Emergiendo
desde la Atlántida al Santuario del Espíritu
Carta Nº 14
NUESTRA MENTE
La mente
consciente es el escenario en donde nos desenvolvemos
Víctor
Manuel Guzmán Villena
El
ser humano es la conjunción perfecta de materia, mente y espíritu y aún hay quienes afirman un cuarto y quinto
elemento en su conformación integral. Es mente y por lo tanto es lo que piensa y llega a ser lo que piensa de
si mismo. Analizando la mente diremos
que ésta es una sola con funciones separadas y así establecemos que el humano
tiene dos fases distintas de consciencia: la primera la consciente y la segunda
la subconsciente.
La
mente consciente y despierta es la que la conocemos como mente objetiva. Es el
resultado de los estímulos externos sobre las células organizadas del cerebro,
es la sustancia cordial o parte externa del cerebro, dirigida por impresiones sensoriales. Cuando dormimos
ella duerme. La mente consciente es el
analizador, el comparador, el razonador y que actúa como centinela o
cuidador a la puerta de
la mente subconsciente. Podríamos decir que la mente consciente es el
timonel del barco, el capitán en el puente el general en el campo de batalla.
Esta mente es la que razona sobre causa y efecto.
Esta
mente consciente está acostumbrada a razonar pero no a nivel personal sino a
nivel grupal y con una carga de tradición social que le impide ver la realidad
ajena a ella. Nuestra mente consciente actúa de acuerdo al entorno al grupo
familiar, social, étnico, económico al que pertenecemos, y
aprendemos a responder de una manera determinada. La mente consciente es
el escenario en donde nos desenvolvemos. Ahí está incluidos los dogmas,
doctrinas, teorías, conocimientos, estudios, experiencias.
El
subconsciente en cambio está hecho para subsistir en perfección, y no hay que
desesperarse por vivir bien sino hay que querer vivir bien y el limitante está
en la mente consciente, y lo primero que hay vencer es a la mente consciente,
es decir la lucha personal. Pero esta lucha no tenemos que hacerla afuera, primero
tenemos que comenzar en lo interno de nuestro yo. Desgraciadamente todos los
elementos contra los que tenemos que luchar existen a nuestro alrededor, lo que hace más difícil, porque cuando ganamos un
batalla a nivel persona, allí tenemos a muchas personas con ideas y conceptos
que tratan de derribarlo, de manera que nosotros tenemos que aplicar una fortaleza muy grande
para no dejarnos vencer.
Nosotros
tenemos que darle una ayuda más tangible, ya que a la mente no se lo puede
medir a pesar que nosotros obtenemos su producto todo el tiempo, de manera
que tenemos que ser muy rectos en el
sentido de manejar la mente subconsciente y solo a través de ella vamos ir
depurando aquellas cosas que nos limitan y vamos a poder abrir nuestro camino,
por lo que tenemos que ser conscientes del poder de nuestra mente
subconsciente.
Como
potenciar la mente subconsciente?
Tenemos que analizar lo que queremos eliminar
de nuestra vida. Habrá una cantidad de cosas que no deseamos que convivan con nosotros,
pero al mismo tiempo va a ver muchas cosas positivas que queremos conservarlas,
y para poder instalar algo nuevo tenemos que eliminar lo viejo. En primera
instancia deberíamos preguntarnos cuales son los hábitos negativos en nuestras
vidas que no nos permite crecer, uno de ellos es no ver las cosas
correctamente, es decir cuando nosotros hacemos un análisis de nuestro entorno
y de nuestra individualidad, pensamos, hacemos y sugerimos que es correcto.
Pero lo correcto es aquello que no daña a las demás personas y por allí es que
tenemos que comenzar a entender.
Igualmente
nos toca hacer un análisis de lo que queremos hacer de nuestras vidas. La
mayoría de personas vivimos limitados,
en un medio donde tratamos de surgir un poco pero casi siempre en el nivel
económico, pero no podemos salir, tenemos puesta nuestra limitación y ahí en este punto nos toca preguntarnos
¿Qué es lo que realmente queremos hacer? Si
tengo la posibilidad de analizar mi vida, quisiera creer que tengo un
camino para no quedarme donde estoy y tengo que alimentar ese imán de pensar
positivamente. Las personas que quieren comenzar a manejar su mente
subconsciente tienen que pensar en forma positiva. Ejemplo en la salud, pensar
que soy sano. En la edad, pensar que soy joven, vital y útil y que no cuenta
los años y sobretodo que yo me amo mucho; el amarse a si mismo es preocuparse
por las cosas que nos convienen, por las cosas que queremos hacer.
El
siguiente paso es manejar los elementos
internos, es ir aprendiendo hacer mi propio médico, mi propio psicólogo mi
propio abogado. Se trata de un proceso lento, que poco a poco cada ser humano
va adquiriendo una responsabilidad de si mismo que le permite proyectarse y
ayudar a crecer al que está a lado. Si
todos los días al levantarnos hacemos la promesa de cumplir todas
las metas propuestas, estamos pensando a
nivel de consciencia, pero nuestra subconsciente nos va a elevar nuestros
dones, nuestras capacidades internas que los tenemos adormecidos, y vamos a
comenzar a despertar, pero no se trata de un milagro sino de un producto o de
un resultado de nuestro trabajo en el crecimiento espiritual.
Pero
este resultado que obtenemos es sujeto de reacciones inmediatas, es decir
cuando uno da un paso positivo por pequeño que este sea, el grupo se vuelve
contra nosotros, primero porque se trata de un instinto de seres humanos
negativos, ya que cuando uno quiere crecer otros pretenden aplastarlo y ahí
prevalece el más fuerte y segundo como los demás no han probado la dosis de
crecimiento espiritual que nosotros estamos poniendo en práctica tienen miedo,
y el miedo bloquea sus acciones. Si sentimos que existe ese bloqueo externo no
importa, hay que seguir, ya que en el momento que yo declaro que he decidido
crecer, que he decidido evolucionar por mi y para mi y proyectarnos a un
crecimiento futuro, quiero decir que estoy lleno de fortaleza, que es el
elemento necesario para ir dejando de lado a lo mejor a los demás y a las demás
cosas que me pesaban. Pero este proceso debe ser sutil para ir ganado terreno y
la persona que está manejando su vida vaya ganando, ya que poco a poco llegará
a triunfar.