  
                                   
                                  
                                  Mariposas multicolores, 
                                  cubren el polvo del día,  
                                  la oscuridad de la noche, 
                                  se tapiza con bichitos de luz. 
                                   
                                  En soledad alegre o tiempo desvanecido, 
                                  se desvela la niña, pensando en su amor. 
                                   
                                  Y así... 
                                  en burbujas de acordes 
                                  o en ébano de alcurnia, 
                                  sobre la alfombra tendida, 
                                  bosqueja su fresca ilusión,  
                                  mientras afuera se mecen los palmares,  
                                  los grillos plateados 
                                  decoran la nostálgica noche 
                                  y sobre el agua, se miran coquetas: 
                                  las tintineantes estrellas diamantinas. 
                                   
                                   
                                    
                                  Volver al
                                  índice 
                                   
                                  
 Diseño y
                                  desarrollo web 
                                  Iris Azul 
                                  ©Todos los derechos reservados®
                                   
                                      |