Capitulo 35

"Una rival para Harry!! La pequeña entrenadora de dragones"

 

 

El sol estaba alto en el cielo, los cinco jóvenes caminaban tranquilos, sentían un gran alivio, más que nada al saber lo cerca que habían estado de ser carne picada para los Sneasel. Harry no había salido muy bien librado de la emboscada, el brazo aun le sangraba. Pero todos agradecían estar con vida y de una pieza.
-Mierda, por que tiene que estar tan lejos esa puta cuidad?! –Touji se estaba impacientando, más que nada al ver el penoso estado su compañero, quien se apretaba el brazo.
Rika y Shin caminaban adelante, este ultimo con una cara de mal humor muy acentuada.  Reiko seguía algo irritada, caminaba detrás de los demás con la mirada baja.
-La puta madre, Sneasel cogidos, esos pokemon no tendrían que existir –se quejaba Harry. Al oír esto Shin lo fulminó con la mirada.
-No es culpa de los Sneasel, ustedes se metieron en su territorio y sin preparación –comentó.
-Ahora decis que esos bichos diabólicos hicieron bien al atacarnos?! –exclamó Touji.
-Hicieron lo les dijo su instinto, son pokemon, y actúan como tales.
-Por favor, no empiecen a discutir –dijo Rika en tono cansado –ahora preocupémonos por llegar rápido a Blackthorn, Harry necesita atención médica, y también nuestros Pokémon.
Los dos entrenadores dieron  por finalizada la discusión con un cruce de miradas para nada amistosas.
Ya estaba entrada la tarde cuando el grupo divisó la inconfundible silueta de la imponente ciudad de Blackthorn.
De todas las ciudades que Touji había visto, esta era la más extraña. Un aura de misticismo parecía manar de ella.
En la entrada podían apreciarse dos enormes pilares de roca, en sus extremos estaban talladas las figuras de lo que parecían ser antiguos pokemon dragones.
Todos entraron, mirando admirados a su alrededor.
Las casas eran pequeñas y rusticas, hechas de roca, pero muy bien construidas, parecían de otra época y cultura.
Un viento frío pero agradable soplaba con fuerza, sacudiendo el cabello de los protagonistas.
-Finalmente estamos acá… -dijo Rika sonriente.
-La ciudad donde se consigue la última medalla… -continuó Shin-Tao
-La tierra de los dragones… -agregó Reiko.
-Si, si! Todo muy lindo, pero podemos ir al hospital??!! Ya me estoy mareando!
-Si es que hay uno… -dijo Touji –miren este lugar,  no saben lo que es la arquitectura moderna?? Hasta Ecruteak se veía mejor…
-Ey! –se quejó Reiko.
-Perdón, perdón.
Después de preguntar a varias personas, finalmente encontraron el hospital… que no era otra cosa que una pequeña clínica no muy diferente al resto de las casitas.
Ahí una enfermera gorda y amable trató la cortadura del brazo de Harry, calificándola de “grave” y soltando comentarios como: “Condenados Sneasel,  este es el quinto herido esta semana, no se porque Clair no se encarga de ellos de una buena vez”
-Quien es Clair? –preguntó Harry con un quejido, mientras la enfermera enrollaba un vendaje alrededor de su brazo.
-Clair es la Gym Leader de Blackthorn, experta en pokemon dragones –informó Rika.
-Dra-dragones? –repitió Touji asustado. Su experiencia con este tipo de pokemon era casi nula, pero conocía de sobra la tremenda fama de “indestructibles” y “superiores” que tienen los dragones.
-Patético –soltó Shin, al ver la cara de Touji.
-Nadie esta hablando con vos!!
-Bien, ya esta –dijo la enfermera –niño, no te esfuerces mucho.
-Gracias, no lo haré.
Los cinco salieron de la clínica.
-Bueno, donde esta ese gimnasio? –preguntó Touji.
-Pensás ir ahora?
-Claro, por qué no?
-No te lo recomiendo, esta líder no es como los que enfrentaste hasta ahora, necesitas prepararte.
-Vamos, Rika –dijo Touji en tono despreocupado –no te parece que ya soy lo bastante bueno?
-Si, pero…
-Todo esta controlado, no te preocupes –Touji hablaba con confianza, pero en el fondo estaba aterrado.
-Bueno, no se ustedes, pero yo me voy a descansar al centro Pokemon –dijo Harry mientras se iba alejando de ellos, en eso estaba cuando vio a un par de chicos discutiendo acaloradamente:
-Sos idiota?! Te digo que mi Voltorb es mas rápido que tu Abra de segunda!!
-No digas estupideces!! Hasta un Zubat podría ver que mi Abra es mejor!!
-No me hagas reír!!
-Te estas burlando de mi??!!
Ambos agarraron del cuello de la camisa al otro, con toda la intención de golpearse.
-Ey, ey! calmense un poco! –interfirió Harry
-Bah, dejalos que se maten, hace rato que no me divierto –dijo Touji sonriente.
-Vos no te metas pendejo!! –gritó el dueño del Voltorb –o acaso queres decir que yo estoy equivocado??
-Por supuesto, cualquiera se da cuenta de que no sabes una mierda!! –dijo el otro.
-Bien, vamos a arreglar eso así –respondió el primero –vos mocoso, vas a tener una batalla conmigo –dijo señalando a Harry.
-Eh? Y yo por qué??
-Así vamos a comprobar lo bueno que es mi Voltorb, que, tenes miedo?
-Claro que no, pero no tengo tiempo para perder con vos.
-Ya veo, hagámoslo mas interesante, si me ganas, te regalo este pokemon –dijo el chico mientras hacia girar una pokebola en su dedo.
-Que pokemon es? –preguntó Harry desconfiado.
-No te preocupes, es un pokemon muy bueno, pero, si yo gano… vos vas a tener que darme uno tuyo.
-No lo hagas Harry, no vale la pena, y además tenes que descansar –dijo Reiko.
-Si, hace lo que te dice tu amiguita, el nene tiene que descansar –dijo burlonamente.
-Ok –repuso Harry tranquilamente, y siguió caminando.
-Ehhh, no, espera!! Dale, no seas cagón, pelea!!
Harry soltó un suspiro –Ok, pero uno contra uno.
-Jajaja, perfecto, Voltorb, ve!
La bola bicolor soltó unas cuantas chispas y miró a todos con un gesto amenazante.
Harry soltó una risita despreocupada.
-Vamos Spark!
Elekid salió a la luz, agitando sus brazos enérgicamente.
 


-Voltorb,  rayo!
-Usa pantalla de luz!!
La bola disparó una descarga, que fue repelida casi en su totalidad por la pantalla protectora que desplegó Elekid.
-Puño trueno!
-Envestida!
El puño trueno no afectó demasiado a Voltorb, pero la embestida si dañó al pokemon de Harry.
-Ataque rápido!
-Vamos Voltorb, no dejes que ese cabeza de enchufe te gane!
Los pokemon saltaron uno contra otro, golpeándose con fuerza, pero Voltorb parecía más agotado.
-Mierda, no voy a ganar, pero vos tampoco! Autodestrucción!!
-Carajo! Spark, no lo dejes, terminalo con Rapidez!
Infinidad de estrellas luminosas salieron disparadas hacia el Voltorb justo cuando este empezaba a brillar, todas impactaron sobre el.
Tras unos segundos de suspenso, Spark vio con alivio como su oponente dejaba de brillar y se quedaba inmóvil.
Su dueño lo retiró, lleno de furia.
Harry hizo lo mismo con su Elekid, no sin antes felicitarlo por su buen trabajo.
Antes de que el derrotado pudiera retroceder, Touji le cerró el paso.
-No te olvidas de algo?
-Dame el pokemon –dijo Harry
El chico miró a su alrededor desesperadamente, buscando una vía de escape, pero no había tal. Finalmente soltó un suspiro de resignación.
-No te quejes, fuiste vos el de la idea, ahora cumplí –dijo Reiko.
-Esta bien… -el entrenador se acercó con la pokebola a Harry –cuidalo.
-Espera –dijo Harry cuando el otro estaba por irse, llevate a este –dijo mientras le daba una parkball.
-Eh? Por qué me das esto?
-Si me llevo tu pokemon así como así mi conciencia va a quedar sucia, así que llevate a ese Venonat.
-Venonat? Que pokemon berreta…
-Si no te gusta me lo devolves!!
-No, no, esta perfecto, bueno, mejor me voy –dijo mientras se alejaba con el otro chico.
Harry se quedó mirando la pokebola que acababa de recibir.
-Abrila, que quiero saber que es! –Exclamó Reiko
-Si, Harry, vamos –dijo Rika.
Touji también se acercó.
-Ok –dijo Harry –acá vamos.
La pokebola se abrió, y al extinguirse la luz que salió de ella, pudo apreciarse una particular criatura.
Era bípeda, parecía tener un sombrero y tenia un par de pequeños ojos negros.
El pokemon parpadeó un par de veces, y miró a Harry.
-Que es esta cosa?? –preguntó Touji.
-Vos tenes un pokedex, usalo –replicó Harry.
 

”Breloom, pokemon Hongo: Este pokemon tipo Hierba/ Luchador es la forma evolucionada de Shroomish. Posee una velocidad impresionante con sus puños, y unas técnicas que avergonzarían a los boxeadores profesionales, sin embargo, es una criatura tranquila que prefiere evitar peleas”
-Que interesante… -murmuró Harry.
Touji se agachó un poco hasta que su cara estuvo a la altura de la del pokemon, y se quedó mirándolo unos segundos.
-Y no podemos usarlo para hacer sopa?
La respuesta a eso fue tan rápida que nadie pudo ver bien, pero Touji estaba de espaldas en el suelo, agarrandose la cara.
-Que pasó??
-Ahhhh, hongo de mierda!! Me rompió la nariz!!
Harry estalló en carcajadas, mientras palmeaba en la cabeza a su nuevo Breloom.
-Este es el comienzo de una hermosa amistad –dijo riendo maliciosamente.


Touji se puso de pie de golpe:
-Ahora vas a ver, te voy a asar y comer!! –gritó mientras agarraba la pokebola de Volco.
-Bueno, bueno, tranquilos.
Cuando Harry terminó de reír y Touji de maldecir, decidieron tener un pequeño combate para ver de que era capaz el hongo.
-Veamos, con un simple combate será suficiente para saber sus capacidades –dijo Rika.
-Bien, ahora lo voy a prender fuego!
-Touji, no se te hace injusto usar un pokemon altamente entrenado y con ventaja de tipo contra el?
-Er…. Ok, entonces uso a Moro
-No!!
-Bueno, bueno, a Denkeshi? El tiene desventaja.
-Ok, a ver que tanto podes hacer –le dijo Harry a su pokemon, mientras este daba veloces puñetazos al aire.
-Pika!! –gritó el pokemon eléctrico al salir de su pokebola
Cruzó miradas con su oponente y tensó los músculos, en posición de ataque.
-Bien, empecemos, Denkeshi, usa onda true…
-Espera.
-Que pasa??
-Este… me prestas tu pokedex? Es que no se que ataques tiene.
Todos los presentes se dieron la cara contra el suelo ruidosamente.
-Toma, toma! –dijo Touji con impaciencia mientras le daba el aparato.
-Ok, ahora si! Denkeshi, onda trueno!!
-Usa ultra puño!!
Normalmente el Pikachu habría sido más rápido, pero el puñetazo le llegó a la cara antes de poder reaccionar. El roedor fue arrojado hacia atrás, comiendo tierra, pero clavó las patas en el suelo y contraatacó con una pequeña descarga, que cumplió con su objetivo de paralizar al Breloom.
-Nada mal… -dijo Rika al ver el buen movimiento del hongo.
Pikachu tomó impulso y saltó velozmente hacia su oponente, dejando un haz de luz blanca a su paso, el ataque rápido fue exitoso, y golpeó al pokemon de Harry en el estomago.
-Contador!!
Breloom agarró la cabeza de Denkeshi con sus pequeñas manos, aprovechando que lo tenía cerca, saltó y lo estrelló contra el suelo con todas sus fuerzas, levantando una polvareda.
-Mierda!!
-Muy bien!!
-Contador, muy interesante, recibe el ataque del oponente y lo regresa haciendo el doble de daño –dijo Rika.
Mientras peleaban, nadie había notado que una figura misteriosa los observaba, escondida tras unas rocas.
Pese a todo Denkeshi se incorporó, justo a tiempo para evitar un nuevo puñetazo.
-Basta de boludeces, usa rayo!!
Pikachu soltó una poderosa descarga, que impactó perfectamente sobre el pokemon hierba, este recibió bastante daño a pesar de su resistencia de tipo.
-Vamos, Breloom! Aguantá y usa Mega agotar!
-Hora de probar tu ataque nuevo, Den –dijo Touji sonriente.
Denkeshi tomó aire y miró el cielo fijamente, nubes negras ya se habían formado en el hasta ahora despejado cielo de Blackthorn, podía verse la electricidad que recorría esas nubes.
-Trueno!!!!
-CHUUUUUUU!!!
Un pilar de luz gigantesco calló directamente sobre Breloom, todos se cubrieron los ojos ante tal resplandor, la gente que pasaba por ahí se quedó viendo el espectáculo.
Cuando terminó, Breloom estaba en el suelo, la electricidad aun rodeaba su cuerpo.
Harry lo miró perplejo:
-Pero… como terminó así?? Tiene resistencia a la electricidad!
-Te olvidas de un detalle –dijo Touji mientras felicitaba a Denkeshi –mira el Pokedex.
Harry apuntó con el aparato a su derrotado monstruo, mientras en la pantalla aparecía: “Breloom, Nivel 27” acto seguido hizo lo mismo con Denkeshi: “Pikachu, Nivel 48”
-Ahora te das cuenta?
-Además no solo es eso, Touji lleva mucho tiempo combatiendo con Denkeshi, y conoce perfectamente sus capacidades, en cambio vos apenas acabas de conocer a ese Breloom –explicó Rika.
Harry se sentó en el suelo, contrariado, tras guardar a Breloom.
-Ja ja ja ja!! Que perdedor!! Como es posible que hayas sido derrotado por un Pikachu?? –gritó una voz chillona que salió de la nada.
Todos se voltearon hacia el lugar de donde provenía.
Una chica de aspecto particular estaba parada sobre una gran roca, mirando a todos con una mueca de desprecio en su cara, tenía el cabello corto y castaño claro, y su vestimenta indicaba que era de buena familia.
De un gran salto se paró frente al grupo.
-Quien mierda sos y con que derecho te dirigís a mi en ese tono??!!! –gritó Harry molesto.
-Me llamo Hikari, Hikari Hokari, entrenadora de pokemon dragones.
Harry estalló en carcajadas al oír el nombre de la chica.
-Wajajajaja “Hikari Hokari” Jajajajaja!!!!!
-Te parece divertido mi nombre? A mi me divierte la forma humillante en la que acabas de perder.
Harry dejó de reír.
-Y a vos que mierda te importa si gano o pierdo??
-Es que como entrenadora con clase que soy, me molesta ver una pelea con tan poco nivel. Y esos pokemon que tienen, Pikachu? Breloom? Que desagradable. Los verdaderos buenos entrenadores solo utilizan los mejores pokemon.
Esta vez Harry no fue el único que le lanzó una mirada de odio.
-Si somos tan patéticos no se que haces acá, pendeja engreída –soltó Touji.
Shin-Tao observaba sin decir nada.
-No estoy hablando con el fracasado del Pikachu, hablo con el fracasado máximo –dijo refiriéndose a Harry.
-Que?!
-Te reto a una batalla, así vas a aprender lo que es ser buen entrenador.
-Hoy ya tuve dos batallas, no tengo ganas de otra, y menos con una creída como vos.
-Ja, tenes miedo, se ve a simple vista.
-Si, claro –dijo Harry poniendo los ojos en blanco.
-Para tu información, deberlas considerar un honor que la discípula numero uno de Clair quiera pelear con vos.
-De Clair? –repitió Rika extrañada.
-Así es.
-Que interesante –dijo Harry sonriente –vamos a ver si no sos solo una habladora.
-OK, tres contra tres mocoso.
-Harry, estas seguro? –le dijo Reiko en voz baja
-Claro, no hay problema.
-Harry, si no ganas voy a golpearte hasta cansarme –lo amenazó Touji.
-Si, si, si.
La chica que parecía tener la edad de Harry sacó una Luxuryball, Harry saco su pokebola numero dos en orden.

-Ve Bagon!! Enséñales tu poder de dragón!!
-A ver si tu dragón puede competir con el mío! Kyo, Ataca!!
Hikari empalideció al ver tamaña bestia carmesí frente a ella, así como toda la gente que estaba por ahí.
Gyarados emitió un rugido que hizo vibrar la tierra, mientras su cuerpo soltaba chispas resplandecientes.
-Bagon, puede que sea grande, pero no es un verdadero dragón como vos! No te dejes intimidar! Usa garra dragón!!
-Baaaaag!! –gritó el dragoncito cabezón, mientras saltaba lo mas alto posible, con sus pequeñas garras brillando intensamente.


Gyarados se preparó para recibirlo, pero para su sorpresa, el salto de Bagon no alcanzó para llegar hasta la cabeza de Kyo, el monstruito se mantuvo unas milésimas de segundo en el aire, y después cayó.
Una gruesa gota de sudor apareció en la cabeza del Gyarados.
Harry se echó a reír.
-Solo fue una falla de cálculo, ahora, usa Foco energía!!
-Kyo, Usa Golpe con ese enano cabezón!
El monstruo acuático estiró su enorme cuerpo hacia su diminuto rival,  quien miró a su entrenadora, esperando una orden, pero al no recibir ninguna, tuvo que soportar el brutal ataque de Gyarados.
Shin frunció el entrecejo, mientras observaba la pelea.
Kyo volvió a erguirse, dejando visible la figura del pequeño dragón, quien se incorporó de entre el polvo, con expresión decidida.
Su ama parecía indecisa.
-Usa golpe de cabeza!!
-Furia dragón!
El pokemon de Harry arqueó el cuello para disparar, pero Bagon se le adelantó, salió disparado hacia el y le dio un duro golpe con su cabeza en plena cara, que resultó ser critico.
Kyo se tambaleó, dolorido.
-Jajajaja, mira como mi Bagon le da una golpiza a ese gusano rojo gigante.
-Vos sos la que tiene que mirar -replicó Harry sonriente.
Gyarados enfurecido acercó su cabeza hasta estar nariz con nariz de Bagon, y ahí mismo le disparó una llamarada azulada que lo envolvió por completo.
-Bagon!!!
Cuando el fuego se disipó, el dragoncito estaba tendido en el suelo, cubierto de quemaduras.

-Solo fue un golpe de suerte! –dijo Hikari mientras lo retiraba
Acto seguido infló una Friendball:
-Vamos, Haku mostrales lo que sabes hacer!!
De la esfera salió un Dratini bastante desarrollado,  se enrolló y soltó un gruñido.
-Un Dratini –dijo Reiko asombrada –donde lo habrá conseguido?
-Y ese Bagon que usó antes también es muy raro… -dijo Rika.
-Ja! Muy lindo el gusanito, pero mi Gyarados es mejor! Kyo, mordelo!
-Usa onda trueno!


El ataque de Haku fue más rápido y logró paralizar al monstruo de Harry, quien fue incapaz de moverse.
-Ahora terminalo con rayo!!
-Rayo??!! –repitió Harry.
Una poderosa descarga eléctrica impactó sobre Kyo, quien se estremeció. Cuando terminó, este aun estaba de pie, mirando amenazadoramente a su pequeño oponente, soltó un tremendo bramido, y se desplomó ruidosamente contra el suelo, levantando una nube de polvo.
Harry no podía creerlo, el dragón marino ocupaba completamente la calle, impidiendo el paso, por lo que su dueño lo retiró.
-“Tiene varios TMs” –pensó Harry.
-Y? ya te asustaste? Ese es el único pokemon decente que tenias?
-Ja, a ver que te parece este, Stantler, ve!!
El ciervo rasgó el suelo con su pezuña.
-Ese Bambie va a caer rapidísimo, Haku, enséñale tu Ciclón!
-Stantler! Pisotón!
El Dratini tuvo que apartarse rápidamente cuando el pokemon de Harry golpeó el suelo con sus patas, un pequeño Ciclón liberado por el dragoncito envolvió al ciervo, por no tuvo fuerza para separarlo del suelo.
-Vamos Haku! Ahora usa mirada maligna!
Los ojos del pokemon se volvieron rojos y malignos, pero esto no intimidó en lo más mínimo a Stantler.
-Competencia de miradas eh? Ok, entonces Hipnosis!
La mirada de Stantler se tiñó de un brillo azulado, y se fijó en la de Dratini.
Ambos se quedaron inmóviles, y tras unos segundos, el monstruo de Hikari comenzó a flaquear, sus ojos se cerraban. Finalmente cayó dormido, pero su dueña se negaba a retirarlo.
-Vamos, despertate!!
-Bien, terminemos con esto, Stantler, acaba con el!
El pokemon cargó a toda velocidad contra su oponente, con la cornamenta al ras del suelo, sus pezuñas levantaban polvo al galopar.
Dratini no despertaba.
-Retiralo,  va a recibir mucho daño si lo dejas –advirtió Rika.
.No! Haku puede hacerlo! –gritó Hikari, mas suplicando que afirmando.
Stantler ya casi estaba sobre el…
-Retiralo! –gritó Touji.
Hikari no se movió, Dratini despertó en ese momento, pero eso no impidió que recibiera el golpe de su vida; fue tan fuerte que salió volando más de cuatro metros de altura, para después rodar por el suelo, completamente derrotado.
-Levántate! Haku! Un Dragón como vos no puede perder con ese Bambie!
-No te das cuenta de que no puede?  Su derrota fue solo culpa tuya –dijo Reiko.
La niña guardó a su Dratini, llena de frustración, ante la mirada risueña de Harry.
-Muy bien, no voy a permitir esta falta de respeto hacia una entrenadora que será reconocida como la mejor en Pokemon Dragones, ahora verán de lo que soy capaz!
-Uuhhhh –dijo Harry burlonamente –Tiemblo ante esas duras palabras.
-Reite mientras puedas, niñito, ataca Vibrava!!!

Un pokemon de extraña apariencia se hizo visible, era como una enorme libélula, pero con rasgos de reptil, sus alas se batían a tal velocidad que era imposible ver su movimiento.
El monstruo soltó un chillido que sin problemas pudo haber destrozado varias ventanas.
-Hace callar a esa cosa! –gritó Harry mientras se cubría los oídos.
-Nunca había visto a ese Pokemon… -murmuró Rika asombrada.
-Vamos a enseñarles lo que pasa cuando alguien se atreve a burlarse de nosotros, Vibrava, bajo tierra!!


-Stantler, dale un pisotón!
Stantler corrió hacia su rival a toda marcha y  se alzó sobre sus patas posteriores, listo para aplastarlo, pero solo golpeó el suelo polvoriento. Vibrava esta a su lado.
-“Es muy rápido!” –pensó Harry.
El ciervo no se dejó estar y torció la cabeza hacia su oponente, listo para darle una cornada, pero este ya no estaba ahí, se había sumergido en la tierra, como si fuese agua.
-Que?! No es un pokemon volador?! –dijo Touji.
El pokemon de Harry miraba con nerviosismo a su alrededor, sin saber por donde saldría Vibrava.
-Stantler, no te quedes quieto!
Cuando reaccionó, ya era demasiado tarde, el Dragón salió justo debajo de el, dándole un terrible golpe en el estomago.
-Cuidado!!
-Ahora terminalo! –gritó Hikari.
Vibrava se colocó volando sobre la cabeza del ciervo, y ahí mismo escupió una llamarada verde-azulada muy extraña, algo similar a la de Gyarados, pero con otra intensidad, Stantler se vio completamente atrapado en el ataque, Harry no podía verlo entre tanto fuego que lo envolvía.
-Dale el golpe de gracia con tu Tumba de Arena! –ordenó la chica sonriente.
El insecto-dragón dejó de vomitar flamas, para después ponerse a volar en círculos a una velocidad tremenda, lo hacia tan rápido que su figura ya no se distinguía, solo podía verse una especie de circulo verde, que pronto se transformó en un torbellino de arena.
Stantler se estaba incorporando trabajosamente, cuando toda esa arena cayó sobre él, dejándolo enterrado.
-Mierda! Stantler!!!
Vibrava dio unas volteretas en el aire y soltó un “alegre” chillido.
Harry vio parte de un asta de su pokemon que sobresalía de entre la montaña de arena,  y apuntó ahí con el rayo de luz de su pokebola para regresarlo.
-Ese mosquito no es ningún debilucho… -dijo Touji sorprendido.
-Espero que a tu Bambie le guste comer arena –se burló Hikari.
-Y yo espero que a tu bicho le gusten las piedras, por no sabes las que se va a tragar! –gritó mientras inflaba su pokebola numero tres. La arrojo hacia el cielo despejado, y de ella salió un pokemon muy grande, que soltó un espeluznante grito.
-Kenji, enséñales lo que podes hacer!!
El Aerodactyl asintió con la cabeza, al tiempo que batía sus enormes alas rocosas. Ya no era el mismo Pokemon de mirada amigable que había salido de ese huevo camino a Ecruteak, había crecido, había madurado, y su carácter juguetón se había transformado poco a poco en ferocidad.
-No me asustas con esa cosa, Vibrava, quemalo con tu Aliento de dragón!
-Kenji,  usa Agilidad!
El monstruo volador se concentró unos instantes para potenciar su velocidad, y giró velozmente justo cuando Vibrava disparaba su ataque sobre él.
-No lo dejes un segundo! –ordenó Hikari.
Aerodactyl  torció bruscamente de dirección al ver venir otro Dragoaliento, que pasó a escasos centímetros de el. Pero el insecto no tenia pensado dejarlo ser, siguió  disparando incansablemente, Kenji esquivaba con magnificas piruetas y giros. Aunque lo intentaba, su oponente no pudo igualar su velocidad, pero su insistencia logró que uno de sus ataques diera en el blanco.
Kenji soltó un grito de dolor, su ala derecha tenía una quemadura muy fea.
-Ya lo tenemos!  Usa Finta!
Vibrava se desvaneció como una sombra  y súbitamente apareció sobre Kenji, golpeándolo.
-Kenji, no lo dejes, usa tu Ataque de ala!!
El Monstruo prehistórico se volvió hacia su rival, que se aun estaba muy cerca. Este reaccionó a tiempo y se apartó a toda prisa, volando verticalmente. Sin embargo Kenji se impulsó como un rayo hacia el, imitando su vuelo, el Ataque Ala fue tan brutal, que se le desprendieron varios trozos de las alas del insecto, quien se precipitó contra el suelo, aturdido.
-Muy bien!! –gritó Harry.
-Vibrava, aguantá!!
El Dragón cayó pesadamente, sus alas de insecto destrozadas se agitaron un poco cuando intentó levantarse, en un esfuerzo por retornar al combate, era lastimoso verlo.
Incluso a Harry le dio pena.
-Mejor rendite, ese bicho no puede más.
-No!! Vamos Vibrava, no podemos perder con este insignificante entrenadorcito!
-No seas idiota!! –Gritó Reiko –no fue suficiente con lo que le pasó a tu Dratini?! No te importa nada lo que les pase a tus pokemon??!!
El sonido de las alas agitándose se detuvo, Vibrava se desplomó.
-No… no puede ser… -murmuró Hikari –no puedo perder contra este vulgar novato.
-Ja, este “vulgar novato” te dio una paliza, estas conforme? –dijo Harry burlonamente, pero la mano de Rika en su hombro lo detuvo.  Su mirada parecía decir “ya fue suficiente”, por lo que Harry se calló.
-Eso es lo que recibís por querer hacerte la “gran entrenadora” la próxima pensalo mejor –dijo duramente Touji.
Shin se limitaba a observar a la chica detenidamente. Como escrutándola con sus fríos ojos.
Hikari tenía la mirada clavada en el suelo, retiró a Vibrava, llena de vergüenza y frustración.
-Y eso de que sos discípula de Clair… -dijo Rika –da la casualidad de que me contaron que desde hace años que ella no acepta discípulos…
Hikari no supo que decir, pudo haber gritado, pero eso no la habría ayudado.
-Ya veo, así que todo era un invento… -dijo Reiko.
-Al final la “entrenadora legendaria” resulto ser solo una pendeja mimada sin nada que hacer –soltó Harry.
Eso fue mas de lo que la niña pudo soportar, dio media vuelta y salió corriendo sin mirar atrás.
-Mmm… creo que fuimos demasiado duros… -empezó a decir Touji.
-Nada de eso, ella fue la que vino acá a joder queriéndose hacer la superada –dijo Harry cruzándose de brazos.
-Se lo merecía –convino Reiko asintiendo con la cabeza.
-No estoy tan segura… esa chica… -dijo Rika en voz baja –Shin, que opinas?
Todos se volvieron hacia el, ya que hacia rato que no decía nada, pero para su sorpresa, el ya no estaba ahí.
La tarde había caído, y hacia bastante frío en ese pueblo de montaña.
-Bah! Tenia que ser ese Chino forro queriéndose hacer ver con sus desapariciones “mágicas” –dijo Touji molesto mientras caminaba, con las manos detrás de la nuca.
-Donde se habrá metido ahora? –preguntó Reiko.
El grupo se dirigía al centro pokemon, las estrellas brillaban intensamente sobre sus cabezas.
-No importa, debe andar por ahí –dijo Harry despreocupadamente.
Rika parecía pensativa.
-Mierda! –gritó una voz mientras un pequeño puño golpeaba la orilla del agua.
Se encontraba en un lugar oscuro y silencioso, una enorme cueva, cuyas paredes de roca caliza resplandecían,  había humedad en el aire, y de la entrada del lugar, un camino bordeado con estatuas que representaban pokemon dragones conducía a una especie de templo, que estaba rodeado por un enorme lago de aguas negras y heladas.
Ese lugar sagrado era conocido como el Dragón Den, donde muchos de los mejores entrenadores de estos pokemon iban a entrenarse para perfeccionar sus habilidades.
Hikari estaba agachada al borde de la orilla, en la parte más apartada y oscura del lugar, detrás del Templo.
-Mierda –repitió con la voz mas apagada. Nunca se había sentido tan humillada en su vida. Miró un segundó sus pokebolas, que tenia sobre sus manos, y no pudo evitar que lagrimas de impotencia y frustración cayeran sobre ellas.
Repentinamente, su rostro denotó ira.
-Todo es por su culpa!! –gritó, se puso de pie e hizo un ademán de arrojarlas al agua, pero una mano le aferró el brazo.
-Si crees eso quiere decir que no has aprendido nada hoy –dijo una voz fría.
-Y vos quien… -comenzó a decir Hikari, mientras se volvía enojada hacia el desconocido.
-Que es lo que buscas? –preguntó el joven con voz enigmática.
-Yo busco… -Hikari se detuvo unos segundos –Busco hacerme mas fuerte –finalizó.
-Eso es lo que estas buscando, estas segura?
-Si! –respondió ella con decisión –Yo quiero… quiero volverme fuerte a como de lugar!!!
El desconocido sonrió.
 

Continuará….