Felipe Lombo, de Oviedo, nos pide información etimológica sobre la
palabra "mitramicina", nombre aplicado a un antibiótico que se usa para
combatir enfermedades tumorales, con objeto de incorporarla a la tesis
de doctorado que está preparando. Nos informa también que esta
molécula se caracteriza por un intenso color amarillo fluorescente.
El mismo Sr. Lombo nos apunta dos posibilidades: que la palabra
proceda del latín "mitra" (cierto tipo de gorro) o del persa "Mithra",
aplicado a una divinidad del sol y del fuego.
La palabra "mitramicina" es la adaptación al castellano del inglés
"mithramycin". "-myc-" procede del griego "mykós" (hongo) y "-in" es el
sufijo tradicionalmente usado para formar los nombres de los
antibióticos desde la aparición de la penicilina.
Nos queda por saber la procedencia de "mithra". La grafía inglesa de la
palabra nos revela que no puede proceder del latín "mitra" (cierto tipo
de gorro) ya que éste procede del griego "mitra", que se escribe con tau
(t) y no con theta (th).
Por tanto, y a falta de otros datos, debemos concluir que la etimología
más probable de "mithra" es la que se basa en Mithra, dios persa del
sol y del fuego, cuyas características concuerdan con el color amarillo
de esta molécula.