"Especialistas aseguran que la radiación de antenas telefonicas puede causar problemas a la salud"

Existe una gran preocupación por parte de la población con respecto a la instalación de antenas telefónicas en barrios residenciales. A veces solo se refiere al aspecto estético,  pero en muchas ocasiones tiene que ver con el miedo a ser afectado por la radiación emitida. Solo en Viña del Mar, existe un promedio de 54 torres de este tipo cada 11 cuadras.

Varios especialistas aseguran que, si bien las antenas son un tipo de fuente que puede resultar inquietante y preocupante por su reciente implantación, simplemente asusta su presencia. Existe una diferencia entre ondas eléctricas ionizantes y no ionizantes, las primeras traen consigo consecuencias negativas. Las antenas telefónicas pertenecen al segundo grupo, que no reporta ningún riesgo.

Norma Canales ha vivido gran parte de su vida en Maipú, y por causa del creciente boom de la telefonía móvil, su barrio paulatinamente se ha visto invadido por estas instalaciones.
A causa de esto, desde hace varios años se encuentra trabajando activamente junto a la organización ecológica RENACE, con el fin de detener el excesivo establecimiento de estos artefactos.

¿Cuál es la razón por la que existe esta oposición ante la instauración de antenas telefónicas?

Como todas las cosas, siempre existen diversas posturas. A muchos vecinos les es indiferente este tema. Algunos sacan provecho de esto ganando algunos pesos. Pero el tema de fondo no pasa por lo estético sino por los serios daños a la salud que pueden surgir a causa de esto.

Estos daños a la salud de los que habla. ¿Cuáles vendrían siendo? Y ¿Cómo afectan la vida de las personas?

Existe mucho temor hacia el tema, sobre todo porque se cree que las antenas pueden ayudar a la aparición de diversos tipos de cáncer. Lo que no es menor. Muchos de los vecinos que viven en barrios de antenas han sufrido muchos otros problemas desde que pusieron esos aparatos.

Varios expertos y médicos han descartado totalmente un posible daño a la salud a causa de esto. ¿Existirá entonces alguna falta de información hacia las personas?

Para nada, de hecho eso no es del todo cierto.  Hace poco unos especialistas (chilenos) aseguraron que las antenas pueden causar severos daños a la salud. Cáncer, depresión, Stress y otros problemas psicológicos son solo algunos de los males que podrían aparecer. Nadie debería vivir en la misma cuadra de estas torres, por el peligro que éstas representan a la salud.

Pero de ser así, ¿Por qué existe tan poca preocupación a nivel global sobre el tema?

Lo que pasa es que este es un problema relativamente nuevo. No hace mucho las personas apenas sabían de qué trataban estas antenas. Los daños por exposición a estos artefactos surgen tras un promedio de 30 años de exposición continua. Es por eso que recién hoy, estamos siendo testigos de las consecuencias.

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Quienes se exponen de forma sucesiva y constante a la contaminación radioeléctrica se encuentran mucho más propensos a adquirir cáncer. Hay que reconocer que no existe algo que asegura particularmente que las antenas lo causan, pero sí se ha asegurado que en las plataformas de las antenas se genera un campo radioeléctrico que  a la larga es peligrosísimo.

¿Qué medidas o mejorías buscan lograr respecto a este asunto?

En Chile existe más de 4 mil antenas y cerca del 75% se encuentra en sectores urbanos y residenciales. Lo que queremos es que se genere una real preocupación en torno al tema. Que se tome conciencia por parte del gobierno y las empresas hacia las personas. Que se respete nuestro derecho a vivir y nuestra libertad.

¿Qué está haciendo la Red Nacional de Acción Ecológica (RENACE) al respecto?

La denuncia de antenas clandestina es pan de todos los días. La organización no solo busca que se respete el espacio de las personas sino también el cuidado del medio.  Si, es cierto que la irradiación de las antenas en nuestro país está en la norma, pero aun así queremos que se genere una reflexión y un marco legal apropiado para la operación y emplazamiento en forma segura y responsable de estas antenas. Una de nuestras propuestas es que las empresas se pongan de acuerdo para instalar torres en común y así evitar la actual invasión que afecta nuestras calles.