La Matriz
Extracelular (MEC) desempeña un papel fundamental, no sólo en el mantenimiento
de la forma y estructura de los organismos pluricelulares, sino que también
ejerce una función moduladora del crecimiento, migración, proliferación,
diferenciación, y muerte celular.
Muchas de estas actividades son reguladas por un conjunto
de señales que se registran directamente
a través de receptores de la membrana plasmática, tales como las integrinas