer campañas antifederalistas y de defensa de la Libra,
además desde ahora se considerarían como el “centro
radical”. El ITP por su parte, comenzó a intentar infuenciar a
los católicos tradicionalistas agrupados alrededor de la
sociedad St.PiusX, que para horror de la mayoría de sus miembros
tomó el desastroso camino hacia el fascismo reaccionario.
Así, mientras un sector del NF se había convertido en
“respetable” y centrista, el otro abrazaba los principios de Mussolini,
Petain y Franco. Para el ITP el inevitable hundimiento vino en 1992.

En esta época yo
ya estaba involucrado en el NF – y consecuentemente en el ITP – desde
que entré como adolescente en 1984. En aquellos años yo
trabajé com organizador regional tanto con SussexNF como con la
rama de los Tunbridge Wells del ITP; publicaba fancines y revistas como
“The Kent Crusader”, “Surrey Action”, “Eastern Legion” y “Catholic
Action”. Sumadas a “Northern Rising” (publicada por las ramas del IPT
de Yorkshire y Lancashire), estas publicaciones abarcaban las cuatro
quintas partes de la produccion literaria de la organización.
Cuando el ITP virtualmente se desintegró en 1992, todas estas
revistas le retiraron su apoyo. El ITP, a su vez, sacó el Final
Conflict, una mezcla de subcultura skinhead y fanatismo cristiano.
La división tuvo lugar por diversas causas, una muy notable fue
el hecho de que el ITP rechazó la estructura de la
organización interna que fue usada con tan gran efecto durante
el período del NF. Sumado con el hecho de que Dereck Holland y
muchos otros habían abandonado el pais y estaban completamente
desinteresados en la lucha de la de la Tercera Posición en
Inglaterra; Roberto Fiore, por su parte, fue atacado por mi y muchos
otros por su involucración en una empresa despiadadamente
capitalista que tenía en Londres. Muchos activistas cesantes del
ITP acusaban además a Holland y a Fiore de robar varios miles de
libras del movimiento que habrían invertido en propiedades
privadas dentro del enclave rural del grupo en el norte de Francia.
Pero el factor decisivo para la ruptura fue la creciente
obsesión del movmiento con el catolicismo radical y el
neofascismo reaccionario.
De los andrajosos restos del ITP vino una nueva organización
independiente, el English Nationalist Movement (ENM). Fueron hechas
nuevas tentativas para volver a plantear los
principios de la Tercera Posición, y las publicaciones del ENM
como “The Crusader and Catalyst” atacaron a Hitler y a Mussolini y
prefirieron emular socialistas ingleses locales como Robert Owen,
William Cobbert, Robert Blatchford y William Morris. Esto
fue combinado con un llamamiento a la acción. El ENM,
además, hizo campaña contra el Unionismo, abogando por la
desintegraci´n de las Islas Británicas en siete naciones
distintas: Inglaterra, Escocia, Gales, Ulster, Irlanda, Mannin (Isla de
Man) y Kernow (Cornwall). Mientras, su servicio de prensa, “The Rising
Press”, distribuyó libretos y pamfletos alrededor de
una amplia gama de asuntos que
incluian los trabajos de Otto y Gregor Strasser, Corneliu Cordeanu o el
coronel Gadafi.

En 1998 el ENM
cambió su nombre por el de “National Revolutionary Faction”
(NRF) y comenzó a hacer llamamientos a la insurrección
armada contra el Estado Británico y otras cosas más
radicales. Una serie de detallados folletos y
boletines fueron distribuidos entre los nacionalistas a lo largo de
todo el pais intentando acabar con la obsesión del BNP con las
marchas y las elecciones, se luchaba contra la partitocracia y el
sistema democrático en si. La refundada organización
forjó también contactos con otros grupos de la Tercera
Posición semejantes como Nouvelle Resistance (Francia), the
American Front, Spartacus (Canada), the Canadian Front, Alternativa
Europea (España), National Destiny (Nueva Zelanda), Devenir
(Bélgica), Rivolta (Italia), Freie Nationalisten (Alemania) y
el Partido Nacional Bolchevique (Rusia). El nacionalbolchevismo
es un concepto que busca establecer una alianza entre el Este y el
Oeste, y el cual existe desde hace mcuhos años. Sus primeros
partidarios fueron personas como Arthur Moeller van der Bruck o Ernst
Junger, ambos abogaron por la alianza de Alemania
con la Rusia bolchevique. NB es en la actualidad usualmente asociado
con autores rusos contemporáneos como Alexander Duguin, y se
convirtió en uno de los principales intereses del NRF. En gran
medida porque ese grupo apoya la creación de un bloque
euroasiático descentralizado en contraposición a la
hegemonía norteamericana.
En años recientes el NRF ha rechazado la postura de la Tercera
Posición, y ahora se describe a si mismo como un movimiento
Nacional-Anarquista. En otras palabras, mientras los partidarios de la
Tercera Posición abogan por ir más allá del
Capitalismo y el Comunismo, los nacionalanarquistas han decidido
trascender ése tercer posicionismo y su noción de
“más allá”. De acuerdo con el conocido pensador
anarquista Hakim Bey, escrito en Millenium(1996): “Hace cinco
años todavía seguía siendo posible ocupar una
tercera posición en el Mundo, un “ni lo uno
ni lo otro” de rechazo o astucia, un reino fuera de
la dialéctica”. Él parte de la premisa de que
dónde no existe un segundo, una oposición, no puede haber
tampoco un tercero, un “ni lo uno ni lo otro”. Así, la
opción queda en que: o bien nos aceptamos como los “últimos
seres humanos”, o nos aceptamos a nosotros
mismos como oposición. Esto ha conducido al NRF a elogiar a
pensadores anarquistas como Bakunin o Preudhon, también a
rechazar el concepto de Estado y a abogar por la creación de
enclaves independientes “en los que los NA puedan vivir según
sus principios e ideales”. Los NA también declaran que, incluso
después del hundimiento de la Civilización, ni esperan ni
desean construir una infraestructura nacional, pues creen que los
individuos semejantes y pragmáticos deben poder instalar y
mantener comunidades orgánicas de su propia elección.
Esto no significa que el NRF haya traicionado su opinión sobre
el orden natural y la separación racial, sino que ahora ya no
tiene ningun interes en imponer su postura a otras personas. El NRF,
además de introducirse en el Nacional-Anarquismo, también
se ha implicado en diversas campañas ecologistas,
manifestaciones anticapitalistas y en círculos de
liberación animal.

El NRF ha sido muy
influenciado por “Alternative Green”, grupo creado en la estela de la
dimisión de Richard Hunt como editor de un
periódico izquierdista “Green Anarchist”. Sus
análisis económicos sobre la esencia explotadora
Occidental del Tercer Mundo, así como su rechazo general a la
división del laborismo, ha conducido a la alianza
entre “Alternative Green”, el NRF, “Nationale-Anarchie”
(nacionalanarquistas alemanes), “Wessex Regionalists”, Oriflamme
(medievalistas), “Albion Awake” (organización
cristiano-anarquista), “El Movimiento Anárquico” (infuenciado
por Jünger y Evola) y otros grupúsculos
diversos, todos con la firme creencia de que todos
los opositores al capitalismo de todo el espectro deben trabajar
conjuntamente para intercambiar ideas y estrategias. En mayo de 2000
estos elementos efectuaron la primera feria herética anarquista
en Brighton, lanzando una nueva alternativa política llamada
Beyond Left-Right. Esta ha sido atacada desde entonces por una variedad
de anarco-dogmáticos de la izquierda, el
grandilocuente “International Workers of the World” (IWW) y la
“Anti-Fascist Action” (AFA). Hasta la fecha, no obstante, estos
diversos grupos no han explicado por qué los NRF o sus aliados
merecen el epíteto de “fascistas” ni tampoco por qué
deben ser reprimidos con la violencia. Además, menos
todavía han sabido definir el sentido real
del fascismo que dicen perseguir.
Dado que ideologías como el Nacional-Socialismo,
Nacional-Comunismo y Nacional-Bolchevismo ya habían procurado
combinar dos opuestos aparentemente contradictorios, la llegada del
Nacional-Anarquismo era algo de por si inevitable. Pero por su parte,
lo que distingue al NRF de sus homólogos
(anarquistas) del espectro izquierda-derecha dominante, es el hecho de
que éste está intentando crear una síntesis.
De hecho, síntesis (“Synthesis”) es el nombre de una nueva
revista en internet establecida por el “Cercle de la Rose
Noire” a través de la cual pensadores del NRF, evolianos y
miembros de la ya extinta “White Order of Thule” (WOT) promueven la
estrategia triádica de “Anarquía”,
“Ocultismo” y “Metapolítica”. El espacio de internet del
Círculo http://www.rosenoire.org/
ha presentado Nacional-Anarquistas con una perspectiva
esotérica, convirtiéndose en un interesante recurso
contra-cultural en el cual artículos, ensayos, poesía,
entrevistas y análisis pueden ser fácilmente encontrados.
Las similitudes entre la triádica estrategia del
Nacional-Anarquismo y el análisis triádico del famoso
filósofo alemán, Georg Friedrich Wilhelm Hegel son
tremendas. Hegel creía que cuando nos
enfrentamos con la ineficacia o imperfección de un pensamiento o
de una afirmación(tesis), estamos creando su negación
(antítesis), y que el resultado de todo ello sería la
negación de ambos y su consiguiente superación
(síntesis). Una vez ocurre esto, la síntesis puede
desarrollar de nuevo una antítesis comenzando así el
proceso otra vez. Esto nos lleva de nuevo a nuestras posturas iniciales
sobre los conceptos trinitarios. Cuando es
considerado desde esta perspectiva, el
Nacional-Anarquismo aparece como el lógico paso hacia el
siguiente despertar espiritual e intelectual de la humanidad.

|