El ministerio Misión Nueva Vida


 

 

 



¿Que es el evangelio del Agua y el Espíritu?

 

El Apóstol Pablo dijo, "Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras" (1 Corintios 15:3-4). ¿Qué quiere decir la palabra "las Escrituras" en la cláusula "Cristo murió por nuestros pecados de acuerdo a las Escrituras"? Significa el Antiguo Testamento. El Apóstol Pablo dijo que Jesús murió por todos nuestros pecados de acuerdo al pacto y a la revelación del Antiguo Testamento. ¿Cómo Él expió todos nuestros pecados? Él lo hizo a través de Su acto de justicia: Su bautismo y Su muerte sobre la Cruz.

Saben, en el tiempo de la primera iglesia, no existía la Navidad, hasta el final del sigo 2. Los primeros Cristianos junto con los Apóstoles solo conmemoraban el 6 de Enero como "el día del bautismo de Jesús," y era la única conmemoración de la Primera Iglesia.

¿Por qué los Apóstoles pusieron tan grande énfasis en el bautismo de Jesús? Es el secreto del verdadero Evangelio del agua y el Espíritu, el cual recibieron de Jesús y que predicaron a todo el mundo. Jesús dijo, "A menos que uno nazca de agua y del Espíritu, no podrá entrar al reino de Dios" (Juan 3:5). La Biblia dijo que Jesús vino por agua y sangre para salvarnos de todos nuestros pecados (1 Juan 5:6). Sangre significa la Cruz, entonces ¿Qué significa por agua?

(Espero que no se confunda con el bautismo de agua de los creyentes y el Bautismo de Jesús. Por favor ponga atención cuidadosamente al significado del bautismo de Jesús. Ahora no estamos enfocados en el bautismo de agua por los creyentes o la doctrina de la regeneración bautismal.)

¿Por qué Jesús fue bautizado por Juan el Bautista? ¿Por qué Jesús proclamó de Su bautismo "por qué así conviene que se cumpla toda justicia?" (Mateo 3:15).

Hebreos 10:1 dice, "Por qué la ley (aquellos sacrificios) son una sombra de las cosas buenas que habrían de venir....." Veamos el típico sacrificio que Dios le dio a Su pueblo para su salvación en el Antiguo Testamento. Si alguien pecaba y era culpable, el pecador tenía que ofrecer una ofrenda por el pecado para hacer expiación por su pecado. Veamos Levítico 1:3-5. "Si su ofrenda es holocausto del ganado vacuno, ofrecerá un macho sin defecto. Lo ofrecerá voluntariamente delante de Jehová a la entrada del tabernáculo de reunión. Pondrá su Pondrá su mano sobre la cabeza de la víctima, la cual será aceptada para hacer expiación por él. Entonces degollará el novillo en presencia de Jehová, y los sacerdotes hijos de Aarón ofrecerán la sangre rociándola por encima y alrededor del altar que está a la entrada del tabernáculo de reunión." Aquí, podemos ver que la ofrenda por el pecado tenía que satisfacer tres condiciones para ser legal ante Dios.

Tenían que

(1) Preparar un animal sacrificial sin defecto (v. 3).
(2) poner su mano sobre la cabeza de la ofrenda quemada (v. 4)
(3) matar (desangrar) el sacrificio para expiación del pecado (v. 5)



En estos versículos de anteriores, debemos confirmar la ley de Dios que el pecado debía ser transferido a la cabeza del animal sacrificial por medio de la imposición de manos, antes de que este muriera. Es una verdad muy importante. Puedes encontrarlo así en muchas expresiones como "imponían las manos sobre la cabeza de la ofrenda por el pecado" para la remisión del pecado en los siguientes capítulos de Levítico. Levítico 16:21 dice, "Pondrá Aarón sus dos manos sobre la cabeza del macho cabrio vivo y confesará sobre él todas las iniquidades de los hijos de Israel, todas sus rebeliones y todos sus pecados. Así los pondrá sobre la cabeza del macho cabrio, y lo enviara al desierto por medio de un hombre destinado para esto."

Cuando Aarón, el sumo sacerdote imponía sus manos sobre la cabeza del macho cabrio, todos los pecados de los Israelitas eran transferidos a la cabeza del macho cabrio. Cuando un pecador imponía sus manos sobre la cabeza de un sacrificio, sus pecados eran transferidos a su cabeza. De la misma manera, cuando una persona es ordenada para el sacerdocio, un ministro pone sus manos sobre la cabeza de la persona para pasar el sacerdocio. Por lo tanto, "la imposición de manos" era el hecho de pasar los pecados sobre el sacrificio. Significa "pasar a."

Y entonces el animal debe morir desangrado, ya que "la vida de la carne en la sangre está. . . pues la misma sangre es la que hace expiación por la persona" (Levítico 17:11).

Sin embargo, los Israelitas eran demasiado débiles para ser expiados por todos sus pecados, ya que no podían evitar pecar cada día hasta el día en que morían, aunque ofrecían ofrendas por el pecado cada vez que pecaban. Así que Dios abrió otra puerta para que ellos pudieran ser perdonados de sus pecados una vez al año. Era el ritual del Día de la Expiación. En el Día de la Expiación, Aarón, el sumo sacerdote, imponía sus manos en la cabeza del chivo expiatorio para pasar los pecados anuales de todos los Israelitas, una vez por todo (Levítico 16:21).

Aarón era el representante de los Israelitas en ese entonces, ya que el imponía sus manos en la cabeza del chivo en lugar de todos los Israelitas. Cuando el mismo imponía sus manos sobre la cabeza del chivo, todos los pecados anuales de los Israelitas (aproximadamente de 2 a 3 millones por vez), estos eran pasados sobre la cabeza del chivo expiatorio a través de esta obra de la ley. Era un estatuto eterno para toda la humanidad (Levítico 16:29).

Esa era la "sombra de las buenas cosas que habrían de venir" (Hebreos 10:1). Ahora, Dios completó "las cosas buenas que habrían de venir" a través de Jesucristo. Veamos como Jesucristo cumplió Su pacto.

Primero, Dios Padre envió a Jesucristo en forma de hombre sin defecto como el Cordero de Dios prometido. Él es Hijo unigénito de Dios, y Él es Dios Santo también. Así que Él era perfecto para ser el Sacrificio de toda la humanidad, sin defecto.

Segundo, Él fue bautizado por Juan el Bautista en el río Jordán. Aquí, necesitamos saber quien fue Juan el Bautista quien bautizó a Jesús. Juan el Bautista era un descendiente de Aarón, el sumo sacerdote. El sacerdote Zacarías, padre de Juan nació en el linaje de Abías, el nieto de Aarón (Lucas 1:5, 1 Crónicas 24:10). Así que Juan el Bautista era un descendiente de Aarón, el sumo sacerdote. Esto quiere decir que tenía el derecho de ser sacerdote. Más aún, Jesús dio su aprobación sobre Juan para ser el mayor de entre toda la humanidad. "De cierto os digo que entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista. Todos los profetas y la Ley profetizaron hasta Juan" (Mateo 11:11. 13). Esto quiere decir que Juan es el último Sumo Sacerdote sobre la tierra y el representante legitimo de toda la humanidad, que Dios prometió y preparo.

El Antiguo Testamento lo profetizó. "Yo envió mi mensajero para que prepare el camino delante de mi" (Malaquías 3:1). "Acordaos de la ley de Moisés, mi siervo, al cual encargué, en Orbe, ordenanzas y leyes para todo Israel. Yo os envío al profeta Elías antes de que venga el día de Jehová, grande y terrible. Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y castigue la tierra con maldición" (Malaquías 4:4-6). Jesús dijo, "Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir" (Mateo 11:14).

Juan el Bautista era el Elías que había de venir y regresar a la gente a Jesucristo, preparándolos para aceptarlo a Él. Él nació seis meses antes que Jesús. Él dio el bautismo de arrepentimiento a la gente en el desierto, para preparar el camino del Señor. Él necesitaba guiar a la gente a recordar la ley y el sistema sacrificial del Antiguo Testamento, para prepararlos para su Salvador, Jesucristo. Así que Él bautizó a la gente y los hizo darse cuenta de que el Salvador vendría a tomar los pecados del mundo, a la manera de la imposición de manos. El bautismo de Juan llamó a los pecadores a regresar al Señor. Así que mucha gente escucho las palabras de Dios a través de Juan y abandonaron sus ídolos y regresaron a Dios, confesando sus pecados.



Entonces Jesús vino de Galilea a Juan en el Jordán para ser bautizado por él. Jesús dijo, "Permítelo ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia" (Mateo 3:15). Aquí, toda justicia es "dikaiosune" en Griego, y su significado es "equidad, justicia." Quiere decir que Jesús salvó a todos los pecadores de sus pecados de una manera absolutamente equitativa y justa. Para liberar a todos los pecadores de sus pecados de una manera absolutamente equitativa y justa, Jesús tuvo que tomar todos sus pecados a través de "la imposición de manos" de acuerdo al pacto, el cual Dios hizo en el Antiguo Testamento. Era la manera más adecuada para que Él tomara todos los pecados de la humanidad, recibiendo el bautismo de Juan. Ya que Jesús tomó todos los pecados del mundo a través de Su bautismo, al día siguiente Juan el Bautista testificó, "¡Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!" (Juan 1:29). El mismo Juan realizó el bautismo sobre Jesús por la imposición de manos. En el momento en el que Juan puso sus manos sobre la cabeza de Jesucristo, todo el pecado del mundo había sido pasado a Él de acuerdo a la ley de Dios.

Tercero, Él fue crucificado para la remisión de nuestros pecados. Antes de Su último aliento, Él dijo "¡Consumado es!" (Juan 19:30). Él derramó toda Su sangre para dar el pago de nuestro pecado. Y Él fue levantado de entre los muertos al tercer día, y ascendió al Cielo. Él borró todo el pecado del mundo, absolutamente con Su bautismo y Su sangre sobre la Cruz.

El Apóstol Pablo dijo, "Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras" (1 Corintios 15:3). Ahora, ¿entiendes como era ofrecido el animal del sacrificio por la remisión de pecados en el antiguo Testamento y porque es la sombra de las cosas buenas que habrían de venir?

Tenía que haber "la imposición de manos" antes de matar al animal sacrificial. Si alguien hubiera omitido "la imposición de manos en el sacrificio" cuando hacía una ofrenda por el pecado, ese alguien no habría podido ser perdonado de su pecado, debido a la falta de legalidad. Dios jamás hubiera recibido un sacrificio tan ilegal. Era en contra de la ley de Dios, el ofrecer un sacrificio omitiendo la imposición de manos.

Jesús vino a este mundo para limpiar todo nuestro pecado por Su acto de justicia (Romanos 5:18). Su acto de justicia fue que Él fue bautizado por Juan el Bautista para quitar el pecado del mundo y fue crucificado para dar la paga por el pecado. Él vino por Su bautismo y sangre. Pero desgraciadamente, la mayoría de los Cristianos conocen solo la mitad de Su acto de justicia. Debemos conocer toda la porción del Evangelio del agua y el Espíritu. Creer en Él, omitiendo una porción importante de Su Evangelio es ilegal y vacío.

El Apóstol Juan aclaro toda la porción de Su Evangelio en su primera Epístola. "Este es Jesucristo, que vino mediante agua y sangre; no mediante agua solamente, sino mediante agua y sangre" (1 Juan 5:6).

Nacemos con una naturaleza pecadora y pecamos hasta el último aliento. No podemos hacer otra cosa que pecar y no podemos escapar el juicio de Dios Nosotros, la humanidad estamos destinados a ir al infierno, "Por que la paga del pecado es muerte" (Romanos 6:23). Pero donde abundó el pecado, la gracia sobreabundó, "De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna." (Romanos 5:29, Juan 3:16).

Jesucristo, el Hijo de Dios vino a este mundo como el Cordero de Dios. Él tomó todo el pecado del mundo cuando fue bautizado por Juan el bautista en el Río Jordán. Como el representante de toda la humanidad, Juan puso sus manos sobre la Cabeza de Jesús, y en el momento, todo el pecado del mundo pasó a Jesús. Así, Jesús tomó todos nuestros pecados por Su bautismo y los cargó hasta la Cruz. Él derramó toda su sagrada sangre como pago por nuestro pecado y expío todos los pecados del mundo totalmente.

Así él gritó fuertemente, "¡Consumado es! Antes de Su último aliento sobre la Cruz. ¿Qué fue consumado por Jesús? Todo el pecado y su juicio fueron consumados por Su acto de justicia, en otras palabras, fuimos perdonados por Su bautismo y Su muerte sobre la Cruz. Jesucristo borró todo el pecado del mundo hace aproximadamente 2,000 años y ha consagrado un camino nuevo y vivo (Hebreos 10:20). Ahora es el tiempo de Su gracia. Quienquiera que crea en Su bautismo y Su muerte puede ser perdonado de todos sus pecados y tiene el morar interno del espíritu Santo (Hechos 2:38). ¡Aleluya!

¡Y que más diremos! Existen muchísimos versículos en la Biblia que aseguran Su Bautismo como la obra indispensable de justicia de Jesús para nuestra salvación (Mateo 3:13-17, 1 Pedro 3:21, Juan 6:53-55, Efesios 4:5, Gálatas 3:27, Hechos 10:37, etc.).

¿Crees esta verdad? ¿Estas limpio de pecado en tu corazón? ¿Acaso Jesús tomó todo nuestro pecado desde el nacimiento hasta ahora? ¿Entonces, ¿estas absolutamente santificado, por creer en Su bautismo y Su sangre?

La Cristiandad de la actualidad debe recobrar el evangelio del agua y el Espíritu. Quien quiera saber acerca del evangelio del agua y el Espíritu con mayor detalle, no dude en ponerse en contacto con La Misión Vida Nueva.

 

La Misión Nueva Vida

La Misión de la Nueva Vida es una organización no-denominacional, no lucrativa cuyo propósito principal es predicar la palabra de DIOS a cada ser humano. Su intención es entrenar discípulos de Jesús para extender el evangelio de nacer de nuevo del agua y del Espíritu.

Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo" (Mateo 28:18-20).

De acuerdo a esta Gran Comisión de nuestro Señor, los socios de The New Life Mission por todo el mundo están trabajando incasablemente para proclamar el evangelio del agua y el Espíritu en cada uno de sus países. Ya que muchos socios de The New Life Mission se levantarán en el futuro, el evangelio del agua y el Espíritu ciertamente será predicado hasta los confines de la tierra.

La Misión de la Nueva Vida (The New Life Mission), fundada por el Reverendo Paul C. Jong en 1991, es una organización misionera no denominacional sin fines de lucro. Su objetivo es predicar las palabras de Dios a toda la gente del mundo, a través de nuestro ministerio literario.

La casa Editorial Hephzibah es un ministerio de (The New Life Mission),  Su oficina principal se encuentra en: 48 Bon-dong Dongjack-ku, Seúl, Corea 156-060, e-mail  newlife@bjnewlife.org

El secretario general es el Pastor John Shin y existen muchas ramas y organizaciones cooperativas por todo el mundo.

Para esparcir el evangelio del agua (bautismo de Jesús) y el Espíritu que permite a la gente resolver su problema de pecado basado en la pura Palabra de Dios revelada en la Biblia, The New Life Misión ha estado traduciendo y publicando libros Cristianos gratuitos en varios idiomas.

El Ministerio de Literatura es una de las maneras más efectivas para predicar el Evangelio por todo el mundo. Así, nosotros hemos traducido la serie de los Libros Cristianos de Paul C. Jong a más de 45 de los idiomas más importantes, y seguimos traduciéndolos a muchos otros idiomas.
Según el mandamiento del Señor, "Gratis lo recibís, dadlo gratis"(Mateo 10:8), nosotros hemos regalado los libros Cristianos del Reverendo Jong a las personas que quieran leerlos. Estamos preparados para donar tantos libros como nuestros socios soliciten y nosotros pagamos los costos de envió. Hemos regalado cientos de miles de libros impresos a iglesias, organizaciones misioneras, hospitales, prisiones, librerías, ministerios y a laicos en más de 150 países.
Usted también puede compartir la Gracia del Señor con nosotros, participando en nuestros ministerios de literatura.
Nosotros también fundamos y apoyamos iglesias en donde los santos nacidos de nuevo viven una vida fiel de acuerdo a la palabra de Dios. Ayudamos a las iglesias del Señor a predicar el evangelio del agua y el Espíritu, obsequiándoles libros Cristianos. Delegamos en nuestros ministros el compartir Su gracia con cualquier grupo en el evangelio del agua y el Espíritu, todo por cuenta nuestra.

 

 

El Ministerio New Life Mission sostiene que Cristo ya pagó deudas pasadas, presentes y futuras de cada una de nuestras vidas. Si así lo creemos: seremos justificados, recién es cuando Dios nos considera sus hijos y dignos de recibir el Espíritu Santo, capaces de obrar los prodigios y milagros como los que hizo Cristo y aún más. Si no lo creemos estaremos destinados a muerte eterna, pues por nuestros méritos no seremos salvos. No creemos en doctrinas de sacrificios, humillaciones e incrementalismos espirituales.

Muchos han oido hablar de que Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida, pero pocos han comprendido su verdadero significado:
El camino pues quienes aspiramos hallar su reino solo lo haremos por Él.
La Vida porque solo mediante creerle a Él, una vez en su camino hallaremos la vida eterna.
¿Y que significa lo del medio? ...es decir la Verdad?
Cristo se hizo cargo de todo nuestro caudal de pecados, se hizo cargo de ellos en su bautismo y luego pagó por ellos con su sangre en la cruz, y a pesar de ello muchos no le creen esta Verdad, considerandose aún pecadores a pesar de repetir de palabra que Jesús pagó.
Si Jesús pagó la deuda del pecado habiéndonos dejado un saldo a favor por lo que nos resta vivir, tampoco es para excedernos en gastos, es decir que debemos "tratar" de santificarnos o de ser mejores, pero solo Jesús es quien nos santifica, quien nos ha perdonado ya en el pasado por los pecados que incluso aún no hemos cometido, solo con la condición de poder creer en esta Verdad de la cual consiste su Evangelio.
Aquellos que creemos en forma completa su Evangelio, tendremos el premio de la Vida Eterna, nos convertimos en Justos (o Justificados), recién es cuando Él nos considera sus hijos.

Aunque existen muchos Cristianos hoy, vemos que muchos de ellos de hecho solo van a la iglesia los Domingos, y en sus corazones no se encuentra ningún estándar claro ni Palabra de salvación. Pero Jesús dijo,

"De cierto, de cierto te digo que a menos que uno nazca de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios" (Juan 3:5).

¿Que significa aquí nacer de nuevo? Nacer de nuevo no es abandonar la vida pecadora de uno y comenzar una nueva vida después de creer en Jesús, como piensa la mayoría de la gente. Aunque esto sería bueno, esto en sí mismo no es nacer de nuevo, ni ser salvo. Cuando la Biblia nos dice que debemos nacer de nuevo del agua y el Espíritu, significa que "los pecadores deben arrepentirse, creer en el bautismo de Jesús y en la sangre de la Cruz, y así recibir la remisión del pecado en sus corazones y convertirse en justos." En otras palabras, significa nacer de arriba. Este no es un cambio que viene de los seres humanos, sino que es una transformación que viene de Dios.

En 1 Juan 5:6-8, la Biblia dice,

"Este es Jesucristo, el que vino por agua y sangre; no por agua solamente, sino por agua y sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad. El Espíritu, el agua y la sangre; y estos tres concuerdan en uno."

 Jesús vino a esta tierra por agua y sangre. Jesús nació del cuerpo de la Virgen María encarnado en carne de hombre, y cuando Él cumplió 30, Él fue bautizado por Juan el Bautista en el Río Jordán. Las obras de la salvación que nos hacen nacer de nuevo del agua y el Espíritu comenzaron con el nacimiento de Jesús, y mientras Él lavaba los pecados del mundo recibiendo Su bautismo de Juan el Bautista, el representante de la humanidad, en el Río Jordán.

Sabemos muy bien que Jesús fue condenado vicariamente en lugar nuestro derramando Su sangre sobre la Cruz. ¿Pero por qué Jesús, Dios Mismo quién era sin pecado, tuvo que soportar esta condenación sobre la Cruz? Existen causas y efectos en todas las cosas. El que Jesús muriera sobre la Cruz por nuestros pecados está muy relacionado al evento de Su bautismo, cuando Él fue bautizado por Juan el Bautista en el Río Jordán, lo cuál era una forma de la imposición de manos.

En el bautismo de Jesús esta escondido el misterio de la remisión del pecado, el misterio de nacer del agua y el Espíritu. Si, a pesar de esto, ignoráramos este bautismo de Jesús y no lo creemos, entonces nosotros mismos estaríamos traicionando la voluntad de Dios y abandonado nuestra propia salvación. Los libros Cristianos gratuitos de The New Life Misión dan una explicación clara del estándar de salvación asentándolo sobre cimientos bíblicos sólidos y reales, y ellos se dirigen a los conceptos básicos de la salvación como el nacer de nuevo del agua y el Espíritu.

      ¡Características de la series del Rev. Paul C. Jong!

            1. Mensajes Llenos de Fe que llevan el testimonio de la verdad, la que nos permite recibir la vida en el Espíritu.
            2. Libros ganadores de Almas que muestran claramente el camino para nacer de nuevo del agua y el Espíritu (Juan 3:5).
            3.Usted puede recibir este servicio absolutamente gratis sin cargo alguno. Sin ninguna obligación de su parte.

Después de revisar los libros en e-books, usted puede solicitar la versión impresa (libros en papel) de los títulos de nuestra organización.
Nosotros se los enviaremos gratis también.
La Misión de la Nueva Vida paga todos los gastos inclusive el franqueo. La serie de Libros Cristianos del Reverendo Paul C. Jong están estrictamente basados en las Escrituras. Ellos pueden ayudar a los lectores para renacer y establecer una fe firme en sus corazones. Sus libros han sido traducidos a más de 50 lenguas importantes y ellos serán continuamente traducidos a muchas lenguas más.

 

A través del bautismo de Jesús por Juan en el río Jordán, se transfirieron todos los pecados del mundo sobre Él. Y Su inmersión total en el agua simbolizada Su muerte y Su emersión del agua representó Su resurrección. En otras palabras, Jesús fue bautizado por Juan para tomar todo el pecado del mundo, pagó el precio del pecado y murió en la Cruz. Su muerte fue para pagar el precio por nuestros pecados y Su resurrección nos dio la vida eterna. Si nosotros no creyéramos que Jesús se llevó todos nuestros pecados a través de Su bautismo, nuestros corazones estarían llenos de pecado. En tal caso, ¿Cómo sería posible permanecer cerca de Dios? El evangelio de la remisión de pecados no es una doctrina de una denominación sino la verdad de Dios. Nosotros no podemos llevar nuestra fe sin el conocimiento perfecto, en otras palabras, nosotros no podemos vencer al mundo si nosotros realmente no consideramos que Jesús fue bautizado por Juan. Así como todo ser viviente necesita el agua para sostenerse vivo, nosotros necesitamos la remisión de pecados y el agua del bautismo de Jesús para vivir por la fe y entrar en el Reino de Cielo. Jesús tuvo que ser bautizado, murió en la Cruz y resucitó para salvarnos de nuestros pecados. Éste es el evangelio del agua y el Espíritu en el que debemos creer con todo nuestro corazón. Aunque Jesús fue crucificado con muerte de Cruz, Él no había hecho nada para merecer tal castigo. Él vino a este mundo para lavar nuestros pecados, fue bautizado a la edad de 30, y se volvió nuestro Salvador a través de Su muerte en la Cruz a la edad de 33. Dios quiso hacernos Sus hijos a la humanidad no importa cuan frágil y pecadores fuéramos. Por eso Jesús fue bautizado. Dios nos dio al mismo tiempo la remisión de pecados y el don del Espíritu Santo. “De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios” (Juan 3:5). Usted tiene que saber y creer que Jesús fue bautizado para lavar todos nuestros pecados. Aun cuando uno es un Cristiano nacido de nuevo, si uno no medita en la verdad que Jesucristo se llevó todos los pecados del mundo a través de Su bautismo, su corazón se ensuciará pronto. Debido a que nosotros somos seres corpóreos, somos responsables incluso de ser ensuciados por el pecado en la vida diaria. Por eso siempre tenemos que vivir por fe, meditando en el bautismo de Jesús, Su sangre, y Su resurrección. Esta fe nos levanta hasta el día en que nosotros entramos en el Reino del Cielo. Jesús no tenía opción sino ser bautizado y morir por nuestros pecados, así que debemos creer que haciendo esto, Él nos trajo la salvación. No hay nada más que podamos hacer sino creer en este bello evangelio para ser liberado de todos los pecados del mundo. Nosotros damos gracias al Señor que nos dio el evangelio del agua y el Espíritu. El regalo más grande que Dios nos dio fue enviar a Su Hijo unigénito para salvarnos de todos nuestros pecados a través de Su bautismo y sangre. La razón por la que nosotros no podíamos permanecer cerca de Dios y estábamos obligados a vivir apartados de Él era que nosotros teníamos el pecado en nuestros corazones. Jesús fue bautizado por Juan para llevarse todos los pecados del mundo y murió en la Cruz para quitar la pared de separación que había entre Dios y el hombre. La relación entre Dios y hombre fue restaurada por Su bautismo y sangre. Nosotros le agradecemos por estos regalos. El amor del padre físico hacia su hijo es grande, pero es incomparable al amor de Dios mediante el cual Jesús nos salvó a los pecadores. El bautismo de Jesús y Su sangre son ambos importantes. ¿Si no hubiera agua en este mundo, alguna cosa viviente sobreviviría? Sin el bautismo de Jesús, no habría nadie sin pecado en su corazón. Si Jesús no hubiera sido bautizado y si Él no se hubiera muerto en la Cruz, nadie habría recibido la remisión de pecados. Afortunadamente, Jesús fue bautizado e hizo el último sacrificio por nosotros. Aunque somos débiles y falibles, podemos recibir el Espíritu Santo creyendo en Su bautismo y sangre en la Cruz. Las personas que creen en el bautismo de Jesucristo y en su muerte en la Cruz pueden permanecer cerca de Dios, pueden orar y pueden alabarlo. Nosotros podemos ahora alabar al Señor y rendirle culto debido a que nos hemos vuelto Sus hijos. Ésta es la bendición y gracia de Dios. El evangelio del bautismo de Jesús y Su sangre en la Cruz es verdaderamente maravilloso. Todos nosotros podemos recibir la salvación y la vida en el Espíritu Santo creyendo en este bello evangelio.

 

Declaración de fe

 

 

Creemos en la Biblia, que consiste del Antiguo y Nuevo testamento, verbalmente esta inspirada por el Espíritu Santo, es infalible en los manuscritos originales y es la Palabra de Dios infalible y autoritaria.

Creemos que la Trinidad de Dios existe eternamente en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Creemos que Adán, creado a la imagen de Dios, fue tentado por Satanás, el dios de este mundo y cayó. Debido al pecado de Adán, todos los humanos han sido imputados con culpa, son totalmente depravados y necesitan la regeneración del Espíritu Santo para salvación.

Creemos que Jesucristo es Dios, nació de una virgen, fue bautizado por Juan el Bautista en el Río Jordán, crucificado como el Cordero de Dios, resucitado de los muertos y ascendió al cielo, donde actualmente Él es exaltado a la diestra de Dios Padre.

Creemos que la salvación consiste en la remisión de los pecados, la imputación de la justicia de Cristo y el regalo de vida eterna, recibida solamente por fe, aparte de las obras.

Creemos que el regreso de Jesucristo es inminente y que será visible y personal.

Creemos que los salvos serán resucitados a vida eterna y bendecidos en el cielo y que los no salvos serán levantados para eternidad y con un castigo consciente en el infierno.

Creemos que la iglesia, el cuerpo de Cristo, consiste solo de aquellos que han nacido de Nuevo, que son bautizados por el Espíritu Santo en Cristo en el tiempo de la regeneración, por quienes ahora Él intercede en el cielo y por quienes Él regresa.

Creemos que Cristo ordeno a la iglesia que fuera por todo el mundo y predicará el evangelio a toda persona, bautizando y enseñando a aquellos que creen.

 

Lo invitamos cordialmente a visitar nuestras  paginas en internet.

www.bjnewlife.org  

El bello Evangelio