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         Boulevard 
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       Con un trazado que interrumpe la monotonía del damero colonial el Boulevar Roca es una reconocida postal de Río Cuarto. De Valsecchi a La Estación -ahora El Andino- esas seis cuadras tienen también un significado especial para el ambiente del Imperio. Cuántas veces hemos caminado por sus veredas o nos hemos sentado en sus bancos (como los vamos a extrañar) esperando la mirada que anuncia el comienzo de una noche... (para que decirlo con palabras). Idas y vueltas, a veces muy concurrido, a veces menos, desplazado temporariamente por otro lugares, el Boulevar fue y será "el lugar de yiro". Por eso este nombre para esta sección. Un homenaje y una continuidad. Bienvenidos al ciber-boulevard: el Imperio Gay.  | 
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       Historia  
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       En los tiempos que corren Río Cuarto no tiene ningún lugar exclusivamente gay pero si hay algunos que concentran gran cantidad de locas. Quién sabe, con un poco de suerte, quizás puedas levantar algo. "SARAOS" Av. Marconi y Cabrera Kefren Rivadavia y Sarmiento El Alma (ex El Ojo) Bolivar al 300  | 
  
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       El Boulevar La Terminal La Plaza Roca Calles Constitución y Sobremonte desde la Plaza a La Terminal  Si estás dispuesto a pagar: Boulevar y Lavalle yiro virtual:  | 
  
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       Ser gay nunca fue fácil. En un mundo machista y en un cultura occidental 
          que aunque lo intenta la políticamente correcta pluralidad no la alcanza 
          nunca, ser diferente siempre fue un problema. Ahora, alguna de los inconvenientes 
          que sufren las locas del mundo entero aquí se ven algo aumentados. Claro 
          no somos Afganistán, si sirve de consuelo hay lugares peores, pero como 
          dicen las abuelas -y las locas viejas- "pueblo chico, infierno grande". Dónde juntarse. Esto siempre fue un gran problema. Dónde encontrarse 
          con amigos, ir a tomar algo, salir bailar, sin tener que someterse a 
          la mirada de la tan abierta y pluralista gente del lugar cuyo más suave 
          comentario suele ser "qué hacen acá estos putos de mierda". Muchas veces 
          hubo lugares de ambiente, y aunque se anuncia otro posible boliche ahora 
          no hay nada. Los boliches a veces tampoco fueron una garantía: acostumbrados 
          a la vuelta del perro, los autos desfilaban en fila india para ver quien 
          entra; y si no alcanzaba no importa, esta nueva casta de viejas chusmas 
          de los remiseros difundirían las novedades (sin perder la oportunidad 
          de hacer un levante protegidos con la excusa de estar trabajando).  Conocer gente es otro drama. Donde encontrarlo. Si te gusta yirar en la calle no pretendas salir y conocer a alguien en diez minutos o en media hora o en una, o... bueno a no desesperar tampoco. Nuestros lugares de yiro no son tan concurridos como las calles de cualquier gran ciudad y hay que tener un poquito de paciencia. Cuantos zapatos gastados para nada. Ahora por suerte hay otros métodos. La página de contactos de Imperio Gay, el chat. Hay que intentar por todos los medios. Ponerse de novio. Yirando en la calle, por contactos, chateando, 
          a través de un amigo o como sea logramos conocer a alguien. Una noche 
          de sexo de vez en cuando es factible, pero ponerse de novio es otra 
          cosa. La laboriosa búsqueda a partir de todos los medios disponibles 
          seguramente dio como resultado el encuentro con alguno de los siguientes 
          especimenes.   |