Función de los genes: el ADN y
el código de la vida |
Gen |

|
El código genético
|
Definicion
de Código genético |
ADN
|
Hebras de ADN |
Replicación del
ADN |
Herencia humana |
Herencia citoplasmática |
Herencia cuantitativa |
Cromosoma |
Ligamiento genético y mapa
genético |
Sexo y ligamiento sexual |
Secuencias repetidas
|
Ribonucleótidos |
Desoxirribonucleótidos |
Regulación de los genes |
La transmisión de genes
|
Genes en poblaciones
|
Genotipo |
Fenotipo |
|
|
|
Función de los genes: el ADN y
el código de la vida
Después de que la ciencia de la genética se
estableciera y de que se clarificaran los patrones de la herencia a través
de los genes, las preguntas más importantes permanecieron sin respuesta
durante más de cincuenta años: ¿cómo se copian los cromosomas y sus genes de
una célula a otra, y cómo determinan éstos la estructura y conducta de los
seres vivos? A principios de la década de 1940, dos genetistas
estadounidenses, George Wells Beadle y Edward Lawrie Tatum, proporcionaron
las primeras pistas importantes. Trabajaron con el hongo Neurospora y
Penicillium, y descubrieron que los genes dirigen la formación de
enzimas a través de las unidades que los constituyen. Cada unidad (un
polipéptido) está producida por un gen específico. Este trabajo orientó los
estudios hacia la naturaleza química de los genes y ayudó a establecer el
campo de la genética molecular.Desde hace tiempo se sabe que los cromosomas
están compuestos casi en su totalidad por dos tipos de sustancias químicas,
proteínas y ácidos nucleicos. Debido en parte a la estrecha relación
establecida entre los genes y las enzimas, que son proteínas, al principio
estas últimas parecían la sustancia fundamental que determinaba la herencia.
Sin embargo, en 1944, el bacteriólogo canadiense Oswald Theodore Avery
demostró que el ácido desoxirribonucleico (ADN) era el que desempeñaba esta
función. Extrajo el ADN de una cepa de bacterias y lo introdujo en otra
cepa. La segunda no sólo adquirió las características de la primera sino que
también las transmitió a generaciones posteriores. Por aquel entonces, se
sabía que el ADN estaba formado por unas sustancias denominadas nucleótidos.
Cada nucleótido estaba compuesto a su vez por un grupo fosfato, un azúcar
conocido como desoxirribosa, y una de las cuatro bases que contienen
nitrógeno. Las cuatro bases nitrogenadas son adenina (A), timina (T),
guanina (G) y citosina (C).En 1953, el genetista estadounidense James Dewey
Watson y el británico Francis Harry Compton Crick aunaron sus conocimientos
químicos y trabajaron juntos en la estructura del ADN. Esta información
proporcionó de inmediato los medios necesarios para comprender cómo se copia
la información hereditaria. Watson y Crick descubrieron que la molécula de
ADN está formada por dos cadenas, o filamentos, alargadas que se enrollan
formando una doble hélice, algo parecido a una larga escalera de caracol.
Las cadenas, o lados de la escalera, están constituidas por moléculas de
fosfato e hidratos de carbono que se alternan. Las bases nitrogenadas,
dispuestas en parejas, representan los escalones. Cada base está unida a una
molécula de azúcar y ligada por un enlace de hidrógeno a una base
complementaria localizada en la cadena opuesta. La adenina siempre se
vincula con la timina, y la guanina con la citosina. Para hacer una copia
nueva e idéntica de la molécula de ADN, sólo se necesita que las dos cadenas
se extiendan y se separen por sus bases (que están unidas de forma débil);
gracias a la presencia en la célula de más nucleótidos, se pueden unir a
cada cadena separada bases complementarias nuevas, formando dos dobles
hélices. Si la secuencia de bases que existía en una cadena era AGATC, la
nueva contendría la secuencia complementaria, o "imagen especular", TCTAG.
Ya que la "base" de cada cromosoma es una molécula larga de ADN formada por
dos cadenas, la producción de dos dobles hélices idénticas dará lugar a dos
cromosomas idénticos.La estructura del ADN es en realidad mucho más larga
que la del cromosoma, pero se halla muy condensada. Ahora se sabe que este
empaquetamiento se basa en diminutas partículas llamadas nucleosomas, sólo
visibles con el microscopio electrónico más potente. El ADN está enrollado
secuencialmente alrededor de cada nucleosoma formando una estructura en
forma de rosario. Entonces la estructura se repliega aún más, de manera que
las cuentas se asocian en espirales regulares. Por esta razón, el ADN tiene
una configuración en espiral enrollada, parecida al filamento de una
bombilla.Tras los descubrimientos de Watson y Crick, quedó el interrogante
de saber cómo el ADN dirigía la formación de proteínas, los compuestos
principales de todos los procesos vitales. Las proteínas no son sólo los
componentes principales de la mayoría de las estructuras celulares, sino que
también controlan casi todas las reacciones químicas que se producen en la
materia viva. La capacidad de una proteína para formar parte de una
estructura, o para ser una enzima que influye sobre la frecuencia de una
reacción química particular, depende de su estructura molecular. Esta
estructura depende a su vez de su composición. Cada proteína está formada
por uno o más componentes denominados polipéptidos, y cada polipéptido está
constituido por una cadena de subunidades llamadas aminoácidos. En los
polipéptidos hay veinte tipos distintos de aminoácidos. Al final, el número,
tipo y orden de los aminoácidos en una cadena determina la estructura y
función de la proteína de la que forma parte.
|
ADN
Siglas del ácido desoxirribonucleico, formado
por un azúcar (2- desoxi-D-ribosa), ácido fosfórico y bases nitrogenadas
(adenina, guanina, citosina y timina). Su estructura es la de una doble
hélice en la que las bases se encuentran situadas en el interior de la
molécula y los grupos fosfato se disponen en el exterior. Las bases
nitrogenadas se unen siempre del mismo modo (adenina con timina y guanina
con citosina) a través de puentes de hidrógeno. La estructura se mantiene
estable gracias al apilamiento de las bases en el centro de la molécula. Las
dos hebras que forman la cadena presentan orientaciones opuestas y pueden
separarse mediante la acción del calor o de determinadas sustancias químicas
(por ejemplo la urea), dando lugar al proceso llamado desnaturalización, que
es reversible, es decir, permite recuperar la estructura helicoidal (renaturalización).
La temperatura a la que la molécula de ADN se desnaturaliza es distinta en
cada especie de organismo. El ADN es el soporte físico que contiene toda la
información genética de un organismo, definiéndose como gen cada una de las
porciones de su molécula que se pueden traducir en una proteína. El orden en
que se presentan las cuatro bases es el que determina el código genético. El
ADN se presenta físicamente en el núcleo de la célula empaquetado a
distintos niveles, formando los cromosomas.Macromolécula catenaria de
carácter acídico que contiene ácido fosfórico, azúcar y bases nitrogenadas y
actúa en el almacenamiento y en la transferencia de la información genética.
Hay dos tipos de ácidos nucleicos: el ácido desoxirribonucleico (ADN) y el
ácido ribonucleico (ARN).Son componentes principales de las células, y
constituyen, en conjunto, entre el 5 y el 15% de su peso seco. Los ácidos
nucleicos también están presentes en los virus, formando complejos con
proteínas, que pueden infectar a una célula huésped específico y replicarse
en su interior. Reciben la denominación de ácidos nucleicos porque el ADN
fue aislado por primera vez del núcleo celular, pero tanto el ADN como el
ARN se encuentran también en otras partes de las células.Son cadenas
constituidas por unidades monoméricas llamadas nucleótidos, siendo
dexorribonucleótidos.Los monómeros constituyentes del ADN y
ribonucleótidos.Los constituyentes del ARN. Los distintos ácidos nucleicos
difieren en la secuencia de bases heterocíclicas características de sus
nucleótidos. Los nucleótidos se unen entre sí mediante enlaces covalentes
formando la estructura covalente de las cadenas de ácidos nucleicos.Acido
nucleico constituido por unidades repetitivas de desoxirribonucleótidos. El
ADN fue aislado por primera vez de las células del pus y del esperma de
salmón, y estudiado intensamente por el suizo Friedrich Miescher, en una
serie de investigaciones comenzadas en 1869. Lo llamó nucleína debido a su
participación en el núcleo celular. Se necesitaron casi 70 años de
investigación para poder identificar por completo los sillares principales y
la estructura del esqueleto de los ácidos nucleicos.Las moléculas de DNA de
diferentes células y virus varían en la proporción de los cuatro tipos de
monómeros nucleotídicos, en las secuencias nucleotídicas y en los pesos
moleculares. Además de las cuatro bases principales (adenina, guanina,
timina y citosina) halladas en todos los ADNs, pequeñas cantidades de
derivados metilados de estas bases, están presentes en algunas moléculas de
ADN, particularmente en las de los virus. Los ADNs aislados de diferentes
organismos tienen normalmente dos hebras que aparecen en una estructura
duplohelicoidal (helicoidal dextrógira), mantenida por enlaces de hidrógeno
entre una purina de una cadena con una pirimidina de la otra. El ADN es
portador de la información genética, que está codificada en la secuencia de
bases. Está presente en los cromosomas y en el material cromosómico de
orgánulos celulares como mitocondrias y cloroplastos, y también está
presente en algunos virus.
|
El código genético
Desde que se demostró, que las proteínas eran
producto de los genes, y que cada gen estaba formado por fracciones de
cadenas de ADN, los científicos llegaron a la conclusión de que, debe haber
un código genético, mediante el cual, el orden de las cuatro bases
nitrogenadas en el ADN, podría determinar la secuencia de aminoácidos en la
formación de polipéptidos. En otras palabras, debe haber un proceso mediante
el cual las bases nitrogenadas transmitan la información que dicta la
síntesis de proteínas. Este proceso podría explicar cómo los genes controlan
las formas y funciones de las células, tejidos y organismos. Como en el ADN
sólo hay cuatro tipos de nucleótidos, y, sin embargo, las proteínas se
constituyen con 20 clases diferentes de aminoácidos, el código genético no
podría basarse en que un nucleótido especificara un aminoácido. Las
combinaciones de dos nucleótidos sólo podrían especificar 16 aminoácidos (42
= 16), de manera que el código debe estar formado por combinaciones de tres
o más nucleótidos sucesivos. El orden de los tripletes, o como se han
denominado, codones, podría definir el orden de los aminoácidos en el
polipéptido.Diez años después de que Watson y Crick determinaran la
estructura del ADN, el código genético fue descifrado y verificado. Su
solución dependió en gran medida de las investigaciones llevadas a cabo
sobre otro grupo de ácidos nucleicos, los ácidos ribonucleicos (ARN). Se
observó que la obtención de un polipéptido a partir del ADN se producía de
forma indirecta a través de una molécula intermedia conocida como ARN
mensajero (ARNm). Parte del ADN se desenrolla de su empaquetamiento
cromosómico, y las dos cadenas se separan en una porción de su longitud. Una
de ellas actúa como plantilla sobre la que se forma el ARNm (con la ayuda de
una enzima denominada ARN polimerasa). El proceso es muy similar a la
formación de una cadena complementaria de ADN durante la división de la
doble hélice, salvo que el ARN contiene uracilo (U) en lugar de timina como
una de sus cuatro bases nucleótidas, y el uracilo (similar a la timina) se
une a la adenina en la formación de pares complementarios.
Por esta razón, una secuencia de
adenina-guanina-adenina-timina-citosina (AGATC) en la cadena codificada de
ADN, origina una secuencia de uracilo-citosina-uracilo-adenina-guanina (UAUAG)
en el ARNm.
|
Secuencias repetidas
Los estudios directos del ADN han demostrado
también que en los organismos superiores ciertas secuencias de nucleótidos
se repiten muchas veces en todo el material genético. Algunas de estas
secuencias repetidas representan copias múltiples de genes que codifican
polipéptidos, o de genes que codifican ARNs especiales (casi siempre existen
muchas copias de genes que producen el ARN de los ribosomas). Parece que
otras secuencias que se repiten no codifican polipéptidos o ARNs, y su
función se desconoce. Entre ellas existen secuencias que, al parecer, son
capaces de saltar de una zona a otra de un cromosoma, o de un cromosoma a
otro. Estos "transposones", o elementos que se transponen, pueden originar
mutaciones en los genes adyacentes a sus puntos de partida o llegada.
|
Herencia humana
La mayoría de las características físicas
humanas están influidas por múltiples variables genéticas, así como por el
medio. Algunas, como la talla, poseen un fuerte componente genético,
mientras que otras, como el peso, tienen un componente ambiental muy
importante. Sin embargo, parece que otros caracteres, como los grupos
sanguíneos (véase Grupo sanguíneo) y los antígenos implicados en el
rechazo de trasplantes, están totalmente determinadas por componentes
genéticos. No se conoce ninguna situación debida al medio que varíe estas
características. Desde hace poco tiempo, los antígenos de trasplante se
estudian en profundidad debido a su interés médico. Los más importantes son
los que se deben a un grupo de genes ligados que se denominan complejo HLA.
Este grupo de genes no sólo determina si el trasplante de órganos será
aceptado o rechazado, sino que también está implicado en la resistencia que
opone el organismo a varias enfermedades (entre las que se incluyen
alergias, diabetes y artritis). La susceptibilidad a padecer ciertas
enfermedades tiene un componente genético muy importante. Este grupo incluye
la esquizofrenia, la tuberculosis, la malaria, varias formas de cáncer, la
migraña, las cefaleas y la hipertensión arterial. Muchas enfermedades
infrecuentes están originadas por genes recesivos, y algunas por genes
dominantes. Los biólogos tienen un gran interés en el estudio e
identificación de los genes. Cuando un gen determinado está implicado en una
enfermedad específica, su estudio es muy importante desde el punto de vista
médico. El genoma humano contiene entre 50.000 y 100.000 genes, de los que
cerca de 4.000 pueden estar asociados a enfermedades. El Proyecto del genoma
humano, coordinado por múltiples instituciones, se inició en 1990 para
establecer el genoma humano completo. El objetivo principal de este proyecto
es trazar diversos mapas de genomas, incluyendo la secuencia nucleotídica
completa del genoma humano. La capacidad de clonar fragmentos grandes de ADN
en vectores cromosómicos artificiales de levaduras, con el fin de realizar
más análisis, y la automatización de muchas técnicas como la secuenciación
de ADN, han sido de gran ayuda en este proyecto.
|
Cromosoma
Se denomina cromosoma a cada uno de los
corpúsculos, generalmente en forma de filamentos, que existen en el núcleo
de las células y controlan el desarrollo genético de los seres vivos. Los
cromosomas eucarióticos son filamentos de cromatina que aparecen contraídos
durante la mitosis y la meiosis; sin embargo, cuando la célula está en
reposo, aparecen contenidos en un núcleo y no se pueden distinguir mediante
tinciones con determinados colorantes, debido a un proceso de hidratación e
imbibición que sufren, de manera que se muestran poco condensados.Nombre que
recibe una diminuta estructura filiforme formada por ácidos nucleicos y
proteínas presente en todas las células vegetales y animales. El cromosoma
contiene el ácido nucleico, ADN, que se divide en pequeñas unidades llamadas
genes. Éstos determinan las características hereditarias de la célula u
organismo. Las células de los individuos de una especie determinada suelen
tener un número fijo de cromosomas, que en las plantas y animales superiores
se presentan por pares. El ser humano tiene 23 pares de cromosomas. En estos
organismos, las células reproductoras tienen por lo general sólo la mitad de
los cromosomas presentes en las corporales o somáticas. Durante la
fecundación, el espermatozoide y el óvulo se unen y reconstruyen en el nuevo
organismo la disposición por pares de los cromosomas; la mitad de estos
cromosomas procede de un parental, y la otra mitad del otro. Es posible
alterar el número de cromosomas de forma artificial, sobre todo en las
plantas, donde se forman múltiplos del número de cromosomas normal mediante
tratamiento con colchicina.Varios miles de genes (unidades de la herencia)
se disponen en una sencilla línea sobre un cromosoma, una estructura
filiforme de ácidos nucleicos y proteínas. Las bandas teñidas de oscuro son
visibles en los cromosomas tomados de las glándulas salivares de
Drosophila sp. , La mosca de la fruta. Su significado no se conoce bien,
pero el hecho de que los diseños específicos de las bandas sean
característicos de varios cromosomas, constituye una valiosa herramienta de
identificación. Cromosoma es cada uno de los pequeños cuerpos en forma de
bastoncillo en que se divide la cromatina del núcleo celular en la mitosis,
los cuales contienen el código genético de la herencia. Los cromosomas están
presentes en todas las células de un organismo (excepto en algunos tipos muy
particulares, de vida corta, como los glóbulos rojos, que carecen de
núcleo). De ordinario miden entre 5 y 15 micrómetros, y para identificarlos
hay que observar la célula en fase de división celular, especialmente
durante la metafase o profase tardía. El número de cromosomas es distinto
para cada especie, aunque es constante para todas las células de la misma
(ley de la constancia numérica de los cromosomas), excepto para las células
reproductoras, que tienen una constitución cromosómica mitad (haploide) con
respecto a las células somáticas (diploide). En la especie humana este
número es de 46, de los cuales 44 son autosómicos y 2 sexuales (un par XY en
el caso del hombre y un par XX en la mujer). Los cromosomas están
constituidos por cadenas lineales de ácido desoxirribonucleico (ADN) y por
proteínas, denominadas histonas, que empaquetan el ADN en unidades de
repetición denominadas nucleosomas. Las cadenas de ADN están estructuradas
en unidades llamadas genes, sintetizadores de proteínas específicas, cada
uno de los cuales posee por término medio del orden de 1.000 a 2.000 pares
de nucleótidos. Las técnicas de estudio de los cromosomas han permitido
obtener con gran precisión el cariotipo humano y detectar alteraciones
genéticas responsables de síndromes cromosómicos que se traducen en
malformaciones y retraso psicomotor. Algunas de las anomalías que afectan a
los cromosomas X e Y producen síndromes con anomalías del desarrollo sexual
(síndrome de Klinefelter, síndrome de Turner). Actualmente se conocen más de
70 síndromes genéticos (síndrome de Down, síndrome de Klinefelter, síndrome
de Turner...) perfectamente definidos y atribuibles a aberraciones
cromosómicas. En todo cromosoma es posible distinguir dos mitades
longitudinales o cromátidas (que se escinden durante la división celular), y
un centrómero o constricción principal del cromosoma, a la que se fijan las
fibras del huso acromático en el curso de la mitosis y de la meiosis, que
delimita dos porciones laterales, los brazos del cromosoma. Según la
posición del centrómero estos brazos son iguales, aproxidamente iguales o
muy desiguales en longitud, lo que determina tipos morfológicos de
cromosomas, conocidos respectivamente como metacéntricos, submetacéntricos y
telocéntricos (acrocéntricos), de gran importancia para la caracterización
del cariotipo. Algunos tipos particulares de cromosomas son los siguientes:
Cromosoma en anillo. Delección de la porción final de un cromosoma y reunión
de las dos porciones distales nuevas, que forman un anillo. Cromosoma
gigante. Cromosoma atípicamente grande formado por la no-disyunción de las
cromátidas en sucesivas mitosis. Son típicos de las glándulas salivales de
los dípteros y tienen especial valor para la confección de mapas
cromosómicos. Cromosoma sexual o heterocromosoma. Cromosoma, de tipo X o Y,
determinante del sexo. Cromosoma bacteriano. ADN de doble filamento de la
célula procariota que forma una gran molécula única y circular (de algunos
millones de pares de bases). No tiene histonas y, por tanto, tampoco la
estructura tridimensional típica de los cromosomas eucariotas.
|
Código genético
Información genética cifrada en las secuencias
nucleotídicas del ácido desoxirribonucleico (ADN), que integra el mensaje
para la síntesis de proteínas. Las proteínas de un individuo son
específicas, por lo que lógicamente, la información para su síntesis que se
encuentra cifrada en el código genético también debe serlo, en consecuencia
el código genético es específico. Una molécula de ADN es una sucesión de
nucleótidos, cada uno de los cuales está formado por ácido fosfórico,
desoxirribosa y una base nitrogenada (púrica o pirimídica), siendo tales
componentes universales en el ADN de todos los seres vivos. Por lo tanto las
diferencias entre el ADN de los distintos individuos residen en la
proporción y orden de cómo se suceden los pares de bases púricas y
pirimidínicas, en el ADN, siendo estas bases nitrogenadas, las que
establecen la especificidad y diferencia para cada individuo. De acuerdo con
ello se considera, que el ADN puede mandar sus órdenes utilizando un
alfabeto de cuatro letras, representadas por cada una de las cuatro bases
púricas y pirimidínicas, es decir, adenina (A), timina (T), citosina (C) y
guanina (G). Estas bases nitrogenadas se agrupan de tres en tres formando
tripletes, también llamados codógenos, como por ejemplo ATC, AGG, TAA, etc.,
y cada triplete es una palabra cifrada, o señal para un determinado
aminoácido; dos o más tripletes pueden conducir al mismo aminoácido. Con las
cuatro bases nitrogenadas (A, T, C, G) se puede construir un número
suficiente de tripletes o codógenos para sintetizar los veinte aminoácidos
que forman las proteínas. Si la agrupación de estas bases fuera de dos en
dos en lugar de tres en tres el total posible de grupos diferentes fuese 4 x
4 = 16, de modo que si existen 20 aminoácidos proteicos distintos faltarían
grupos para designarlos. Pero siendo los grupos de tres (tripletes) las
probabilidades de combinación permiten un total de 64 tripletes o codógenos
(4 x 4 x 4 = 64); así aparecen más tripletes que aminoácidos existentes,
pero se ha llegado a demostrar que cada aminoácido puede responder a la
señal de más de un triplete, por cuya razón se dice que el código o lenguaje
genético está degenerado.Los codógenos o tripletes son universales, es
decir, especifican al mismo aminoácido en todos los seres vivos, por ello
solamente con tripletes sueltos el lenguaje del ADN no podría ser
específico. Lo que le da especificidad, es la forma como se suceden los
tripletes en el ADN. Metafóricamente el código genético, podría compararse
con un código de lenguaje escrito, de manera que las cuatro bases
nitrogenadas, para entenderlo, podrían equiparse con letras, los tripletes
(agrupación de estas bases en grupos de tres), podrían llamarse palabras de
tres letras, y el ordenamiento de tripletes que lleva la información, para
el ordenamiento de aminoácidos en la proteína, podría comparase con una
frase del lenguaje.
Un ejemplo de ordenamiento o sucesión de
tripletes sería:
ATT _ GGC _ CGA _ AAC _ ACG _ AAA
La información del código genético contenida
en los tripletes del ADN se transcribe en una información complementaria en
los tripletes de ARN-mensajero (ARNm), (llamados codones), y ésta se traduce
en el orden de aminoácidos en la proteína.
|
Gen
Unidad de herencia, partícula de material
genético que determina la herencia de una característica determinada, o de
un grupo de ellas. Los genes están localizados en los cromosomas en el
núcleo celular y se disponen en línea a lo largo de cada uno de ellos. Cada
gen ocupa en el cromosoma una posición, o locus. Por esta razón, el término
locus se intercambia en muchas ocasiones con el de gen.El
material genético es el ácido desoxirribonucleico, o ADN (véase
Ácidos nucleicos), una molécula que representa la "columna vertebral" del
cromosoma. Debido a que en cada cromosoma el ADN es una molécula continua,
alargada, simple y delgada, los genes deben ser parte de ella; y como es una
cadena de subunidades muy pequeñas que se conocen por nucleótidos, cada gen
incluye muchos nucleótidos. Cada nucleótido está formado por un azúcar de
cinco carbonos, ácido fosfórico y una base nitrogenada. En cada cadena
existen cuatro tipos diferentes de bases —adenina, guanina, citosina y
timina— y su secuencia determina las propiedades del gen.Los genes ejercen
sus efectos a través de las moléculas a las que dan origen. Los productos
inmediatos de un gen son las moléculas de ácido ribonucleico (ARN); éstas
son copias de ADN, excepto porque en lugar de la base uracilo tienen timina.
Las moléculas de ARN de algunos genes participan de forma directa en el
metabolismo del organismo, aunque su finalidad es, en su mayoría, la
producción de proteínas. Las proteínas están formadas por cadenas de
unidades que se denominan aminoácidos, y la secuencia de bases presente en
el ARN determina la secuencia de aminoácidos en la proteína por medio del
código genético (véase Genética: el código genético). La secuencia de
aminoácidos en una proteína específica será la responsable de determinar si
ésta formará parte de una estructura del organismo, o si se convertirá en un
enzima para favorecer una reacción química particular. Por lo tanto, las
variaciones en el ADN pueden producir cambios que afecten a la estructura o
a la química de un organismo.Las bases de nucleótidos del ADN que codifican
la estructura de los ARN y proteínas, no son los únicos componentes de los
genes; otros grupos de bases adyacentes a las secuencias codificadoras
afectan a la cantidad y disposición de los productos de los genes. En los
organismos superiores (los animales y las plantas, más que en las bacterias
y los virus), las secuencias no codificadoras superan en número de diez o
más a las codificadoras, y las funciones de estas regiones son muy poco
conocidas. Ésto significa que los genéticos no pueden establecer aún límites
precisos respecto al tamaño de los genes de animales y plantas.
|
Regulación de los genes
El conocimiento de cómo se forman las
proteínas permite a los científicos entender cómo los genes producen efectos
específicos sobre las estructuras y funciones de los organismos. Sin
embargo, esto no explica las variaciones que sufren los organismos en
respuesta a circunstancias cambiantes del medio, o la manera en que un
cigoto simple da lugar a todos los tejidos y órganos diferentes que
constituyen un ser humano. En estos órganos y tejidos, la mayoría de las
células contienen conjuntos de genes idénticos, sin embargo, forman
proteínas distintas. Es evidente que en las células de cualquier tejido u
órgano algunos genes están activos y otros no. Los distintos tejidos tienen
series de genes diferentes en estado activo. Por esta razón, parte de la
explicación del desarrollo de un organismo complejo debe basarse en cómo se
activan los genes de forma específica. El proceso de la activación de los
genes en los organismos superiores aún no está claro, aunque gracias al
trabajo del genetista francés François Jacob y de Jacques Lucien Monod, se
sabe mucho acerca de este proceso en las bacterias. Junto a cada gen
bacteriano existe un segmento de ADN conocido como promotor. Este es el
lugar sobre el cual la ARN polimerasa, enzima responsable de la producción
de ARNm, se adhiere al ADN e inicia la transcripción. Entre el promotor y el
gen existe con frecuencia otro segmento de ADN que recibe el nombre de
operador, donde otra proteína —el represor— puede adherirse.Cuando el
represor se une al operador, detiene el desplazamiento de la ARN polimerasa
a lo largo del cromosoma y la producción de ARNm; por lo tanto el gen se
inactiva. Sin embargo, la presencia en la célula de una sustancia química
determinada puede provocar que el represor se separe y el gen se active.
Otras sustancias pueden afectar el grado de actividad del gen al alterar la
capacidad de la ARN polimerasa de unirse al promotor. Un gen que recibe el
nombre de regulador produce la proteína represora.En las bacterias, varios
genes pueden estar controlados de forma simultánea por un promotor y uno o
más operadores. El sistema completo se denomina entonces operon. Parece que
los operones no existen en los organismos complejos, aunque es muy posible
que cada gen tenga su propio sistema individual de promotores y operadores,
y que los intrones y las secuencias repetidas desempeñen también algún papel
en este proceso.
|
Herencia citoplasmática
Además del núcleo, ciertos componentes de las
células contienen ADN. Éstos incluyen los cuerpos citoplasmáticos
denominados mitocondrias (los productores de energía de la célula), y los
cloroplastos de las plantas, en los que tiene lugar la fotosíntesis. Estos
cuerpos se autoreproducen. El ADN se replica de manera similar al del
núcleo, y algunas veces su código se transcribe y se traduce en proteínas.
En 1981 se determinó la secuencia completa de nucleótidos del ADN de una
mitocondria. En apariencia, la mitocondria utiliza un código que difiere muy
poco del utilizado por el núcleo.Los caracteres determinados por el ADN
citoplasmático se heredan con más frecuencia a través de la madre que del
padre (exclusivamente a través de la madre en el caso del Homo sapiens),
ya que los espermatozoides y el polen contienen por lo general menos
material citoplasmático que el óvulo. Algunos casos de herencia materna
aparente están en realidad relacionados con la transmisión de virus de la
madre al hijo a través del citoplasma del óvulo.
|
Hebras de ADN
Los ácidos nucleicos son moléculas complejas
producidas por la célula, esenciales para todos los organismos. Determinan
el desarrollo del cuerpo y todas sus características, para ello almacenan
información hereditaria y dirigen la síntesis de proteínas. Este modelo
generado por ordenador muestra dos cadenas de ácido desoxirribonucleico
(ADN) enrolladas en forma de doble hélice.
|
La transmisión de genes
La unión de los gametos combina dos conjuntos
de genes, uno de cada progenitor. Por lo tanto, cada gen —es decir, cada
posición específica sobre un cromosoma que afecta a un carácter particular—
está representado por dos copias, una procedente de la madre y otra del
padre (para excepciones a esta regla, véase el apartado siguiente sobre sexo
y unión sexual). Cada copia se localiza en la misma posición sobre cada uno
de los cromosomas pares del cigoto. Cuando las dos copias son idénticas se
dice que el individuo es homocigótico para aquel gen particular. Cuando son
diferentes, es decir, cuando cada progenitor ha aportado una forma distinta,
o alelo, del mismo gen, se dice que el individuo es heterocigótico para
dicho gen. Ambos alelos están contenidos en el material genético del
individuo, pero si uno es dominante, sólo se manifiesta éste. Sin embargo,
como demostró Mendel, el carácter recesivo puede volver a manifestarse en
generaciones posteriores (en individuos homocigóticos para sus alelos).Por
ejemplo, la capacidad de una persona para pigmentar la piel, el cabello y
los ojos, depende de la presencia de un alelo particular (A),
mientras que la ausencia de esta capacidad, denominada albinismo, es
consecuencia de otro alelo (a) del mismo gen (por consenso, los
alelos se designan siempre por una única letra; el alelo dominante se
representa con una letra mayúscula y el recesivo con una minúscula). Los
efectos de A son dominantes; los de a, recesivos. Por lo
tanto, los individuos heterocigóticos (Aa), así como los
homocigóticos (AA), para el alelo responsable de la producción de
pigmento, tienen una pigmentación normal. Las personas homocigóticas para el
alelo que da lugar a una ausencia de pigmentación (aa) son albinas.
Cada hijo de una pareja en la que ambos son heterocigóticos (Aa)
tienen un 25 % de las probabilidades de ser homocigóticos AA, un 50 %
de ser heterocigóticos Aa, y un 25 % de ser homocigóticos aa.
Sólo los individuos que son aa serán albinos. Observamos que cada
hijo tiene una posibilidad entre cuatro de ser albino, pero no es exacto
decir que en una familia, una cuarta parte de los niños estarán afectados.
Ambos alelos estarán presentes en el material genético del descendiente
heterocigótico, quien originará gametos que contendrán uno u otro alelo. Se
distingue entre la apariencia, o característica manifestada, de un
organismo, y los genes y alelos que posee. Los caracteres observables
representan lo que se denomina el fenotipo del organismo, y su composición
genética se conoce como genotipo.Éste no es siempre el caso en el que un
alelo es dominante y el otro recesivo. Por ejemplo, el dondiego de noche
puede tener flores de color rojo, blanco o rosa. Las plantas con flores
rojas pueden tener dos copias del alelo R para el color rojo de las
flores, y por lo tanto son homocigóticas RR. Las plantas con flores
blancas tienen dos copias del alelo r para el color blanco de las
flores, y son homocigóticas rr. Las plantas con una copia de cada
alelo, heterocigóticas Rr, son rosas, es decir, una mezcla de colores
producida por los dos alelos.Rara vez la acción de los genes es cuestión de
un gen aislado que controla un solo carácter. Con frecuencia un gen puede
controlar más de un carácter, y un carácter puede depender de muchos genes.
Por ejemplo, es necesaria la presencia de al menos dos genes dominantes para
producir el pigmento violeta en las flores de la planta del guisante de
olor. Estas plantas que son homocigóticas para alguno o ambos de los alelos
recesivos implicados en el carácter del color producen flores blancas. Por
lo tanto, los efectos de un gen pueden depender de cuáles sean los otros
genes presentes.
|
Genes
en poblaciones
La genética de poblaciones, que investiga cómo
se expanden los genes a través de las poblaciones de organismos, encontró
una base sólida en los trabajos del matemático inglés Godfrey H. Hardy y el
obstetra alemán Wilhelm Weinberg, quienes en 1908 formularon por separado lo
que ahora se conoce como la ley de Hardy-Weinberg. Esta afirma que si dos
alelos de un gen autosómico (A y a) existen en una población,
si la frecuencia con las que se presentan (expresadas en decimales) son p
y q, (p + q = 1) respectivamente, y si el apareamiento
se produce de forma aleatoria con respecto al gen, entonces, después de una
generación la frecuencia de los tres genotipos AA, Aa y aa
será p2, 2pq y q2, respectivamente. Por consiguiente,
en ausencia de alteraciones, estas secuencias permanecerán constantes de
generación en generación. Cualquier variación de la frecuencia, que indica
un cambio evolutivo, debe estar, por tanto, relacionada con alteraciones.
Estas pueden ser mutaciones, selección natural, migración y reproducción en
pequeñas poblaciones que pueden perder alelos determinados por casualidad o
desviación genética al azar (véase Evolución).La evidencia indica que
la mayoría de las poblaciones son más variables genéticamente de lo que se
supone. Los estudios de los productos polipeptídicos de los genes han
señalado que, por término medio, cerca de un tercio de ellos tienen
variantes genéticas con frecuencias superiores a las que cabría esperar a
partir del equilibrio entre su generación por mutación, y la desventaja
selectiva de los mutantes. Esto ha conducido a un interés creciente por las
formas en que los alelos alternados se pueden mantener de forma activa en un
estado de equilibrio de modo que ninguno reemplace al otro. Uno de estos
mecanismos de equilibrio es la ventaja heterocigótica, cuando el
heterocigótico sobrevive mejor que cualquiera de los homocigóticos. Otro
mecanismo, llamado selección dependiente de la frecuencia, se basa en la
ventaja relativa de las variedades poco frecuentes, como por ejemplo en
poblaciones expuestas a depredadores. Los depredadores tienden a centrarse
en la variedad más común, y a no hacer caso de las variedades raras. Por
esta razón, cuando una variedad es poco frecuente puede estar en ventaja,
aunque perderá dicha ventaja conforme la selección natural para el rasgo de
adaptación la haga más abundante. Entonces, los depredadores empiezan a
sacrificar la variedad favorecida, hasta alcanzar equilibrio entre los
alelos de la población. Los parásitos pueden actuar de un modo similar,
especializándose en atacar cualquier variedad de huéspedes que sea la más
común, y manteniendo por ello la variabilidad genética en las poblaciones de
huéspedes.
|
Desoxirribonucleótidos
Los nucleótidos estructurales del ADN; todos
tienen como pentosa la 2'-desoxi-D-ribosa y difieren entre sí en función de
la base nitrogenada, que posean, de la cuál reciben el nombre. Hay cuatro
tipos de bases nitrogenadas que forman parte de los desoxirribonucleótidos:
adenina, guanina (ambos derivados de la purina), citosina y timina (estos
últimos derivados de la pirimidina). Así encontramos desoxirribonucleótidos
de adenina, de guanina, de citosina y de timina.
|
Ribonucleótidos
Los nucleótidos estructurales del ARN. De modo
semejante a los desoxirribonucleótidos constan de una molécula de ácido
fosfórico, una molécula de pentosa, en este caso la D-ribosa y una base
nitrogenada que puede ser de cuatro tipos: adenina, guanina, citosina y
uracilo. Así como las tres primeras son comunes también para el ADN, el
uracilo se halla presente en el ARN y muy raras veces en el ADN, mientras
que la timina es una base habitual del ADN.Por tanto, desoxirribonucleótidos
y ribonucleótidos difieren en la pentosa que posean que puede ser
desoxiribosa o ribosa, y, además, los desoxirribonucleótidos no suelen
llevar uracilo así como los ribonucleótidos no suelen llevar timina.Los
nucleótidos se unen entre sí por enlaces covalentes, entre el ácido
fosfórico de un nucleótido y el carbono en posición 3' de la molécula de
pentosa de otro nucleótido, formando así la estructura covalente de las
cadenas de los ácidos nucleicos.
|
Replicación del ADN
Proceso mediante el cuál se sintetizan dos
moléculas hijas de ADN de doble hélice a partir de un ADN progenitor, que
actúa como molde.También se denomina duplicación del ADN. Ocurre una vez en
cada generación celular durante la fase S (de síntesis) del ciclo celular.
En la mayoría de las células eucariotas la replicación del ADN lleva
finalmente a la mitosis, pero en las células reproductoras (espermatocitos y
oocitos primarios) lleva a la meiosis.Existen varios tipos de replicación:
conservadora, semiconservadora, y dispersora.
|
Herencia cuantitativa
Los caracteres que se expresan como
variaciones en cantidad o extensión, como el peso, la talla o el grado de
pigmentación, suelen depender de muchos genes, así como de las influencias
del medio. Con frecuencia, los efectos de genes distintos parecen ser
aditivos, es decir, parece que cada gen produce un pequeño incremento o
descenso independiente de los otros genes. Por ejemplo, la altura de una
planta puede estar determinada por una serie de cuatro genes: A, B, C
y D. Supongamos que cuando su genotipo es aabbccdd, la planta
alcanza una altura media de 25 cm, y que cada sustitución por un par de
alelos dominantes aumenta la altura media en unos 10 centímetros. En el caso
de una planta que es AABBccdd su altura será de 45 cm, y en aquella
que es AABBCCDD será de 65 centímetros. En realidad, los resultados
no suelen ser tan regulares. Genes diferentes pueden contribuir de forma
distinta a la medida total, y ciertos genes pueden interactuar, de modo que
la aportación de uno depende de la presencia de otro. La herencia de
características cuantitativas que dependen de varios genes se denomina
herencia poligénica. La combinación de influencias genéticas y del medio se
conoce como herencia multifactorial.
|
Ligamiento genético y mapa
genético
El principio de Mendel según el cual los genes
que controlan diferentes caracteres son heredados de forma independiente uno
de otro es cierto sólo cuando los genes existen en cromosomas diferentes. El
genetista estadounidense Thomas Hunt Morgan y sus colaboradores demostraron
en una serie amplia de experimentos con moscas de la fruta (que se
reproducen con gran velocidad), que los genes se disponen de forma lineal en
los cromosomas y que cuando éstos se encuentran en el mismo cromosoma, se
heredan como una unidad aislada mientras el propio cromosoma permanezca
intacto. Los genes que se heredan de esta forma se dice que están
ligados.Sin embargo, Morgan y su grupo observaron también que este
ligamiento rara vez es completo. Las combinaciones de características alelas
de cada progenitor pueden reorganizarse entre algunos de sus descendientes.
Durante la meiosis, una pareja de cromosomas análogos puede intercambiar
material durante lo que se llama recombinación o sobrecruzamiento. (El
efecto del sobrecruzamiento puede observarse al microscopio como una forma
de unión entre los dos cromosomas). El sobrecruzamiento se produce más o
menos al azar a lo largo de los cromosomas, de modo que la frecuencia de
recombinación entre dos genes depende de la distancia que los separe en el
cromosoma.Si los genes están relativamente alejados, los gametos
recombinados serán habituales; si están más o menos próximos, los gametos
recombinados serán poco frecuentes. En el descendiente que procede de los
gametos, el sobrecruzamiento se manifiesta en la forma de nuevas
combinaciones de caracteres visibles.Cuanto mayor sea el sobrecruzamiento,
más elevado será el porcentaje de descendientes que muestran las
combinaciones nuevas. Consecuencia de ello, los científicos pueden trazar o
dibujar mediante experimentos de reproducción apropiados, las posiciones
relativas de los genes a lo largo del cromosoma.Para detectar
recombinaciones, que se producen sólo rara vez, los genetistas han utilizado
durante los últimos años organismos que producen gran número de
descendientes con gran rapidez, como bacterias, mohos y virus. Por esta
razón, son capaces de trazar mapas de genes que están muy próximos. El
método introducido en el laboratorio de Morgan ha adquirido hoy tal
precisión que se pueden dibujar las diferencias que se originan en un gen
particular. Estos mapas han demostrado que no sólo los genes se disponen de
forma lineal a lo largo de los cromosomas, sino que ellos mismos son
estructuras lineales. La detección de recombinaciones poco frecuentes puede
poner de manifiesto estructuras incluso más pequeñas que las que se observan
con los microscopios más potentes.Los estudios en hongos, y más tarde en
moscas de la fruta, han demostrado que en ocasiones la recombinación de
alelos puede tener lugar sin que se produzcan intercambios recíprocos entre
los cromosomas. En apariencia, cuando existen dos versiones distintas del
mismo gen (en un individuo heterocigótico), una de ellas puede ser
"corregida" para equipararse a la otra. Tales correcciones pueden tener
lugar en cualquier dirección (por ejemplo, el alelo A puede ser
modificado a a o a la inversa). Este proceso se ha denominado
conversión genética. En ocasiones, varios genes adyacentes experimentan una
conversión conjunta; la probabilidad de que ésta se produzca entre dos genes
depende de la distancia entre ellos. Esto proporciona otra forma de
determinar las posiciones relativas de los genes en el cromosoma.
|
Sexo y ligamiento sexual
Morgan contribuyó también a los estudios
genéticos cuando en 1910 observó diferencias sexuales en la herencia de
caracteres, un patrón que se conoce como herencia ligada al sexo.El sexo
está determinado por la acción de una pareja de cromosomas. Las anomalías
del sistema endocrino u otros trastornos pueden alterar la expresión de los
caracteres sexuales secundarios, aunque casi nunca invierten totalmente el
sexo. Por ejemplo, una mujer tiene 23 pares de cromosomas, y los componentes
de cada par son muy similares. Sin embargo, un varón tiene 22 pares iguales
de cromosomas y uno con dos cromosomas diferentes en tamaño y estructura.
Los 22 pares de cromosomas semejantes en mujeres y en hombres se llaman
autosomas.El resto de los cromosomas se denomina, en ambos sexos, cromosomas
sexuales. En las mujeres los dos cromosomas sexuales idénticos se llaman
cromosomas X. En el hombre, uno de los cromosomas sexuales es también
un cromosoma X, pero el otro, más pequeño, recibe el nombre de
cromosoma Y. Cuando se forman los gametos, cada óvulo producido por
la mujer contiene un cromosoma X, pero el espermatozoide generado por
el hombre puede contener o un cromosoma X o uno Y. La unión de
un óvulo, que siempre contiene un cromosoma X, con un espermatozoide
que también tiene un cromosoma X, origina un cigoto con dos X:
Un descendiente femenino. La unión de un óvulo con un espermatozoide con un
cromosoma Y da lugar a un descendiente masculino. Este mecanismo
sufre modificaciones en diversas plantas y animales.La longitud aproximada
del cromosoma Y es un tercio de la del X, y aparte de su papel
en la determinación del sexo masculino, parece que es genéticamente
inactivo. Por ello, la mayor parte de los genes en el X carecen de su
pareja en el Y. Se dice que estos genes están ligados al sexo, y
tienen un patrón hereditario característico. Por ejemplo, la enfermedad
denominada hemofilia, está producida por un gen recesivo (h) ligado
al sexo. Una mujer con HH o Hh es normal; una mujer con hh
tiene hemofilia. Un hombre nunca es heterocigótico para este gen porque
hereda sólo el gen que existe en el cromosoma X. Un varón con H
es normal; con h padecerá hemofilia. Cuando un hombre normal (H)
y una mujer heterocigótica (Hh) tienen un descendiente, las niñas son
normales, aunque la mitad de ellas tendrán el gen h —es decir,
ninguna de ellas es hh, pero la mitad tendrán el genotipo Hh—.Los
niños heredan sólo el H o el h; por lo tanto, la mitad de
ellos serán hemofílicos. Por esta razón, en condiciones normales, una mujer
portadora transmitirá la enfermedad a la mitad de sus hijos, y el gen
recesivo h a la mitad de sus hijas, quienes a su vez se convierten en
portadoras de hemofilia. Se han identificado otras muchas situaciones en los
seres humanos incluyendo la ceguera para los colores rojo y verde, la miopía
hereditaria, la ceguera nocturna y la ictiosis (una enfermedad cutánea) como
caracteres ligados al sexo.
|
Genotipo
Es un conjunto de los genes constitutivos de
un individuo o de una especie; Generalmente referido a uno o varios genes
relevantes en un contexto determinado.
|
Fenotipo
Es un conjunto de caracteres hereditarios, que
posee cada individuo perteneciente a una determinada especie vegetal o
animal.Es una realización visible del genotipo en un determinado ambiente.
|
|