Localizar Fallas Términas en un Circuito

Los que reparamos equipos electrónicos, frecuentemente nos encontramos con aparatos que presentan síntomas o fallas que aparecen, desaparecen o varían con los cambios en la temperatura del equipo.

Los síntomas son:

A - El aparato funciona correctamente al encenderlo (en "frío") y luego de algunos minutos comienza a presentar mal funcionamiento o simplemente deja de funcionar.

B - El aparato presenta una falla (o mal funcionamiento) al encenderlo estando “frío” y luego de algunos minutos, cuando este alcanza la temperatura normal de funcionamiento, la falla desaparece y el equipo funciona correctamente.

C - La falla o mal funcionamiento está presente todo el tiempo, pero se agrava o disminuye en forma evidente al ir cambiando la temperatura del aparato.

Cuando los síntomas que presentan los equipos electrónicos encajan dentro de alguna de las descripciones anteriores, podemos decir que se trata de fallas “térmicas”. En algunas ocasiones los problemas de tipo “térmico” pueden presentarse por soldaduras o conexiones defectuosas, este tipo de fallas son relativamente fáciles de detectar. Pero en muchos casos, estos problemas son originados por componentes que han perdido parcialmente sus propiedades originales y se han vuelto inestables térmicamente. Esto puede deberse a muchos factores, como: perdidas de la capacidad dieléctrica, humedad, oxido, “fugas” en los materiales aislantes, alteraciones en los cristales semiconductores, fatiga del material, etc. Las fallas térmicas pueden originarse en todo tipo de componentes: condensadores, resistencias, diodos, bobinas, transistores, circuitos integrados, etc.

Localizar este tipo de defectos mediante la extracción y medición fuera del circuito, de cada uno de los componentes sospechosos, resulta bastante complicado y no garantiza que pueda ser detectado el problema, pues en este tipo de fallas, los instrumentos de comprobación pueden dar lecturas correctas y hacernos pensar que el problema esta en otra parte, con la consiguiente perdida de tiempo. Para localizar componentes con problemas térmicos, el método más practico es provocar cambios en la temperatura de los circuitos y piezas sospechosas y observar el comportamiento del aparato.

Para esto muchos técnicos utilizamos el popular secador de cabello y el Spray "Enfriador" (llamado también “congelante”, "Instant Freeze", etc.) Mediante el uso de estos implementos, podemos calentar y enfriar diferentes circuitos y componentes, observando el comportamiento del aparato y los síntomas que presenta.

Procedimiento practico

Al enfrentarnos a un aparato electrónico con un problema térmico, debemos hacerlo funcionar, de forma tal que podamos acceder con facilidad a los diferentes circuitos y componentes. Es importante que al encenderlo, el aparato este “frío”, es decir a temperatura ambiente. Con el secador colocado a una distancia de 3 o 4 centímetros (figura 1) del área donde se encuentran los componentes “sospechosos” procedemos a aplicar calor mientras observamos el comportamiento del equipo y los síntomas que presenta.

Ya sea, que se trate de síntomas del tipo A, B o C (mencionados anteriormente), cuando calentemos un grupo de componentes, entre los que se encuentra la pieza defectuosa, notaremos un rápido cambio en el comportamiento que presenta el aparato. Una vez que hemos logrado esto, usando el spray enfriador y el tubo que nos permite aplicarlo exactamente donde queremos, procedemos a enfriar uno por uno los componentes que hemos calentado (figura 2), mientras observamos el comportamiento del aparato. Cuando enfriemos el componente defectuoso notaremos de inmediato un rápido cambio en los síntomas, y el aparato volverá a su estado inicial. De esta forma se puede localizar rápidamente él o los componentes causantes del problema y reemplazarlos.

Consideraciones

Usar preferiblemente un secador pequeño, de mediana potencia (400 a 600W), que tenga una abertura de salida de aire reducida (sin difusor) para poder dirigir mejor el calor a las partes que se desea calentar.

No aplicar excesivo calor a los componentes. Generalmente 10 a 15 segundos son suficientes.

Realice una búsqueda sistemática, aplicando el proceso a las diferentes etapas o circuitos que puedan estar involucrados en el problema, una por una, hasta localizar la causa.

Utilice en forma prudente y racional el Spray enfriador. Algunos de esos productos pueden dañar la capa de ozono.

Conclusión

Si bien existen herramientas llamadas “Heat Gun” (pistola caliente) que son en realidad secadores más robustos y potentes, fabricados para trabajo pesado en la industria o el taller. En lo personal prefiero usar un simple secador de cabello, pues las temperaturas generadas por un Heat Gun son generalmente muy elevadas, al igual que su precio.

El secador, no solo es el imprescindible instrumento de peluqueros y estilistas, es también una herramienta de gran utilidad en todo taller de reparaciones electrónicas. Su uso no se limita solamente a la localización de fallas térmicas. El popular secador de cabello, resulta excelente para eliminar rastros de humedad en placas y componentes cuando el aparato se ha mojado o antes de aplicar selladores o materiales aislantes en circuitos del alto voltaje. También es útil cuando aplicamos grasas lubricantes en algunos mecanismos, ya que el aire caliente del secador puede ayudar a hacer que las mismas penetren y se distribuyan más uniformemente en las partes mecánicas.

Como ven el popular secador de cabello es una herramienta imprescindible en el taller de electrónica.

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