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ARTICULOS TECNICOS |
BALANCEADO DE HELICES
Escrito originalmente por Keith Pickersgill, traducido y adaptado por Agustín Guillén
¿Baila tu motor una Bosanova durante el vuelo? Seguro que tus hélices
necesitan ser re-equilibradas.
Motivos de desequilibrado de la hélice:
* Las helices sufren desgaste y arañazos por lo que pueden necesitar
reequilibrarlas.
* Las hélices dañadas que han sido reparadas, seguro que hay que
reequilibrarlas.
* Un almacenaje incorrecto puede causarlo.
* Puede que venga desequilibrada de fábrica.
* Realizaste alguna modificación que requiere un re-equilibrado de la
pala.
* Añadirle algún tipo de materiales protectores, pueden desequilibrar
la pala.
Hay dos formas de equilibrar objetos giratorios, incluyendo las hélices:
* Equilibrado estático.- Cada pala debe pesar lo mismo y el centro de
gravedad debe encontrarse en el mismo radio.
* Equilibrado dinámico.- Incluso si está realizado un equilibrado
estático, una pala puede tener su centro de gravedad más adelantado
o retrasado dentro de la pala que la otra.
Cuanto más grueso sea el objeto giratorio (a lo largo de su eje de giro), y
mayor sea su energía rotacional, más crítico será el equilibrado dinámico. El
equilibrado dinámico requiere de un costoso material para realizarlo. Los
cigüeñales deben ser cuidadosamente equilibrados (estática y
dinámicamente). Afortunadamente para nosotros, las hélices son objetos
relativamente ligeros y giran mucho más lentamente que un cigüeñal, así que
vamos a concentrarnos tan solo en el equilibrado estático.
Todo lo que se necesita realizar con cualquier hélice normal es asegurarse
de que no pese más un lado que el otro. Si se suelta la correa de la
reductora y se permite que el eje de la hélice gire libremente, no debería
haber tendencia a girar hacía ningún lado.
Sin embargo, hay que ser más preciso que esto.
Yo tengo dos formas sencillas de testear el equilibrado de mis hélices:
- La primera es la más basta, pero sirve para la mayoría de los propósitos.
Consiste en buscar un rodamiento de bolas que encaje exactamente en el
agujero central de la hélice. Después hay que introducir un tornillo largo que
quede ajustádamente en el centro de este cojinete. Resbale el cojinete
hasta la cabeza de tornillo y coloca una tuerca en el otro estremo,
apretándola aunque permitiendo que el rodamiento gire libremente. Ahora
hay que colocar el tornillo o eje sujeto en un "tornillo de banco" que
sobresalga horizontalmente y, alineando una pala de la hélice comprobar que
no hay tendencia a caer ni subir. Hay que realizar lo mismo con cada pala de
la hélice. De esta manera se verá rápidamente si un lado es más ligero que el
otro.
- Para el segundo sistema (y más exacto), es necesario fabricarse un
pequeño balancin:
Este balancín se compone de tres partes:
1. - Un hilo de pescar de un 1 mm y un par de metros de largo.
- Un tornillo de 8 mm de diámetro y unos 50 mm de largo. En este
tornillo hay que taladrar un agujero exáctamente por su centro a
todo lo largo de su eje. El díametro de este agujero debe ser
aproximado al hilo de pescar.
- Un eje o "conector" de nylon, de madera o de aluminio, realizado con
torno, que ajuste en el agujero central de la hélice (usualmente de
una pulgada). Debe tener un lado plano para evitar que pase a través
del agujero y debe sobresalir unos tres centímetros del centro de la
hélice. En este eje hay que perforar un agujero en su mismo centro,
para colocar el tornillo y poder atornillar el tornillo
en el eje. También hay que pasar el hilo de pescar por el agujero del
tornillo.
Ahora hay que colocar el "invento" en el agujero central de la hélice,
hasta que haga tope y colgar todo (utilizando el sobrante del hilo de
pescar) del techo, de manera que la hélice quede a una altura cómoda
para trabajar.
La principal diferencia de este sistema con respecto al anterior es que la
hélice queda en un plano horizontal, no vertical; por lo que se puede testear
el equilibrado de una hélice no solo en relacción de la línea de las palas, sino
de todo el conjunto. Támbién si es una hélice de más de dos palas, se
comprueba en el acto cual es más pesada.
La sensibilidad de el sistema puede ajustarse atornillando el tornillo y
modificando cuanto sobresale de la hélice, pues la punta del tornillo es el
punto del que todo cuelga. Si la punta está mucho más alta que el centro de
gravedad de la hélice (aproximadamente en el centro de su grosor), el
invento será menos sensible. Si se baja la punta del tornillo, acercándola al
centro de gravedad, será más preciso; pero si se baja demasiado
(sobrepasando el centro de gravedad), la hélice girará en cualquier dirección.
Con este sistema, si tienes una hélice de dos palas, no solo puedes averiguar
si una pala es más pesada que la otra, además es posible saber si un lado de
cada pala es más pesado que el otro. La solución es "facil": añadir material al
lado más ligero, o retirarlo del más pesado, siempre y cuando no se
modifique la forma general de la hélice.
Si el desequilibrio es pequeño, simplemente habría que añadir un poco de
pintura en el lado más ligero (mejor una capa fina sobre la mayor superficie
posible). En cada capa de pintura, hay que dejar secar y reverificar el
equilibrado.
Una hélice bien equilibrada girará suavemente, con pocas vibraciones,
disminuyendo el stress del piloto y la fatiga del motor. No será posible
eliminar todas las vibraciones, especialmente en motores de un cilindro.
También vibrará el cigüeñal, el stator del encendido, la reductora y la
correa de la reductora. Estas piezas pueden ser equilibradas (incluso
dinámicamente) en un taller de equilibrado de ciguieñales de motocicletas.
Almacenamiento de las hélices
Si una hélice de madera se almacena en posición vertical por un periodo
largo de tiempo, es posible que se desequilibre. Esto puede ocurrir incluso
mientras está colocada en el motor, así que gira la hélice hasta una posición
horizontal si dejas sin utilizar el motor durante mucho tiempo.
No se sabe si es debido a la humedad de la madera, al efecto de la gravedad
o si es por un efecto capilar; pero la realidad es que el motor empezará a
vibrar.
Es normal guardar una hélice horizontalmente, pero aun así habría que
rotarla 180 grados cada pocas semanas.
La peor manera de guardar una hélice es apoyada en una pared como si
fuera un rifle, y la mejor es tumbada en una superficie nivelada.