Carta de Zelda Sayre a Francis Scott Key Fitzgerald
Scott: nada hay en el mundo que desee excepto tú, y tu amor precioso. Todas las cosas materiales no son nada. Tuve que vivir una sórdida, descolorida existencia, porque tu pronto me amas menos, y menos, y no hice nada. Nada para conservar tu corazón para mí. Yo quiero amar en primer lugar, e incidentalmente vivir.
Cómo puede usted pensar deliberadamente en vivir sin mí. -Si usted muere, querido, mi querido Scott, sería como quedar ciego. Sé que yo podría , también -Ino tengo ningún propósito en la vida- salvo una decoración bonita.
¿No piensas que fui hecha para tí? Me siento como si me hubieras pedido, y hubiera sido entregada a domicilio –por eso nací en este mundo-.
Yo quisiera que me usaras, como un reloj, un amuleto o un ramito de flores para tu ojal. Y entonces, cuando estemos solos, yo desearía ayudarte, para que sepas que no puedes hacer nada sin mí.... Zelda
|