Este cáncer
deriva del epitelio cervical multilaminar, que tiene una organización
similar a la de la epidermis de la piel. Normalmente la proliferación
se produce solo en la capa basal, generando células que se desplazan
a la superficie exterior, diferenciándose a lo largo de este desplazamiento
en células aplanadas ricas en queratina, que no se dividen y se descaman
de la superficie.
Sin embargo, en ocasiones se examinan muestras de este epitelio en las cuales
las células en división no se encuentran en la capa basal y
además se encuentra algún desorden de diferenciación.
Esto se conoce como DISPLASIA.
Estas placas displásicas pueden permanecer inocuas o incluso remitir
espontáneamente, o bien pueden progresar durante un período
de varios años, hasta producir placas denominadas CARCINOMA
IN SITU.
En el carcinoma
in situ, la pauta normal
de división y diferenciación celular está seriamente
desorganizada, y todas las capas
del epitelio están formadas por células indiferenciadas en proliferación,
que a menudo son muy variables en tamaño y cariotipo; sin embargo estas
células anormales todavía están confinadas en el lado
epitelial de la lámina basal. Sin un tratamiento, la placa anormal
puede permanecer inofensiva o entrar en regresión; pero en 20 o 30%
de los casos, las células se escapan del epitelio,
cruzando la lámina basal, y empiezan a
invadir el tejido conjuntivo subyacente lo que se conoce como CARCINOMA
MALIGNO