Origen
Abandonada
en la bruma
De
un río que persiste
Sostiene
el peso de la desconfianza
Anidado
en el pecho gastado de su gente.
Locura
espectral
De
una progenie de audaces
Que
afrontaron el reto del arcano
Con
sus miserias frías y tenaces
Dominando
las grietas trascendidas
De
liminares espantos y partidas.
El
hombre al que gestó la recorre
La
gana, la sostiene,
Vibra
en su seco seno bochornoso
Y
recibe la herencia poco apetecida,
Que
lo seduce, lo pudre, lo domina...
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