Aquí estamos al final de una era -- la última historia en la laaaaaaaaarga carrera de Dan Jurgens en los títulos Superman. Al final del último año, cuando Jurgens estuvo mejor de lo que recordaba y parecia estar particularmente inspirado por el solido trabajo e innovativos dibujos de Steve Epting, especialmente esperaba que esta última historia terminara con un bang -- una historia que él y los fans pudieramos recordar.
Tristemente, me decepciona con la grandiosa "Hora Final de la Tierra". No que la historia sea mala (presenta algunas interesantes ideas), es solo que nada pasa aquí diferente a otras docenas de historias de Jurgens. Es como siempre y eso es demasiado malo.
Superman está ocupado intentando repeler un ataque masivo de misiles que estan lloviendo sobre todo el mundo. Estos misiles se entierran en la tierra y son de origen extraterrestre; mientras los habitantes de Metropolis se preocupan que el fin este cerca, Super sigue su camino encontrando a Vartox, Vestion y Pax esperando por él. Los tres campeones dan al Hombre de Acero una golpiza, incluyendo una dosis con polvo de Kryptonita, mostrándole la verdadera mente maestra tras este plan -- Brainiac 2.0. Brainiac, ahora completamente máquina, planea completar su venganza sobre Super por reducir la Tierra a cenizas con sus misiles. Lo que sigue es una serie de encuentros entre el Hombre de Acero y el Hombre del Microchip y los tres villanos que desesperadamente buscan el camino de su bondad.
El problema es que eso es *todo*. Superman desafia sus adversarios, los enfrenta en combate, los persuade que confiar en Brainiac es una mala cosa y se retira. Brainiac, ahora libre de la carne y aparentemente de sus habilidades siquicas, interpreta un papel que podría haber sido llenado por cualquiera de una docena de super-villanos. Llega a ser un chico mal en esta últma actualización, recurriendo a la fuerza bruta para conseguir lo que desea. Los personajes de reparto hacen algunos cameos (Jimmy aparece en un puñado de paneles para mostrar el peligro a los inocentes y Lois juega a la anfitriona con Lana y Pete Ross lo suficiente para poner a descansar esa extraña cosa acerca del nombre del hijo de Lana) y la única indicación que este es un adiós esta en la narración en la última página acerca de como habrá siempre y por siempre un Superman. Nada especial, nada sentimental -- sólo otro día en Casa De Jurgens. Aunque no está mal, te deja esperando un poco más.
Como siempre, Epting hace un gran trabajo con algunos dinámicos y cinemáticos planos y acercamientos. Escenas como la secuencia de apertura, donde Epting ubica la batalla inicial contra el Monte Rushmore y lo utiliza para enfatizar la magnitud del evento, o el rápido *zoom* de la página 26 desde un distante edificio hasta un determinado Superman, con la capa ondeando, es lo que extrañare una vez que Epting pase a acompañar a Stuart Immonen en _Adventures of Superman_. Epting también crea un realmente formidable, único Brainiac con cables en lugar de musculos; aunque Jurgens no le dió a esta amenazante criatura mucho que hacer.
Así que qué tenemos para el hurra final de Dan Jurgens? Lo mismo de siempre. Mientras "La Hora Final de la Tierra" es una decente pieza de trabajo, deseaba, muy en lo profundo de mi corazón, que nos hubiera dado ese empuje extra que nos hiciera *realmente* extrañarlo. |