IMPRESIONES
DE
OLAVARRÍA
FMI
O
TRENES.
USTED
DECIDE.
Ya
se
apagaron
las
luces
de
la
Audiencia
Pública
de
Olavarría,
donde
se
discutió
el
futuro
de
Ferrosur
y
de
una
parte
importante
del
patrimonio
ferroviario
nacional.
Ahora
es
la
hora
de
meditar
lo
que
vivimos
en
esa
jornada
y
tratar
de
entender
como
cada
uno
de
los
actores
jugó
sus
cartas.
De
más
está
decir
que
descreemos
de
la
audiencia
en
sí,
y
que
la
experiencia
nos
demuestra
que
las
mismas
no
son
ni
más
ni
menos
que
una
formalidad,
ya
que
el
fondo
de
la
cuestión
se
discutió
y
acordó
en
otro
sitio
distinto
a
la
audiencia.
Sin
embargo,
creemos
que
la
audiencia
es
una
buena
vidriera
para
ver
como
cada
uno
de
los
actores
políticos
se
desempeña
y
una
buena
oportunidad
para
confrontar
nuestras
ideas
con
las
de
otros
actores.
Ya
nos
hemos
ocupado
antes
en
esta
columna
de
Ferrosur,
y
hemos
dicho
que
entre
las
empresas
ferroviarias
privadas
es
una
de
las
mejorcitas,
lo
cual
no
quiere
decir
que
la
defendamos,
si
no
que
simplemente
mientras
creemos
que
Ferrosur
es
una
empresa
correcta,
creemos
que
hay
otras
que
simplemente
son
una
cueva
de
delincuentes.
Lo
central
de
esta
Audiencia
Pública
fue
que
se
presentaron,
por
primera
vez
tres
participantes
que
defendieron
la
postura
de
la
Estatización
de
los
ferrocarriles
(dos
además
de
la
nuestra)
No
tubo
desperdicio
la
presentación
del
órgano
de
renegociación
de
las
concesiones
donde
después
de
decir
que
Ferrosur
solo
había
cumplido
con
el
20%
de
las
inversiones
previstas,
y
otras
perlitas
por
el
estilo,
propuso
la
renegociación
aplicando
a
medias
el
concepto
cristiano
de:
“perdona
nuestras
deudas
como
nosotros
perdonamos
a
nuestros
deudores”,
ya
que
a
pesar
que
en
la
renegociación
se
le
perdona
a
Ferrosur
el
pago
del
Canon,
ésta
no
plantea
perdonar
el
exigir
el
pago
de
los
peajes
del
tren
de
pasajeros,
¿será
que
no
son
cristianos?,
vaya
uno
a
saber.
Se
destacó
también
la
presencia
en
el
evento
de
Senadores
y
Diputados
Peronistas
(la
diputada
Graciela
Caamaño,
y
el
Senador
Capitanich,)
de
la
comisión
de
seguimiento
de
las
privatizadas.
El
caso
de
la
diputada
Caamaño
fue
paradigmático,
de
lo
que
la
diputada
no
sabe
no
habla,
y
por
lo
tanto
no
habló.
El
Senador
fue
mucho
más
locuaz
y
se
explayó
sobre
una
serie
de
temas
que
a
nuestro
entender
no
entiende
ni
comprende,
y
después
de
muchas
vueltas
y
de
decir
que
los
órganos
de
control
de
su
propio
gobierno,
empezando
por
la
CNRT
no
sirven
para
nada
y
no
son
confiables,
terminó
dando
un
vergonzoso
SÍ
a
la
renegociación.
Después
de
ellos
le
tocó
el
turno
al
defensor
del
Pueblo
de
la
Nación,
el
cual
reclamó
el
pago
del
canon
adeudado
por
la
empresa
Ferrosur,
basándose
en
una
comparativa
con
la
empresa
Ferro
Expreso
Pampeano,
que
a
nuestro
entender
sólo
podía
cerrar
en
la
mente
de
un
contador.
Es
cierto
que
Ferrosur
debería
pagar
el
canon
adeudado,
pero
hacer
una
comparativa
con
una
empresa
que
ha
mantenido
una
actitud
en
el
borde
de
lo
delincuencial,
tal
como
Ferroexpreso,
nos
pareció
por
lo
menos
una
exageración.
Nos
hubiese
gustado
una
presentación
más
ajustada
a
los
hechos,
pero
eso
fue
lo
que
hubo.
Muy
interesante
la
presentación
de
la
propia
empresa,
en
la
voz
de
su
contador
en
jefe,
el
cual
no
se
codeó
ni
con
sus
empleados
ni
con
otros
miembros
de
la
audiencia,
se
ve
que
el
hombre
tendría
sangre
real
o
ganas
de
tenerla,
pero
al
margen
de
sus
ínfulas
de
realeza
el
hombre
presentó
un
detallado
cuadro
de
las
obras
que
Ferrosur
ha
venido
realizando,
algunas
bien,
otras
se
vistió
con
ropa
ajena,
por
ejemplo
cuando
dijo
que
la
empresa
había
invertido
en
obras
en
el
puerto
La
Plata
y
esas
obras
realmente
las
pagó
el
consorcio
de
gestión
del
Puerto
La
Plata,
pero
sacando
esos
pequeños
deslices,
en
general
fue
una
buena
exposición
que
mostró
una
empresa
en
marcha
y
con
ganas
de
hacer
cosas.
De
la
exposición
de
este
Sr.,
se
desprende
que
si
sumamos
las
obras,
Ferrosur
habría
invertido
el
80%
de
lo
que
se
había
comprometido
en
el
contrato
original.
El
problema
es
que
lo
invirtió
en
obras
que
no
estaban
contempladas
en
los
pliegos
licitatorios,
como
por
ejemplo
un
desvío
hasta
la
fábrica
Cerro
Negro
(que
nos
enteramos
en
la
reunión
que
es
de
un
grupo
de
escoceses)
De
la
exposición
del
contador
de
Ferrosur
también
se
desprendió
la
ineficiencia
de
la
gente
de
la
Secretaría
de
Transporte
y
de
la
Unidad
de
Renegociación,
que
podrían
haber
usado
este
tipo
de
obras
como
elementos
de
inversión
de
la
empresa
(son
obras
que
al
final
de
la
licitación
le
quedarán
al
país),
en
lugar
de
incluir
como
inversiones
las
reparaciones
de
las
locomotoras
o
los
cambios
de
durmientes,
pero
eso
es
otro
tema.
No
tubo
desperdicio
la
intervención
de
la
Diputada
María
América
GONZALEZ
(ARI),
la
cual
no
sólo
demostró
que
entendía
de
lo
que
estaba
hablando
si
no
que
además
fundadamente
explicó
por
qué
lo
de
la
renegociación
era
una
total
barbaridad
sin
más.
Luego
pasaron
gente
que
venía
trabajando
con
la
empresa,
y
que
genuinamente
creía
que
Ferrosur
debía
seguir,
una
de
ellos
un
empresario
Pyme,
relató
como
Ferrosur
le
había
perdonado
la
vida
en
una
quiebra,
por
lo
cual
vemos
lógico
que
hablara
bien
de
la
empresa.
En
general
los
clientes
de
Ferrosur
estuvieron
de
acuerdo
con
la
empresa
y
en
apoyar
la
renegociación,
no
fue
en
cambio
esa
la
posición
que
asumieron
desde
distintos
puntos
de
vista
los
usuarios
a
los
que
Ferrosur
no
atiende,
como
por
ejemplo
a
la
gente
de
Puerto
Quequén.
De
los
propios
empleados
de
la
empresa
que
por
un
sueldo
mensual
hablaron
maravillas
de
Ferrosur
y
nos
hicieron
perder
tiempo
a
todos
los
concurrentes
a
la
audiencia
no
hablaremos
porque
creo
que
hablar
de
chupamedias
a
sueldo
no
vale
la
pena.
Nuestra
intervención
fue
casi
al
mediodía,
y
sonó
como
un
disparo
en
la
oscuridad,
ya
que
nadie
esperaba
que
en
esta
audiencia
alguien
propusiera
con
todas
las
letras
la
reestatización
y
la
recesión
de
los
contratos
en
contra
de
la
renegociación
que
se
proponía.
Lo
que
si
fue
de
destacar
fue
la
intervención
del
representante
de
la
UF
Local
(verde
de
Pedraza)
el
cual
no
sólo
habló
bien
de
la
empresa,
sino
que
justificó
la
disminución
de
personal
por
la
empresa,
¿con
delegados
como
estos
quién
necesita
patrones?.
Fue
muy
interesante
también
la
participación
de
algunos
teóricos
que
desde
el
peronismo
intentaron
toda
una
complicada
descripción
que
terminaba
en
la
necesidad
de
una
empresa
estatal
de
ferrocarriles
pero
sin
nombrarla,
difícil
sin
duda
explicar
lo
inexplicable.
Casi
al
final
del
evento
subió
al
estrado
lo
que
podría
considerarse
el
número
vivo
de
Ferrosur,
un
señor
que
dijo
que
era
contratado
de
Ferrosur
y
que
se
especializaba
en
hacer
exitoso
cualquier
emprendimiento,
y
a
continuación
pasó
a
detallar
su
currículum
para
lo
que
tardó
no
menos
de
12
minutos
(las
exposiciones
eran
de
10
minutos
cada
una)
cuando
la
gente
comenzó
a
silbarlo
aclaró
que
su
misión
dentro
de
Ferrosur
era
implementar
las
normas
ISO,
realmente
Ferrosur
nos
podría
haber
ahorrado
escuchar
a
este
Señor.
Uno
de
los
últimos
oradores
fue
un
representante
de
Patria
Libre,
este
compañero
relató
el
proceso
de
las
privatizaciones
y
con
un
adecuado
encuadre
denunció
todo
el
proceso
desde
lo
social,
lo
sindical
y
desde
el
punto
de
vista
de
los
argentinos
todos,
para
terminar
proponiendo
la
recreación
de
la
empresa
Estatal
de
Ferrocarriles.
Como
conclusión
La
de
Ferrosur
fue
la
primer
Audiencia
Pública
de
ferrocarriles
en
donde
desde
por
lo
menos
cuatro
sectores
distintos
se
cuestionó
abiertamente
el
modelo
de
las
licitaciones
y
se
llegó
a
plantear
la
necesidad
de
la
reestatización.
Se
vio
como
en
otras
veces
la
voluntad
del
ejecutivo
de
imponer
a
contrapelo
un
modelo
que
no
solo
no
beneficia,
sino
que
directamente
perjudica
a
la
mayoría
de
los
argentinos.
En
pocas
palabras,
con
distintos
matices,
el
modelo
menemista
neoliberal
sigue.
C.N.S.T.